Siento la mano de Aisha enroscarse con la mía. Tal parece que a Guillermo no se le pasa desapercibido esa acción. Su mirada baja a nuestra unión, y luego sube a mi rostro y me ve con una ceja alzada.
—¿Ustedes son pareja?—habla Tina, su tono de voz reprochador no se me pasa por alto.
Estoy por hablar, pero Aisha me interrumpe.
—No, pero estamos por intentarlo—dice, mientras me brinda un ligero apretón de manos, eso hace que la vea sorprendido. ¿Por qué decía eso? Yo no le he dado señales de que quiero salir con ella o algo por el estilo.
—Que malos gustos tienes—habla mi hermana entre dientes.
—¡Claro, que no! No lo entenderías Cristina. Recuerda que tú lo ves con otros ojos, porque es tu hermano, pero a mí se me hace atractivo.
—Claro que lo entiendo, mi hermano es un odioso. Además, no quedan bien como pareja, ¡Búscate otro!
—Ya fue Tina—Guillermo pasa su brazo diestro por los hombros de mi hermana—. No tienes por qué decir esas cosas de tu hermano, si ellos quieren llevar una relación, tienes que respetarlo. Quedamos en ir a una pizzería, ¿Nos vamos?
—¡Pero, a ti...!—Guillermo se acerca al oído de mi hermana y le susurra algo. Ella solo pone los ojos en blanco.
Todo se siente tan incómodo. Que no puedo ni siquiera hablar.
Guillermo sonríe en nuestra dirección.
—¿No les gustaría ir con nosotros?
Estoy por hablar, pero Aisha se me adelanta, nuevamente.
—No. Estoy a dieta, pero gracias por tomarnos en cuenta.
¿Acaso dijo: «tomarnos»?
—Yo si voy—digo, soltándome de su agarre.
—Bien—sonríe—. Nos vamos en mi auto.
Guille y Tina, empiezan a avanzar hacia la salida, mientras que yo me quedo al lado de Aisha, quien sostiene mi camisa.
—Quiero decirte algo Félix—su tono de voz es serio.
—¿Qué sucede?
—¿Eres gay?
Me tenso ante tal pregunta.
—¿Q-qué? ¿Por qué me preguntas eso?—no puedo evitar que las palabras me salgan atropelladas.
Una sonrisa se surca en su rostro.
—¿Por qué te pones tan nervioso?—se acerca a mí de forma tentativa—. Eres demasiado obvio, ¿te gusta Guillermo?
Abro mi boca sorprendido.
—¿Qué cosas dices? ¡Por supuesto que no!
—Entonces, bésame y acepta ser mi novio.
¿Qué? ¿Acaso ella está jugando conmigo? Me burlo irónico.
»—No te rías. No estoy bromeando Félix. Si no aceptas crearé rumores falsos, sobre ti.
—¿Aisha, me estás amenazando?—me acerco a ella, hasta que nuestras narices se están rozando.
Se encoge de hombros, restándole importancia.
—¿Aceptas o no?
Niego.
—Necesito saber ¿por qué llegaste a esa conclusión de que me gusta Guillermo?
Pone los ojos en blanco.
—Te pusiste nervioso cuando lo viste, y la mirada que le das no es de esas típicas...
—¿Solo por una mirada puedes deducir eso? No seas ridícula.
—Entonces, ¿por qué tu voz titubea?—resopla.
—¡Porque eso que dices me parece ridículo! ¿¡Cómo me vas a preguntar de qué si soy gay, cuando me he enrollado contigo!?
—¡Ni siquiera hemos pasado de unos besos Félix!—grita—¿Eres gay o no?
—¡No lo soy! Maldita sea—rompo distancia con ella, para unirnos en un beso feroz, pero así como lo empiezo lo termino—. Acepto ser tu novio, pero nunca más vuelvas a preguntarme tal cosa.
La suelto y empiezo a avanzar hacia la salida. Mis manos tiemblan. Me sentía demasiado ansioso. ¡Yo no soy gay, y mucho menos me pongo nervioso cuando veo a Guillermo!
Cuando salgo de la cancha con lo primero que me encuentro es con él. Aprieto mis labios en una línea fina.
