Simon fue a su puesto de pescado como todos los dias para encontrarse con la sorpresa de que su local había sido clausurado, segun el cartel puesto en su puerta el inspector a cargo de la revisión no habia aprobado el lugar por violar múltiples clausulas sanitarias y no ser apto para vender alimentos, Simon quedo perplejo al leer el informe ya que ningun inspector de ningun tipo habia pasado por la tienda, ni si quiera en años anteriores que habia trabajado en ella.
Le parecía una broma de mal gusto por lo que solo removió el cartel de clausurado y abrió el local como si nada. Estaba teniendo una mañana normal hasta que por la puerta de su local entró Lucas, el hijo mayor de Don Carlos, fue una gran sorpresa para Simon por que solo había venido un par de veces a la tienda.
-¿Lucas? ¿Qué haces aquí?- pregunto confundida
-¿Qué haces tú aquí? el local está clausurado, me enviaron el reporte a mi casa está mañana.-
-¿Un reporte? ¿La clausura es real?- quedó sorprendido al ver qué era cierto- ¿Cuando ocurrió?.
Le parecía imposible que se hubiera clausurado el local sin ser visto primero, además de él tener que estar presente porque tenía el único par de llaves.
-Nadie vino, no puede ser verdad-
-Vamos Simon, no es necesario entrar para ver que este lugar es una pocilga, está deteriorado y huele horrible, lo mejor que podemos hacer es cerrarlo-
-¿Cerrarlo? ¿Y tú desde cuándo puedes decir eso ?- preguntó molesto Simon.
-Mira, se que quedaste a cargo de este lugar pero no te pertenece realmente porque mi papá nunca completo los papeles de escritura-
-¿Qué dices? ¡Firme los papeles hace tiempo!- contestó enojado.
-No sirven nada esos papeles, nunca fue oficial el traspaso del bien por lo tanto la tienda es mía y puedo hacer lo que quiera con ella- decía Lucas mientras mostraba los papeles que indicaban que la tienda aún le pertenecía a Don Carlos.
Simón abrió la boca de impresión al ver el documento, no podía creer que Don Carlos lo había engañado de esa manera pero no tenía sentido porque no obtenía ningún centavo de lo que ganaba, lo más probable era que olvidara realizar el traspaso.
-Estoy planeando vender la tienda muy pronto así que la tienda quedará cerrada, por eso voy a tener que recojas tus pertenencias y te vayas.-
No pudo decir nada por el impacto de la noticia, la pescadería era todo su trabajo y su vida, aunque ya no lo disfrutaba como antes realizarlo no estaba pensando en renunciar tan pronto. Resignado ante la noticia, recogió las cosas que le pertenecían y las guardó en una bolsa de consorcio, antes de irse fue a hablar con Lucas para entregarle las llaves.
-Lucas, ten las llaves del local- dijo mientras las colocaba en su mano- bueno, hora de irme, gracias por todo.- Dijo con desánimo.
-Gracias a ti Simón, lamento que las cosas pasaran de esta manera pero tengo que vender la tienda con urgencia porque están por embargar mí casa por las deudas y mi padre está muy mal de salud- Guardo las llave del local en su bolsillo.- Gracias al cielo ayer me llamó un comprador interesado en el terreno de este local, me sorprendió saber que todavía estaba a nombre de mí padre.-
-¿Te llamaron? ¿Tan pronto?- preguntó con intriga.
Le parecía raro que apareciera un comprador tan rápido, la inspección del local tiene fecha recién de hace 2 días, además de no ser una zona tan conocida y popular para tener gente interesada.
-Si, es un golpe de suerte para mí y pienso aprovecharlo.
-¿Sabes quién es el comprador?-
-Oh, no hable directamente con el pero si con su secretario, creo que me dijo que su nombre era Ángel, Angel Gray, me dijo que una empresa importante de la ciudad quería mí terreno, me darán 10 millones por el-
-¿¡Angel Gray!?- dijo enojado, reconoció el nombre de inmediato y lo llevó a darse cuenta quien estaba detrás de todo esto.
-Si, lo siento amigo, si no estuviera en este aprieto te dejaría la tienda con gusto, pon mí número en tu currículum y daré una gran reseña para tu próximo trabajo, mucha suerte-
Cómo pudo se despidió lo más amable posible de Lucas, traten de no desquitar su ira con él porque solo es un peón en este juego sucio.
-Es ese maldito infeliz de Gustav.- Susurro molesto.
Supo de inmediato que todo esto era obra de él cuando escuchó el nombre de Angel Gray, ese era su secretario personal y se encargaba de todas las labores que no quería hacer Gustav, solía hablar mucho de ese secretario en las reuniones familiares, presumiendo lo eficiente que es y lo mucho que lo respeta.
De regreso en casa Simón estaba hecha todavía una furia, al punto de tirar todas las cosas que tenía en la mano, se echó en el sillón y dejó que sus sentimientos fluyeran.
-¿¡Este es el castigo que querías darme!? ¿Quieres que te llame y te suplique? ¿Que bese tus pies por piedad? Eso jamás va a ocurrir, escoria inmunda, saldré de esta como pueda sin ti- se dijo para sí mismo Simon.
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Comments
Alicia Marin
solo no sigas dejandote humillar de ese miserable
2023-11-19
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