Capitulo 5: Equipo de Alto Riesgo

"El fracaso puede ser un duro golpe para nuestros sueños, pero en la adversidad encontramos la fuerza para construir lazos inquebrantables y descubrir que el valor está en intentarlo juntos, no solo en el resultado." - Helen Keller

—Las reglas del evento deportivo, aunque se nos presenten como justas, en realidad no lo son. Aquellos que cuenten con una mayor cantidad de créditos estarán en clara desventaja. Por ejemplo, si dos equipos tienen 10,000 y 1,000 créditos respectivamente, y ambos pierden un 30%, ambos sufrirán la misma pérdida, ¿no es así? Sin embargo, la situación cambia drásticamente cuando se trata de ganar créditos. Los equipos con más créditos necesitarán robar porcentajes de varios equipos para obtener una ganancia real, lo cual resultará sumamente difícil. Por otro lado, los equipos con menos créditos solo necesitarán robar un porcentaje a un solo equipo con más créditos para lograr una ganancia significativa.

He desarrollado una teoría al respecto: este evento deportivo ha sido organizado por la escuela con el objetivo de expulsar a Mastermind. Él se encontrará en clara desventaja al poseer una gran cantidad de créditos. ¿Qué opinan ustedes al respecto, chicos?

—Siendo sincera, estoy muy preocupada por ti Nerlin, en el evento participarán alumnos muy atléticos y talentosos como Sonic, no debiste ofrecerte como participante.

—Lily, agradezco tu preocupación por mí, pero no debes preocuparte. Soy consciente de que en el evento participarán alumnos atléticos y talentosos como Sonic, pero confía en mí, estoy preparado para enfrentar cualquier desafío. Después de todo, soy el protagonista de esta novela, ¿verdad? Entonces, ahora me gustaría escuchar sus opiniones sobre mi teoría.

—Debo admitir, Nerlin, que tu teoría es sorprendente. Es algo que nunca hubiera imaginado que se te ocurriría. Tienes razón en decir que Mastermind tiene un dominio sobre la escuela, y es comprensible que UME quiera expulsarlo. Además, el hecho de que eventos escolares con reglas particulares, como el deportivo que se llevará a cabo mañana, no se hayan organizado en años, respalda tu teoría.

—Deberíamos investigar más a fondo. Mañana durante el evento, estaremos atentos a los maestros y organizadores. Tal vez podamos descubrir alguna pista o indicio sobre lo que está sucediendo.

—Estoy de acuerdo, Axel. Será importante estar alertas y observar detenidamente.

—Bueno, parece que mi teoría resultó ser acertada. Supongo que soy un genio después de todo —comenté con una pizca de arrogancia.

—Un verdadero genio no se arriesgaría a la expulsión solo por una chica.

—Ya superalo, Rylan. Hablando de ella, tengo que irme.

—¿Qué? ¿Por qué? Aún no hemos terminado nuestra exploración urbana. Todavía nos quedan algunas habitaciones por explorar en este hospital.

—Lo siento, pero necesito finalizar mi estrategia con Nila. Nos vemos mañana, chicos.

Me despedí rápidamente y me dirigí directamente a la casa de Nila. Durante las últimas semanas, habíamos estado planeando diferentes estrategias para el evento de mañana. Lo más importante sería evitar las competencias atléticas como las carreras o la natación, ya que Sonic y Airón son expertos en esas áreas. Si queremos tener alguna posibilidad de ganar, debemos participar en competencias que se adapten a nuestras habilidades. En mi caso, soy bueno en parkour, por lo que algo que involucre saltos y obstáculos, como una carrera de obstáculos, sería una buena opción.

También debemos considerar las competencias donde el riesgo de perder créditos sea mínimo. Si bien es cierto que en ese tipo de eventos la ganancia será menor, hemos decidido jugar de manera segura y evitar situaciones de alto riesgo. Estamos dispuestos a sacrificar un poco de ganancia para asegurarnos de no perder demasiados créditos.

—¿Estás lista para mañana?

—¡E-Eh! ¿Qué? ¿Y-Yo? Ah, s-sí.

Incliné mi cabeza con curiosidad.

—¿Estás bien? —pregunté, mirándola con preocupación.

—S-Sí, solo estoy un poco nerviosa, todo está bien... —respondió rápidamente, tratando de disimular sus emociones.

—Últimamente has estado actuando raro, me preocupas. Si dices que todo está bien, te creeré. Pero si puedo hacer algo por ti, solo dime, haré hasta lo imposible por ayudarte.

—No tengo ninguna duda sobre eso último. Bien entonces... p-podrías abrazarme... —susurró, apenas audible.

Un momento de silencio se apoderó de nosotros. Finalmente, asentí con determinación.

—¡Oh! Entendido.

La rodeé suavemente con mis musculosos y poderosos brazos (eso obviamente es una broma). Nos quedamos unos minutos en silencio, permitiendo que el peso de nuestras emociones se disipara en la tranquilidad del momento. Podía escuchar y sentir su respiración suave y constante, como una melodía que calma mi corazón. Era la primera vez que Nila me pedía algo así, rompiendo su habitual actitud tsundere.

