¡Babilony, Alístate!

Los hombres que rodean a esa mujer de rojo, le miran entre sorprendidos y desconfiados.

Uno de ellos, se le atreve a decir: — Estáis loca...es que no tiene cara, ni traza de Príncipe – y la mujer le responde: Acaso los príncipes, precisan ser siempre muy hermosos? Este es flaco, alto y lindo y delgado de los bolsillos. ¿No le veis? mirad esas facciones tan delicadas además es muy sabio y sabiondo al hablar muy bien, orar y declamar, escribir y decir poesías que al rey le encantarán.

— ¡El príncipe, de qué principado, pues es! – pregunta el otro hombre.

— Eso no los diré para que tu señor, vea a estos tres en buenas condiciones de atención, y que le deis ropas buenas para presentarse ante el rey, que por lo visto han tenido un largo viaje, estarán sedientos, hambrientos y sus pertenencias han debido ir dejando atrás — continúa la mujer encapuchada.

Los hombres piden ayuda y llevan a los tres en camillas de enfermos para la guerra. Van hacia dentro de aquel castillo, que se le ve, más amplio y fuerte que el de Penestrón o Marcio.

Cuando están arriba y se han alejado en busca de agua y algo con que limpiarles, la mujer de rojo baja la capucha de su capa y mira de cerca a Marcelo Komadín.

— Hola, cómo estás... que alegría verlos... ¡Soy... Karina! ¡No podía presentarme ante ustedes con el rostro descubierto totalmente pues podrían haber demostrado que me conocían!

— ¡Karina! qué... de cómo llegaste aquí.

Alex y Fausto miran y sonríen a Karina.

Yo caí en plena ciénega... en una colcha de ramas y plantas navegantes. Unos pescadores del lago aledaño me rescataron. Ellos me trajeron hasta aquí.

— Estáis algo diferente – le dice Komadín.

— Escucha, me he cambiado de estilo para que no reconozcan... debo ser como una cortesana amorosa y romántica. Ya vienen... haces de cuenta que estás recuperando. Yo supuse que estaban actuando.

– Dale... – dice Komadín.

señora dice uno de los hombres aquellos el rey los quiere a su lado en la hora del almuerzo.

— Está bien señor está bien, ya voy guardando mucho a este príncipe vale oro... Enrique... verá encantado de conocerle y saber lo maravilloso que es su reina, él no se imagina lo que va a vivir, el rey quedará completamente encantado de conocerte te lo aseguro.

Karina, vestida de cortesana, levantando su capa de terciopelo y encaje, igual que su vestido rojo, rápidamente, se detiene en el umbral de la puerta, mira a sus amigos venidos del futuro con ella. Les guiña un ojo y gira va caminando hacia el salón del almuerzo.

En la plataforma aeroespacial con todo el equipamiento real virtual completamente encendido, Arlon acompañado de Babilony, examinan los botones, miran las pantallas en las que aparecen todavía las imágenes de Leridana y Penestrón alias Marcio, o, a lo contrario, y esas en que se ve al niño Fabián, corriendo entre la maleza y aparece Babilony, que le salva en otras escenas... quizá se pueda haber fugado la escena y en otra pantalla aparezca... las escenas del campo de donde salió Fabián y del ataque del ejército del grupo de militares chateando y quemando las cabañas de los campesinos; el momento de la pelea con Babilony, Marcelo Komadín, Alex y Fausto. En otra pantalla, las imágenes de los cocodrilos en el castillo de Penestrón, abren la bocaza y se tragan al jumento.

Pero, nada en aparecer las escenas de estos momentos actuales; nada de las imágenes que Karina comentó, al caer en aquella ciénega y al ser rescatada por unos pescadores ni tampoco su llegada a este castillo y peor aún estas escenas en vivo y directo.

— Qué crees que pueda haber sucedido, Arlon –le interroga Babilonia.

