3 horas antes de la fiesta.
La emoción y los nervios se mezclaban dentro de mí mientras me miraba en el espejo, tratando de encontrar la perfección en cada detalle. El baile de fin de año estaba a punto de comenzar, y mi corazón latía con anticipación.
Mi habitación estaba llena de un suave resplandor dorado gracias a las luces cálidas que había colocado alrededor del espejo. Frente a mí, el vestido descansaba elegantemente sobre la cama, esperando su momento de gloria. Era un vestido largo y delicado en un tono suave de rosa pálido. La falda fluía con cada movimiento, y los detalles de encaje en la parte superior agregaban un toque romántico.
Con cuidado, me deslicé dentro del vestido, sintiendo cómo se ajustaba perfectamente a mi figura. A medida que el vestido se elevaba a su lugar, sentí como si estuviera entrando en un mundo de ensueño. Mirándome en el espejo, me maravillé ante la transformación que había experimentado. Era como si el vestido hubiera tomado vida y me hubiera envuelto en elegancia y gracia.
Después de asegurarme de que el vestido estuviera impecable, caminé hacia el tocador donde había colocado una variedad de productos de maquillaje. Quería lograr un look sofisticado y atemporal que complementara el aura del baile. Comencé aplicando una base suave que realzara mi piel sin ocultar su brillo natural. Luego, resalté mis ojos con un maquillaje suave y definido, utilizando tonos neutros que acentuaran mis rasgos.
A medida que pasaba el rímel por mis pestañas, mi mente divagaba hacia Nerlin. Habíamos compartido tantos momentos memorables juntos en la universidad, y este baile era la oportunidad perfecta para dar un paso más allá en nuestra relación. Pero cada vez que la idea de confesarme cruzaba mi mente, un escalofrío de nerviosismo recorría mi espina dorsal. Sabía que era el momento adecuado, pero eso no significaba que fuera fácil.
Mi madre entró en mi habitación con una sonrisa, observando mi preparación con cariño.
—Nila, cariño, estás deslumbrante —dijo con orgullo. —Este vestido te queda como un sueño.
Agradecí su elogio con una sonrisa nerviosa. Mi madre siempre había sido mi mayor apoyo y confidente, y su presencia me daba un sentido de calma en medio de la tormenta de emociones.
—Gracias, mamá. Espero que Nerlin también piense lo mismo.
Mi madre me abrazó suavemente y luego me apartó para mirarme a los ojos.
—Nila, querida, recuerda que lo que importa es la conexión que tienen. Si sientes algo por él y él siente lo mismo por ti, entonces el resto solo son detalles.
Sus palabras resonaron en mí, y asentí con gratitud. Tenía razón; lo más importante era lo que compartíamos, no la perfección del vestido o el maquillaje.
Mientras mi madre y yo conversábamos, mi mente estaba en una mezcla de emociones. La emoción por la noche que tenía por delante estaba acompañada de una sensación de vulnerabilidad. Pero sabía que era hora de enfrentar mis miedos y ser honesta conmigo misma y con Nerlin.
Después de terminar el maquillaje y asegurarme de que cada detalle estuviera en su lugar, me levanté de la silla con una sonrisa.
—Gracias, mamá. Estoy lista para enfrentar esta noche.
Mi madre me abrazó una vez más, y su apoyo me llenó de coraje. Mientras el reloj avanzaba y el baile se acercaba, sabía que estaba en el camino correcto. Con Nerlin en mi corazón y un vestido que reflejaba mi confianza interior, estaba lista para hacer que esta noche fuera inolvidable.
Mientras esperaba en mi habitación, el reloj marcaba cada segundo con un tic-tac constante que parecía martillear en mi cabeza. Aunque el vestido me llenaba de confianza, no podía evitar sentir la ansiedad que burbujeaba en mi estómago. Había esperado tanto tiempo para confesarme a Nerlin, y ahora que el momento se acercaba, me inundaban dudas y miedos.
Me miré en el espejo una vez más, tratando de encontrar la valentía que necesitaba para seguir adelante. Cada vez que mis ojos se encontraban con los míos en el reflejo, veía la imagen de una chica decidida y valiente. Pero, en mi interior, la lucha entre la valentía y la inseguridad era intensa.
Tomé un profundo aliento y me recordé a mí misma por qué había decidido dar este paso. Nerlin era alguien especial para mí, alguien con quien había compartido risas, secretos y aventuras. Había llegado el momento de ser honesta sobre mis sentimientos y ver qué sucedía.
Sin embargo, mientras pasaban los minutos, mis pensamientos se volvían más caóticos. Un momento me agarraba con coraje, convencida de que podía hacerlo, de que podía confesarme y cambiar el rumbo de nuestra relación. Pero al siguiente instante, la duda volvía a apoderarse de mí, llenándome de inseguridad y miedo al rechazo.
Caminé de un lado a otro de la habitación, tratando de encontrar una distracción para calmar mi mente. Miré por la ventana, observando cómo el sol se ocultaba en el horizonte. Mi corazón latía rápidamente, como si supiera que algo grande estaba a punto de suceder.
Me senté en el borde de la cama y tomé mi teléfono, buscando el consejo de mi amiga Leah. Envié un mensaje breve: "Leah, ¿Qué hago si me siento asustada y emocionada al mismo tiempo?" Esperé ansiosamente su respuesta, esperando que sus palabras pudieran darme la claridad que necesitaba.
Mi teléfono vibró con su respuesta casi de inmediato:
『¡Nila, respira! Es normal sentirse así antes de un gran paso. Piensa en todas las veces que han compartido y en cómo Nerlin te ha tratado. Confía en lo que sientes y recuerda que estás siendo sincera contigo misma』
Las palabras de Leah me dieron un poco de calma. Respiré profundamente, tratando de seguir su consejo. Cerré los ojos y traté de visualizar todos los momentos que había compartido con Nerlin: las salidas que hemos tenido, las conversaciones tarde por la noche, las miradas cómplices que compartíamos. No podía negar que había una conexión especial entre nosotros.
De repente, sentí un nuevo resurgimiento de coraje. Si bien todavía estaba nerviosa, sabía que no podía dejar que el miedo me detuviera. Nerlin merecía saber cómo me sentía, y yo merecía liberarme de esta ansiedad que había estado cargando.
Justo cuando estaba a punto de levantarme y enfrentar la puerta, volví a sentir esa sensación de mariposas en el estómago. La incertidumbre volvió a envolverme, haciéndome dudar una vez más. ¿Y si arruinaba todo? ¿Y si nuestra amistad se volvían extraña después de esto?
Pero entonces, recordé las palabras de Leah. Confía en lo que sientes. Confía en Nerlin. La idea de no darle una oportunidad a mis sentimientos era aún más aterradora que el miedo al rechazo.
Justo cuando estaba a punto de dar un paso más cerca de la puerta, escuché un suave golpe. Mi corazón dio un salto cuando me di cuenta de que era el sonido de alguien tocando la puerta. Mi pulso se aceleró mientras caminaba hacia la entrada. Respiré hondo una vez más, sintiendo una mezcla de nerviosismo y emoción.
Abrí la puerta y allí estaba Nerlin, vestido con elegancia en su traje. Su sonrisa cálida me hizo sentir como si el mundo entero desapareciera a mi alrededor.
—Nila, estás... increíble —murmuró, sus ojos brillando mientras me miraba.
Sonreí, sintiendo un nuevo impulso de coraje al verlo.
—Gracias, Nerlin. Tú también te ves asombroso.
Nerlin extendió su brazo hacia mí.
—¿Estás lista?
Tomé su brazo, sintiendo que finalmente había encontrado el valor que necesitaba.
—Sí, Nerlin. Estoy lista.
Mientras caminábamos hacia la noche que nos esperaba, sentí una mezcla de emociones, pero esta vez, la valentía superó a la inseguridad. Sabía que esta noche sería inolvidable, sin importar el resultado de mi confesión.
8
3 horas antes de la fiesta.
El reloj marcaba implacablemente el paso del tiempo, y yo aún estaba sumido en un profundo sueño cuando la alarma sonó, interrumpiendo mis dulces sueños. Me desperté de un salto, recordando que el baile de fin de año universitario estaba a punto de comenzar, y tenía que pasar por Nila para recogerla. ¡Solo una hora! ¿Cómo demonios había dormido tanto?
Me levanté rápidamente de la cama, la somnolencia desapareciendo instantáneamente mientras entraba en modo de pánico. Me apresuré a la ducha, el agua fría haciendo que mi cuerpo se sacudiera de sorpresa. Me lavé el cabello y el cuerpo con rapidez, sintiendo la presión del tiempo mientras el agua corría por mi piel.
Salí de la ducha y me envolví en una toalla antes de mirarme en el espejo. Mi cabello aún goteaba agua y, con una maldición interna, me dirigí hacia mi armario. Tomé el traje que la universidad me ofreció, lo planché rápidamente, aunque aún quedaban algunas arrugas tenía la esperanza de que Nila lo aprobara.
