Capítulo 9

Paul se dirigió a casa del capitán. Hace un tiempo que tenía cierta espinita y quería sacársela antes de ir a trabajar. 

—Muy bien capitán ¿Que rayos pasa? Y exijo la verdad. 

—Paul sabes que no puedo decirte. Sobre todo por que estas envuelto en la investigación. 

—¿¡Me están investigando!?. 

—Si a ti y a Elliot ya sabes el protocolo, no es nada nuevo. Tengan cuidado se metieron con gente peligrosa en ese bosque, aún no estamos seguros pero creemos que enviarán por uno o ambos de ustedes por así decirlo. 

—Maldición, esto es una mierda.

—Paul ¿Cuando vas a decirle a Elliot sobre ese asunto? Con todo esto tal vez se sepa. Sólo digo. 

—No lo sé capitán. La verdad no me importa, ya estoy bien sólo siento molestias en muy raras ocasiones.

—Eso es extraño, tu compañero te puso una bala en el pulmón y tú actúas como si nada. Si mi compañero casi me matara, yo estaría furioso con él aunque no lo hubiera hecho a propósito. Perder la vida no es juego para nadie.

—No estoy muerto. 

—No, pero casi, si Elliot hubiera apuntado 5 centímetros a la izquierda estarías muerto. Eso no es para tomárselo a la ligera. 

—¿¡Fui yo!? Casi te mato idiota, dijiste que no era mi culpa ¿¡Cuando demonios pensabas decírmelo!? —Gritaba Elliot furioso, había escuchado toda la conversación. 

—Ven, vámonos hablaremos durante el camino, es demasiado temprano aún para tantas maldiciones. 

—¡No lleguen tarde! —Gritó el capitán pero ellos ya se habían ido.

—¿Porque no me dijiste? —Elliot interrogó ya más tranquilo en el auto, aún se escuchaba herido.

—No quería que te sintieras culpable verás yo pues... amh, cielos pues... verás… no sé cómo decirlo.

—¿Decir que? ¿Vas a terminar conmigo? Viéndolo bien no puedes terminar algo que no existe —reflexionó.  

—Ya que aquí voy, no sabes lo nervioso que estoy pero te lo diré. Tu me gustas ¿De acuerdo? Me gustas desde qué llegaste, aunque al principio creo que no lo note y cuando las señales empezaron a ser más claras me negué a aceptarlo, ahora se porque sentí lo que sentí cuando te conocí. 

—¿Qué sentiste? —Elliot estaba nervioso como nunca antes.

—La idea de tener un compañero después de tanto tiempo me pareció una estupidez iba dispuesto a dar lucha de ser necesario para conservar mi independencia. Pero cuando te vi por primera vez tus ojos me parecieron lo más hermoso que existía, luego vi tu sonrisa y eso me sacó de mi error en definitiva tu sonrisa era lo más hermoso del mundo —confesó mirando la carretera—. Yo nunca antes estuve enamorado así que no sabía que me pasaba ya que si bien yo estuve casado, mi relación con Lucy no fue así. Ella y yo nos casamos a los 16 solo unos días después de que Junior nació, sólo nos casamos por el yo la quería mucho, la respetaba y ella a mí. Fuimos muy felices incluso creí que eso era el amor pero aunque si era amor. Un amor puro y sincero, el amor que viene con la amistad y todo eso la verdad es que no era amor de esta clase, en ese momento yo no supe qué hacer con lo que me provocadas. Ya sabes como soy me lo negué a mi mismo todo el tiempo que me fue posible, te molesté lo más que pude quería que te artaras y te fueras pero no lo hiciste. 

—A veces soy terco. 

—Lo eres y estoy agradecido por eso. En fin, el día del tiroteó nos recibieron a balazos yo estaba muy preocupado de que te hirieran. Es estúpido pero estaba más preocupado por ti que por mi y no era la preocupación normal por un compañero, se que no era el mejor momento para aceptar las cosas pero allí fue que yo lo supe con mayor claridad. Me di cuenta que siempre estuvo allí sólo no lo aceptaba. Era el peor momento para que mi mente se aclarará aunque así allí fue cuando tuve todo claro, así que me puse en tu camino en un intento por ponerte a salvó, eso es algo que no se debe hacer. Tu me disparaste y no te diste cuenta porque yo no quería que lo hicieras ya que en todo lo que pensaba era en sacarte de allí a salvo la idea que te pasará algo me aterro. Cuando desperté en el hospital lo primero que vi fue a ti allí eso me llenó de satisfacción.