—Que no se te suba a la cabeza —comentó, mirándome directamente a los ojos.

Sonreí con complicidad, sintiendo cómo mi corazón se aceleraba en mi pecho.

—Lo sé, no te preocupes. Pero debo admitir que abrazarte también me tranquiliza a mí —respondí sinceramente, dejando que mis palabras expresaran la calidez que sentía hacia ella.

En ese instante, ella escondió su rostro rápidamente en mi pecho, como si buscara refugio en mi abrazo. No pude ver qué expresión dibujó en su rostro, pero estoy seguro de que fue una mezcla de ternura y vulnerabilidad.

—¡Está bien, ya puedes soltarme! —gritó avergonzada, tratando de liberarse de mi abrazo.

—Lo siento, pero no pienso hacerlo —respondí con una sonrisa traviesa en mi rostro.

—¡ !

Sin previo aviso, ella desplegó una rápida técnica de defensa personal. En cuestión de segundos, mi cuerpo yacía adolorido en el suelo.

—¡AUCH! ¡No tenías que hacer eso! —protesté, masajeando la zona dolorida.

—No me dejaste alternativa —contestó, defendiendo su acción.

—¡Ni siquiera preguntaste una segunda vez! En fin, ayúdame a levantarme.

En ese momento, una idea cruzó mi mente. En lugar de tomar su mano para ponerme de pie, decidí aprovechar la situación. La jalé suavemente hacia mí, provocando que cayera encima mío.

—¡ !

Esta vez, en lugar de intentar escapar de mi abrazo, Nila optó por esconder su rostro nuevamente en mi pecho. Había notado que cuando estábamos demasiado cerca y se sentía extremadamente avergonzada, solía recurrir a ese gesto. Me di cuenta de que ella no se daba cuenta de esta tendencia suya, ya que si lo supiera, probablemente no lo repetiría jamás.

—¡T-T-T-Te! —balbuceó, tratando de encontrar las palabras adecuadas.

—¿Sí? —respondí curioso, esperando escuchar lo que tenía que decir.

—¡T-Tenemos que seguir discutiendo sobre el evento deportivo! —exclamó, tratando de mantener la compostura.

—¿Podemos hacerlo mientras estamos así?

—¡NO! —respondió de inmediato, apartándose de mí y recomponiéndose.

Decidí no molestarla más, ya que si continuaba con ese tipo de acciones y comentarios en este momento, lo más probable era que se enojara de verdad.

—He estado practicando diferentes deportes para no ser una carga —confesó Nila con cierta preocupación.

—Nila, no eres una carga, en absoluto.

—Es solo que... no he logrado obtener resultados satisfactorios en mis prácticas —explicó, bajando la mirada.

—Eso probablemente se debe a que eres demasiado exigente contigo misma. Estoy seguro de que lo harás bien mañana en el evento —intenté animarla.

—¿T-Tú crees? —preguntó con un atisbo de esperanza en sus ojos.

—¡Claro que sí! ¿Qué te parece si dejamos las estrategias a un lado por un momento y simplemente practicamos juntos un poco? Tal vez eso te ayude a relajarte.

—E-Está bien —aceptó, asintiendo tímidamente.

Durante toda la tarde y parte de la noche nos dedicamos a practicar una variedad de deportes que creímos podrían formar parte del evento deportivo: fútbol, baloncesto, tenis, tenis de mesa y muchos otros más. Aunque ahora que lo recuerdo, hace unos días fuimos a un centro de natación y Nila no me advirtió que no sabía nadar. Ella de verdad está haciendo todo lo posible para prepararse y obtener buenos resultados.

Después de una larga sesión de entrenamiento, finalmente llegó el momento de descansar y recuperar energías para el gran día de mañana. Aunque aún me inquieta la teoría que compartí con mis amigos, he decidido dejarles la investigación a ellos. Lily es mucho más inteligente que yo, y confío en que mis amigos podrán recopilar información valiosa desde fuera. Por mi parte, debo centrarme en el evento para evitar ser expulsado y dar lo mejor de mí. El sueño me envolvió rápidamente mientras me preparaba mentalmente para lo que estaba por venir.

1

Solo quedaban diez minutos para que comenzara el evento y Nerlin no aparecía por ningún lado. ¿Dónde demonios se habrá metido? Necesitamos presentarnos juntos, pero no responde a mis mensajes ni a mis llamadas. ¡Maldita sea! ¿Estará en su edificio? Es el único lugar donde no lo he buscado todavía.

Decidí dirigirme al edificio 4, donde se encuentra su clase, y para mi sorpresa, allí estaba él. Estaba conversando con sus amigos. Me acerqué sigilosamente y me pegué a la pared, tratando de escuchar su conversación a escondidas. Ahora que lo pienso, esto es una mala costumbre, pero la preocupación me nublaba el juicio.

—¿Estás seguro de que no quieres nuestros créditos? —insistió, mirándolo con preocupación.

—¿Tan poco confías en mí que crees que terminaré endeudado? —respondió, con una punzada de decepción.

—Es solo por precaución. Además, ¿qué tal si ella te traiciona? Hasta hace unas semanas te alejaba, ¿y ahora de repente quiere ayudarte? Podría estar usando una estrategia.

