Era el día antes del apocalipsis.
“¡Jajajaja!”, de repente se echó a reír. Mientras reía, las lágrimas brotaron de sus ojos. Lloró y rió mientras derramaba la ira y el dolor de su corazón.
Habían pasado ocho años. Había estado luchando por sobrevivir. .... Como le debía la vida a Andrew, la culpa y la deuda que sentía la hacían aferrarse a lo último que él le había dado, ella había prometido que si tenia la oportunidad le pagaría este hombre todo lo que este cuerpo le debía.
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Capítulo 9. Lila Merr.
"¡Alire Taller!" Una voz exclamó.
—Alire, es genial que todavía estés viva. — corrió y la tomó del brazo.
Como el lugar era demasiado pequeño, Alire no pudo esquivarla.
Si no se equivocaba, Liner Blan estaba agarrando la mano de Lucio Lond en ese momento. Parecía que los dos habían sido pareja antes del apocalipsis.
"Alire, estaba muy preocupado por ti. Estaba a punto de ir a buscarte", dijo Lucio con cariño.
Alire se sintió extrañada y frunció el ceño. “¿Qué están haciendo estos dos?”, pensó.
En ese momento se pudo escuchar una transmisión de radio.
“Las bases en las ciudades M, S, H y A ya están construidas. El gobierno ha lanzado una operación de rescate en las inmediaciones, pero el personal es limitado. Esperamos que todos puedan dirigirse a estas bases por sus propios medios lo antes posible”
Lucio preguntó rápidamente: “Alire, la familia Kill ya ha construido una base en la ciudad A. ¿Enviaron a alguien para que te recogiera?”
Liner Blan también la miró expectante.
Sólo entonces Alire comprendió lo que estaban planeando. Por otro lado, cuando Alex se enteró de la familia kill en la Ciudad A, miró a Alire diferente.
—No. Después de todo, no soy miembro de la familia Kill. —Alire negó con la cabeza y destrozó sus fantasías como podría ayudarlos si aun estaba esperando su venganza.
Las expresiones de y Liner Blan se endurecieron mientras la incredulidad cruzaba sus rostros. Liner Blan inmediatamente gritó en estado de shock: "¿Cómo es eso posible? ¿Acaso el jefe de la familia Kill no te ama mucho?"
Alire se burló. “Aun así, ¿qué te hace pensar que te llevaré conmigo?”
Las expresiones de Liner Blan y Lucio se oscurecieron. Ninguno de los dos habló más y no parecían tan cálidos como antes.
No hace falta decir que Alire no los tomó en serio. Llevó a la chica en sus brazos adentro. La madre de Alex la detuvo y dijo en un tono poco amistoso: "¿Quién te dejó entrar? Mi hijo es amable, pero mi familia ya no puede acomodar a tanta gente. Además, no tenemos comida para alimentar a unas pocas personas ociosas".
Alex salió a tiempo y dijo: "Mamá, deja que la señorita se quede aquí. No es fácil sobrevivir en la era apocalíptica. Si puedes ayudarla, hazlo".
La señora parecía ser muy obediente con su hijo. Al oír sus palabras, dejó de hablar, pero las demás personas en la habitación no estaban contentas.
“Pueden entrar, pero esta chica herida no. ¡Quién sabe si se convertirá en un zombi!”
—Exactamente. Exactamente. Échenlos a patadas.
Alex se ajustó las gafas y dijo: “Quienes no quieran quedarse aquí pueden irse. La señorita Taller es mi amiga”.
Obviamente estaba demostrando su buena voluntad, por lo que Alire naturalmente no lo rechazó. Ella asintió y dijo: "Solo está herida. No se convertirá en un zombi. Sigue siendo un persona con super poderes "
¡Con super poderes ! Los presentes se quedaron atónitos. Por la transmisión, ya sabían que algunas personas adquirirían super poderes , escupirían fuego y conjurarían agua. Sin embargo, no lo habían visto con sus propios ojos. Al instante comenzaron a mirar a la chica de manera diferente.
En sus corazones, deificaron a aquellos con super poderes y creyeron que la chica no se convertiría en un zombi.
En realidad, existía una cierta posibilidad de que aquellos con super poderes también pudieran infectarse, pero era mucho menor que la de la gente común. Alire no lo explicó. Tenía la sensación de que el manantial espiritual podría suprimir el virus zombi.
Alguien murmuró: "¿Quién sabe si es verdad?"