—¡Paul!. 

 — Lo siento pero ver tu dolor por mi me hizo feliz, sobra decir que me preocupe cuando te desmayaste pero tenerte medio desnudo a dos metro de mí me incomodaba muchísimo, digamos que era difícil no tener una erección todo el tiempo. Soy terco, así me dije que sólo era por todo el tiempo que llevaba sin tener sexo, sólo quería ir a casa y masturbarme en paz. Eso hasta que la bendita Mauda sugirió que te quedarás en mi casa la odié en ese momento, contigo allí no podría hacer nada pero tu me besaste y fue el cielo y el infierno al mismo tiempo aún hoy lo sigue siendo. Eso, eso es todo lo que soy capaz de expresarme —término diciendo sin despegar la mirada del camino. 

—Te amo Paul, se que no lo dirás pero yo estoy muy seguro que también me quieres aunque sea un poco —por primera vez tuvo el valor de poner su mano sobre la de Paul que iba conduciendo, él se tensó pero no la movió. 

—Lamento no podér ofrecerte algo mejor.

—Ésta bien, yo no voy a exigirte nada que no quieras darme. Como te dije yo soy como un perro me conformaré con lo que quieras darme para mi estar contigo como tu compañero es más que suficiente, ya que en privado siempre serás mío y yo tuyo así que esta bien.

—Estuve pensado que tal vez quieras mudarte de casa del capitán y ya que yo tengo un cuarto vacío podría alquilarlo. Así no se vería extraño que duermas en mi casa todas las noches.

—¿Me quieres en tu cama todas las noches? —lo molesto con una sonrisa juguetona. 

—Por supuesto, yo he vivido mucho tiempo solo, me gustaría algo de compañía y un poco de calor en mi cama. 

—Esa es una gran idea —se emocionó mirando la carretera —poder vivir con Paul lo hacía muy feliz, no debía esperar mucho siempre se lo recordaba a sí mismo. 

—No te vez muy emocionado, si quieres quedarte con el capitán lo entiendo. En realidad a mi me da lo mismo, por mas que yo quiera tenerte todo el tiempo tu comodidad también me importa.   

—No, no es eso —se justificó—. Es sólo que recordé que debo ir a casa a arreglar mis asuntos. 

—¿Cuando te vas?. 

—En tres días, no estoy seguro de cuánto me tomé así que no se cuando regrese. 

—Eso está bien. Yo me voy en dos días a casa de mi hijo el quiere que esté allí una semana antes de la boda. 

—Voy a extrañarte muchísimo.

—Yo también y lo sabés —confesó parando el auto para poder besar a gusto a su precioso Elliot.

***

 Takada se dirigió a la oficina asignada específicamente a la parte técnica de su equipo que constaba Nat’Li y el asistente de esta Bob. 

—Nat’Li investiga todo sobre los apartamentos en qué nos hospedamos por favor. 

—Si claro —la chica rápidamente se puso a trabajar por la información requerida en cuestión de minutos la tuvo lista—. El lugar antes era de una corporación, me llevó algo de tiempo ya que esconden muy bien sus huellas pero lo rastreó hasta empresas REED RED esta misma es sólo una fachada ya que lo que hacen es secreto puesto que trabajan en su mayoría para el gobierno central —informó la chica.

—¿Algo más?. 

—Si, el fundador fue Steat Reed padre de... Loud Reed nuestro jefe —informó sorprendida. 

—Steat Reed, Reed Steat, Loud Reed. Soy un idiota, debí notarlo antes —gruño enfadado. 

—Ah, ¿Teniente? Lo llama el jefe Loud —Bob avisó señalando la pantalla improvisada en la pared.  

Más populares

Comments

Elizabeth Moreno

Elizabeth Moreno

te enamoraste desde que lo viste paul y takada digue investigando a reed

2024-04-20

0

Ellizabett car :0

Ellizabett car :0

al fin acepta sus sentimientos y algo mee dice que esto se pondrá feo

2024-01-08

3

Mary (Lupis❤️🌹)

Mary (Lupis❤️🌹)

woow acepto sus sentimientos

2023-12-22

1

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play