Su hermano comete un gran error al robarle a un mafioso, y solo ella puede salvarlo de la cárcel. Solo que no espera lo que un malvado mafioso tiene pensado para ella y termina cayendo en un laberinto sin salida.
NovelToon tiene autorización de Jaqueline Nicole para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 2
-¡### Disculpe señor! No puede estar aquí. - Exclamo dirigiéndose al hombre. Este se giró y la observó fijamente. -¿Bruno? ¿Qué haces aquí?-Pregunto confundida.
-Hola hermanita... No me digas que tú cuidas a este ladronzuelo.-Ironizó.
-¿Por qué lo dices? ¿Ladronzuelo?-Se inquietó.
-Este idiota que ves aquí me robo una caleta de dinero.
-¿Qué? ¡No puedo creerlo! -Se tapó la boca sorprendida.
-¡Si! -Contestó serio. -Necesito que te alejes de aquí porque esta noche terminaré con él. -Le advirtió, Selene observó el sombrío rostro de su hermano y sintió la necesidad de interferir, ella conocía a Julieta y sabía que esto le rompería el corazón.
-Bruno escúchame.- Dijo acercándose a él y tomándolo del rostro. -No puedes hacerle nada a este chico.
-¡No intercedas Selene! Es mejor que te mantengas alejada.
-¡No! ¡No! Escucha... Yo conozco a su familia, seguramente hay alguna manera de arreglar esto. Puedo decirles que junten el dinero que te robo... - Rogó.
-Ya tengo el dinero...
-¿Y entonces??-
-Nadie se burla de mí y vive para contarlo.
- Debe haber alguna otra manera de obtener tu venganza Bruno, por favor piénsalo. Hazlo por mí. -Suplicaba.
-¿Por qué te interesa tanto este delincuente?- -Cuestiono.
- No me interesa él, yo soy amiga de su hermana... Sé que ella sufriría mucho, puedo hablar con Julieta para que haga algo por su hermano.
-¿Y qué podría hacer? ¿Mm? No necesito una prostituta.
-¡No es prostituta! Ella puede limpiar tu casa si quieres o algo así...
-Hermana... tú y yo vamos en diferentes direcciones. Cuando una persona hace el mal, debe pagarlo.
-¡Por favor! -Suplicaba con sus manos.
-¡No! -Exclamo fuerte haciendo asustar a Selene. Ella frunció el ceño al ver que su hermano no daba brazo a torcer y decidió ir más allá.
-¡Bruno! Tú te reunirás con Julieta y veran como arreglan esto, o sino ...
-¿O sino qué? - Se paró Bruno frente a ella intentando intimidarla.
-Sino hablaré con mamá y le contaré toda la verdad. - Lo Amenazó.
-¿La verdad? ¿Qué verdad?
-La verdad sobre Ernesto...
-¡¿Qué?! -Exclamo sorprendido.
-Así como escuchaste Bruno.
-Tú no debes meterte en mis asuntos.- se acercó enojado a su hermana.
-¡Pues lo haré! -Lo enfrentó.
-¿Lo harás? - Pregunto enojado.
-Ellos no lo merecen Bruno... No quiero pelear contigo pero hazme caso.
-¡Esto es chantaje! Así que si yo hago lo que se me dé la gana con tu amiguita… Luego no quiero que te arrepientas.
-¿Qué le harás?
-Ya veré... -Contestó retirándose de la habitación.
-¡Dime!- Suplicó.
-Mañana te llamaré y es mejor que no vuelvas a meterte en mis asuntos. - Contestó Bruno cerrando la puerta de la habitación muy enojado. Selene se quedó muy angustiada con la situación, observó a Tomás que continuaba inconsciente y tomó valor para salir de la habitación para buscar a Julieta.
-¡Juli! ¡Ven! - La llamo desde la puerta de urgencias para que ella ingresara a la habitación, Julieta rápidamente fue tras ella, no veía la hora de ver a su hermano.
