capítulo 17

Cuando estábamos en el estacionamiento Jade me pidió las llaves del carro.

_ Yo manejo, se que estas afectado.

En todo el trayecto a casa no dije nada, tenía sentimientos encontrados, una parte de mí estaba dolido y otra parte decía que la fidelidad solo existía en las novelas. Jade me miraba una y otra vez, me pasaba su mano por mi hombro.

Llegamos a la casa sin hablar, llegué a mi habitación y me lancé en la cama, lloré hasta que más no pude, grité hasta quedarme sin voz, renegué de la vida porque había entregado todo a esa mujer y ahora era como un completo extraño para ella.

Estuve encerrado por más de dos horas hasta que Rita entró:

_ Disculpa amor, sé que no quieres hablar conmigo, pero bajemos a comer.

No decía nada, la miraba con ganas de agarrarla por el cuello y decirle que es igual a todas. Pero ella no tenía la culpa de lo que yo estaba viviendo, solo quería ayudarme.

_ Por favor dime algo, si quieres grítame, pero di algo por amor a Dios.

Escuchando sus palabras me juré que no sería fiel nunca más, que en adelante toda mujer que se me cruce la haría mía solo por placer y capricho.

_ Contesta Damir por Dios.

_ Ven Rita y dame un abrazo.

Ella corrió y me abrazó tan fuerte que casi no podía respirar. No pude contener mis lágrimas.

_ Te amo, aquí estoy y aquí estaré siempre.

_ No me falles por favor, eres lo único que me queda en este mundo.

_ Cuentas conmigo amor, ¿Sabes? Tenía miedo de entrar, pensé que me lastimarías.

_ No tengo por qué lastimarte, no tienes culpa de nada, lo que me está pasando estaba destinado que debía pasar.

_ Vamos a la ducha para que tomes un baño y te repongas, no puedes dejar de comer, no quiero que te enfermes.

Tomé un baño, Rita me buscó ropa, me vestí y bajé a comer.

Jade al verme dijo:

_ Qué bueno que bajaste ¿Ya estas mejor? Siéntate para que comas, estábamos esperando por ti.

_ Ya estoy mejor, sí vamos a comer.

Sirvieron y nos sentamos, el almuerzo estuvo bastante silencioso, no hubo tema de conversación, ellas sólo me miraban para ver cómo iba a reaccionar.

_ La comida estaba deliciosa, gracias por acompañarme a pasar mi mal momento.

Luego nos fuimos a la sala a conversar.

Rita me preguntó:

_ ¿Tienes algo planificado para mañana amor?

_ No amor, nada ¿Por qué preguntas?

_ Quiero que vayamos al club campestre.

_ Buena idea, pero vamos con todos los empleados.

_ Si vamos todos, así los conozco mejor

Dijo Jade.

_ Rita ¿Dónde está mi teléfono?

_ Ya te lo busco amor, toma aquí esta.

_ Gracias mi hermosa, mañana día obligatorio de paseo al club,

Llamé a Zairí.

_ Hola mi preciosa Como estás? ¿Cómo va la empresa?

_ Hola tío, ¿Cómo te sientes? Por acá vamos bien.

_ Estoy bastante mejor, te llamaba para invitarlos al club campestre mañana, todos deben ir porque Jade quiere conocerlos mejor. Pídele a Maggy que envíe la lista a la administración del club para que no tengamos problema con los pases.

_ Como digas tío, ya le indico a Margaret.

_ Chao mi preciosa, nos vemos a las nueve de la mañana allá.

Al colgar Rita me dijo:

_ Hay un problema amor.

_ ¿Qué sucede? Eres tu quien está inventando paseo.

_ No tengo traje de baños aquí todos están en mi casa, vamos a buscarlos.

_ ¿Y tu usas traje de baño? Hasta donde sé te bañas con los faldones que siempre usabas.

_ No seas tan cruel con ella.

Intervino Jade.

_ Déjalo Jade, el siempre haciéndome sentir mal.

_ No vamos a ir a tu casa, mejor vamos todos al mall.

_ ¿Hasta cuándo vamos a gastar dinero mujeres?

Dije.

_ Hasta que se acabe.

Gritaron ambas con mala cara.

_ Ni modo vamos al mall.

El resto de la tarde la pasamos de compras, estas mujeres escudriñaron todas las tiendas que pudieron y otra vez el carro iba lleno de bolsas.

Camino a casa pregunté:

_ ¿Qué vamos a comer? Porque tengo hambre.

_ Quiero comer pollo broaster con papa y ensalada.

Dijo Rita.

_ Me parece buena opción, ¿Qué opinas tu Jade?

_ Con ustedes voy a engordar rápidamente.

_ Estás acostumbrada a comer ensaladas y comidas light que no llenan el estómago.

_ Así es, hace mucho que dejé de comer comidas pesadas, ya no soy una jovencita y debo cuidarme.