Mientras me vestía, escuché el sonido de mi teléfono vibrando en la mesa de noche. Lo recogí y vi un mensaje de Nila. Sonreí involuntariamente al leer sus palabras. Saber que ella también estaba emocionada por el baile me dio un toque de confianza.
Después de vestirme, me dirigí hacia el espejo nuevamente. Mi cabello era la próxima tarea en la lista. Tomé el secador y comencé a secarlo, pero un mechón rebelde decidió tomar una dirección propia. ¡Qué demonios! El mechón se negaba a cooperar, negándose a quedarse en su lugar con todo el estilo de un niño petulante.
—Vamos, solo un poco de cooperación, ¿sí? —murmuré en voz baja, como si pudiera persuadir al mechón con palabras.
Pasé los dedos por mi cabello, tratando de convencer al mechón de que se quedara en su lugar. Pero, por supuesto, el mechón tenía otros planes. Rebotó nuevamente en su posición original, desafiándome con su tenacidad.
Frustrado pero determinado, alcé una ceja y sonreí ligeramente. Si el mechón de cabello quería una batalla, estaba más que dispuesto a dársela. Tomé un poco de cera y la apliqué en mis manos. Con movimientos precisos, intenté persuadir al mechón de que se mantuviera en su lugar.
Lo peiné hacia atrás, aplicando cera en cada hebra obstinada. Pero el mechón no estaba dispuesto a ceder sin pelear. Rebotó una vez más, desafiante y terco como nunca.
—Oh, esto es personal ahora —murmuré, mirándome fijamente en el espejo.
Apreté los dientes y volví a aplicar más cera, decidido a ganar esta batalla capilar. Poco a poco, el mechón comenzó a ceder, finalmente aceptando su derrota. Me relajé, sintiendo una mezcla de triunfo y diversión por la situación.
Una vez que mi cabello estuvo finalmente bajo control, me miré una última vez en el espejo. Estaba vestido y listo, con el mechón de cabello finalmente en su lugar. Respiré hondo, tratando de calmar los latidos frenéticos de mi corazón. El baile estaba a punto de comenzar, y yo estaba ansioso por ver a Nila.
Recogí las llaves del coche y me dirigí hacia la puerta. Justo cuando estaba a punto de salir, sentí un cosquilleo de emoción en mi estómago. Sabía que esta noche sería inolvidable, y no solo por el baile en sí. Estaba emocionado por pasar tiempo con Nila, por verla lucir hermosa y por descubrir qué tenía reservado para esta noche.
Cerré la puerta detrás de mí y me dirigí hacia el coche con una sonrisa en los labios. A pesar de los nervios y la inusual batalla con mi cabello, estaba listo para enfrentar la noche con determinación y una pizca de anticipación.
Con las llaves en la mano y una sonrisa de anticipación, me dirigí hacia el coche. Sabía que el camino hacia la casa de Nila sería corto pero lleno de pensamientos emocionantes. A medida que el motor ronroneaba, mi mente vagaba por diferentes escenarios posibles para la noche.
Mientras conducía, no pude evitar pensar en llevarle flores a Nila. Sabía que eran un gesto cliché, pero también eran un símbolo de aprecio y atención. Pensé en detenerme en una florería cercana para elegir las flores perfectas, pero luego recordé que la fiesta probablemente no permitiría que lleváramos objetos personales como flores.
El pensamiento de Nila dejando las flores en casa mientras disfrutábamos del baile me hizo cambiar de opinión. ¿Qué sentido tenía darle flores si no podía llevarlas consigo? Decidí que era mejor dejar las flores para otro momento y en su lugar opté por la idea de llevarla a cenar después del baile, una forma de seguir disfrutando de la noche.
Cambié de dirección y me dirigí hacia una tienda de regalos cercana. Sin embargo, después de explorar las estanterías durante unos minutos, nada parecía encajar con lo que tenía en mente. Quería darle algo especial, algo que mostrara que había pensado en ella, pero nada parecía adecuado.
Finalmente, me di cuenta de que estaba gastando demasiado tiempo buscando el regalo perfecto y que el reloj seguía avanzando. Suspiré y decidí que lo más importante era estar con Nila y disfrutar del baile juntos. Si había algo que quería darle, podría ser simplemente mi tiempo y atención.
Con ese pensamiento en mente, continué mi camino hacia la casa de Nila. La emoción seguía burbujeando en mi interior, mezclada con un toque de nerviosismo. Quería que esta noche fuera especial, quería que Nila se sintiera apreciada y feliz.
Justo cuando me acercaba a su casa, recordé que Atticus también asistiría al baile. El vive un poco lejos del campus. Decidí enviarle un mensaje para ofrecerle un viaje, ya que iba en su dirección de todos modos.
—Hey, Atticus. ¿Quieres que pase a recogerte antes del baile? Te llevaré al campus
Escribí en mi teléfono y lo envié. No pasó mucho tiempo antes de recibir su respuesta.
『¡¿Enserio? Eso sería genial, Nerlin.』
Sonreí y me dirigí hacia su dirección. Llegué a su casa y él ya estaba esperando afuera con una sonrisa nerviosa.
—H-Hola, Nerlin, gracias por el viaje. —saludó mientras subía al coche.
—¡Claro, Atticus! ¡Estoy emocionado por la noche! —respondí con entusiasmo.
Mientras conducíamos, compartimos algunas anécdotas y risas, lo que ayudó a aliviar mis nervios antes de llegar a la casa de Nila.
Finalmente, llegué a su calle y estacioné el coche frente a su casa. El corazón latía con fuerza mientras respiraba hondo para calmarme. Esta noche era importante, y no podía evitar sentir que algo especial estaba a punto de suceder.
Con un suspiro de emoción, salí del coche y me acerqué a la puerta de la casa de Nila. Levanté la mano y toqué la puerta, el sonido resonando en el aire. No había vuelta atrás ahora.
9
—N-Nerlin ¿Dónde estamos? —pregunté con cierto nerviosismo.
—Estamos en la casa de Nila, no te preocupes. Luego de esto, iremos a UME. No llegaremos tarde.
—Eso no es lo que me preocupa. —susurré, sintiendo un nudo en el estómago.
De todos los lugares a los cuales podría haber ido, Nerlin me llevó específicamente al que menos quería.
Finalmente, la puerta de la casa se abrió y Nila salió.
—Nila, estás... increíble —murmuró Nerlin, visiblemente impresionado.
—Gracias, Nerlin. Tú también te ves asombroso.
Nerlin extendió su brazo hacia Nila, invitándola a tomarlo.
—¿Estás lista?
—Sí, Nerlin. Estoy lista.
En cuanto ambos comenzaron a caminar hacia el coche, instintivamente me escondí como pude en los asientos traseros, tratando de no parecer demasiado torpe en el proceso. Sé que debo parecer una persona ridícula, pero aún así no puedo evitarlo.
Finalmente, subieron al coche. La oscuridad de la noche combinada con mi traje negro me brindaba el camuflaje que necesitaba para pasar desapercibido en el asiento trasero.
—Por cierto, creo que no se conocen, Nila, el es Atticus. —dijo Nerlin, revelando mi presencia.
—Por cierto, creo que no se conocen. Nila, él es Atticus. —dijo Nerlin, revelando mi presencia.
Reflexionando un poco, me pregunto por qué me escondí en primer lugar. Sabiendo que Nerlin ya sabía que estaba aquí, podría haberme hecho notar sin problema. Supongo que me dejé llevar por la situación, yo no soy así, vamos Atticus, eres más inteligente que esto.
Salí de mi escondite lentamente. Al alzar la vista, mis ojos se encontraron con los de ella, mostrándome una mirada espeluznante, como si fuera un advenedizo aquí, un obstáculo para ella.
—Te equivocas, Nerlin. Ya lo conozco. —dijo Nila, sosteniendo su mirada en mí.
—¡Oh! ¿En serio? ¡Qué cool! ¿De dónde se conocen?
—Lo recuerdas, ¿Verdad, Atticus? —dijo Nila.
—E-Eh, b-bueno.
—En el bosque detrás de UME, lo encontré solo y llorando como un cobarde. Así que le di un par de consejos.
Puedo intuir que se refiere a la advertencia de ese día. Probablemente me lo recuerda porque ahora le estoy estorbando.
—Eso es inusual en ti, Nila. Pero es bueno que vayas evolucionando y ayudes a los demás.
—¡Sí! Todo fue gracias a ti. —dijo, finalmente apartando su vista de mí.
—P-Perdón, no tenía intención de interrumpir su cita. Pensé que se encontrarían en el campus, y que por eso Nerlin me ofreció llevarme. —me disculpé, sintiendo cierta vergüenza pero principalmente preocupación.
—No te preocupes, Atticus. Te ofrecí llevarte porque vives lejos. Hubiera sido costoso y complicado para ti llegar a UME. Además, Nila entiende la situación, ¿Verdad? —respondió Nerlin con amabilidad.
—¡Claro! No te preocupes, Atticus. —añadió Nila, con un toque de sarcasmo en su voz.
Intenté mantenerme callado, esperando que la conversación entre Nerlin y Nila fluyera sin mi intervención.
Me sentía como si fuera un espectador en su propia película, una película en la que no tenía ningún papel importante.