Sin embargo, ante las palabras de Alex, solo susurró la frase y no la ahuyentó.
Alex despejó una pequeña habitación para que Alire y la chica se recuperara.
Alire asintió en señal de agradecimiento.
Alex sonrió gentilmente y dijo: “Fuimos compañera de clase en la secundaria y luego nos topamos en reuniones. No hay necesidad de ser tan distante conmigo”.
Con una expresión fría, Alire dijo: “Mi amiga todavía necesita tratamiento. Me temo que no tendré tiempo para hablar contigo”.
Alex era una persona inteligente. Asintió cortésmente y salió de la habitación.
Alire colocó la chica en la cama, luciendo terriblemente pálida. Su ropa deportiva negra estaba empapada en sangre. Alire metió la mano en la mochila y sacó un botiquín de primeros auxilios de su espacio. No quería exponer su identidad como una persona con poderes espaciales. "Es mejor ser cautelosa cuando estoy afuera", pensó.
La ropa y la herida en su espalda ya estaban pegadas. Mientras Alire fruncía el ceño, apretó los dientes y le rasgó la ropa.
Pensó que era mejor hacer el trabajo rápidamente o de lo contrario solo prolongaría sus lesiones.
Después de que la ropa se rasgó, la herida en su espalda quedó completamente expuesta. Era muy profunda y le habían quitado una parte de la carne. Toda la herida era de color marrón oscuro y la sangre que fluía era negra. Esto era una señal de que había sido infectado por el virus zombi. Sin embargo, no había salido mucha sangre de la herida y la sangre había manchado solo la parte de su ropa que estaba rasgada.
Colocó la mano sobre su herida. El manantial espiritual brotó de su mano, pero no descendió, sino que fue absorbido por la herida de su espalda.
Este fenómeno también confirmó sus pensamientos. Alire estaba encantada. Después de que la herida pasó de marrón oscuro a rojo, bajó la mano y le dio otro trago del agua de manantial espiritual. Su tez mejoró visiblemente.
Si alguien más hubiera presenciado esta escena, las consecuencias habrían sido impensables. Incluso ocho años después del apocalipsis, los científicos de todo el mundo seguían trabajando arduamente para desentrañar el secreto de los anticuerpos zombi, y más aún ahora. Si alguien lo descubriera, probablemente enviarían a Alire para que la sometieran a experimentos.
Cayó la noche. Alire recordó qué día era hoy y miró a la chica, que estaba acostado en la cama. Como su tez había mejorado mucho, salió por la puerta.
En comparación con su pánico, esta actitud tranquila y serena los molestó mucho. No hace falta decir que comenzaron a criticarla.
Liner quien se había cansado de fingir dijo: “Es una señorita muy presumida. No solo ocupó una habitación cuando recién llegó, sino que no hizo nada y solo esperó para comer gratis”.
“Alire, ¿qué derecho tienes a ser tan arrogante ahora? Es el fin del mundo ahora. Tal vez la familia Kill esté acabada. ¿De qué más tienes que estar orgulloso?”.
“Ahora todos somos iguales. No, no te puedes comparar conmigo. Eres solo una jovencita que solo puede llorar desesperadamente al final del mundo”.
Sus palabras desmintieron todo el resentimiento que había en su corazón.
Cuando levantó la vista, Alire ya estaba frente a ella. Dio un paso atrás con miedo, pero Alire la agarró del cuello.
Alire dijo: "Incluso si no me queda nada, aún puedo matarte fácilmente”.
Alire no la mato sería muy aburrido. Iba a hacerla sufrir de la misma manera que ella había muerto en su vida anterior.
Después de eso Alire de dirigió a la ventana sin prestar atención a la multitud, el cielo estaba nublado como si fuera a llover habían pasado tres días, mañana lloverá todo el día lluvia ácida, después los Zombies evolucionarán.
Lucio intento atacar a Alire pero Alex lo detuvo al parecer nadie aquí era rival para Alire.
En medio de la noche la chica despertó.
Alire preguntó con preocupación: "Chica, ¿cómo están tus heridas?"
"Estoy bien. Es solo que me pica un poco la espalda".
Alire se sintió aliviada. “La picazón significa que la herida se está curando. No te preocupes”.
“¿Cuál es tu nombre?”
La chica observó a la hermosa mujer que le hablaba pensó que estaría muerta pero esta chica la salvo.
“Mi nombre es Lili Merr, gracias por salvarme te debo la vida”.