_ Podemos llevarte a un lugar donde sirven ensaladas muy nutritivas ¿Verdad Rita?

_ Sí Jade, son muy deliciosas y saludables.

_ ¿Y perderme del pollo broaster? Ustedes están locos.

Fuimos a un restaurante de comida rápida y pedimos pollo broaster para llevar, llegamos a casa y nos sentamos a comer.

Luego nos fuimos a las habitaciones. Ya en la cama listo para dormir extrañaba que Rita no había llegado, tomé mi teléfono y la llamé:

_ ¿Dónde estás? ¿Por qué no vienes a mi habitación?

_ Pensé que querías estar solo, por eso no fui a tu habitación.

_ Lo menos que quiero es estar solo, ven por favor.

_ En un momento voy, así te muestro lo que compré para lucir mañana y lo que quiero que uses tú.

Colgó la llamada y unos minutos después entró a la habitación. Cuando esa mujer se quitó la bata de dormir quedé con la boca abierta.

_ ¿Tú no pretenderás usar eso en el club mañana?

_ ¿No te gusta? Me parece lindo y es solo un bikini amor, no le veo nada de malo.

_ Sí, es muy lindo pero, vas a provocar un accidente cuando te vean así; además, hasta hace unos días tú usabas faldas hasta los tobillos y nunca te han visto en traje de baño, trata de usar algo más prudente se pueden sobrepasar contigo y yo voy a tener problemas.

_ ¿Sientes celos amor?

_ Sí Rita, me da celos.

_ Me gusta que sientas celos, porque eso me dice que te importo mucho, solo te pido que no sean celos enfermizos, aquí tengo este short y esta franela, son más discretos, espero te gusten.

_ Me gusta más y yo estaré tranquilo.

_ Esta es tu ropa y tu traje de baño, como siempre, sé que te va a gustar.

_ Si amor está bien. Pero ya vamos a dormir hoy el día fue muy fuerte y estoy agotado.

_ ¿Dormir? Me hubiese quedado en mi habitación.

_ ¿Y qué quieres que hagamos?

_ Que hagamos el amor rico hasta que no podamos más.

Apagamos la luz y tuvimos una noche apasionada, llena de deseo, lujuria y sexo desenfrenado, a pesar de su poca experiencia disfrutaba lo disfrutaba al máximo, los orgasmos se hacían presentes a cada momento.

Pasada la media noche nos quedamos dormidos y nos sorprendió la luz del día pasadas las siete de la mañana.

Nos levantamos a la carrera porque debíamos estar en el club a las nueve, bajamos y Jade ya esperaba por nosotros.

_ ¿Nos vamos? Ya estaba pensando irme sola, no sé que tienen ustedes o en que andan que se tardan tanto.

No dimos respuesta, pero la cara sonrojada de Rita lo expresaba todo sin necesidad de palabra alguna. Salimos los tres directo al club campestre.

Cuando llegamos ya los chicos estaban en el club esperándonos. Rita fue hasta la administración a confirmar los pases. Jade y yo fuimos con el resto del grupo.

Una niña y un chiquillo salieron corriendo y saltaron encima de mí, perdí el equilibrio y al piso fuimos a parar los tres.

_ Niños les dije que no fuesen a tumbar al tío y fue lo primero que hicieron.

Dijo Zairí que venía corriendo detrás de ellos.

_ Déjalos preciosa, son mis angelitos queridos.

Mi mente viajó al pasado cuando llegaba a casa de Susej y Zairí, Daniela y Jhosué salían corriendo apenas me oían llegar a escudriñar en mis bolsillos y hacerme reír.

_ Tío, ya me tienen cansada y solo tenemos media hora aquí. Señora Jade disculpe, pero mis hijos son demasiado tremendos.

_ No te preocupes, vengan niños, yo me encargaré de ustedes, ya su tío está viejo y cansado.

Jade se llevó a los niños y Zairí me preguntó:

_ Tío ¿Dónde está Rita? ¿Acaso no viene?

_ Fue a la administración a confirmar los pases.

Y en ese preciso instante llegó Rita furiosa a donde estábamos.

_ Hola Zairí. Damir vaya usted a la administración porque ellos no me conocen, le dije quien soy y según ellos Rita Fisher es otra mujer, lo que falta es que me saquen con seguridad.

Mi sobrina al escuchar la voz de la mujer que hablaba en frente se sorprendió.

_ ¿Tú eres Rita Fisher? La Rita que conozco no viste así y no se parece a ti.

_ Sí, soy la misma, presidente adjunto y tu jefa directa.

_ Pero mujer, que hermosa eres tú, que cambio tan drástico, me encanta ver lo preciosa que te ves vestida así.

Rita con su cara sonrojada, le preguntó a Zairí

_ ¿En serio me veo bien? ¿Te gusta cómo me veo?