—Sí, es una posibilidad —admitió

¿Pasará otra vez? sintiendo cómo la incertidumbre se apoderaba de mí. Mi corazón empezó a latir con fuerza y mi respiración se volvió agitada.

—Pero saben qué —respondió, dejando escapar un suspiro—, confío en ella. He presenciado su dedicación y sacrificio. Estoy seguro de que ganaremos, en gran parte, nuestro éxito dependería de ella. Y si llegamos a enfrentar algún obstáculo...

—No perderán —interrumpió mi Lily con firmeza—. Y si por alguna razón lo hacen, no le des tus créditos.

—¡¿Acaso eres una adivina?! Pero ella merece quedarse en esta universidad mucho más que yo. Ya he tomado mi decisión.

En ese momento, me di cuenta de lo especial que era. Nunca creí que encontraría a alguien como él, alguien dispuesto a sacrificarse por el bien de los demás. Sentí un profundo deseo de ser digna de su amistad, de dar lo mejor de mí para evitar la expulsión. Estaba decidida a demostrarle que también podía salvarlo, que juntos podríamos superar cualquier desafío y salir victoriosos.

Mientras me encontraba absorta en mis pensamientos, no me percaté de que sus ojos estaban a escasos centímetros de los míos.

—¡AAAHH! —exclamé, sobresaltada.

—Estaba a punto de llamarte, no me di cuenta de que intentabas contactarme. El evento está por comenzar, ¿vamos juntos? —me dijo, con una sonrisa inocente.

—¡¿No vas a mencionar nada sobre lo que acabas de hacer?! Casi me da un infarto —respondí, con un tono de indignación.

—Lo siento. ¿Entonces, nos vamos? —preguntó, tratando de recuperar mi buen ánimo.

—No, estoy enfadada... —murmuré, cruzando los brazos.

Debo admitir que me gusta cuando hace esfuerzos para alegrarme cuando estoy enfadada. Me regala cosas, cocina para mí o intenta hacerme reír. Es un momento agradable que no puedo negar.

—¿Qué te parece si, después de todo esto, vamos al cine?

—No creas que puedes ganarme así —respondí, tratando de mantener mi postura.

—Entonces, ¿qué te parece si te enseño a hacer soufflé? —insistió con una sonrisa.

—¡Déjalo ya! El tuyo también tuvo errores, no eres mejor que yo. Además, he mejorado mucho por mi cuenta —respondí, desafiante.

—JAJAJAJA.

Esto no salió como lo había planeado.

—¡Ash! Está bien, puedo enfadarme contigo después. Vámonos —finalmente cedí.

Llegamos justo a tiempo, justo antes de tener que confirmar nuestra asistencia con los organizadores. Una vez registrados oficialmente, nos informaron que ya podíamos seleccionar las competencias en las que participaríamos a través de la app UME. ¡Las opciones ya estaban disponibles! Si tan solo hubiéramos llegado un poco más temprano... Bueno, lamentarse no nos llevaría a ninguna parte. En este momento, éramos 136 participantes, y era inevitable que algunos fueran expulsados al final del evento. Debíamos hacer todo lo posible por evitar eso.

Las competencias que nos esperaban eran verdaderamente peculiares. No se limitaban a los deportes tradicionales, sino que combinaban disciplinas o modificaban las reglas de manera sorprendente. Era una oportunidad única para poner a prueba nuestras habilidades en contextos inesperados.

Las competencias individuales nos desafiarían a enfrentar desafíos tanto físicos como mentales. Desde acertijos lógicos mientras corremos, hasta pruebas de agilidad en las alturas. Cada competencia nos presentaba un nuevo desafío y debíamos estar preparados para adaptarnos rápidamente a las circunstancias cambiantes.

Pero además de las competencias individuales, también había desafíos en equipo. Esto significaba que tendríamos que colaborar estrechamente con nuestro compañero para superar obstáculos y alcanzar la victoria. No se trataba solo de nuestras habilidades individuales, sino también de nuestra capacidad para trabajar en conjunto, confiar el uno en el otro y complementarnos mutuamente. Las competencias serán las siguientes:

*Quemados (en equipos)

*Carrera de relevos (en equipos)

*Salto de altura (individual)

*lanzamiento de peso (individual)

*Carrera de obstáculos (individual)

*Tiro con arco (individual)

*Esgrima (individual)

*Natación (individual)

*Boxeo (individual) 

*Gimnasia (individual)

*Escalada en roca (individual)

*Ciclismo en pista (individual)

*Voleibol de playa (en equipos)

*Patinaje artístico (en equipos)

*Levantamiento de pesas (individual)

*Hockey sobre hielo (en equipos)

*Tenis de mesa (en equipos)

*Slalom de conos (en equipos)

*Gato y ratón (en equipos)

*Descenso rápido (en equipos)

*Remo (en equipos)

*Bádminton (en equipos)

*Laberinto (en equipos)

*Judo (en equipos)

*Salto de longitud (en equipos)

Finalmente ha llegado el tan esperado momento: el inicio del evento. Ahora tenemos la oportunidad de elegir en qué competencias participar. Se nos pide un mínimo de 10 eventos, pero no podemos simplemente apuntarnos a todos sin pensar. Sería una estrategia poco inteligente. En cambio, debemos considerar cuidadosamente nuestras fortalezas y debilidades, y seleccionar sabiamente en qué competencias queremos poner a prueba nuestras habilidades.