Cada vez que Nila dirigía su atención hacia mí, sentía una extraña tensión en el aire. Me esforzaba por sonreír y asentir, pero no podía evitar sentir que estaba invadiendo su espacio. Sus comentarios indirectos y miradas significativas me hacían sentir como si estuviera sobrando en el coche.
Mientras avanzábamos por la carretera, mi mente estaba atrapada en una lucha interna. Por un lado, quería mantenerme tranquilo y evitar cualquier conflicto o malentendido. Por otro lado, me sentía cada vez más incómodo y deseaba que el viaje terminara lo antes posible.
Nerlin mencionó algo sobre la música y Nila pareció emocionada por la idea. Escuché sus risas mientras buscaban una canción que todos pudieran disfrutar.
Estoy en el mismo coche que el diablo, ella sabía lo que yo sabía, y su presencia solo aumentaba mis temores.
Mientras continuábamos el recorrido, intenté distraerme mirando por la ventana. El paisaje pasaba frente a mis ojos, pero mi mente estaba en otro lugar. Nila y Nerlin continuaron su conversación, riendo y bromeando como si no hubiera ninguna tensión.
Mis intentos de despejar mi mente navegando por mi teléfono resultaron en vano. Cada vez que levantaba la vista, me encontraba con la mirada de Nila en el espejo retrovisor. Era como si supiera que estaba tratando de evadir su presencia.
No pasó mucho tiempo antes de que Nila dirigiera su atención hacia mí. Me lanzó una mirada furtiva acompañada de una sonrisa que me puso aún más nervioso. Ella sabía que yo sabía la verdad.
—Atticus, ¿No estás emocionado por la fiesta? —preguntó Nila con una voz dulce pero con un matiz que solo yo podía detectar.
Tragué saliva, tratando de mantener la calma.
—S-Sí, por supuesto. S-Será genial. —tartamudeé, mis intentos por responder adecuadamente no resultaron.
Nila rió suavemente, como si hubiera captado algo que los demás no entendíamos. Mi corazón latía con fuerza en mi pecho mientras luchaba por controlar mis emociones. No podía dejarme llevar por el miedo y arruinar la noche.
Mis ojos buscaron refugio en el paisaje que pasaba frente a la ventana. La noche estaba tranquila, las luces de la ciudad creaban un ambiente sereno. Me aferré a esa imagen, tratando de encontrar algo de paz en medio de la tensión que me rodeaba.
Finalmente, llegamos al campus de UME y Nerlin estacionó el coche. Mientras salía, me sentía como si estuviera escapando de una trampa.
—Bien, Atticus, nos vemos luego. —Nerlin tomó suavemente la mano de Nila, preparándose para despedirse.
Creí que me había librado de todo, que se marcharía, al fin y al cabo, eso es lo que quería, alejarme ¿No es así?
—Espera, Nerlin, me gustaría hablar con Atticus. —dijo con un tono serio, deteniendo cualquier posibilidad de escape.
—¿Eh? Okey, entonces supongo que iré a saludar a algunos amigos. —respondió él despreocupadamente, aceptando la situación con calma.
Ahora estoy cara a cara con el diablo, y no puedo mantenerme firme. Solo su presencia es suficiente para evitar que mantenga una buena postura. Estoy comenzando a sudar.
—Aléjate de nosotros, yo soy la única persona que él necesita. —dijo con un tono desafiante, marcando su territorio.
Nila comenzó a alejarse, dejándome solo con una tensión incómoda.
—N-No lo quieres de verdad si solo buscas acaparar su corazón. Solo estás siendo egoísta.
¡Mierda! ¡¿Por qué dije eso?! Mis palabras escaparon de mi boca por sí solas, en un intento involuntario de expresar lo que sentía.
—¡¿Eh?! ¡No me molesta que tenga amigos, pero todos ustedes son un cáncer! Especialmente tú. —respondió, lanzando acusaciones con fiereza.
—T-Tal vez tengas razón conmigo. En verdad me tomé en serio todo esto, pero los demás solo querían divertirse. Entonces, si no quieres que tenga amigos con los cuales pueda divertirse, ¿Qué tipo de amigos debería tener? —respondí.
¿Por qué sigo hablando? No, la pregunta que debería hacerme es: ¿Por qué sigo hablando con alguien que no escuchará nada de lo que diga?
—Alguien que le ayude a progresar. El ocio es solo momentáneo, pero alguien que pueda ayudarlo, brindarle apoyo para alcanzar sus metas, es lo mejor. Incluso si la amistad termina, lo que aprenda seguirá con él.
—...
Es cierto que en la vida se debe progresar, conseguir dinero, un buen trabajo estable y ahorrar para el retiro. Pero la vida es única, después de esta no tendremos otra oportunidad. Aunque teóricamente posible, es prácticamente imposible. Por eso, el sentido de la vida, nuestro propósito principal, debería ser disfrutarla. Después de todo, es un regalo único. Aun así, decidí no compartir esto con Nila. Ella no lo entendería.
—Me voy, espero no volver a verte.
—Ten por seguro que no me volverás a ver.
Estaba seguro de hacerlo, pero ahora estoy aún más decidido.
Nerlin regresó. Creí que finalmente se irían a la fiesta, pero...
—Nila, lo olvidé. Me gustaría hablar con Atticus también. ¿Podrías adelantarte, por favor? —Pidió amablemente.
—E-Esta bien.
¿Me preguntará sobre lo que hablamos Nila y yo? Supongo que desde la distancia se podía notar que nuestra conversación no era precisamente amistosa.
—Gracias, Atticus. Realmente has sido un miembro valioso para la Cipher Squad. Fuiste el único que, a pesar de todo, sigue comprometido en detener a Mastermind. Espero que podamos seguir colaborando el próximo semestre.
—¿E-Eh? E-Está bien, Nerlin. Gracias, igualmente.
—Bien, ¿Estás aquí para detener a Mastermind, verdad? Si llegas a necesitar ayuda, no dudes en buscarme. Siempre estaré dispuesto a ayudarte cuando lo necesites. —dijo colocando su mano en mi hombro.
—Lo tendré en cuenta.
—Bien, que disfrutes la fiesta. —dijo, despidiéndose.
Es curioso, pensé que tendría que hacer esto en solitario, y en cierta medida así es, pero extrañamente no me siento solo. Siento que si llego a languidecer, él estará ahí para levantarme.
10
La música retumba en mis oídos mientras observo la animada escena frente a mí. Estamos en la fiesta de fin de año en UME, y la emoción es palpable en el aire. Pero, a pesar de la aparente alegría que nos rodea, no puedo evitar sentirme incómodo, especialmente cuando mi mirada se posa en Nila.
Sé que algo no cuadra con ella. Desde que descubrí evidencias que podrían señalarla como Mastermind, la desconfianza se ha apoderado de mí. No puedo permitirme bajar la guardia, no cuando las personas están en juego.
Nila llegó a la fiesta junto a Nerlin, ambos lucen elegantes y sonrientes. Pero mis ojos están puestos en Nila, buscando cualquier señal de su verdadera naturaleza. Observé cómo le susurró algo a Nerlin antes de separarse. Probablemente algo como "Voy a saludar a mis amigas", y Nerlin asintió distraídamente mientras se dirigió a la pista de baile.
Este es el momento que he estado esperando. Mientras Nila se aleja, aprovecho la oportunidad para seguir sus pasos discretamente. Mantengo una distancia segura, tratando de no levantar sospechas mientras la sigo a través de la multitud.
Veo cómo Nila se reúne con sus amigas, su risa suena genuina y su sonrisa parece auténtica. Pero no puedo dejarme engañar por las apariencias. Si hay algo que he aprendido, es que las cosas no siempre son lo que parecen. Mientras Nila interactúa con sus amigas, permanezco observando, buscando cualquier gesto o comportamiento que delate sus verdaderas intenciones.
Nila se despide de sus amigas y se dirige hacia otro rincón de la fiesta. La sigo de cerca, mi mirada clavada en su figura. Cada vez que ella se detiene para conversar con otros estudiantes, siento un escalofrío recorriendo mi espalda. No puedo creer que este tan tranquila después de todo lo que les ha hecho a los estudiantes de UME.
El tiempo pasa y la fiesta continúa en su apogeo. Nila parece estar en todas partes, siempre rodeada de personas que parecen disfrutar de su compañía. Sigo vigilando desde las sombras, observando cada uno de sus movimientos con atención.
Mientras sigo observando a Nila desde la distancia en la fiesta, mi mente comienza a viajar al pasado, a todos los momentos en los que intenté desentrañar el enigma que rodea a Mastermind. Ha sido un camino lleno de pistas borrosas y teorías inconclusas, pero estoy decidido a encontrar la verdad detrás de esa enigmática figura.
Mi investigación me llevó a revisar eventos pasados en el campus, y descubrí que muchas de las situaciones caóticas y misteriosas que habían ocurrido siempre tenían algún vínculo con Mastermind. Principalmente las desapariciones inexplicables, parecía que esta figura siempre estaba involucrada de alguna manera.
