Jennifer Núñez una joven de 23 años quien pensaba que tenía una vida perfecta hasta que un día descubre que su novio y su mejor amiga la estaban engañando, después de pasar tanto dolor y seguir hacia delante conoce a Roberto Antonio Diaz dueño de una de la compañía más importantes de Inglaterra, quien le dará un giro inesperado a sus planes y poniendo de cabeza.
Con quien descubrirá su verdadera personalidad y el amor verdadero.
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Capitulo 11
Llegamos a la casa y nos sentamos en el sillón de la sala.
-En que estás pensando - hago qué me mire.
- Supongo que te vas a ir hoy - mirándolo.
- Me quedaré, compraré un apartamento y me quedaré.
- Me alegro, no quiero perder la comunicación contigo y te debo una disculpa por lo que paso en el centro comercial.
- Eso no fue nada, mereces respeto y ese idiota se cree a un dueño de ti.
- Mi teléfono no deja de sonar, he bloqueado su número, pero sigue insistiendo desde otro número - lo miro - tu teléfono está sonando no vas a contestar.
- No te preocupes es solo trabajo, es fin de semana y no quiero pensar en eso - beso su mejilla - me gustas mucho Jennifer.
Mi teléfono volvió a sonar y miré quien era, di un suspiro y lo apago, lo último que quiero es que me arruinen este momento.
- Tú también me gustas y....
- Quieres salir conmigo - la tomo de las manos.
- Si quiero salir contigo Antonio - sonrió y lo beso.
Pude sentir la mirada de nuestros padres, pero no dije nada, somos adultos y ya no tenemos que dar explicaciones de lo que hacemos.
- Es un hecho eres mi novia y la más linda quhe e tenido.
-Siento que vamos un poco rápido, pero a la vez no me importa en absoluto.
- Si vamos un poco rápido, mis padres se casaron cuando solo tenían cinco mese de novios y a un están juntos, así qué para mí el tiempo que tiene conociendo a alquilen o en una relación no define si durará o no.
- Lo dices por las personas que duran años de relación y cuando se casa a los tres meses ya se separan.
- Tú no eres como las demás, no tienes nada de común y eso me gusta - me levanto - ven vamos a la habitación.
- Tomo su mano - si, pero a un es temprano, bueno son las once de la noche.
Lo sigo hasta la habitación y al entrar me pego contra la puerta besando me.
-Pensé que íbamos a dormir o ver una película - añadí.
- Lo aremos yo solo quería besarte un rato más antes de irme a la ducha - beso su cuello y bajo el cierre de su vestido - no voy a negar que me gustaría volver a repetir lo de anoche.
- mi también me gustaría - desabrocho su camisa, pero el sonido de la puerta nos interrumpe - iré a ver quien es adelántate.
Abro la puerta y me encuentro con mi madre.
- Interrumpo algo, lamento molestarte a esta hora.
-No interrumpes nada, quieres preguntar algo - mirándola a los ojos.
- Hay algo entre ustedes dos, en la cena ayer la atracción se sentía entre ustedes dos.
- Mamá sé que quieres respuestas, pero creo que este no es el momento ni el lugar, quiero dormir y Antonio también, mañana hablaremos de eso y te cuento todo lo que tienes que saber.
-Eso espero y comportarse ustedes dos - beso su frente y me voy.
Cerré la puerta y di un suspiro de alivio al ver como se marcha, me saco la ropa y voy al baño a ducharme.
- Me dejas un lugar para poder entrar - me muerdo el labio.
- Mirando me así agradesco que sea tan pequeña la ducha - le hago espacio para que entre.
Tuvimos un pequeña sesión de besos y caricias mientras el agua recorre nuestro cuerpo, nunca volveré a ver esta ducha como antes, de los besos y las caricias nos dejamos llevar por las ganas de más haciéndonos uno, pensé que el sexo solo se hace en la cama, estaba muy equivocada fue igual o más placentero que en ella, llegamos al estacis del placer y salió de mi, terminamos de bañarnos y fuimos a la cama, sus manos me abrazan desde atrás dándome una sensación de valides qué nunca había sentido,me quede dormida entre sus brazos.