Sabemos que no somos expertos en todo. Si participamos en deportes en los que somos terribles, el riesgo de perder nuestro porcentaje es demasiado alto y podríamos comprometer nuestras posibilidades generales en el evento. Por lo tanto, debemos seguir la estrategia que acordamos previamente. Tenemos que priorizar y establecer qué evento será el primero en el que nos lanzaremos.

Además, también debemos tener en cuenta la distribución horaria de las competencias. Es crucial asistir a la hora acordada para evitar cualquier contratiempo o penalización. Organizar nuestra agenda y priorizar los eventos nos ayudará a mantenernos enfocados y maximizar nuestras oportunidades de éxito.

—¿Vas a seguir mirándome fijamente para siempre?

—Estoy esperando tus indicaciones. —respondió, con una leve sonrisa.

—¡¿Eh?! ¿Por qué tengo que ser yo la que tome las decisiones? —exclamé, sintiendo la presión aumentar.

—Porque eres más inteligente que yo. Además, fuiste tú quien ideó nuestra estrategia, confío en tu liderazgo. —respondió, mostrando admiración.

—Es una gran responsabilidad para mí.

Debo hacer todo lo posible. Seré digna de su amistad y confianza.

—¡De acuerdo! En ese caso, vamos a participar en la competencia de voleibol de playa. Hemos practicado mucho, creo que podemos tener un buen desempeño.

—¡Genial! ¡Vamos entonces!

El partido de voleibol de playa comenzó y nuestras esperanzas estaban en lo más alto. Sin embargo, nuestra actuación...

FUE TERRIBLE.

Perdimos todos los sets de manera aplastante. La derrota total se traducía en una gran deuda acumulada, perdimos el 100%. Si no nos recuperábamos rápidamente, seremos expulsados.

2

Esto es desastroso, hemos perdido de manera catastrófica. Si no tomo medidas, la confianza de Nila se desvanecerá por completo. Necesito que se mantenga firme, que nos guíe. Sé que ella es capaz.

—¡Muy bien! ¿Cuál es nuestra próxima competencia? —pregunté, esbozando una sonrisa.

—¿E-eh? ¿No estás preocupado?—respondió confundida.

—No, siempre y cuando tú nos lideres.

—Deja de bromear. ¿Acaso no viste lo que acabamos de presenciar? Fue mi culpa...

—Tu solo decidiste en qué participaríamos, la culpa fue de ambos. Eso no significa que vayamos a perder en todas las competencias. Simplemente elegimos mal. Escúchame, no te preocupes por nada. El exceso de pensamientos solo nubla tu mente. Concéntrate en organizar lo que creas que es lo correcto.

—Pero si perdemos otra v...

—Aun así, seguiré a tu lado —interrumpí con determinación.

—¡M-muy bien, entonces vamos a judo! Quizás no sepas pelear, pero si yo gano, recuperaremos parte de nuestro porcentaje.

—Estoy seguro de que haré el ridículo, pero está bien. ¡Vamos!

¡Si, hice el ridículo! No puedo evitar sentirme un completo desastre en este momento. No es culpa mía, nunca tuve la necesidad de aprender a pelear. Crecí en una familia común y corriente, rodeado de amigos normales. La gente que aprende a pelear generalmente lo hace por necesidad: aquellos que crecieron en la pobreza, las víctimas de acoso escolar. Tal vez haya quienes lo hacen por pura diversión, pero ese nunca fue mi caso. Cómo sea, solo estoy buscando excusas y eso no me llevará a ninguna parte. El punto es que me derribaron en cuestión de segundos. Ahora temo que las demás chicas me vean de manera diferente. No puedo decir que no me importe, porque si mi reputación se ve afectada, también se verá afectada mi red de contactos y mi acceso a información. No puedo permitir que eso suceda. Necesito enfocarme en el evento deportivo que tenemos ahora mismo. Debo dejar de preocuparme y adoptar una mentalidad más estoica.

¡Nila también dejó una impresión en su pelea, pero en su caso, todo lo contrario a mí! Ganó fácilmente cada uno de sus combates. Algunos de los estudiantes parecían no tener idea de su habilidad, y su actitud burlona e insultante hacia ella probablemente ahora  quede en silencio. A partir de hoy, dudo que alguien se atreva a burlarse de ella, al menos no en su presencia.

La competencia de judo se llevó a cabo en formato de equipos. Los participantes se registraron y se organizaron en un torneo. Lamentablemente, perdí mi primer combate y fui descalificado de inmediato. Sin embargo, Nila no dejó de sorprendernos. Ganó todas y cada una de sus peleas, llevándose el primer lugar. ¡Esto nos permitió sumar un 22% más a nuestro porcentaje total! Es un avance significativo, considerando que aún tenemos la oportunidad de participar en otras 8 competencias. Si queremos tener éxito en esta competencia, debemos asegurarnos de ganar al menos un 10% en cada una de ellas a partir de ahora.