No pasó mucho tiempo antes de que comenzara a notar similitudes entre los comportamientos de Mastermind y los de Nila. Siempre parecía estar en el lugar correcto en el momento adecuado, como si supiera exactamente cómo causar caos y confusión. Y aunque en la superficie Nila parecía una estudiante amigable y carismática después de conocer a Nerlin, había momentos en los que noté un destello de malicia en su mirada.
A medida que conectaba los puntos y analizaba cada pieza de información, llegué a una conclusión que me dejó sin aliento: Nila podría ser Mastermind. No tenía pruebas sólidas, solo una serie de coincidencias inquietantes que me llevaban a pensar que había algo oscuro escondido detrás de su fachada encantadora.
La idea de que Nila pudiera ser Mastermind me atormentaba día y noche. Me sumergí en la investigación, buscando cualquier detalle que pudiera confirmar mis sospechas. Revisé archivos, conversaciones y eventos pasados en busca de pistas que pudieran vincular a Nila con las maquinaciones de Mastermind. Cada vez que encontraba una pista, mi corazón latía con anticipación, pero también con temor por lo que podría descubrir.
Mis sospechas sobre Nila y su conexión con Mastermind eran cada vez más fuertes, pero necesitaba pruebas concretas para respaldar mis teorías. Me sumergí aún más en la investigación, dispuesto a encontrar cualquier indicio que pudiera vincular a ambas figuras de manera irrefutable.
Un día, mientras revisaba detenidamente las imágenes de las escenas, noté un detalle que me llamó la atención. En una de las fotos, capturada durante un evento en el campus, pude ver un reflejo en un espejo cercano que mostraba a una persona caminando en dirección opuesta. Esa persona tenía una silueta muy similar a la de Nila. Mi mente se puso en marcha, y recordé que Nila tenía la costumbre de moverse rápidamente y desaparecer en medio de la confusión.
Otro hallazgo significativo fue cuando comparé los lugares y momentos en los que se habían producido los incidentes de Mastermind y las apariciones públicas de Nila. Sorprendentemente, Nila parecía estar ausente en los mismos eventos o lugares en los que el caos había estallado, a pesar de estar en el mismo lugar solo momentos antes. Fue entonces cuando recordé que Nila tenía una debilidad por los eventos dramáticos y las situaciones conflictivas. Era como si estuviera alimentando su necesidad de protagonismo a través de los actos de Mastermind.
Una de las pruebas más contundentes llegó cuando descubrí una conversación en línea, hackeando la aplicación de UME, entre Mastermind y alguien con el nombre de "N". Los mensajes parecían ser inocuos, pero analicé los patrones y las palabras clave. Noté que las iniciales "N" y "M" se usaban en momentos estratégicos de la conversación. Además, las referencias a objetos personales de Nila eran constantes en los mensajes. Estaba claro que estaba hablando consigo misma, coordinando sus acciones de manera meticulosa.
La investigación me llevó a desentrañar una serie de eventos y coincidencias que solo podían tener una explicación: Nila era Mastermind. No podía negar las pruebas que tenía delante de mí. Los patrones de comportamiento, las desapariciones misteriosas y las conversaciones en línea eran demasiado consistentes para ser una simple coincidencia.
Después de eso decidí seguirla y confrontarla en el bosque, pero al parecer tenía todo calculado, y no pude hacer nada.
A medida que conectaba los puntos, una sensación de asombro y horror se apoderó de mí. No solo había descubierto la verdad detrás de Mastermind, sino que también había encontrado la identidad de la persona detrás de la máscara: Nila. Era difícil de creer, y al mismo tiempo, era la respuesta que había estado buscando durante tanto tiempo.
Mis pensamientos se movían a toda velocidad, analizando cada detalle y buscando patrones más profundos. Recordé cómo Nila siempre parecía estar al tanto de los eventos en la universidad, incluso antes de que fueran anunciados. Sus reacciones exageradas a las noticias y su habilidad para predecir situaciones complicadas ahora tenían sentido. Era como si estuviera manipulando todo desde las sombras, creando oportunidades para sus actos como Mastermind.
Mientras recordaba todos estos detalles, mi determinación se fortalecía. Ahora sabía que tenía razón en mis sospechas, y estaba decidido a enfrentar a Nila y detener sus planes antes de que fuera demasiado tarde. Mi mente estaba llena de planes y estrategias, y sabía que tenía que actuar con cautela para proteger a Nerlin y a los demás estudiantes de sus manipulaciones.
Pero a medida que me concentraba en mis pensamientos, la realidad de la fiesta a mi alrededor volvió a la vanguardia. Me di cuenta de que había estado absorto en mis recuerdos y pensamientos durante un tiempo. Observé a Nila mientras continuaba disfrutando de la fiesta, y un escalofrío recorrió mi espalda otra vez. Mi intuición me decía que algo más grande estaba en juego, que Mastermind tenía un plan que iba más allá de esta fiesta.
La noche estaba llena de incertidumbre y peligro, y estaba decidido a descubrir qué estaba tramando Nila y cómo podría afectar a todos nosotros. Pero antes de que pudiera actuar, necesitaba encontrar la oportunidad adecuada para confrontarla y obtener respuestas. La verdad esta a mi alcance, y no descansaré hasta que finalmente salga a la luz.
11
Estoy convencido de tres certezas: Nila sabe que no estoy en la fiesta por mera diversión, también comprende que mi presencia no es solo para su vigilancia y por último, se que ha urdido un plan para frenarme. Este es su típico modus operandi como Mastermind: atacar antes que sus rivales. Lo ha demostrado en el incidente del bosque y en el intento fallido de rescatar a los estudiantes de UME. Por eso, ahora sé que no solo debo mantenerla bajo observación, debo actuar si quiero poner fin a esto esta noche. Poseo las pruebas para exponer la identidad de Mastermind ante todos los estudiantes de UME. Lamentablemente, eso no será suficiente, ya que revelar su identidad no resolverá el problema. No tengo pruebas de su falsa acusación contra esas personas, lo que significa que no puedo expulsarla. Sin embargo, no todo está perdido, tengo un plan. Solo necesito provocar a Mastermind para que intente expulsar a alguien. Estoy seguro de que podría lograrlo con poco tiempo de preparación. El único dilema es encontrar a una persona adecuada como señuelo. No soy una mala persona, no me rebajaré a su nivel, por lo que seré yo mismo quien se ofrezca como cebo.
Mientras observo cómo Nila está rodeada de gente, me acerco lentamente. Mi objetivo es esperar hasta que quede aislada para poder iniciar una conversación con ella.
Por fortuna, Nila y su grupo de amigas se encuentran cerca de una mesa de bocadillos y bebidas. La gente viene y va de vez en cuando, aunque algunos permanecen cerca para disfrutar de la comida y la bebida, ya que también hay cubos de basura en ese lugar.
Bien, es hora de acercarme. Esto resulta ser más desafiante de lo que anticipé. Mis pensamientos y mis acciones son completamente ajenos el uno del otro, en mi mente, suelo ser decidido y resuelto, pero al actuar, mi desenvoltura desaparece. Tartamudeo al hablar, adopto una postura incómoda y evito el contacto visual. En este entorno abarrotado, me siento incapaz de moverme con soltura hacia la mesa de bebidas. A pesar de ello, enderezo mi postura. Siendo más alto que los otros estudiantes, resalto, lo cual me incomoda. Finalmente, llego a mi destino y logro captar la conversación de Nila con sus amigas.
—Nila, me alegra mucho por ti. Irradias determinación y energía —comentó su amiga.
—¡Gracias! Esta noche pienso poner fin a todo. ¡Será un momento inolvidable! —responde Nila emocionada.
Conozco su doble vida, lo que me hace sobreanalizar cada una de sus palabras en busca de significados ocultos.
—Nila, tal vez deberías regresar con él. Bye bye~ —dijo su amiga mientras se alejaba de Nila.
Finalmente, se quedó sola. Es el momento perfecto.
Me acerco por detrás y poso mi mano en su hombro. Los nervios me invaden. Vamos, Atticus, solo expresa tus pensamientos sin mirarla directamente. Cerrar los ojos parece tentador, pero si lo hago, no sabré si alguien más se acerca.
—¿Eh? ¿Qué es lo que quieres? ¿Acaso no afirmaste que no me volverías a ver? —respondió con determinación.
Aunque me refería a después de la fiesta, mi timidez me impide pronunciarlo.
—¿E-estás disfrutando la fiesta? —mi voz tembló.
—Eso a ti no te importa. —replicó, señalándome con el dedo.
—Q-quisiera hacerte una pregunta.
—...
En lugar de irse o decir algo, ella cruzó los brazos, mostrando cierta disposición a escuchar.
Cerré los ojos, tratando de imaginar que no había nadie frente a mí. Era la única manera en que podría formular una pregunta como la que estaba a punto de hacer.
—¿Qué crees que pensaría Nerlin si supiera el tipo de persona que eres?
—...
No respondió. Simplemente dio media vuelta, aparentemente lista para marcharse.
—Te detendré hoy.
