La boda abrupta de mi padre casi dos meses después de la muerte de mi madre trajo nuevos cambios a los que me estaba costando trabajo adaptarme, más que nada porque su nueva esposa y sus dos hijas no me lo estaban poniendo fácil pues mientras papá se iba de viaje por trabajo a mí me tocaba aguantar las conductas poco amables de su nueva familia, perdón nuestra nueva familia. Pero después de tres años cuando por accidente escuché a mi madrastra como planeaba casarme con un viejo rabo verde que bien podría ser mi abuelo no tuve más opción que huir hacia lo único que me había dejado mi mamá, una casa en el bosque
NovelToon tiene autorización de Coral Villalobos para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Bestia
No sé que tipo de gente estés acostumbrado a tratar y la verdad es que tampoco me interesa, ahora espero que te vayas de mi casa y si es posible no te acerques de nuevo
- Yo no eh venido a tu casa, tu me hás traído
Abrí la boca y después la volví a cerrar este hombre me hacía querer golpearlo, él me preguntó hace cuánto vivía en este lugar, pues hacia años que no venía nadie al bosque, eso me dejó ver qué él vivía por acá, evadiendo su pregunta, pregunté yo
- ¿Tú donde vives?
- No sé contesta a una pregunta con otra pregunta
- Llevo un mes viviendo aquí, tu turno de responder
- Por acá más al centro del bosque
Cómo es que no había escuchado de alguien que viviera en el bosque
- ¿No le temes a la bestia? ¿O en realidad es un mito?
Él se rió y su risa me hizo erizar la piel
- Claro que es real
- ¿le has visto?
- Si, te recomiendo que no salgas de noche por tu seguridad ¿vives aquí tu sola?
- Si
Él iba a decir algo más pero miro hacia la ventana y dijo que tendría que irse
- No olvides llevarte tus monedas
- Si las dejo... ¿te volveré a ver?
No pude evitar sonrojarme y aunque trate de ocultarlo él lo noto y se rio aún más fuerte y después tomó la bolsita con las monedas y las metió en la bolsa de su pantalón
- Como espero no volverte a ver me llevo mis cosas
Este era un infeliz y yo una tonta por dejarme llevar por una cara bonita, pensaba contestarle pero él salió por la puerta y yo me quedé con todo lo que tenía que decir atorado en la garganta. Estaba furiosa realmente furiosa
- ¿quien se cree que es? No es más que un patán sin educación, ¿que no me quiere ver? ¿y quién quiere verlo a él?
Estaba caminando de un lado a otro mientras recitaba palabras que si alguien me escuchase quedaría horrorizado pues no eran palabras que una dama debía utilizar. Cuando mi furia se calmó puse agua en el fogón a calentar para darme una ducha pues por miedo a que él despertara no tuve oportunidad para hacerlo antes, lleve el agua a la bañera y me metí en ella dejando que el agua se llevará el resto de mi indignación y simplemente disfrute del calor que me proporcionaba.
Adam
Aunque tenía que irme aún tenía algo de tiempo y me quedé observando por la ventana como caminaba y hacía señas con sus manos, se notaba que estaba enojada. No sabía decir si se veía más hermosa enojada (como si fuera posible) después de unos minutos se calmo y... Y yo supe en ese momento que debía irme pero algo ataba mis pies al lugar en el que estaba impidiendo me dar un paso. Ella se estaba metiendo en la bañera y yo estaba viendo como un acosador y aunque no quisiera hacerlo (porque en verdad no quería) no podía apartar la vista parecía hechizado pues no podía dejar de verla y maravillarme con la diosa que tenía enfrente. Su piel blanca y tersa, sus pechos que perfectamente cubrirían mis manos, una cintura tan diminuta que uno solo de mis brazos daría la vuelta completa fácilmente, unas piernas largas y un trasero perfecto, era un pecado que esa mujer usará ropa para cubrir esa obra de arte.
Cuando sentí que mi transformación llegaría corrí lo más lejos de ese lugar, quería quedarme contemplándola pero no podía hacerlo, si yo fuese normal, podría cortejarla, podría probar esos labios, ¿cómo sería tocar su piel? ¿tener su cuerpo bajo el mío? moví mi cabeza negando, yo no podía tener ese tipo de pensamientos, yo no era normal y nunca volvería a serlo. Mi transformación llegó y un rugido salió de mi garganta, estaba harto, frustrado de todas las noches tener que convertirme en un animal, una bestia salvaje que estaba destinada a vagar por el bosque. Al principio el instinto robaba mi razón y no tenía conciencia de lo que hacía, ahora después de tantos años había logrado controlarlo y ahora podía estar consciente de todo lo que hacía tanto humano como bestia. Desde entonces no había matado a nadie más, ya llevaba demasiadas muertes en mi conciencia, muertes de las que jamás podría perdonarme.
******************************************
Bestia