ARIEL PARTE DIESCIOCHO

Ias respiró profundo intentando serenarse al comprobar que el laberinto le había hecho una mala jugada y que nada podía hacer para evitarlo.

Ahora solo le quedaba esperar el próximo paso y salir victorioso, él deseaba con toda su alma la paz ya que no soportaba más la idea de seguir matando inocentes.

Por tal razón haría cualquier cosa para lograrlo, inesperadamente el príncipe rival pensaba igual que él y además se había empezado a ocupar del asunto. Frunciendo el ceño Ias se percató que estuvo demasiado lento en su “anhelo” esperando sentado a que surgiese el milagro.

Ahora que efectivamente “el milagro” se produjo él ayudaría en todo y si eso significaba eliminar todo ser vivo habitante del laberinto de ilusiones así lo haría.

— ¿En serio estarías dispuesto a matarnos? — retumbó una voz masculina en el lugar donde ahora él estaba solo — Eso no es nada reconfortante Príncipe, ni bueno de tu parte ya que somos tus súbditos después de todo — la voz se movía continuamente

—Si realmente te consideras un súbdito mío entonces deja de molestar a mis amigos y a mí — dijo con firmeza Ias — Y permítenos pasar.

—Bien sabes que no puedo hacer eso — contestó la voz — Nadie debe entrar al palacio de la luz, ni siquiera tú…príncipe Ias.

— En ese caso morirás — contestó furioso pero seguro él, ocasionando risas en la voz — No le veo la gracia — dijo más indignado aún — ¡Muéstrate!.

— Como tú quieras — diciendo esto se fue corporizando una figura frente suyo hasta quedar terminada. Era una persona con una túnica verde y ojos amarillos, era lo único que Ias podía verle, pero cuando conjuro una espada le vió las manos rojas. Con que se trataba de un dragón de fuego, pensó Ias frunciendo el ceño.  Insolente.

— Te haré ejecutar por esta ofensa — dijo Ias

— Primero deberás vencerme príncipe Ias — respondió burlistamente su oponente.

— Será un verdadero placer.

Ias conjuro otra espada y sin perder un instante se lanzó a su oponente quien lo supo esquivar sin dificultad alguna, pero el príncipe no se quedó atrás ya que contraatacó de forma brillante consiguiendo desarmarlo.

El otro reía como si le hubiesen contado alguna broma, hecho que enardecía a Ias más aún que el combate mismo.

Cuando lo creyó acorralado el otro conjuro el poder del fuego haciendo una esfera pequeña e inmediatamente se la lanzó, Ias la desintegró con su espada instintivamente debido a que estaba más que acostumbrado a los enfrentamientos pero su asombro lo dejó pasmado ¿cómo era posible que ese sujeto pueda conjurar el fuego sin estar en su verdadera apariencia? Solo los de la familia real podían hacer tal cosa ¿sería algún pariente suyo?

Eso era imposible porque ningún familiar suyo se atrevería a adentrarse en este lugar, él era el único audaz de entre todos los miembros de la realeza.

— ¡¿Quién eres?! — rugió más indignado aún — ¡Muéstrate de una vez!

— Solo si me derrotas primero

— Estoy harto de tus juegos — diciendo esto lo volvió a atacar pero su rival se defendía muy bien empleando el poder del fuego para contraatacar. Sin embargo Ias fue mejor y logró derribarlo, inmediatamente lo apuntó con su espada al cuello mientras decía — Ahora me mostrarás tu horrenda cara perdedor — el otro desde el suelo se quitó la capucha mostrándole a Ias su propio rostro — ¿Qué significa esto? — era como verse en un espejo — No tiene sentido.

—Yo soy tú — dijo misteriosamente el caído

— ¡No! — Ias le clavó la espada en el hombro e inmediatamente su figura se fue desvirtuando, fue desintegrándose hasta tomar su verdadero aspecto. El de una persona de piel verde clara, cuyos ojos y cabellos eran verde oscuro

— Eres el Ilusionista del laberinto, este es tu verdadero rostro — Su sangre era verde también

—Podría haber sido más sutil príncipe Ias

— ¡Cállate! — rugió Ias  — Ahora dime ¿dónde están los demás?

—¿Se refiere al príncipe dragón de agua y a ese extraño sujeto? — contestó burlistamente— ¿Quiere saber qué hice con el príncipe del reino enemigo? ¿en  serio? — Como respuesta Ias dobló la espada aún enterrada en el hombro del dragón verde quien se quejó — Ah, duele.