No hay problema. En este preciso instante, al tocar la pantalla de mi teléfono, puedo enviar un mensaje a todos los alumnos de UME con las pruebas que demuestran que Nila es Mastermind. Aunque esto no resultará en su expulsión, al menos me brindará cierta protección por ahora. No podrá hacerme nada.
Nila giró y avanzó hacia mí con determinación.
—Te crees tan inteligente y especial, superior a los demás. Te ves como el salvador de los amigos de Nerlin. Sin tu ayuda, no podrían descubrir la identidad de Mastermind. Pero, ¿Sabes qué? Si Nerlin me hubiera pedido ayuda a mí, esto habría terminado hace tiempo. Esos códigos que a ti te llevan horas resolver, con la complejidad con la que están diseñados, yo podría leerlos sin ningún problema, como si estuviera leyendo algo en español.
Por supuesto, tú los creaste.
—¿Entonces por qué no te graduas de inmediato? —pregunté.
—Quiero divertirme. La universidad no representa ningún desafío para mí, así que lo único que me queda es disfrutar del tiempo aquí, especialmente con él. —dijo señalando a Nerlin a lo lejos.
—¿Y por eso expulsas gente? Has echado a personas cercanas a Nerlin. Eres egoísta.
—Él es de mi propiedad, puedo hacer lo que quiera con él. —Nila miró mi mano, que sostenía el teléfono, listo para enviar aquel mensaje. —Permíteme decirte algo. —se aproximó a mi oreja mientras posaba su mano en mi hombro. —Si no puedo apartarlos de él, entonces lo apartaré a él de ustedes.
Dijo con un tono desafiante mientras cruzaba junto a mí.
¡¿Qué quiso decir con eso?! Una angustia empezó a apoderarse de mí mientras observaba cómo se acercaba a Nerlin. Mientras él estaba distraído, Nila tomó el teléfono de su bolsillo y comenzó a usarlo. Antes de que Nerlin pudiera darse cuenta, Nila lo devolvió a su lugar.
Es difícil asimilar lo que estoy pensando en este momento. Ella no sería capaz de hacerle algo así a la persona que ama, ¿Verdad? Una vez más, siento que todo es culpa mía. ¿Debí alejarme de su camino?
Nila se separó de Nerlin nuevamente. Necesito dejar de lado a Nila por un momento y enfocarme en Nerlin. Debo advertirle sobre el tipo de persona que es Nila, aunque eso signifique que me odie.
Me acerqué a Nerlin y lo tomé del brazo. Cuando Nerlin volteó a mirarme, señalé hacia el balcón. Mi voz no es especialmente fuerte y la música estridente impediría que alguien me escuchara, por lo que parece más sensato hablar con Nerlin en un lugar donde la música no sea tan ensordecedora.
Nos dirigimos hacia el balcón, y Nerlin puso sus manos en mis hombros.
—¡Si te me acercaste es porque necesitas mi ayuda con Mastermind, ¿Cierto?! —preguntó, emocionado.
Esa pregunta me tomó por sorpresa. Olvidé que le había dicho tácitamente a Nerlin que no necesitaba su ayuda en la fiesta, que solo tenía que disfrutarla.
Recuperé el control de mis pensamientos y los coloqué en orden. Aparté sus manos de mis hombros y adopté una expresión seria. Después de todo, lo que le diré probablemente no será agradable.
—¡N-N, Nerlin, esto es importante!
Una vez más, mis palabras parecen desviarse de mis pensamientos, o tal vez están revelando más de lo que realmente sé sobre mí. Había anticipado una conversación seria, pero en este momento, soy yo quien está preocupado. El tono de mi voz refleja mi agitación.
—...
La mirada confundida de Nerlin se encontró con la mía, mientras yo buscaba transmitir mis palabras con urgencia.
—¡N-No necesito tu ayuda, eres tú quien necesita la mía! ¡Estás en problemas! ¡Debemos...! —Comencé a exponer mi argumento.
Nerlin suavizó su expresión, se apoyó en el borde del balcón y me cortó en seco.
—Atticus, ven.
—¿Eh? ¡Espera, necesito decirte esto! —Exclamé, visiblemente inquieto.
—Solo ven, no te quitará mucho tiempo.
Apoyé mis manos en el balcón y dirigí mi mirada al cielo.
—Eres una persona excepcional, en el buen sentido. Esa es tu mayor virtud, pero también tu mayor debilidad. Mucho más que tu timidez. Te empeñas tanto en ayudar a los demás que te olvidas de cuidarte a ti mismo. Dejas de lado tu apariencia y tu higiene. Te has inmerso tanto en tus investigaciones que incluso pasas por alto dormir...
Mi apariencia descuidada suele ser un punto de burla para la Cipher Squad, pero solo Nerlin ha sido capaz de percibir más allá.
—Lo que quiero expresar es que, antes de preocuparte por los demás, debes preocuparte por ti mismo. Antes de tender una mano, extiéndetela a ti. Porque para salvar a la escuela entera, primero debes salvarte a ti. No podrás ayudarlos si no estás aquí. Primero eres tú. Y aunque suene un poco egoísta, después vienen los demás.
Lo entiendo perfectamente. Un pobre no podría ayudar a un vagabundo si no tiene dinero. Un soldado herido en batalla no podría auxiliar a otro en peor situación si no tiene la fuerza para sacarlo de la zona de conflicto, en caso de que alguna herida se lo impida. Es un consejo sensato, lo tomaré en cuenta para el futuro. ¡Pero! En este preciso momento, realmente debo salvarlo.
Mientras reflexionaba, no me percaté de que Nerlin había desaparecido.
Regresé a la fiesta para buscarlo y, a lo lejos, vi a Nila. Sostenía una bebida y escrutaba sus alrededores. Cuando se aseguró de que nadie la observaba, extrajo una pequeña bolsa y vertió su contenido en la bebida. Luego, se aproximó a Nerlin y le entregó la copa, asegurándose de que él la aceptara sin resistirse ni percibir su aroma.
Mis sospechas se confirmaron: Nila está tramando expulsar a Nerlin.
12
Las luces brillantes y los murmullos animados llenan el salón de la fiesta de fin de año. La atmósfera está cargada de emoción y anticipación, mientras todos los estudiantes celebran el final de otro semestre en la universidad. Nila y yo estamos aquí, listos para sumergirnos en la diversión y los momentos inolvidables que esta noche nos tiene reservados.
Nila luce absolutamente impresionante en su vestido, con su cabello suelto y su sonrisa radiante. Está claro que ella también está disfrutando esta gran noche. No puedo evitar sentir una extraña sensación en el pecho al verla así. ¿Será que estoy nervioso? No, no puede ser. Después de todo, solo estamos aquí para disfrutar la fiesta, ¿Verdad?
Nos mezclamos entre la multitud, saludando a amigos y compañeros de clase que encontramos en el camino. La música resuena en el aire y la pista de baile está llena de personas que se mueven al ritmo de la música. Nila y yo compartimos una mirada y sin decir una palabra, comenzamos a mover nuestros cuerpos al compás de la melodía. Aunque aún no es el vals romántico, nuestros movimientos están sincronizados y nos dejamos llevar por el ambiente festivo.
El aroma tentador de la comida y las bebidas nos atrae hacia una mesa llena de deliciosas opciones. No puedo resistirme a probar un poco de todo: la comida tan refinada, los bocadillos y las bebidas. Nila ríe mientras me ve disfrutar de la comida con entusiasmo. Aunque siempre he tenido un apetito voraz, en este momento parece que cada bocado tiene un sabor aún más delicioso.
Mientras conversamos y nos reímos con amigos, siento que Nila y yo nos estamos acercando más. Nuestra conexión es más profunda que nunca, y aunque siempre ha sido mi amiga cercana, esta noche parece que estamos compartiendo algo especial. Nuestras risas se mezclan con las de los demás, y cada momento juntos es un recordatorio de lo afortunado que soy de tenerla en mi vida.
El reloj avanza y la fiesta sigue en su apogeo. Las luces intermitentes y los juegos en la pista de baile mantienen a todos entretenidos. Nila y yo continuamos bailando y divirtiéndonos, haciendo chistes y compartiendo historias. En algún momento, alguien nos desafía a un juego de mesa y, por supuesto, aceptamos el reto con entusiasmo.
—Bien ¿De que se trata?. —pregunté, ya que es un juego que nunca antes había jugado.
—Es en parejas, tu y Nila serán un equipo y Nik y yo seremos el otro equipo, el objetivo del juego es simple, solo tienen que avanzar por el tablero y dependiendo de la casilla en la que estés, deberás tomar una tarjeta que podría tener un valor número o restar valor numérico, el equipo con mayor puntaje ganará.
—Bien, ¡Vamos, Nila!
Perdimos, es entendible, fue nuestra primera vez jugando, además, hoy no es tanto sobre ganar, hoy se trata sobre pasar un buen rato juntos.
A medida que la noche avanza, los fuegos artificiales comienzan a iluminar el cielo. Nos detenemos para mirar el espectáculo y Nila se acurruca junto a mí, compartiendo el cálido abrazo de la noche. Es un momento mágico, y mientras observo los destellos de colores en el cielo oscuro, me doy cuenta de que esta es una noche que nunca olvidaré.