_ Claro! Mira el cuerpo que tienes, cualquier mujer desearía tener tu cuerpo para mostrarlo.

_ Perdón que las interrumpa señoritas, voy a la administración a resolver el inconveniente.

Ellas continuaron conversando. Cuando regresé todos estaban asombrados con la nueva Rita Fisher, nadie podía creerlo. Nos ubicamos en la piscina y nos fuimos colocando los trajes de baño.

Ni Valery que tenía años conociendo a Rita la pudo reconocer a primera vista.

_ No puedo creer que seas tú, tantos años conociéndote y jamás imaginé que eras así de hermosa.

Rita ruborizada no sabía que contestar.

Luego fue Margaret:

_ Mujer, que hombre fué quien frotó tu lámpara para que salieras de la botella.

_ Ninguno Margaret, decidí cambiar mi forma de vestir, escuché consejos, no quiero llegar a vieja sola, y para conquistar a un hombre debía quitarme los faldones.

_ Mira que curvas te gastas y hasta buenas t….

Hizo un ademán con sus manos semejando las tetas de Rita.

Hombres y mujeres miraban a Rita, era el tema de conversación de sus compañeros de trabajo que comentaban con admiración su cambio de apariencia. Hasta Jhonatan que siempre ha sido callado y distraído en su mundo, en varias ocasiones lo ví con la mirada fija en Rita.

Zairí se me acercó aprovechando que estaba solo.

_ Tío ¿Cuéntame qué fué lo que pasó con tu esposa?

_ Hane se cansó de mí, decidió que debíamos separarnos y hasta ha tomado la decisión de irse del país y llevarse a los niños.

_ No entiendo, si ustedes se veían bien, nunca han tenido problemas, bueno hasta donde yo sé.

_ Ella alegó que la descuidé, que en estos dos años me dediqué a trabajar día y noche y los dejé a un lado.

_ Eso es cierto tío, hemos trabajado sin descanso en este tiempo, pero es por el bien de la firma y la estabilidad económica de los que en ella trabajamos.

_ Bueno preciosa al parecer Hane no entendió nada de eso. Desde que nos casamos y a pesar de ser una mujer estudiada nunca tuvo la necesidad de salir a trabajar, ni siquiera cuando tuvimos mala racha financiera, yo siempre suplía los gastos de mi hogar.

_ Sigo sin entender sus razones.

_ En pocas palabras, le amargó la buena vida. Cuando me escribió para decirme lo que decidió, porque ni siquiera tuvo la valentía de decírmelo en mi cara, que se enamoró de otro hombre y que ya no era digna de seguir conmigo, por eso se iba de la casa y se llevaba los niños.

_ Todo eso es una locura, pero ¿Por qué tiene que llevarse los niños de la casa?

_ No sólo de la casa es del país que piensa llevárselos. Eso no es lo peor, ayer me citó al tribunal para que le firmara el permiso, da la impresión de que tiene prisa por irse lejos de mí.

_ ¿Y le firmaste el permiso tío? Nunca entenderé por qué lo hizo, si le firmaste es porque sabes que es lo mejor para ellos.

_ Sí, le otorgué el permiso. Daimar habló conmigo y me explicó las razones. Cambiando el tema; ¿Cómo están Daniela y Jhosué?

_ De Jhosué no se mucho, después que salió de prisión desapareció y llama muy pocas veces. Daniela tienes dos niñas y un niño y con su nuevo esposo le está yendo muy bien.

_ Me alegra saber que están bien, cuando hables con Jhosué dile que me busque para que hablemos, si necesita ayuda aquí estaré, ¿Y de tu mamá que sabes? ¿Cuéntame de Susej?

_ Mi mamá me ha visitado un par de veces, su visita no es grata para mis hijos ni para mi esposo. Siempre que va me causa problemas, llega con exigencias y mi esposo sabe todo lo que hizo y me reclama, la última vez llegó pidiendo dinero porque iba a iniciar un negocio, pero yo sé que es para darle al tipo ese con quien vive. Ella no cambiará nunca, no sé que le hizo ese tipo que no lo deja.

_ Si supieras las locuras que ha hecho, tal vez un día te cuente, hoy no porque arruinaremos el momento.

Si supiera Zairí todas las locuras que la misma Susej me confesó, o parte de ellas.

_ ¿Y qué sabes del cambio de apariencia que tuvo Rita?

Guardé silencio unos segundos y luego le contesté.

_ ¿Rita? Rita tuvo una semana de consejos y asesorías para cambiar su imagen.

_ Ajá! ¿Ese cambio repentino en Rita tiene nombre y apellido verdad Damir Mc.night? Tú crees que no me he dado cuenta.

_ Esa conversación es para otro momento mi bella.

Y solté una ligera sonrisa que sin palabras daba respuestas a su pregunta.

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