Capitulo 9: Presente

Años pasaron desde esos sucesos, "No puedo creer que los recordará tan bien". Ya por fin iba a convertirse en una señorita, pero lo más importante en adulta, en estos últimos cuatro años estudió como un aprendiz de médico, para convertirse en una oficial de médico. Es decir se había convertido en una curandera donde ofrecía sus servicios al pueblo, con la ayuda de Arisu, únicamente pedía dinero por los medicamentos exclusivos o difíciles de crear. El pueblo la amaba y tenía un respeto por todo lo que hacia, pero a diferencia de los nobles, la repudiaban y como no faltar los benditos rumores, le afectaron al principio pero luego fue acostumbrándose y pensar "(mientras mis seres queridos no se lo crean, a mí no me debe afectar)".

Bueno aquí empieza mi gran aventura llena de misterios, verdades y no de faltar un toque de romance, no me puedo creer que recordará todos eso sucesos pasados de como llegue a este castillo, como baile con el Rey Supremo, la boda junto a la planificación de un ejercito. Mi relación con Aristotte fue mejorando los últimos a los últimos años, era su gran amigo como su asesor, le contaba sus sueños o cosas que pensaba, a lo que él respondía sabiamente y a veces cruelmente. Roxana sabia perfectamente que su amigo le escondía varios secretos, ya que a veces actuaba como un completo psicópata sin motivos alguno o actuaba completamente como un maníaco sobre algo y empeoro cuando estalló.

Cuando digo que estalló, me quiero referir cuando empezó la guerra, así es como va ahora mismo el mundo donde estoy viviendo, y como era de esperar nuestro pequeño país no se salvaría del charco de sangre. Todo empezó con la muerte del emperador de los Inmortales y su heredero iniciando una guerra contra los demonios sin apoyo de los humanos con la tipica excusa "que estaban sin recursos para una guerra". No tardó ambos bandos en presionar a nuestro país gritaban urgentemente ayuda.

  -Aristotte, ¿ estás bien desde que inició la guerra estás como ansioso?.- Pregunto Roxona preocupada por su amigo.

Desde antes de que se formara dicha guerra, Aristotte ya lo sabía, siempre escuchaba a escondida a decir "Se volverá a repetir", "Si vuelve a ocurrir despertará", nunca entendía lo que quería decir, pronunciar alguna pregunta al respecto me delataria que estaba espiando y lo que había logrado no habría servido nada.

  -No te preocupes Roxana, no es nada importante.- Respondió seco para luego irse volando.

Suspiro nuestra protagonista, era una accion de cobardía pero lo mejor, él hablando era un sin filtro no sabia guardar un secreto. No tardó en volver a su hogar después de un arduo trabajo, su hermano mayor se había quedado un poco más, al mismo entrar se escuchaba una discusión de diferentes hombres sobre el tema principal La Guerra.

  -No podemos prosponer la decisión, podemos perder lo que hemos conseguido Allendis.- Aconsejaba Taisho, saliendo de la junta a su fiel amigo, apoyando su mano en el hombro de él.

No pudo responder la sugerencia de su amigo ya que había una protagonista escuchando todo con bastante entusiasmo, aunque no lo había hecho a posta, el silencio inundó completamente y los presentes se quedaron mirando al contrario de cada uno.

  -No quise escuchar eso ni nada, yo solo venía de afuera del castillo.- Decía con cierta incomodidad para luego salir del lugar.

Roxana corrió hacia su cuarto, pasando en medio de ambos, no quería que pensaran que era una cotilla o algo peor. Cuando abrió la puerta de su habitación, vio a un hombre desnudo, cuando iba a gritar se dio cuenta de sus ojos bien parecidos a lo de su amigo Aristotte, junto la falta de un miembro de su cuerpo un brazo entero.

   -¿Aristotte?.- Preguntaba extrañada y llena de curiosidad, mientras cerraba la puerta detrás de ella.

  -Antes de que me preguntes algo más, ¿Puedes darte la vuelta? Es algo incómodo y vergonzoso.- Dijo el hombre tímido y tapándose con una sábana.

  -¿Que?.- No terminó la frase para bajar la mirada para luego subirla y darse cuenta lo que estaba pasando.

Se giró bruscamente, mientras le decía que en el armario principal había ropa de su hermano Arisu y que la podía usar, pensaba que su amigo estaba demasiado bueno, no se le marcaban mucho los músculos pero le quedaba perfecto, su melena larga, suelta y negra junto a sus ojos rojos. Después de unos minutos terminó de colocarse la ropa y permitió que la protagonista, se diera la vuelta a lo que ella respondió con una risa, que todas la conocían como el "pato ahogándose".

  -Ya entiendo, muchas cosas sobre el apodo asociado a tu risa, por el oráculo.- Expreso espantado el pájaro, ahora demonio, mientras se tapaba sus oídos.

  -¿Como hiciste, para convertirte en un hombre mas bueno que los dulces?.- Sorto de una nuestra protagonista, para mirarlo a los ojos fijamente.