El ambiente festivo sigue llenando el aire mientras Nila y yo continuamos explorando cada rincón de la fiesta. La música cambia de ritmo y una canción pegajosa nos atrae hacia la pista de baile. Nos unimos a la multitud que se mueve al ritmo de la música animada, riendo mientras seguimos los pasos y las coreografías improvisadas.
—¡Vamos, Nerlin, muestra tus mejores movimientos! —exclamó Nila emocionada, tomando mi mano y guiándome en la pista de baile.
Río, dejándome llevar por el espíritu juguetón de la noche. Juntos, reímos y bailamos, compartiendo momentos de diversión y camaradería. A medida que nos movemos, me doy cuenta de que cada movimiento y cada risa nos acerca más.
Después de un rato, decidimos tomar un descanso y nos dirigimos a una mesa cercana. Nila tomó una copa de vino y yo una taza de té. Nos sentamos y miramos a nuestro alrededor, observando a otros disfrutar de la fiesta.
—¿Puedes creer lo rápido que ha pasado este semestre? —pregunté, con una expresión nostálgica.
—Definitivamente, siento que fue ayer cuando comenzamos las clases. Pero bueno, al menos terminamos con estilo en esta fiesta —respondió ella, brindándome una sonrisa.
asentí y suspiré, apoyando mi barbilla en mi mano.
—Es una pena que no todos estén aquí para celebrar juntos —comenté, con un tono pensativo.
—Tienes razón, pero al menos estamos aquí y podemos hacer lo mejor de esta noche —me respondió tocando suavemente mi mano.
Nila sonríe y sus ojos brillan mientras me mira. En ese momento, me siento agradecido por la amistad que compartimos y la forma en que podemos disfrutar de los momentos simples juntos.
La música cambia nuevamente y una canción más enérgica comienza a sonar. Nila se levanta de repente y extiende la mano hacia mí.
—¡Ven, Nerlin! ¡No puedes resistirte a esta canción!
Siendo sincero, ya estoy comenzando a agotarme, pero pensar que en el futuro recordaré este momento y me arrepentiré de no haber disfrutado lo suficiente, me motiva y me da las energías suficientes para seguir disfrutando.
Río ante su entusiasmo y tomo su mano, levantándome de la silla. Juntos regresamos a la pista de baile, donde nos sumergimos en la música y el movimiento.
Tomó la mano de Nila, la levantó y le doy un giro, provocando que su cuerpo también lo haga, luego la regreso a mi del mismo modo. Su rostro ahora está cerca del mío.
—No sabía que podías hacer eso. —dijo mientras sus mejillas se ruborizaban, aunque ahora no trata de ocultarlas.
—Hay algunas cosas de mi que no sabes.
Bailamos con energía, riendo y compartiendo comentarios divertidos mientras nos movemos al ritmo de la melodía.
En medio de la diversión, nos encontramos con otros amigos que también están disfrutando de la fiesta. Intercambiamos saludos y chistes, y a medida que nos movemos entre la multitud, la sensación de comunidad y alegría es palpable. Cada risa, cada conversación y cada abrazo fortalecen los lazos que compartimos.
La noche avanza y las risas continúan. La pista de baile está llena de personas que disfrutan de la música y la compañía de amigos. Nila y yo seguimos bailando y riendo, compartiendo un vínculo que parece crecer con cada momento que pasamos juntos.
A medida que la noche avanza, la atmósfera en la fiesta se vuelve más mágica. Las luces parpadean suavemente, creando un ambiente cálido y romántico. La música cambia nuevamente, esta vez a una melodía suave y lenta. Las parejas empiezan a reunirse en la pista de baile para el tradicional baile lento.
Observo cómo las parejas se acercan y comienzan a moverse en sintonía con la música. Nila y yo intercambiamos miradas, y sin necesidad de palabras, nos dirigimos hacia la pista de baile. Extiendo mi mano hacia ella y la guío con gentileza mientras nos unimos al baile.
La suavidad de la música envuelve el ambiente mientras nos movemos en círculos, abrazados en un baile lento. Nuestros pasos son coordinados y nuestras miradas se encuentran, creando un momento de intimidad y conexión en medio de la multitud.
—¿Sabes? Nunca pensé que estaríamos aquí, compartiendo este baile juntos —susurra Nila, su voz llena de emoción.
—Yo tampoco lo habría imaginado, pero estoy contento de estar aquí contigo —respondo sinceramente.
Bailamos en silencio por un momento, dejando que la música y el movimiento hablen por nosotros. Cada paso que damos parece sellar nuestra amistad, reforzando la confianza que compartimos y los momentos que hemos vivido juntos.
A nuestro alrededor, otras parejas también disfrutan del baile lento. Las miradas de complicidad y las sonrisas románticas llenan la pista de baile, creando una atmósfera de amor y alegría.
Mientras seguimos bailando, nuestras manos entrelazadas, siento que el mundo exterior desaparece por un momento. Solo somos Nila y yo, compartiendo un momento especial en medio de la fiesta. El tiempo parece detenerse mientras continuamos girando suavemente, disfrutando de la compañía del otro.
—Gracias por este hermoso baile, Nerlin. Es un momento completamente mágico —dice Nila con una mirada que refleja su gratitud.
—El placer es mío, Nila. No puedo pensar en una mejor persona con la que compartirlo —respondo, sintiendo una mezcla de felicidad y agradecimiento.
Nila apoyó su cabeza en mi pecho, y por un momento, dejamos de bailar. Nos encontramos abrazados en el centro de la pista de baile, disfrutando de un momento de calma en medio de la fiesta bulliciosa.
—Sabes, Nerlin, creo que nunca me disculpé contigo adecuadamente por lo que te hice en el pasado —comentó con un tono lleno de arrepentimiento.
—No necesitas disculparte, Nila. Yo fuí quien te eligió en ese momento, ahora es tu turno. —respondí con sinceridad.
Nila miró hacia abajo, como si estuviera perdida en sus pensamientos. Luego alzó la mirada y me miró directamente a los ojos.
—Siempre estaré aquí para ti, Nerlin. Pero no puedo evitar sentirme culpable por cómo actué. Si hay algo que pueda hacer para que me perdones, por favor, dímelo. Haré lo que sea necesario.
Sus palabras me tomaron por sorpresa. Nunca había esperado que Nila se disculpara de esa manera. Pero en lugar de responder inmediatamente, reflexioné por un momento.
—En realidad, hay algo que me gustaría que hicieras —dije, manteniendo un tono ligero.
—¿Qué es? —preguntó curiosa.
—Sigue disfrutando de esta noche. Deja el pasado atrás y vive este momento al máximo. Eso es lo que realmente importa.
Nila separó su cabeza de mi pecho y me miró con una expresión cálida en su rostro. Sonrió y tomó suavemente mi mano, invitándome a seguir bailando.
La música seguía sonando mientras nos movíamos al ritmo de la melodía, Eramos solo ella y yo, compartiendo este momento especial en medio de la multitud.
El ambiente estaba lleno de risas, charlas animadas y el murmullo de la música. La pista de baile estaba llena de parejas que disfrutaban de la noche.
Desde lejos, pude ver cómo Atticus se aproximaba rápidamente hacia nosotros. Empujando a los estudiantes que se encontraban en su camino. No era típico de su comportamiento, lo que me hacía pensar que algo importante estaba ocurriendo. Su expresión reflejaba una profunda preocupación mientras se abría paso hacia donde Nila y yo nos encontrábamos en la pista de baile.
—¡¡¡NERLIN!!!
13
30 minutos antes.
Maldita sea, Nerlin, ¿por qué tenías que alejarte? Todo lo que haces es complicar aún más las cosas. No, no puedo permitirme pensar así. Él no tiene idea de lo que está pasando, es comprensible que quiera volver y disfrutar de la fiesta con Nila. A fin de cuentas, siento una punzada de celos, tanto de él como de los otros estudiantes. A pesar de estar en UME, en este momento no tienen preocupaciones sobre las expulsiones o sobre Mastermind. Supongo que la antigua reflexión que escuché tiene algo de verdad: la ignorancia puede conducir a la felicidad.
Ahora, tengo que encontrar una forma de rescatar a Nerlin y a todos los estudiantes de UME de una vez por todas. Detener a Nila esta noche es mi máxima prioridad. Exponer su identidad no resolverá nada. Necesito expulsarla, y la mejor manera de hacerlo es jugar con sus propias reglas. Voy a incriminar a Nila.
Nunca pensé que llegaría a hacer algo como esto, pero Mastermind me está obligando a cuestionar mis propios límites morales. ¿Es correcto hacerle daño a una persona mala si eso soluciona un problema mayor? Algunos gobiernos tienen la pena de muerte para los delincuentes, pero que sea legal, ¿lo convierte en lo correcto? La infidelidad es legal, pero ser infiel es considerado incorrecto. La moralidad es un concepto humano y, al ser creado por nosotros, está lleno de imperfecciones.