—Uaah, estoy agotada.

—Te mereces un descanso. ¿Qué te parece si yo participo en una competencia individual?

—Hmm, está bien. ¿Hay alguna en particular en la que quieras participar?

—¿Qué te parece la natación? He leído las reglas y parece que Airón no tendría ninguna ventaja debido a ellas.

—¡N-Ni lo pienses! ¡La natación no!

—¿Eh? ¿Por qué no?~

—S-Simplemente no... E-Escalada en roca, eso es. Participa en esa.

—¡Okey!

Aunque tenía curiosidad por saber la razón, decidí no insistir en preguntarle el por qué no quería que participara en la natación. En su lugar, me registré en la competencia de escalada en roca. Aún faltaban unos 15 minutos antes de que comenzara, así que pensé que sería un buen momento para charlar un poco con mis amigos. Después de intercambiar mensajes, acordamos un lugar donde reunirnos.

—¡Nerlin, ¿qué vas a hacer?!

—¿Te refieres a la deuda, verdad? No te preocupes, no tengo planes de perder. Por cierto, me gustaría saber si han descubierto algo sobre la organización del evento.

—Puedes hacer muchos planes, pero llevarlos a cabo con éxito es otra historia. Ten mucho cuidado. Sí, al parecer John escuchó a dos profesores hablando sobre Mastermind. La escuela no puede simplemente cambiar las reglas a su antojo, por lo que buscar a la fuerza quién tiene más créditos es inaceptable. Este evento es un intento legal de la escuela para descubrir quién es Mastermind.

—¿No les importa que alumnos inocentes sean expulsados? Además, ¿cómo pueden estar seguros de que Mastermind participaría en primer lugar?

—No lo sé, y no creo que pueda descubrirlo hoy. Por un lado, esta investigación es emocionante, pero por otro, es preocupante. No solo debemos cuidarnos de Mastermind, sino también de la propia escuela.

—Está bien, discutiremos todo esto una vez que termine el evento. Tengo que irme ahora.

—¡Buena suerte!~

Sin duda, me hubiera gustado saber todo esto después de que termine el evento. No puedo permitir que los comentarios de Lily me distraigan. Nerlin, concéntrate. No solo mi permanencia en la escuela está en juego, sino también la de Nila. El evento está a punto de comenzar, así que dejaré de lado los pensamientos sobre lo que escuché por ahora.

Cuando llegué al lugar del evento, me di cuenta de que Nila estaba allí para apoyarme. Me saludó con una mano y una sonrisa. Sabiendo que ella confía en mí, no pienso dejar que esta oportunidad se escape.

Una vez que me aseguré el arnés de seguridad, esperé pacientemente la señal de inicio. Observé a los otros participantes y me di cuenta de que ninguno tenía experiencia en escalada. Sin embargo, no puedo permitirme confiarme. Hacerlo solo me pondría en una desventaja mental. Todos aquí quieren ganar, se han esforzado para llegar hasta este día, tal vez entrenaron días enteros. Así que planeo corresponder a su esfuerzo con el mío.

Cuando sonó la señal de inicio, todos comenzamos a escalar. La tarea no es complicada: buscar puntos de apoyo y, una vez encontrados, ascender al siguiente. Tengo experiencia en esto, por lo que no me resulta difícil. Antes de comenzar, es una buena idea observar la ruta para identificar posibles puntos de apoyo. Con eso en mente, pude obtener el primer lugar sin problemas.

Las reglas eran simples: el primero en escalar y tomar la bandera colocada en la cima sería el ganador. Aunque logré asegurar el primer lugar con una gran diferencia de tiempo, el porcentaje obtenido no fue demasiado alto, solo un 15%. Pero miro el lado positivo, al menos es un avance. Solo nos falta un 13% para eliminar la deuda y otro 50% adicional para recuperar nuestros créditos.

Una vez terminé con la competencia me reuní rápidamente con Nila para elegir la siguiente competencia.

—Necesito confirmar algo contigo —dijo Nila con tono serio.

—¿Eh? ¿De qué se trata? —pregunté intrigado.

—Dijiste que si caemos en una deuda, me darías todos tus créditos, pero una vez que comenzó el evento, nuestros créditos se fusionaron y luego los perdimos todos. ¿Qué créditos me vas a dar si no tienes ninguno?

—Ah, así que de eso se trataba. No te preocupes, los créditos que perdimos eran tuyos, la deuda es tuya, ya que yo no tenía ningún crédito desde el principio.

—¡¿Qué?! —exclamó sorprendida.

—Antes del evento, le transferí parte de mis créditos a Lily. Una vez que esto termine, ella me los devolverá. Si tenemos una deuda, te los daré.

—Uhm, entiendo. Está bien entonces...

—¿Podemos elegir la siguiente competencia?

—¡O-Oh, sí! Claro, podemos hacerlo.