  -Eso debes decírselo a mis padres, esta es mi verdadera forma y como sé que querrás una explicación sobre esto, te la daré.- Vio como la contraria se preparaba para la historia que iba a contar.

"Habrás escuchado la historia de la creación de los diversos imperios que existen y el motivo de ello. En vez que nacieron fueron creadas por mí, las dos almas gemelas, volviendo a despertar a los pájaros dioses, algo totalmente prohibido incluso olvidado. El precio de ello me conllevó, a convertirme en el pájaro de una sola ala, el cual conociste, destinado a la destrucción, desconozco quién era la otra persona del relato. Lo demás de mi vida no lo recuerdo, por ello pedí tu ayuda el día que nos conocíamos."

Tras escuchar la historia incompleta le pareció algo rara, sin lógica incluso poco creíble, si no fuera por la honestidad de su amigo al contarla, por ello le dijo que le ayudaría a conseguir sus recuerdos a toda costa. El le dijo que a través de los diferentes Imperios hay restos de la antigua civilizacion y asi el podia revivir sus recuerdos, pero como iba a viajar fuera de su país y menos ahora con una guerra.

Fue hacia su amigo Tai el cual confiaba a muerte, extrañadamente estaba en el Salón del Consejo, ahí se reunía únicamente los siete generales para planificación del país, impuestos, leyes, sobre otras cosas políticas. Llegó a la entrada de aquel consejo, lo único que la separaba era una puerta de madera. Pudo escuchar gracias a la ayuda de un general que tenía una voz bastante fuerte,  podía entender un poco de lo que hablaban. Trataban de llevar a Tai como "embajador" al imperio humano, ya que sangre de esa raza corría a través de sus venas, ahí fue cuando se le iluminaron los ojos a la protagonista por la gran idea que había obtenido. Llamó a la puerta para luego identificarse luego después de unos instantes le permitieron la entrada, cosa que abrió la puerta para acceder adentro dejándola abierta.

  -Deberían enviarnos a Tai y a mi, Roxana última hija de Allendis ya que ambos somos mitades de esa raza. Tai es importante aquí, ¿Pero en ese imperio? Solo es hijo de una sirvienta, en cambio mi madre fue una oráculo y una dama de alta cuna de Dailay. Debe ir alguien con influencia en ambos razas, por ello debo acompañar a Tai.- Explicaba con determinación, mientras veía la aprobación de todos en sus rostros excepto de su padre.

Todos aprobaron su petición, ambos se iban mañana a la noche, el trayecto era largo, se encontraba al norte era el más  lejano de todos los imperios y estaba rodeado de montañas. Rato después en el cuarto de Roxana, le comentó que irian al imperio de los humanos a su amigo pájaro, no estaba muy feliz había algo dentro de ella que le decía ¿Porque?, Todo debido a las miradas de su padre, así sin más decidió a ir a donde estaba su padre y lo encontró admirando un cuadro de él con su segunda mujer, sabía que no había marcha atrás, él sabía que ella estaba ahí.

  -Padre, tiempo atrás me diste una lección entre ser el jefe de los demonios zorro y ser mi padre, sobre mi conducta con el tema de Dailay. Por ello te explicaré mis motivos de hacer esto, mi deber como princesa del País de las Sombras e hija de una alta cuna aristocrática en Dailay mi bebé es proteger aquellos que amo y proteger mi tierra sin importar nada, como usted me enseño, como Roxana quiero ver lo que hay fuera de estos muros y darte a entender que ya no soy niña indefensa.- Expresaba orgullosa, mientras miraba fijamente a su padre.

Fue la primera vez en decirle algo tan confiada de mí misma, a mi padre no le gustaba para nada que rompieramos las normas establecidas y esta no era la primera vez que las rompía, sabía dentro de mí, que si él gritaba o decía algo que no me gustaba escuchar, la confianzas que había logrado conseguir se iban a ir en un segundo. Pero su voz nunca se pronunció, en vez se vio como se desvanecía en un paso lento y firme hacia el oscuro pasillo perdiéndose lentamente su silueta.

No obtuvo su respuesta, pero una paz inundó todo su cuerpo, todo lo que tuvo que decir fue dicho y ya podría marcha sin nada que dejar atrás. Empezó su marcha hacia su recámara, para cuando entró vio como su gran amigo había vuelto a su forma de pájaro, era un ave fénix azul turquesa que acababa en un azu oscuro, sus plumas largas como una pavo real, una sola ala y sus ojos rojos como la sangre.

  -¡No es justo!, Yo quería dormir con el hombre guapo, bueno sí no es con el hombre guapo será con su versión ave.- Dijo extrovertida, mientras abrazaba Aristótte a la fuerza y se iba a la cama.

                                                     

Si hay una errata decírmelo en comentarios

Más para saber de la historia en ig: @ kokkiro_21   

Más populares

Comments

Antonio Salmeron Fernandez

Antonio Salmeron Fernandez

cada me gusta mas la novela

2024-09-13

1

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play