Con ese pensamiento en mente, decidí abandonar la fiesta para buscar algunas cosas que podrían ayudarme a expulsar a Nila. Salí apresuradamente y me dirigí a las tiendas más cercanas, pero me di cuenta de que estaban cerradas. Siendo casi medianoche, era de esperar que los establecimientos ya no estuvieran abiertos. No tenía la opción de dirigirme al centro de la ciudad, ya que para entonces la fiesta habría terminado. Así que me vi obligado a tomar una decisión que no me hacía sentir cómodo: iba a robar.
Subí la cerca de una casa que estaba al lado de la tienda. Al alcanzar el tejado, puedo ingresar si logro desatornillar la rejilla de ventilación. Por suerte, siempre llevo conmigo una herramienta multiusos. Aunque el destornillador era más pequeño que los tornillos, la navaja resultó ser útil. Con determinación, logré entrar. Mientras tomaba los productos necesarios, me prometí a mí mismo que volvería al día siguiente para pagar lo que había tomado.
Lo siguiente en mi plan era incriminar a Nila. Para lograrlo, tendría que plantar evidencia de alguna manera. En este momento, Nerlin y Nila estaban disfrutando de un juego de mesa con otros amigos. Lamentablemente, Nila estaba sentada en una posición desde la cual podría verme fácilmente si me acercaba. Así que, por el momento, solo podía esperar a que terminaran. Me senté en una de las mesas para observar. Parecía que todos se estaban divirtiendo. Aunque me sentía culpable al pensar que yo sería el motivo de que la fiesta terminara, sabía que era necesario. Tal vez me convertiría en el héroe de UME y ganaría popularidad, al igual que Nerlin al salvar su club. O quizás, como consecuencia de la expulsión de Mastermind, las expulsiones por parte de otros estudiantes aumentarían de nuevo. Nila era un mal necesario, pero cometió el error de afectar a mis amigos. Y tal vez nosotros cometimos el error de intentar descubrir su identidad.
Ambos finalmente terminaron su juego y me levanté instintivamente, aunque en realidad aún no puedo tomar acción. Tengo que esperar el momento perfecto, por ahora me limitaré a seguir sus movimientos.
El inicio de los fuegos artificiales habría sido la oportunidad ideal. Entre la multitud, Nila difícilmente podría notar quién está detrás suyo o si alguien le implantó algo. Sin embargo, ese mismo beneficio también se convirtió en una desventaja, ya que la gente se amontonó rápidamente, impidiéndome acercarme.
Una vez más, regresaron a la pista de baile, un lugar en el que definitivamente no puedo estar. Está en el centro del lugar y no todas las parejas bailan, lo que significa que hay demasiado espacio libre donde cualquiera podría notarme.
Con cada minuto que pasa, me siento cada vez más impotente. Si Lily o Nerlin estuvieran en mi lugar, ya habrían ideado un plan para plantar las pruebas. Tal vez se habrían acercado para distraer a Nila mientras otro miembro de la Cipher Squad lleva a cabo el trabajo necesario.
Decidí acercarme a la mesa de bebidas y tomé una copa de vino. Luego subí al segundo piso, donde se encontraba el balcón donde había conversado con Nerlin hace unos momentos. Quería tomarme un momento para reflexionar y encontrar la determinación necesaria para hacer lo que se avecina.
Me senté en el balcón, con mis pies colgando en el aire. Tengo miedo a las alturas, pero extrañamente en este momento no siento ese temor. Hay cosas que me preocupan mucho más en este momento, supongo. Tomé un sorbo de vino y levanté la mirada hacia el cielo. Es increíble cómo ha pasado ya un año. Es sorprendente que alguien como yo haya logrado hacer amigos. Y es aún más sorprendente que alguien haya logrado arrebatármelos tan fácilmente, sin ni siquiera aparecer en persona. Nila es definitivamente mucho más inteligente que yo, pero eso no significa que siempre vaya a ganar. Después de todo, sigue siendo humana y los humanos cometen errores. Su error fue considerarme su enemigo. Puede que sea inseguro y tímido, pero eso no dicta mi determinación en lo que quiero lograr. Si no es hoy, será mañana, pasado, en una semana o un mes. Pero en este momento, no hay nada que no haría para lograr su expulsión. Solo espero que el tiempo no me robe a mis amigos. Lo que más anhelo es que todos estemos juntos el próximo semestre.
Mientras reflexionaba, los recuerdos del pasado cercano también vinieron a mí. No estoy seguro de cómo habría transcurrido esta noche si no hubiera aceptado la invitación de Nerlin para llevarme. Si no hubiera estado en ese auto, no la habría enojado. Quizás ella solo quería disfrutar de esta noche. Si no hubiera estado en el auto, no habríamos tenido ese enfrentamiento, ni siquiera la habría visto llegar con ese... ¿Bolso? ¡Es cierto! Nila llegó a la fiesta con un bolso. Podría plantar la evidencia allí. Solo tengo que encontrarlo. En la entrada, hay un lugar reservado para objetos personales como bolsos o mochilas. Además, no está vigilado y no debería haber estudiantes cerca.
Me dirigí rápidamente al lugar, y para mi sorpresa, había una multitud de bolsos amontonados en ese espacio. Era abrumador, pero no podía permitirme estresarme. Tenía que apurarme, si alguien me veía, simplemente podía decir que estaba buscando mi propia mochila.
Comencé la búsqueda meticulosa. Uno por uno, inspeccioné los bolsos, en ocasiones tuve que sacarlos todos para no confundirme. Sabía que el bolso de Nila combinaba con su vestido, un color específico que recordaba claramente. Además, había un detalle distintivo: un llavero que Nerlin le había regalado. Me lo había contado una vez cuando buscaba su consejo sobre qué regalarle a Nila. A medida que pasaban los minutos, mi determinación crecía en lugar de debilitarse. Con cada búsqueda, el número de lugares se reducía, lo que solo me impulsaba a seguir adelante. Y finalmente, llegó el momento. No estaba allí. Si no estaba en esta pila, solo había un lugar donde podría estar... en el auto. Si lo encontraba allí, me sentiría frustrado por no haber comenzado mi búsqueda allí en primer lugar.
Me dirigí al estacionamiento y localicé el auto. A través de la ventana, pude ver el bolso. Solo faltaba encontrar una manera de abrir la puerta. Recordé que podía usar el cordón de mi zapato para formar un nudo, luego pasar el nudo por el pequeño espacio en la ventana y llegar hasta el seguro de la puerta. Era la única opción que tenía en mente. Me quité el cordón de mi zapato derecho, preparándome para hacer el nudo, cuando recibí una notificación en mi teléfono. Inicialmente, pensé en ignorarla, pero una extraña corazonada me decía que podría ser importante.
Desbloqueé rápidamente mi teléfono y abrí las notificaciones. Mi corazón se aceleró cuando vi que alguien había reclamado mis créditos. Un escalofrío recorrió mi espalda. ¿Ella lo sabía? ¿O simplemente estaba tratando de deshacerse de mí desde el principio? Solo me quedaban 3 días para abandonar la escuela, pero no creía que fuera a ocurrir hoy. Si ella quería expulsarme, tenía que ser esta noche. El miedo se apoderó de mí en ese momento. Entonces, recordé las palabras de Nerlin: "Si llegas a necesitar ayuda, puedes buscarme. Siempre estaré dispuesto a ayudarte cuando lo necesites". No quería depender de él, pero en ese instante, me sentía verdaderamente aterrado. Me había creído más valiente de lo que realmente era. No era capaz de enfrentar esto solo.
Salí corriendo en dirección a la fiesta. El miedo de imaginar cómo sería expulsado superaba todo a mi alrededor. Empujé a la gente que se interponía en mi camino mientras corría, llamando la atención sin preocuparme por ello. Finalmente, los vi a ambos. Necesitaba ayuda desesperadamente. Corrí hacia Nerlin, extendiendo la mano, como si solo el contacto con él pudiera salvarme de la expulsión.
—¡¡¡NERLIN!!! —grité mientras me acercaba a toda velocidad.
Justo cuando estaba a pocos metros de él, fui tacleado por alguien. Caí de bruces, mi visión se nubló por un instante. Lo último que vi antes de que todo se volviera confuso fueron esos ojos, esos malditos ojos que tanto me aterraban.
—¡Atticus Forrester, quedas arrestado por robo agravado, conspiración y posesión de material de explotación infantil! Tienes derecho a permanecer en silencio. Todo lo que digas puede y será usado en tu contra en un tribunal de justicia. Tienes derecho a un abogado. Si no puedes pagar uno, se te proporcionará uno.
14
El caos se desató en la fiesta y los oficiales nos pidieron evacuar a todos los estudiantes por precaución. Alguien planeaba disparar a los estudiantes durante la fiesta. Tomé a Nila de la mano y la llevé lo más lejos posible, dirigiéndonos al bosque detrás del campus. Después de correr por un rato, finalmente nos detuvimos.
—¿Estás bien? —Pregunté con un tono de preocupación evidente en mi voz.
—¿Eh? Sí, ¿y tú? —Respondió, su rostro mostraba una mezcla de sorpresa y decepción.
—Sí, estoy bien. —Respondí, abrazándola con suavidad.
Sin embargo, ella se separó inmediatamente y me miró fijamente a los ojos.