Al ingresar a la habitación y ver a su hermano de ese modo, se entristeció mucho. Lágrimas caían sobre su rostro mientras se acercaba lentamente a él.
-Él está bien Juli... Seguramente quedará internado aquí un tiempo.
-¿Realmente está bien o solo me lo dices para tranquilizarme?
-Está bien amiga, no te preocupes. Quería consultarte algo...- Dijo con preocupación.
-¿Qué sucede?
-¿La policía ha hablado contigo?
-¡No! ¿A ti te han dicho algo?
-No, pero seguramente pronto vendrán a hacerte preguntas.
-Ay ni sé que es lo que les diré.-Contestó Julieta tomando su cabeza.
-Debes estar tranquila...
-Es que posiblemente lo lleven a un reformatorio.-Contestó inquieta.
-Pero... ¿Y tu padrastro?
-Mi padrastro es un borracho. ¿Qué se podría hacer con él?? Solo vive emborrachándose desligándose de nosotros.
-Ay amiga... es que yo creo que el reformatorio es algo mínimo para lo que podría enfrentar.
-No entiendo. -Contestó intranquila.
-¿Tú sabes lo que hizo tu hermano?
-Creo que robo...
-Bien, él robó. Pero... ¿Sabes a quién?
-No lo sé, pero supongo que a alguien poderoso para que vengan esos hombres a llevárselos.
-Bueno, Julieta, lo mejor es que te sientes...-Dijo Selene con sus manos guiándola hacia la silla que tenía atrás de ella.
-¿Tú sabes quien es verdad?
- Sí... -Dijo suspirando profundamente.
-¡Ay no Selene! -Exclamo Levantándose de la silla. -¿Es alguien malo verdad?
-En realidad no es malo, pero es un poco cruel y quería asesinarlo.-
-No entiendo... ¿Cómo sabes eso??-Pregunto confundida.
-Él estaba aquí a punto de asesinar a tu hermano.
-¡¿Qué?! Entonces es una persona mala.
-No, no es malo. Escúchame Julieta ese hombre es mi hermano.
-¿Tú estás hablándome en serio?
-Sí...-Contestó suspirando mientras agachaba la cabeza.
-Entonces tengo que sacar a mi hermano de aquí.- Dijo Julieta muy nerviosa.
-No, no. Yo cuidaré a tu hermano.
-Selene no puede confiar en eso, él ya entró aquí y quiso asesinarlo.
-Yo lo persuadí para que no lo haga... ¿Si? Tranquila.-Intentaba tranquilizarla.
-Selene no puedo creer en eso. ¡Ay por dios si le sucede algo a mi hermano moriré! -Exclamo Julieta en medio de lágrimas.
-No, no amiga. Tú seguramente tendrás que hacer algo para que él se sienta tranquilo.
-¿Algo como que?
-Seguramente quiera que limpies en su casa o que hagas algún trabajo para él.
-No puedo entender como mi hermano se metió en este lío y encima de todo seguro querrá su dinero. ¡Ay dios! -Exclamo Julieta con una opresión en su pecho, sabía que todo estaba muy mal y que seguramente este hombre no perdonaría esto fácilmente.
-El dinero lo recuperó, de eso no te preocupes.
-¿Me lo dices de verdad?
-¡Claro que si amiga! Pero seguramente debas encontrarte con él para saber que es lo que decidió.
-Está bien, si tengo que hacerme cargo de esto, lo haré, pero él debe prometer que no le hará daño a mi hermano.
-No te preocupes amiga, yo haré que cumpla.
-Gracias Selene, gracias por todo. No sé cómo agradecerte.
-No te preocupes, tú me has ayudado muchísimo en el pasado y estoy más que agradecida contigo. Ahora debo irme y continuar con los pacientes, vendré en cuanto me desocupe.
-Está bien amiga... Gracias.
-¡De nada! Te estaré llamando según lo que diga mi hermano.
-Esta bien... -Contestó Julieta un poco inquieta, pero era capaz de todo por su hermano. Selene se despidió y Julieta se quedó un rato junto a su hermano.