Ambos estábamos listos para competir al mismo tiempo esta vez. Nila participaría en salto de altura, mientras que yo me enfrentaría a la carrera de obstáculos. No puedo negar que sentía cierto nerviosismo. La razón era clara: Sonic también estaría compitiendo en la misma carrera. Aunque desconocía su nombre real, su apodo lo decía todo. Como miembro destacado del club de atletismo, había ganado numerosas maratones y su increíble condición física era evidente. Las carreras tampoco suponían un desafío para él, ya que siempre demostraba una velocidad sorprendente, superando a cualquier estudiante de UME. Tenía una oportunidad, cierto, pero los obstáculos de la carrera eran variados: trepar cuerdas, saltar largas distancias, arrastrarse por el suelo y otros desafíos que podrían causarle problemas. Aun así, no podía evitar sentir cierto nerviosismo.

Una vez llegamos al lugar y nos colocamos en nuestras posiciones, la señal de inicio resonó. Por primera vez, pude comprender el motivo de su apodo. Sonic superó a todos los competidores con una facilidad abrumadora, dejando una gran distancia entre él y el resto. Afortunadamente para mí, tuvo problemas en cada uno de los obstáculos, lo que me permitió alcanzarlo e incluso tomar la delantera en algunos momentos. Sin embargo, se recuperaba rápidamente. Después de una larga carrera, logré obtener el tercer lugar. Un porcentaje de los perdedores se repartió equitativamente entre los tres primeros lugares. A pesar de mi esfuerzo, el porcentaje obtenido fue solo del 5%. Con esta competencia y la que Nila está por enfrentar, ya hemos cumplido con la mitad del mínimo requerido. Por supuesto, si nos falta porcentaje, podemos participar en más competencias, aunque esto implicaría asumir mayores riesgos.

—¿Cómo te fue? —preguntó Nila ansiosa por escuchar los resultados.

—Solo gané un 5% a pesar de quedar en tercer lugar. ¿Y tú?

—¡Gané un 15%! ¡Ya no tenemos deudas! —exclamó aliviada.

—Es un alivio, pero aún no tenemos créditos y si no ganamos más, corremos el riesgo de caer en deuda nuevamente.

—Vamos, Nerlin. Tú no sueles ser pesimista. Esta vez me toca a mí animarte —dijo Nila con determinación.

—Tienes razón. Estoy sobrepensando las cosas. De todos modos, hemos llegado a la mitad del evento, así que merecemos un descanso.

Creí que sus palabras de ánimo eran solo eso, palabras. Sin embargo, en cuanto nos sentamos en el césped, en un rincón apartado del bullicio, Nila me tomó del brazo y me hizo caer sobre su regazo. Empezó a acariciarme la cabeza suavemente.

—Puedes descansar un momento si quieres —sugirió con ternura.

—No sueles ser así. ¿Te sientes mal? ¿Acaso estás ovulando? —pregunté, tratando de entender su cambio repentino de actitud.

—¡¡S-SOLO TRATO DE SER AMABLE, IDIOTA!! —exclamó Nila, empujándome y haciendo que mi cabeza golpeara el suelo. Luego, su mano se dirigió rápidamente hacia mí.

—¡Era una broma, no me golpees! —protesté.

—¡Demasiado tarde! —respondió, antes de golpearme.

3

Estoy agotada. Siento como si lleváramos compitiendo durante siglos. La última competencia en la que participamos, llamada "Gato y Ratón", fue un desafío lleno de emociones. Consistía en un espacio con múltiples obstáculos, donde dos equipos se enfrentaban. Uno de los equipos actuaba como cazador y el otro como presa.

Nuestro equipo tuvo el papel de cazador en esta ocasión. El objetivo era perseguir al equipo contrario y tocar a uno de sus miembros. Si lográbamos hacerlo, seríamos los ganadores. Por otro lado, el equipo que actuaba como presa debía huir y evitar ser capturado durante un tiempo determinado. Si lograban mantenerse a salvo hasta el final, serían ellos quienes se llevarían la victoria.

Debo admitir que no tuve un papel destacado en esta competencia. La victoria fue principalmente gracias a Nerlin, quien demostró una increíble habilidad en la persecución y logró capturar a uno de los miembros del equipo contrario. Fue un momento emocionante y estábamos eufóricos por conseguir la victoria.

Con esta competencia, hemos participado en un total de 12 desafíos. El sueño de participar en el mínimo necesario se volvió imposible de alcanzar. La próxima competencia será la número 13 y también la última. Sabemos que debemos multiplicar aún más nuestros esfuerzos si queremos tener alguna posibilidad de cumplir nuestro objetivo.

—¡Muy bien! Solo nos queda una competencia más.

—Lo sé, Nerlin. Por cierto, ¿podrías hacerme un favor?

—¡Claro! ¿De qué se trata?

—Me encantaría que tú eligieras la última competencia en la que participaremos.

—¿Eh? ¿Por qué quieres que sea yo quien decida?

—No hay una razón estratégica específica. Simplemente quiero que esta última prueba sea especial, y creo que tu elección hará que sea aún más significativa.

—Hmm, entiendo. Déjame pensar en ello.