—Lo siento, Nerlin. —Dijo, desviando la mirada hacia un lado.
Tomé con ternura su rostro entre mis manos, volviendo a dirigir su mirada hacia mí. La observé, sin decir una sola palabra, tratando de entender sus emociones.
—Atticus, era... Tu amigo. —Añadió, sus palabras salieron de sus labios con un tono de pesar.
Aún no comprendo por qué Nila se está disculpando.
—Y aún después de lo que pasó, no puedo evitar seguir enojada con él por arruinar la noche, mi noche. —Comentó, expresando su frustración con claridad en su voz.
Esto me trae a la mente el caso de Delia. Ella se enojó y pareció no dar importancia a mis sentimientos en absoluto. Supongo que Nila se siente de manera similar ahora.
—La verdad es que yo... —Nila comenzó a hablar entre lágrimas.
Tomé su mano con suavidad y la llevé a mi pecho, ofreciendo consuelo.
—Nila, no necesitas disculparte conmigo por nada. —mi voz salió reconfortante mientras secaba sus lágrimas con delicadeza. —No tienes por qué llorar, ¿Sí?
—E-Esta bien. —respondió con voz temblorosa, esforzándose por controlar sus emociones.
Vi cómo Nila secaba sus lágrimas por sí sola, su expresión se transformó en una sonrisa que me llenó de alivio.
—Pero aún tengo que decirte algo. —dijo con un tono serio, sus ojos mostraban determinación.
—Okey, pero antes me gustaría saber algo. —añadí con curiosidad.
—¿Q-Qué es? —preguntó con inquietud con su mirada fija en la mía.
—¿Seguirías conmigo, sin importar qué? —le pregunté, transmitiendo mis sentimientos con sinceridad.
—Tú sabes que sí. —respondió, infundiendo seguridad en su voz, lo cual me reconfortó.
Decidí confesar mis pensamientos, buscando una comprensión mutua.
—Nila, durante la fiesta, vi a Atticus y a ti juntos en algunas ocasiones, a pesar de que nunca los había visto juntos antes. —le confesé, tratando de entender mejor la situación.
—E-Eso...
Nila comenzó a hablar, pero antes de que continuara, posé mi dedo en sus labios suavemente, silenciándola de manera gentil.
—Tú mencionaste que una vez lo encontraste llorando en el bosque. Luego recordé aquella ocasión en la que Atticus reveló que fue al bosque persiguiendo a Mastermind... Él estaba planeando expulsarte. Y no podía permitir que te hiciera eso.
—¿Tú lo...? —Nila dejó la frase en el aire, su expresión reflejaba asombro y desconcierto
Desde que conozco a Nila, he estado preparándola para este momento.
—Nila, yo soy Mastermind.
Ella abrió los ojos con asombro, su rostro revelaba una mezcla de sorpresa y confusión.
—Entenderé si después de saber esto ya no quieres estar conmigo. —dije, esperando su respuesta.
Nila se precipitó hacia mí con una urgencia palpable, sus labios buscaron los míos en un beso apasionado que transmitía sus profundos sentimientos. Cuando finalmente sus pies regresaron al suelo, mis manos la rodearon suavemente por la cintura, mientras sus brazos se enlazaban alrededor de mi cuello, uniendo nuestros cuerpos en un abrazo íntimo y emocional.
—No me importa. —dijo mientras se separaba de mí con una mirada decidida.
Le ofrecí una sonrisa, sintiendo un alivio profundo.
—¿En serio creías que dejaría a la persona que amo solo por algo así? —Nila dijo, su voz transmitía seguridad y ternura.
—Bueno, no estaba completamente seguro, pero tenía la intención de revelártelo hoy. No quiero ocultarte nada acerca de quién soy.
En realidad, eso es una pequeña mentira. He estado planeando este momento durante un tiempo, buscando el momento adecuado para revelarle mi identidad. Sin embargo, si no hubiera sentido que ella estaba lista para escuchar la verdad, no habría tomado el riesgo de decírselo.
—Sabes, Nerlin, en algún momento pensé que sería más sencillo si fueras una persona malvada, así sería la única en tu vida, parece que mi deseo se hizo realidad, jeje. —rió con suavidad, su mano cubría tímidamente su sonrisa, y luego prosiguió. —Oye, Nerlin, lo de Atticus... ¿Lo hiciste por mí? —preguntó con nerviosismo.
—Sí, investigué a Atticus desde el día que lo conocí. Resulta que perdió a sus padres cuando era solo un niño, así que se mudó con su abuelo desde los 6 años. Su abuelo le brindó una educación excepcional, ya que también fue estudiante en UME.
Tuve un encuentro casual con el abuelo de Atticus en un callejón. Después de que me revelara que también fue estudiante de UME, decidí investigarlo. Conocer a Atticus simplemente me facilitó las cosas.
—Atticus comenzó a sospechar de ti y confirmaste sus sospechas cuando reclamaste los créditos de todos, pero no expulsaste a nadie, ese fue mi trabajo. Tú solo reclamaste los créditos para darle una advertencia, mostrándole que también podrías expulsar a todos si quisieras. Atticus no pudo engañarme; yo sabía que él sospechaba de ti y no podía permitir que te hiciera daño. —expliqué, enfatizando mi razón para expulsar a alguien que consideraba un amigo. —Planeé su expulsión y la llevé a cabo hoy. Cuando fue a advertirme sobre ti en el balcón, no le permití hablar. Sabía que solo me complicaría las cosas. En su lugar, lo invité a hacerme compañía. Esa fue mi oportunidad para transferir archivos que incluían videos indebidos, así como planes falsos sobre cómo planeaba disparar a los estudiantes de UME, además de borrar su investigación y la supuesta evidencia que tenía sobre ti. También mandé el video que mostraba cómo entraba a robar una tienda a la policía. Sus acciones solo lo perjudicaron más. Hice todo esto por ti.
—¡Eso me hace sentir realmente especial! —exclamó emocionada, balanceándose de un lado a otro. —Oye, Nerlin, ¿Esto significa que soy tu número uno? No harías algo similar por alguien más, ¿Verdad?
—No voy a ocultarte la verdad, Nila. Sí, haría cosas similares por otras personas, pero la diferencia es que por ti, haría absolutamente cualquier cosa. —contesté "sincero", tomando sus manos entre las mías.
—¡Entonces, entonces...! —empezó a decir, llena de emoción. —¿Ahora soy una chica digna de ti?
—Sí, lo eres. —respondí con una sonrisa.
Ahora finalmente, acabo de terminar con Nila, ella está completamente obsesionada conmigo. Es una ironía fascinante cómo alguien con un coeficiente intelectual tan elevado puede llegar a ser tan imbécil. Pero no puedo culparla por ello; sus emociones y traumas la mantienen en un estado de nubosidad, donde sus decisiones están teñidas por sus inseguridades y deseos no satisfechos. Todavía conservo fresco en mi mente el recuerdo del día en que la conocí. Fue entonces cuando sembré la primera semilla, aprovechando la debilidad de la asesora de su club. A través de amenazas, logré doblegar su voluntad y la forcé a cumplir con mis exigencias. Le insinué que expondría su traición conyugal a su esposo si no accedía a mis peticiones. El resultado fue más que satisfactorio, ya que no solo logré que el platillo seleccionado para la competencia fuera el soufflé, sino que también me aseguré la victoria en el concurso. Después de un arduo trabajo, finalmente logré cimentar una relación que parecía estable con Nila. Sin embargo, comprendía que para alcanzar el control total sobre ella, necesitaba convertirme en la única persona en la que confiara ciegamente. Fue entonces cuando me dirigí a las chicas de su clase, les revelé que tenía sentimientos por Nila, ellas propusieron votar por ella en el evento deportivo, de esa forma yo podría ser su pareja, propusieron un plan que en realidad fue mío, siendo yo, obtuve su cooperación de manera rápida y sencilla. La semilla de confianza que había plantado en su corazón comenzó a germinar, y ella no tardó en considerarme su refugio en un mundo incierto. Después de eso, las cosas fueron más fáciles. La confianza crecía poco a poco, tuve que deshacerme de Delia, ya que estaba en mi camino. Fingir que me importaba fue una parte necesaria, pero esos son solo detalles sin importancia.
Mis planes dieron un vuelco inesperado cuando Lily compartió conmigo su condición. Se desplegó en mí una compleja red de decisiones, ya que, a pesar de la coyuntura, Lily sigue siendo crucial para la Cipher Squad. Es el núcleo y su papel en el equipo es innegable, y por supuesto, también me es útil a mi. Así que, adapté mis planes, concebí la idea de un viaje durante las vacaciones. El propósito es claro: me reuniré con alguien con los recursos necesarios para salvarla.
¿Que pasará con Atticus? El y su abuelo están siendo arrestados en este momento, y por la seriedad de sus crimenes es probable que nunca salgan de prisión, en especial su abuelo, jejeje.
Este año ha sido divertido desde el comienzo, y espero divertirme aún más el próximo semestre. Pensé que UME sería una universidad aburrida, pero parece que me equivoqué, por primera vez.
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