— Responde sin rodeos maldito.

—Solo hacía mi deber señor – dijo con voz lastimosa pero Ias introdujo más la hoja filosa de la espada en el hombro del Ilusionista — ¡Está bien! ¡Está bien!

El dragón ilusionista le pidió que le permitiese incorporarse, Ias retiró su espada del hombro de su rival haciéndola desvanecer.

Cuando se hubo levantado respiraba entrecortado por la pérdida de sangre, aún así chasqueó los dedos y los muros se separaron para formar nuevos caminos que los unirían con los demás.

En cuestión de segundos Ias vió a Ariel dirigirse a él y a Príncipe en el suelo envuelto en su propia sangre.

—¡Príncipe! — gritó mientras corría a su lado arrodillándose — ¿Qué sucedió?

Ariel llegó a ellos segundos luego y tras acuclillarse colocó su mano derecha sobre la herida que empezó a cicatrizar en décimas de segundos mientras la sangre se iba renovando en su interior y los tejidos musculares se reconstituían.

El herido dejó de sentir dolor y recuperó la conciencia al poco tiempo. Todos se asombraron al ver los magníficos poderes de Ariel

—Listo, ya no tiene ninguna herida — dijo Ariel mientras lo ayudaba a incorporarse

El ilusionista le dijo al príncipe dragón que lo de su hermanito menor fue un engaño ya que él había visto en su interior aquella historia y decidió usarla a su favor.

Príncipe le dio un fuerte golpe en la boca del estómago logrando que se quedara sin una gota de aire por unos cuantos segundos.

— ¡Imbécil! — dijo furioso Príncipe- ¡No tienes idea lo que generaste!

— Solo hacia mi trabajo — dijo con voz entrecortada.

—Vuelve a decir eso y sencillamente te mato — comentó Ias — Nunca debiste atacar estando yo presente.

—Aprendí la lección señor — el dragón verde permanecía arrodillado debido a la pérdida de sangre por la herida y al dolor de estómago que ahora se incorporaba. Realmente ese no era su día. — Ahora si no le importa permaneceré aquí un rato por mis dolores y no se preocupe ya que cicatrizo solo — como respuesta Ias le gruñó. — Lo siento — comentó bajando la mirada.

—Ahora que llegamos al palacio de luz — decía Ias — Entremos — todos miraron la gran fortaleza que se levantaba frente de ellos tan imponente como misteriosa.

Entraron los tres al palacio de luz cuyas puertas se cerraron detrás en cuanto pisaron el interior.

Todo estaba hecho de un exquisito color blanco brillante que parecía tener vida propia, las paredes, el techo y el piso. Las columnas tenían formas de dragones cuyas manos delanteras sostenían el techo, sus feroces expresiones llamaban la atención de Ariel.

Dos puertas se encontraban una en cada extremo y justo frente de ellos una gran escalera que conducía al primer piso.

El viento era frío y arrastraba restos de una niebla pequeña blanca también. Ias avanzó tres pasos concentrándose en la joya en cuestión, su mente la localizó al instante. Estaba en el primer piso.

Subieron las escaleras en cuestión de segundos hasta llegar al pasillo que conducía a múltiples habitaciones. En una de ellas estaba la joya de fuego pero en cuál, Ias no conseguía detectarla con nitidez.

— Tendremos que abrir todas las habitaciones — dijo Ariel

— No pueden hacer eso — contestó el dragón verde parado detrás suyo — Si abren la puerta equivocada quedarían atrapados para siempre aquí — los tres lo miraron con odio intenso a lo que él resopló molesto — Oigan, yo no impuse las reglas ¿entienden? — ya se había recuperado, parecía como si nunca hubiese sido atacado. Era sorprendente ese sujeto — Para cuando llegue aquí ya estaban vigentes.

—¿Cuál es la correcta entonces? – preguntó Príncipe

— Solo el príncipe de fuego lo sabrá

— Sabes que te odio ¿verdad? — le dijo Príncipe

—Ese suele ser el sentimiento que despierto en las personas — contestó el ilusionista con indiferencia — No me asombra.

— Ias, no pierdas mas el tiempo — dijo Ariel _ Encuentra la joya de una vez.