Nerlin se tomó un momento para reflexionar sobre mi solicitud. Quería encontrar una competencia que nos desafiara y nos permitiera demostrar nuestras habilidades de manera única. Después de un breve silencio, Nerlin finalmente respondió.

No puedo evitar que mi mente se llene de pensamientos. El no tenía ninguna razón para participar en el evento deportivo, pero cuando mencionó que yo era su motivación, mi corazón se llenó de alegría. Es una persona buena y me encanta la forma en que nuestra amistad se desarrolla. Es diferente a cualquier relación de amistad que tiene con otras chicas, incluso con Lily. A veces me sorprendo pensando que incluso si fuera una persona mala, todavía lo querría, siempre y cuando me trate bien. Sí, sé que suena egoísta, pero no puedo evitarlo. Quiero que él sea una mala persona con todos, excepto conmigo.

Me molesta verlo interactuar con otras chicas y sentir celos cuando ellas se le acercan. Por eso me opuse a que participara en la natación. No es que esté enamorada de él, es algo difícil de explicar. Él es mi primer amigo en mucho tiempo y valoro enormemente nuestra amistad. No quiero compartirlo con nadie más.

—¿Nila?

—L-Lo siento, estaba pensando en algo...

—¿Puedo saber en qué?

—E-En t-ti... ¡N-No me refiero a eso, m-me refería a que estaba pensando que competencia decidirás!

—Oh, ya veo. Ciertamente ya me he decidido.

—¿Si? ¿Cuál es?

—¡Quemados!

"Quemados" es considerada la competencia más desafiante del evento. A diferencia de otras competencias en las que participamos individualmente o en equipo, como carreras, escalada, remo o natación, donde los tres primeros lugares se determinaban por la posición de llegada, "Quemados" es un enfrentamiento estilo "battle royale" en el que solo habrá un equipo ganador.

En esta competencia, el objetivo es eliminar a los oponentes lanzándoles pelotas que caben en las palmas de las manos. Estas pelotas están diseñadas de tal manera que facilitan el agarre y el lanzamiento preciso. Cada participante llevará un chaleco especial que actúa como un sensor. Si una pelota impacta en el chaleco de un jugador, se considerará eliminado.

El equipo que logre ser el último en pie será el ganador y obtendrá un porcentaje de los créditos de los equipos perdedores. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta competencia conlleva un alto riesgo. Si no logramos ganar, es posible que caigamos nuevamente en una deuda. Por otro lado, si tenemos éxito, nos iremos del evento con una gran cantidad de créditos.

—¡Esta bien, confío en tu decisión!

Ambos completamos el registro, y el ambiente en la sala era tenso. Con alrededor de 20 equipos y 40 participantes, la competencia se prometía feroz. La mayoría de ellos cargaba con deudas, lo que significaba que iban a jugar con una intensidad desbordante, dispuestos a darlo todo en un último esfuerzo por evitar ser expulsados.

Una vez en nuestras posiciones designadas, nos entregaron tres pelotas a cada uno. El corazón latía con fuerza en mi pecho mientras me preparaba para el desafío inminente. El referí dio la señal de inicio y, en un instante, nos lanzamos al terreno de juego como si nos soltaran en una jaula con lobos hambrientos. Al instante, varios equipos se abalanzaron sobre nosotros, sabiendo que no teníamos deudas y ocupábamos una buena posición en el evento. Esquivar las pelotas y correr al mismo tiempo era una tarea desafiante, pero extrañamente, en medio de la adrenalina, sentía una extraña emoción. Tal vez era el hecho de que esta era la última competencia, o simplemente la sensación de estar disfrutando por primera vez en este evento. Una pequeña sonrisa se dibujó en mi rostro.

Pronto nos vimos separados y me encontré sola frente a cuatro equipos. Logré eliminar a cinco personas en total, pero en este juego solo importaba sobrevivir. Miré a mi alrededor y me di cuenta de que la situación era desalentadora. La posición de los equipos que me rodeaban, su precisión en los lanzamientos y la trayectoria de las pelotas me hacían sentir impotente. Parecía imposible esquivarlas todas. Necesitaba crear una apertura o esperar un milagro, aunque sabía que esos solo sucedían en las películas. Finalmente, fui eliminada y me dirigí hacia los asientos de los espectadores.

En ese momento, me di cuenta de la increíble habilidad de Nerlin. Cada movimiento suyo era asombroso. Esquivaba las pelotas con saltos ágiles y, en un giro sorprendente, lanzaba sus propias pelotas, eliminando a sus oponentes antes de que tuvieran la oportunidad de lanzar más. La atención de todos se centraba en él, pero parecía estar relajado, como si hubiera encontrado su estado de flujo perfecto. La competencia había durado alrededor de 45 minutos, y Nerlin emergió como el vencedor indiscutible.

Terminamos el evento con el doble de créditos de los que teníamos al principio. Aunque no nos llevamos el primer lugar, obtuvimos el quinto puesto en la clasificación general, lo cual era un logro en sí mismo. Personalmente, me sentía satisfecha. No buscaba ganar, solo quería evitar ser expulsada. Y lo habíamos logrado.

