Tanta Jugarreta

En Madrid, la actualidad: 2070.

El Director del Proyecto de Rescate del Castillo Hundido, se reúne con cinco expertos en el ramo, del estudio de palacios y castillos medievales y renacentistas en Europa.

Ellos hacen parte del trabajo de inmersión.

Director, visiblemente consternado:

—《Se ha puesto tenebroso ese paisaje para nuestros amigos exploradores del tiempo, tras las historias reales que nunca fueron contadas.

《O, si los antiguos las contaron, pasaron al olvido y otras tantas sufrieron cambios y alteraciones quedando como cuentos antiguos para niños o jóvenes, con los que sus padres o mayores de vecindad podían mandarlos a la cama para que con tanto miedo, no salgan luego de anochecer o si era de día en ciertas horas específicas para no incomodar el sueño, trabajo, o descanso de la siesta o para hacer el amor a la hora que se les antojase a los adultos.

《Así, ahora, miran incrédulos, ese paisaje medieval auténtico, pues en esa época lo que valía eran los Castillos y he aquí el primero de los siete mayores, que andan buscando para verificar si uno de ellos, es el castillo hundido de Madrid.》》》》

《Es así, que,

Alexandre, Marcelo Komadín, Fausto Glaccio, Héctor, Aparecida y Verónice, han sido ubicados próximos a un castillo que Arlon supone, sea el punto de partida para encontrar los hilos que nos unirán con el conductor histórico para encontrar la historia de este castillo hundido de Madrid y la cuestión de la especie de cocodrilos prehistóricos que supuestamente vivieron hasta esa época medieval.

Uno de los asistentes interroga al director:

— Esos humanos actuales que están allí en el pasado de forma virtual real o como le llamen a esa tecnología, ¿van a ocupar el cuerpo de personajes reales del pasado o solo los van a ver o podrán también interactuar en las acciones históricos reales?

Director, muy conpiscuo: — La tecnología es puramente virtual, lo real es lo que, proviene de la interfaz creada para darle vida a los personajes que se presentan en una cuestión de transformación de las circunstancias presentes en los textos rescatados.

Participante: — ¿Esto significa que hay de cualquier manera una interacción?

Director, atento: — ¿Por ejemplo? El personaje es un rey, él será real desde el enfoque técnico de la interfaz, el humano real, lo verá...pero no lo captará de forma física, mientras no se de la orden de la orden de interferir, lo que es muy dificil si no se consigue un nivel promedio de interacctuación entre los tiempos.

Otro participante: —Más claro, si pudiese señor Director ¡!

El Director algo incómodo :— Sí, vamos a decir que no es facil emtenderlo: hay que reconocer que todavía es un invento en proceso de creación y todo lo bueno que se ha hecho en la humanidad ha llevado tiempo, esfuerzo y mucha voluntad de trabajo intenso.

El primer observador, con rostro inquisitivo:— Bien, una respuesta no contundente no sirve en la ciencia ni en el arte.

El Director agarrando el hilo del sarcasmo para responderle a cabalidad—: Cabalmente, es obvio que lo que hacemos es ciencia y arte al mismo tiempo, por ello merece estudio y estudio.

Otro participante: — Pero aún la respuesta no es clara: cómo se llegará a interactuar difeninitava y completamente?

Director del Proyecto del Castillo hundido:— Solamente el ingeniero Arlon, ha conseguido interactuar pero ese estudio no puede aun adaptarse a cualquier visitante al pasado o al futuro que está enmarcado en la teoría del único presente.

Un rumor de ideas captadas de reclamos de mayor entendimiento y explicación se desata en el salón de Madrid.

El Director muy circunspecto les pide cordura, calma y promesa: 《La situación allí en la inmersión no está completamente esclarecida.

《Por ejemplo, Arlon de pronto se encontró en la piel de José Trejo el Trigueño, y supo que este hubo de ser él mismo, en el pasado, allí es donde entra la cuestión cuántica. Si un humano actual ingresa al pasado en búsqueda de algo que le llama la atención, o quizá propositalmente inicia esa búsqueda siguiendo algunos parámetros anticipados, es bien probable que se encuentre con que es parte de ese momento histórico en el tiempo, y que posiblemente seas tu mismo, tú yo cuántico, o tu hermano gemelo del alma y de vida.

Ante el breve silencio tras esto último, el Director concluyó la discusión: — Señoras y señores, tendréis que estudiar el trabajo Ave Fénix y el Barón de Platino para saber que es lo que buscamos, qué es lo ya se ha encontrado y cuáles son las posibilidades de mayores logros en el trabajo de inmersión y la propuesta científica: "Vivir en el pasado y en el futuro es vivir en el presente".