Así lo hizo el aludido, cerró sus ojos y la rastreó. No le resultó nada sencillo ya que había muchas interferencias en ese lugar pero con su poder pudo localizarla al final. Abriendo nuevamente sus ojos dijo mientras sonreía:

— Ya se dónde se encuentra — caminó cinco pasos y volteó — Está aquí — todos lo siguieron expectantes mientras Ias sujetaba el picaporte y se disponía a abrirla — Detrás de esta puerta — al abrirla una luz roja intensa los encegueció y arrastró al interior cerrando violentamente la puerta detrás de ellos. El pasillo quedó nuevamente desértico.

La habitación estaba inmaculada todo de blanco incluso la araña de cristal tenía luces blancas que iluminaban el recinto. Solo un destello rojo desarmonizaba con el lugar proveniente de la joya de fuego que se encontraba en el centro colocada sobre una tarima blanca.

La joya escarlata brillaba con intensa luz propia irradiando calor a todo aquel que estuviese cerca; casi al segundo de haber sido arrastrado al interior del recinto la luz se desvaneció y se corporizó un espíritu cuya forma era la de un hombre joven que los contemplaba en silencio.

El dragón del bosque miraba todo asombradísimo ya que nunca antes había tenido la oportunidad de encontrarse allí.

El espíritu de fuego le sonrió comprensivo hecho que lo calmó bastante, ya no se sentía prisionero de los dragones de fuego pero siempre les resultó incomprensibles por lo tanto los trataba con recelo. 

Ahora por primera vez podía bajar la guardia frente a ellos, ese espíritu le había transmitido esa sensación con la mirada. Evidentemente que se trataba de alguien muy poderoso aunque su apariencia demostrase lo contrario.

Ias se acercó a la joya sin despegar la mirada en el espíritu presente quien le transmitía seguridad total, en su cabeza resonaron sus palabras:

“No te sientas intimidado por mi, príncipe Ias, eres quien debe sujetar esta joya y unirla a la que el otro príncipe trae consigo”.

Cuando estuvo junto a la joya pudo sentir el calor recorrerle todo el cuerpo, la miró hipnotizado.

Príncipe contemplaba la escena expectante ya que deseaba acabar pronto aquella misión con éxito pero no podía terminar de sentirse seguro en el territorio enemigo, al menos de momento. Cruzaba los dedos esperando que todo tenga un buen final.

Ariel miró al espíritu con recelo mientras fruncía el ceño, no le gustaba nada la forma en que lo miraba como sabiendo quién era él y qué estaba haciendo allí realmente. Parecía saber incluso qué sucedía con su ser interior, le estaba leyendo su misma alma y no le gustaba nada.

Comenzó a sudar y respirar entrecortado, tenía que ocultar sus sentimientos y pensamientos más profundos pero ¿cómo? Solo esperaba que todo eso acabe pronto y así poder volver a su dimensión para proseguir la búsqueda del poder que lo fortalecería solo a él.

El espíritu los observó con detenimiento a cada uno de los recién llegados, sabía perfectamente que llegarían y en qué condición lo harían como lo supo el otro espíritu, el que habitaba en el palacio oscuro, ahora conocido como palacio azul.

Ambos los habían esperado durante tanto tiempo que ahora estaban simplemente fascinados con ellos.

Instantes después volvió su atención a Ias quien seguía observando la joya petrificado, con su voz calmada lo sacó de aquel hipnotismo.

— Debes sujetar la joya con ambas manos muchacho — le dijo — Luego tendrás que unirla a la joya del agua de tu compañero.

El otro príncipe sacó la joya del agua y se acercó a Ias aguardando el siguiente movimiento, el príncipe dragón de fuego sujetó la joya roja y la levantó de donde yacía.