Él solo me ve, y puedo captar un poco de decepción, en esos ojos verdes. ¿Será que vio todo? ¡Pues mejor que sea así! Quizás sus sentimientos por mí se esfuman pronto.
Empezamos a avanzar en silencio por el parking, hasta que damos con su coche.
—¿Cristina no viene?
—¡Espérenme!—grita a los lejos mi hermana—. Se olvidaba mi libro de español, disculpen la tardanza.
Entramos al auto, pero me sorprende el hecho de que mi hermana va conmigo en la parte de atrás...
No debí haber aceptado, ya que la presencia de Buqué—, me cae como un balde agua fría.
—¡Hola!—saluda tomando asiento. Se acerca y besa la mejilla de Guille. ¿Tanta confianza se tiene para hacer eso?
—¡Respeten a los solteros!—refunfuña mi hermana.
—Yo no estoy soltero—me veo diciendo. ¡Eso me ha salido por mero impulso!
—Hace unos minutos, estabas soltero ¿Tan rápido aceptaste a la urgida de AishNa?—regaña Tina.
—No es de tu incumbencia—hablo entre dientes.
—Que bien, por ti Félix—habla Guillermo, con su mirada puesta en la carretera—. Espero y duren mucho tiempo. Ella es una chica muy hermosa.
Una risa irónica proviene de Luke, pero se ve siendo callado por el puñetazo que Guille le brinda. El camino hasta pizzería es un poco incómodo para mí, a pesar de que Guille siempre quiere incluirme, siempre me veo arruinándolo, incluso parece que ni siquiera me esfuerzo, pero simplemente no puedo.
Además, me siento insignificante al lado de Luke y mi hermana, ya que ellos siempre le hacen reír. Y ni hablar de primer mencionado, que siempre trata de tocarlo sin timidez alguna. Ellos parecen llevarse muy bien.
Una vez que llegamos a la pizzería nos bajamos del auto, y seguido de eso entramos. Dejo que ellos escojan, no pienso opinar mucho hasta que Luke dice:
—Una pizza hawaiana.
Arrugo mis rostro ante la mención.
—A Félix no le gusta—dice divertido Guille. Tal parece que se fijó en la mueca que hice o él de verdad lo recordaba...
Miro la pizza que Guillermo me ofrece. El olor me llega a la nariz, y no se me hace para nada agradable. Reprimo la mueca que se quiere formar en mi rostro. No puedo ser un desagradecido y no aceptar lo que mi mejor amigo me ofrece, así que la tomo.
Sus ojos verdes me ven expectantes. Sé que le emociona verme probar algo que a él tanto le gusta, porque yo también siento lo mismo cuando él lo hace.
Me llevo la pizza a la boca, y le doy el primer mordisco, mastico. Estoy por tragar, pero una arcada hace presencia y vómito.
—¿Qué pasa?—pregunta asustado Guille, pero trato de apartarlo, pero él insiste en seguir a mi lado. ¡Qué vergüenza!—. ¿No te gusta?
Niego, pero vuelvo a vomitar. Puedo sentir ese maldito sabor en paladar.
—Me encanto—digo, reponiendome. Y agarro el bote con agua que él me ofrece.
Escucho una carcajada brotar de él, y lo observo extrañado. Sus brazos me envuelven en una abrazo.
—¡Mentiroso!
—¿¡Qué!? Yo no he mentido...—digo esquivando su mirada.
— Está bien si no te gusta, Félix—dice posando su barbilla en mi hombro. Eso me pone nervioso, tenerlo así de cerca, y seguramente yo olía a vómito.
Me separo de él; puedo escuchar mi corazón latir con fuerzas.
—¿No te molesta, que no tengamos los mismos gustos?—murmuro por lo bajo.
Él niega.
—Está bien que tengamos gustos diferentes. Muchas veces coincidiremos y otras no, y eso está más que bien. Yo siempre te consideraré mi amigo pase lo que pase.
Entrecierro mis ojos en su dirección. No sé si creerle, sin embargo esa sonrisa amable que me brinda me hace disipar cualquier duda. Repito las palabras que me dijo: “Siempre te consideraré mi amigo pase lo que pase”
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 33 Episodes
Comments
cheesecake
AAAAAHHH Q LE IBA A DECIR
2023-08-25
0
cheesecake
Celosito
2023-08-25
0