— No se, quizá una interferencia, pero no sé justificaría. No hubo en estos tiempos nada electrónico... ni radial, ni peor aún cibernético.

pero no te parece demasiado extraño es como un corte de interferencia de onda.

Arlon no responde, se rasca la frente, aspira hondo... recuerda lo sucedido con Stephen Caveinter, en Ave Fénix, esos saltos de tiempo, pero ahora son como extravios de señales, de imagen, le contesta a Babilony:

— La verdad que no sé, no me atrevo pero hemos perdido varias imágenes y los otros dónde están falta la suiza falta Héctor el poeta, falta Juan el pintor, falta Sandra pues yo también falta también Marcia Kit Piojo ambas íntimas del Brasil.

bien pero mejor es seguir ahí a donde estás ahora a Karina no hay que perder la vista está muy interesante Ojalá que puedan encontrar algo y no atajarse mucho tiempo para continuar ahí encontrar a los otros.

sí Babilony, como te dije anoche debes acomodarte prepararte con todas las armas necesarias incluso hasta bomba de juego lanzamiento de rayos eléctricos todo lo que puedas pues veo que sí en este castillo habrá mucha envidia y maldad entre estos hermanos hemos visto lo que contaba marcio. Qué quiere decir que a él siendo el mayor, los siguientes hermanos lo habrían relegado y dejado en la pobreza más miserable.

Le vuelve a decir a la "androide humanoide":

— Alístate, Babiloni, al amanecer de mañana irás a entrar.

Babilonia no espera, no puede esperar... inmediatamente se sienta en su silla y gira y en un movimiento, se encuentra dando una vuelta en el aire en su sala privada; abre las manos y los brazos y todos los objetos metálicos se vienen como normalmente ante un imán, se colan haciendo perfecto entrada en sus ropas metálicas pero con características humanas perfectas y cuya piel se pega en las piezas y se funden en su interior de manera tan perfecta y queda una piel humana exactamente idéntica. Aún más Babilony ensaya un despliegue de armas por todas partes de su cuerpo, desde sus dedos y de sus piernas y hace un lanzamiento y aquí aparece de forma virtual en diferentes lugares, arriba, abajo, al frente debajo, arriba; como láser; provocando lluvia de fuego, de hielo, de humo, de viento, huracanado; con solo apuntar y pelear con las uñas y cualquier miembro de su cuerpo o desde la boca, peor si lanza con fuerza, provocando destrozos inigualables, seres humanos que vuelan tras el impacto de la fuerza del empuje de Babilony, que se torna un verdadero monstruo en servicio, en este sentido, del rescate de la verdad, de la igualdad, de la hermandad, en contra del odio, la ambición; destruyendo lo banal o lo terrible de la envidia y del maltrato en la guerra contra el esclavismo.

—¡¡Tenemos que cuidar la posible, fuga de escenas! Analizarás todo allí mismo en el campo de acción Babilony!

Le gritó Arlon, mientras ella se preparaba.

— Ya está Arlon Ya estoy lista.

— ¿Pretenderás entrar ahora Babilony?

— De...de una vez hablo, de una vez hablamos... Hola, hola, qué está pasando... — la máquina habló sola.

— Cierto ¿Para qué esperaría hasta mañana? sí... de una vez puedo entrar y además es mejor puesto que muchas imágenes hacen o hay algún problema en el sistema o algo se interfiriendo de que fuera desde órbita del planeta y tendremos que revisarlo urgentemente dame tu bendición mi jefe, mi creador, allá voy: Se impulsa y sale como un cohete y desaparece en el tiempo.

De pronto habla un audio que emana y se escucha en el estudio de la plataforma aeroespacial y real virtual creada por Arlon D.

«— Amado principe. Estamos aquí presas. Esperábamos órdenes de — Amado principe. Estamos aquí presas. Esperábamos órdenes de — Amado principe. Estamos aquí presas. Esperábamos órdenes de...»

...***...

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***