Aish extiende su mano y me entrega una botella con agua, se lo agradezco.
Mi entrenamiento de básquet fue intenso. Q pesar de que llevo una materia reprobada, el entrenador me dejo entrenar, aunque al principio se mostro reacio tuve que suplicarle, así que supongo que ese fue un plus; eso sí, nunca dejo de decirme que tengo que esforzarme más o si no me mandará a la banca o simplemente me sacara del equipo. Y yo no puedo permitir eso, el básquet es una de la razones por la que trato de esforzarme, aunque no lo parezca.
Tomo asiento en una de las bancas, y me seco el sudor. Volteo a mi izquierda, y veo que Luke tiene su mirada. ¿Acaso sabia qué Guillermo está enamorado de mí?
Y si eso es así, me hace sentir feliz. Así que le observo altivo.
Anhelaba con todo mi ser de que lo supiera, no me importaba nada. Siento demasiado orgullo de saber de qué yo ocupo un lugar en el corazón de Guille. Y sé que ese mequetrefe nunca va a poder adueñarse de él.
—¿Te cae mal Luke?—pergunta Aisha a mi lado.
—No. ¿Por qué?
—Por como se miran, aunque pueda ser que nos odie a ambos, por arruinar su noche.
Carcajeo, captando la atención de varios, por risa estridente.
Me siento tan feliz por eso también.
—¿Qué te causa gracia?—la observo, y le pellizco un cachete.
—Me doy cuenta de que realmente fuimos inoportunos.
Ella sonríe, y toma mi mano entre las suyas.
—Creo, que tambien nos arruinaron nuestra noche—dice acortando un poco la distancia.
—Equipo de básquet, pueden dejar la cancha. Los chicos de voleibol, están por ocuparla—avisan.
Trago saliva, cuando veo su flamante cabellera pelirroja entrar a la cancha. Se ve muy energético. No entiendo, cómo hace para siempre traer una brillante sonrisa en su rostro.
Nuestras miradas chocan, pero se ve obligado a romper nuestro contacto visual, cuando Luke se atraviesa.
Suspiro, hastiado.
«¡Qué sujeto tan desagradable!»
—¿Quieres ir por algo de fruta a la cafetería?—Aisha me toma de la mandíbula, obligándome a verla.
—No, gracias. Quiero quedarme a ver el entrenamiento de voleibol.
—¡Hey, amigo!—saludo de puño a Héctor—.Cuñada.
—¿Por qué le dices cuñada a Aisha?—cuestiono arrugando mi entrecejo.
La pelinegra pasa sus brazos por mi cintura abrazándome. Me tenso, dándome cuenta de que Guillermo está viendo todo esto, con sus brazos cruzados sobre su pecho.
Quiero soltar el agarre de Aisha, no obstante no quiero hacerla sentir mal, y aparte es una chica atractiva. ¿Quién no querría que la pelinegra le abracé como lo hace conmigo?
«Mentiroso, solo quieres darle celos» ¿Celos? Pff, ¿por qué querría darle celos? Ni siquiera me interesaba darle celos. Él solamente es... ¿Mi amigo? ¿Guillermo seguía siendo mi amigo? ¿Qué somos el pelirrojo y yo realmente?
Me vi volviendo a la realidad cuando sentí un mordisco en mi hombro.
—¡Por Dios, Aisha! ¿No has comido?—la pelinegra me observa con un mohín en sus labios.
—Héctor, dice que hacemos linda pareja.
Hago una mueca.
—Aisha y yo, no somos pareja—observo a mi amigo con el entrecejo fruncido.
—¿Por qué no los son? Si siempre se están besando. ¡Ya sean novios!
—Felix, no quiere proponermelo...
—Aisha, pero es que tú también puedes hacerlo. ¡No le dejes todo el trabajo a mi hermano!
—¿Yo...? Nunca he hecho algo así...
—No le hagas caso. Héctor vete, ¿no que tenías tutorías a esta hora?—le doy una mirada dura.
Hace una cara de sorpresa. Seguramente lo olvido.
—¡Bien, córreme Félix, gracias! Eres un amigo estupendo, pero quiero que te des cuenta que no me voy porque me dices, si no porque quiero—dice irónicamente, y empieza caminar a la salida, no sin antes gritar:—¡Vivan los novios!
Me tapo la cara. Mi amigo es un caso.
La pelinegra ríe por lo bajo, seguido de eso deposita un beso en mi cuello.
—Si quieres te puedes ir. Me quedaré viendo todo el entrenamiento.
Sigo con mi mirada todos los movimientos que hace Guillermo. Es demasiado talentoso.
Sus golpes y saltos son muy precisos. Toda su concentración está en el juego.
—Me quedaré un rato contigo. Me agrada estar a tu lado...
Atrapo mi labio inferior entre mis dientes. Ella es muy intensa, por el simple hecho que le gusto. Desde que puse un pie en los pasillos del instituto no dejo de seguirme. Pensé que su enamoramiento por mí, se había esfumado, pero me equivoque.
Me quedo viendo el partido, junto a Aisha, hasta cuando termina. Guillermo, siempre sobresalía. Tiene esa aura de captar la atención de todos, a pesar de que es gay, tiene a chicas detrás de él, y sé que para él no todo es color de rosa, ya que he escuchado que los de su equipo se comportan de forma grosera con él, solamente por su orientación sexual, no obstante siempre se muestra firme ante sus ataques.
Me sorprendía el hecho de que su mirada siempre me buscaba.
—¿Te llevas con Guillermo?—pregunta. Dejo de ver al pelirrojo y volteo en su dirección.
Ella no tenía ni idea de que Guillermo y yo fuimos amigos.
—Mmm algo—digo dudoso—.¿Por qué?
—Tengo la sensación de que le atraes.
Abro mis ojos de par en par.
Suelto una risa nerviosa.
—Qué cosas dices—resoplo—¿Piensas qué los gays se van enamorando de todos los chicos qué ven?—me burlo.
Ella se encoge de hombros.
—Sé que no, pero creo que le gustas, estoy segura de eso...
Una risa burlona penetra en mis oídos.
—Aisha, cariño. Mi amigo Guille, jamás se fijaría en mi hermano—interrumpe Tina.
¿Y está mocosa de que nariz salio?
—¿Por qué, no? Tu hermano es atractivo.
Mi hermana vuelve a carcajearse, pero más fuerte. Captando la atención de todos.
«Quiero que la tierra me trague»
—¿Está cosa se te hace atractiva? Qué pasa si te digo que se tarda una hora en el baño, haciendo del número dos.
—¡Tina!—advierto.
—¿Alguna vez has tenido la mala suerte de olerle un gas? ¡Amiga, mi hermano parece que se está pudriendo! Eructa como cerdo, y de paso come con la boca abierta. ¡Él es horrible!
—¡Tina, cállate!—regaño—No le creas Aisha, ella está mintiendo.
La mirada de la pelinegra pasaba de mi hermana a mí.
—¿A poco si haces todo eso Félix?—la voz de Guillermo, hace que me volteé en su dirección. Su rostro está muy sonrojado, por lo tanto, eso hace que sus ojos verdes resalten más.
Trago en seco, cuando nuestros ojos se encuentran, una sonrisa se empieza a surcar en su rostro, pero rápidamente se ve siendo reemplazada por una mirada impasible.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 33 Episodes
Comments
cheesecake
Este wey es locooo
2023-08-25
0
cheesecake
Si realmente lo fueron jajajajaj
2023-08-25
0
cheesecake
Luke sabe cosas!!!
2023-08-25
0