4

Una vez que me reuní con Nerlin en la entrega de premios, un organizador del evento se acercó a nosotros para realizar algunas entrevistas y conocer nuestros pensamientos sobre el evento deportivo.

—Tal parece que Nila, fuiste elegida por tu clase para participar en este evento. ¿Cómo te sentiste al respecto? —preguntó el entrevistador.

—En ese momento, sentí una mezcla de enojo, frustración y otras emociones negativas. Pero ahora, me siento feliz y más segura de mí misma. Me di cuenta del tipo de compañeras que tengo y puedo decir que las odio —respondí con una sonrisa desafiante.

El entrevistador se sorprendió por mi respuesta, pero continuó con la siguiente pregunta.

—E-Eh, está bien ¿Y tú, Nerlin? Participaste voluntariamente en el evento. ¿Fue porque confiabas en que tus habilidades te harían ganar créditos?

Nerlin se tomó un momento para responder y luego dijo:

—No, participé para no dejar sola a Nila. Los créditos no me importan en lo absoluto. De hecho, me gustaría darle todos los créditos que gané a ella.

La multitud reaccionó con asombro ante su respuesta y algunos incluso emitieron exclamaciones de sorpresa.

Estupido, realmente sabe exactamente donde atacarme. Durante la entrevista, noté que las chicas de mi clase me miraban con enojo. Probablemente nunca imaginaron que Nerlin participaría en el evento por mi bienestar. Quería provocar aún más celos en ellas, así que cuando el entrevistador nos pidió que posáramos para una foto abracé a Nerlin con fuerza, él rodeó mi cadera con su brazo. En lugar de mirar a la cámara, primero dirigí mi mirada hacia las chicas de mi clase. Con una sonrisa traviesa en mi rostro, le di un beso en la mejilla a Nerlin. Fue un momento de pura provocación, y la expresión en los rostros de las chicas fue realmente divertida de ver.

Una vez terminado todo esto, Lily y sus amigos nos rodearon mientras felicitaban a Nerlin.

—¡Lo hicieron!

—¡Estuviste genial!

—Gracias, chicos. Aunque todo fue gracias a ella, como les había dicho.

En cuanto mencionó mi nombre, Lily se acercó hacia mí, tomó mis manos y me pidió disculpas.

—¡PERDÓNAME! Nerlin confía mucho en ti, debí haberlo hecho yo también.

—E-Es comprensible que no confíes en alguien que no conoces. No te preocupes.

—¡Aun así, lo siento!

—E-Está bien, lo entiendo, de verdad.

—Por cierto, Nerlin, toma tus créditos.

Lily abrió la aplicación UME y transfirió los créditos a Nerlin.

—Oye, Nila, ¿podrías abrir la app UME?

—Claro, pero ¿para qué?

Abrí la aplicación de UME. Nerlin acercó su teléfono celular al mío y transfirió todos los créditos que había ganado ese día.

—¡N-No es necesario que hagas eso, de verdad!

—No hay problema, considera esto como una muestra de mi gratitud.

—¡L-La que debería estar agradecida soy yo! ¿Por qué me das tus creditos?

—Por ser mi amiga, claro.

—¡Ah!

No pude evitar abrazarlo con fuerza. Realmente lo quiero.

—Bueno, los dejamos solos. Deben tener cosas de las que hablar. Nerlin, otro día te informamos sobre lo que descubrimos.

—Gracias, chicos.

Mientras caminábamos juntos hacia casa, sugerí hacer una parada en un café cercano. Quería invitarlo como muestra de agradecimiento por todo lo que ha hecho por mí. Después de todo, sigo en UME gracias a él. Charlamos durante mucho tiempo y, esta vez, decidí ser sincera. Normalmente, cuando hablamos, suelo mentirle y negar las razones detrás de mis acciones y sentimientos. Pero esta vez, me abrí completamente y expresé toda mi gratitud. Le dije que lo valoraba muchísimo y que lo quería demasiado. Aunque me daba vergüenza, sentía que era lo mínimo que podía hacer, ya que al final no pude protegerlo como yo quería.

—Con esto, prácticamente ya estamos en vacaciones.

—Hablando de eso, ¿qué harás en vacaciones, Nerlin?

—Me gustaría conseguir un trabajo. ¿Y tú?

—Ayudaré en el restaurante familiar. Oye, ¿qué te parece si trabajas conmigo?~

—¿En serio? ¡Genial, claro!

—Perfecto. Le comentaré a mi padre sobre ti y te enviaré un mensaje para confirmar tu primer día. ¡Estoy emocionada de trabajar contigo!

—A mí también me emociona pasar mis vacaciones contigo.

Una sonrisa se formó en mi rostro al imaginar esa idea. Últimamente, Nerlin pasa más tiempo conmigo que con su grupo de amigos. Realmente me siento especial.

Nuestra amistad ha dado un gran paso hacia adelante. Nerlin ha luchado por mí, así que prometo dar lo mejor de mí para que nuestra amistad dure para siempre.

Quiero estar el en cada aventura, compartir risas, lágrimas, y ser su apoyo incondicional disfruto de nuestra complicidad y de cada momento que compartimos, pero no puedo evitar preguntarme qué nos depara el futuro.

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