Capítulos
1 ARIEL PARTE UNO
2 ARIEL PARTE DOS
3 ARIEL PARTE TRES
4 ARIEL PARTE CUATRO
5 ARIEL PARTE CINCO
6 ARIEL PARTE SEIS
7 ARIEL PARTE SIETE
8 ARIEL PARTE OCHO
9 ARIEL PARTE NUEVE
10 ARIEL PARTE DIEZ
11 ARIEL PARTE ONCE
12 ARIEL PARTE DOCE
13 ARIEL PARTE TRECE
14 ARIEL PARTE CATORCE
15 ARIEL PARTE QUINCE
16 ARIEL PARTE DIESCISEIS
17 ARIEL PARTE DIESCISIETE
18 ARIEL PARTE DIESCIOCHO
19 ARIEL PARTE DIESCINUEVE
20 ARIEL PARTE VEINTE
21 ARIEL PARTE VEINTIÚNO
22 ARIEL PARTE VEINTIDOS
23 ARIEL PARTE VEINTITRÉS
24 ARIEL PARTE VEINTICUATRO
25 ARIEL PARTE VEINTICINCO
26 ARIEL PARTE VEINTISEIS
27 ARIEL PARTE VEINTISIETE
28 ARIEL PARTE VEINTIOCHO
29 ARIEL PARTE VEINTINUEVE
30 ARIEL PARTE TREINTA
31 ARIEL PARTE TREINTA Y UNO
32 ARIEL PARTE TREINTA Y DOS
33 URIEL PARTE TREINTA Y TRES
34 URIEL PARTE TREINTA Y CUATRO
35 URIEL PARTE TREINTA Y CINCO
36 URIEL PARTE TREINTA Y SEIS
37 URIEL PARTE TREINTA Y SIETE
38 URIEL PARTE TREINTA Y OCHO
39 URIEL PARTE TREINTA Y NUEVE
40 URIEL PARTE CUARENTA
41 URIEL PARTE CUARENTA Y UNO
42 URIEL PARTE CUARENTA Y DOS
43 URIEL PARTE CUARENTA Y TRES
44 URIEL PARTE CUARENTA Y CUATRO
45 URIEL PARTE CUARENTA Y CINCO
46 URIEL PARTE CUARENTA Y SEIS
47 URIEL PARTE CUARENTA Y SIETE
48 URIEL PARTE CUARENTA Y OCHO
49 URIEL PARTE CUARENTA Y NUEVE
50 REENCUENTRO, PARTE UNO
51 REENCUENTRO, PARTE DOS
52 REENCUENTRO, PARTE TRES
53 REENCUENTRO, PARTE CUATRO
54 REENCUENTRO, PARTE CINCO
55 REENCUENTRO, PARTE SEIS
Capítulos

Updated 55 Episodes

1
ARIEL PARTE UNO
2
ARIEL PARTE DOS
3
ARIEL PARTE TRES
4
ARIEL PARTE CUATRO
5
ARIEL PARTE CINCO
6
ARIEL PARTE SEIS
7
ARIEL PARTE SIETE
8
ARIEL PARTE OCHO
9
ARIEL PARTE NUEVE
10
ARIEL PARTE DIEZ
11
ARIEL PARTE ONCE
12
ARIEL PARTE DOCE
13
ARIEL PARTE TRECE
14
ARIEL PARTE CATORCE
15
ARIEL PARTE QUINCE
16
ARIEL PARTE DIESCISEIS
17
ARIEL PARTE DIESCISIETE
18
ARIEL PARTE DIESCIOCHO
19
ARIEL PARTE DIESCINUEVE
20
ARIEL PARTE VEINTE
21
ARIEL PARTE VEINTIÚNO
22
ARIEL PARTE VEINTIDOS
23
ARIEL PARTE VEINTITRÉS
24
ARIEL PARTE VEINTICUATRO
25
ARIEL PARTE VEINTICINCO
26
ARIEL PARTE VEINTISEIS
27
ARIEL PARTE VEINTISIETE
28
ARIEL PARTE VEINTIOCHO
29
ARIEL PARTE VEINTINUEVE
30
ARIEL PARTE TREINTA
31
ARIEL PARTE TREINTA Y UNO
32
ARIEL PARTE TREINTA Y DOS
33
URIEL PARTE TREINTA Y TRES
34
URIEL PARTE TREINTA Y CUATRO
35
URIEL PARTE TREINTA Y CINCO
36
URIEL PARTE TREINTA Y SEIS
37
URIEL PARTE TREINTA Y SIETE
38
URIEL PARTE TREINTA Y OCHO
39
URIEL PARTE TREINTA Y NUEVE
40
URIEL PARTE CUARENTA
41
URIEL PARTE CUARENTA Y UNO
42
URIEL PARTE CUARENTA Y DOS
43
URIEL PARTE CUARENTA Y TRES
44
URIEL PARTE CUARENTA Y CUATRO
45
URIEL PARTE CUARENTA Y CINCO
46
URIEL PARTE CUARENTA Y SEIS
47
URIEL PARTE CUARENTA Y SIETE
48
URIEL PARTE CUARENTA Y OCHO
49
URIEL PARTE CUARENTA Y NUEVE
50
REENCUENTRO, PARTE UNO
51
REENCUENTRO, PARTE DOS
52
REENCUENTRO, PARTE TRES
53
REENCUENTRO, PARTE CUATRO
54
REENCUENTRO, PARTE CINCO
55
REENCUENTRO, PARTE SEIS

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play