¿Qué sucede cuando la mafia y el romance se juntan? Bastian es un bravucón de corazón frío que esconde un deseo particular: quiere amar de verdad. La vida le sonríe cuando Nadir aparece en la preparatoria como el estudiante nuevo y ambos se embarcarán en una relación bastante curiosa.
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9
—Yo espero que puedas postularte al club —dice Oliver.
—Ya lo veremos.
—¿Tienes alguna pregunta?
—¿Es cierto que Alma Romance y Mafia Gris son enemigos a muerte?
Mi pregunta lo pone pensativo, como si yo lo hubiese puesto indeciso sobre a lo que debe responder.
—No es que seamos enemigos a muerte, pero, si existe rivalidad entre ellos y nosotros.
—¿Por qué?
—Hay alumnos que creen que el mundo tiene la oportunidad de mejorar si hay comunicación y expresión —se queda callado, me mira por algunos segundos y sonríe tenue—. Hay otros alumnos que creen que el dinero lo es todo en el mundo y que solo los niños ricos tienen el derecho a tener el control.
—¿No toleras a Bastian?
—Es un sujeto indiferente para mí. ¿Lo conoces?
—Sí.
—Es mejor que te mantengas lejos de él.
—¿Es peligroso?
—Siempre está involucrado en conflictos con los demás estudiantes y dinero.
—¿Pero es peligroso?
—Sí.
—¿Y por qué siendo un peligro, él es el jefe del club Mafia Gris en esta escuela? Eso no tiene mucho sentido.
—Como te dije antes, hay personas que creen que el dinero lo es todo en esta vida y saben cómo utilizarlo para tener el control.
...💘💘💘...
En el estacionamiento de la preparatoria hay varios remolques, uno de ellos es una dulcería. Armando está a mi lado, estoy terminando de prepararme un snack de gomitas enchiladas.
—Julia y tú hacen buen pareja —le digo sin pena.
—¡Como crees!
—Se nota que ella te gusta.
Armando no tiene escapatoria, es una verdad que su lenguaje corporal evidencia cada vez que ella está con nosotros.
—Bueno, si me gusta.
—¡Yo sabía!
—¿Crees que ella esté consiente?
—A ella también le gustas. Los he observado y hay química entre ustedes.
Él se ríe. Con el tenedor capturo un gusano enchilado y lo introduzco en mi boca. ¡Es delicioso!
—¿A ti te gusta alguien? —Su pregunta me hace pensar poquito.
—No. La verdad no me gusta nadie.
Mi celular empieza a timbrar. Es el gánster gris.
—¿Hola?
—¿Volviste a casa? —Su voz es firme y esta vez suena más grave.
—¿Tú volviste a casa?
—¿Por qué evades mi pregunta?
—Sabes cómo soy, ¿no?
Armando me mira con curiosidad.
—Estoy a punto de irme, te llevo a casa.
—Vale, estoy yendo a tu auto.
Finaliza la llamada.
—¿Te vas? —Armando tiene curiosidad por que le cuente.
—El gánster es mi favorito en este momento —le digo de forma causal.
—¿Tu favorito?
—Mi chofer personal.
—¡Y tú vecino!
Salgo de la dulcería con mi snack en la mano y en la boca degustando una gomita enchilada. ¡Delicioso!
Bastian espera en su auto, esta a unos metros de distancia y cuando me mira, se me ocurre sonreírle.
—¿Vas a casa? —Oliver aparece de repente, se interpone entre mi campo de visión.
—Sí.
—Sí gustas, puedo llevarte.
—Que amable, pero ya tengo quien me lleve. ¡Gracias por tu oferta!
—No agradezcas, lo hago con gusto.
—¿Quieres convencerme para unirme a tu club?
—¡La verdad sí!
—¿Quieres un poco? —Le ofrezco de mi snack.
Sus ojos miel parecen derretirse a causa de la luz de sol.
—Bueno, está bien.
Oliver se acerca a mí, con el tenedor le ofrezco un gusano enchilado, lo alzo del plato para que él pueda agarrarlo. ¡Pero Bastian me arrebata el tenedor y se lo lleva a la boca!