El primer interesado: — Entonces no hay pasado ni futuro, esa afirmación ya es vieja, señor director, no nos haga creer otra cosa.

Director, exigiendo la promesa:

《– Señoras y señores: Ustedes fueron elegidos de entre cien aspirantes a participar en este proyecto, así salieron los jóvenes que están ahora en la Edad Media... parece extraño decir esto, sin embargo, eso es Real... entonces, es menester que vosotros os adecuéis y aceptéis lo que vayáis viendo, así como ellos en la inmersión vayan viviendo, conociendo, estudiando y quizá siendo ellos mismos. Eso dependerá del nivel síquico y motivacional de cada uno de ellos o de ustedes.

《Mientras tanto, os ruego que no especuléis demasiado y respetéis los comentarios del avance de este proyecto. Lo que sea con más sigilo y secreto será mejor para este proyecto, si no, serán eliminados y no participarán del proyecto ya en ejecución del: "Rescate del Castillo Hundido".

— Señor Director, por favor, que haya más diálogos de actualización del proyecto inmersivo y el estado de los participantes allí.

— Sí, sí, sí. — Exclama la mayoría. Nosotros no dudamos de la veracidad y del valor de este proyecto–; queremos inclusive ingresar en la inmersión–; Ha de ser maravilloso estar en la Edad Media –; Por favor director, cuéntenos esa historia del Príncipe Fabían –; Señor director, queremos saber sobre una humanoide robótica o unos robots puros que hay en la inmersión... qué nos puede decir de esa figura; ¿Es cierto? ¿Es masculina o femenina —; Cómo se llama? Por favor señor director... ¡Señor!

Una lluvia de interrogantes, el Director no irá a. avanzar más.

Con las manos indica que "Eso se dirá más adelante", luego se despide moviendo las manos el aire y sale de esa sala modernísima.

En la plataforma móvil de Arlon, en plena edad media virtual real.

Arlon sentado ante las cámaras aéreas y las luces de órdenes, analiza esa reunión:— El director es excelente, pero, casi lo han desnudado de las cuestiones que no debería todavía hablar.

— Qué por ejemplo, aparte de lo captado respecto a la condición científica y artística muy bien defendida – considera Babilony, sentada a un metro y poco de Arlon.

Arlon, sin mirarle a Babilony:— Lo de los robots como tú.

— Ah sí...

— Sí...

Babilony hablando con delicado estilo de soberana:— Eso me pareció muy bien.

Arlon: — Estás muy orgullosa por cómo hablais.

Babilony aparentando decepción: —Ya deberías haberme presentado ante los medios científicos y demás.

— Por qué tendría que hacerlo.

— ¿Acaso no soy una gran invención?

— Qué consideras.

— ¿Acaso no soy de tu invención?

— No es muy decente decir que lo que uno hace es lo mejor.

— Ah... gracias, eso me agradó.

— ¿Te das por satisfecha?

—No...

— ¿Por qué?

— Porque quiero tu amor.

— No se puede amar por demás lo que uno hace como propio, como si fuera un padre, no te podría amar más que como a una hija. Olvidaos de eso.

—¿Acaso no soy una máquina?

Arlon se levanta, mira a Babilony que imita a una prostituta.

Debe pensar en muchas cosas, como la situación un tanto trancada del desplazamiento que no se ha acomodado bien hasta el momento... Y ahora nota que Babilony actúa como humana. Ella, el robot, no puede o no debería incurrir en esos diálogos íntimos, eróticos, incómodos y casi, sino totalmente, orillando en una situación fuera de orden de lo puramente científico.

—Debo trabajar, el personal de apoyo está casi todos ya, en el castillo del Marqués hijo de Pléonedes. Y mi invención llamada Babilony, quiere hacer el amor.

Babilony se retuerce en la cama... Arlon tiene ganas de reír... Y ríe... Pero se contiene... Esto es. ridículo. Babilony, yo tengo una enamorada.

— No seré celosa...

— Puff...—mejor te apago hasta mañana...

—No podrás... me he auto programado yo misma.

Al final, Arlon se ha cansado ese día de tanta jugarreta de Bsbilony y blá blá en esa larga reunión con la gente del Museo en Madrid.

Arlon efectivamente domina sus máquinas...aprieta un botón en su panel invisible al tocar su pulso y apaga a Babilony a lo que ella se acababa de acostar en la cama para aguardarlo.

— ¡Mañana hay que controlar cómo están los participantes en el castillo de aquel mostruo Kinyang!— Le dice a Babilony pero esta ya está desconectada — ¡Hasta mañana! Hum...Arlon se estira para relajar en la cama que flota y se duerme a los pocos segundos allá arriba en la plataforma aeroespacial.

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