Aragon Fayna conoce en su nuevo año de estudiante a Dragon Edan, un arrogante, frio y ególatra que solo vela por si mismo, sin importarle nadie mas, hasta que ella se puso bajo su mirada una joven que se mudo a ese lugar frio al no poder vivir en un lugar calido al tener la temperatura corporal mas alta de la normal.
NovelToon tiene autorización de Lily Benitez para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 9- No eres un fenomeno
*MORENA Y CLARA
-Debemos salir de aquí. Le susurra Morena a Clara.
-¿Cómo?... Están armados. Le dice Clara.
-¿Crees que nuestra madre regrese?... No lo hará ... Siempre velo por ella... Nosotras fuimos algo conveniente... Solo nos uso... No los escuchaste cuando hablaron. Le dice Morena.
-No... Estaba ocupada asustada de que nos maten. Le dice Clara.
-Por favor Clara... No le habrás creído que se repuso por nosotras... Si al tiempo se volvió a unir al señor Aragón. Le dice Morena que era la que más pensaba de las dos.
-A mi me agrada el señor Aragón. Murmura entre sollozos Clara.
-A mi también ... Y si nos quedamos le harán daño... Y a Fay... No me gusta lo que dijeron de hacerle a Fay. Le dice.
-Crei que no nos agradaba. Le comenta Clara.
-Nosotras nada más podemos fastidiarla... No dejaré que otro lo haga. Le responde Morena.
-Si... Nosotras nada más podemos molestar a nuestra hermanastra... En los libros está escrito... Pero debemos defenderla como familia. Reflexiona Clara.
-QUE TANTO MURMURAN. Les llama la atención el que las cuidaba.
-Nos sentimos muy acaloradas. Dice Morena con voz sensual.
-Si ... Hace mucho calor aquí. Le sigue el juego Clara que mira a su hermana que con un gesto en la mirada sabe que hacer.
Morena se desprende la campera de manera suave al tiempo que lo hace Clara.
El guardia queda a la expectativa del espectáculo que se le presentaba.
"El jefe dijo que no podía tocarlas, pero no dijo que no podía ver", pensó parándose firme a mirarlas.
***
-Señor perdimos contacto con los hombres. Le informa uno de sus subordinados.
-MALDICION... NO SE QUEDEN AHI PARADOS... LOCALICEN DONDE ESTAN. Ordeno furioso, se incorporo para ir a ver a las mellizas al llegar ve que el guardia estaba desvanecido.
-IDIOTA ... LEVANTATE ... ¿DONDE ESTAN?. Le reprocha pateandolo.
El guardia aún mareado por el golpe que recibió en la cabeza no logro responder.
-DE PRISA... BUSQUEN A LAS MELLIZAS. Grito furioso a sus hombres.
***
-En está zona no hay señal. Le comunica el copiloto del que conducía el vehículo dónde tenían a Fay junto a Edan.
-No importa... La tenemos. Le dijo sin preocupación.
-Que haremos con él. Le pregunta.
-Que crees... No debe quedar testigos. Le responde.
En eso el hombres gira para ver a Edan y eliminarlo pero ya no está, solo ve a Fay recostada por el asiento.
-Se nos escapó. Dice en estado de alerta.
-¿Qué?... Imposible. Le dice el conductor frenando de golpe haciendo que el de atrás por esquivarlo se estrelle saliendo del camino.
Edan se había vuelto invisible a los ojos de ellos con su poder de Dragón y sonreía al saber que podía hacer eso. Cuando bajaron a abrir la puerta para constatar como salió aprovecho a dejarlos inconscientes y se dirigió a detener a los de adelante.
El conductor del vehículo de adelante vio algo enorme al frente que lo hizo salir de la carretera estrellándose provocando que se incendie con sus ocupantes. Lo mismo sucedió con los el otro vehículo de atrás.
Fay debido a la fuerte jaqueca que sentía, al no haber tomado ningún medicamento, seguia desvanecida en el asiento, no percatandose de lo que sucedía a su alrededor.
Edan la extrajo del interior del vehículo e incendio el mismo, alejándose del lugar llevando a Fay entre sus garras con cuidado. Ahora que descubrió que podía ser invisible mantenia ese estado para que ella no lo vea como era realmente.
En un momento ella sintió la brisa acariciando su rostro, abrió apenas los ojos viendo el camino abajo y las casas a lo lejos. Le daba vértigo el movimiento de ascender y descender.
"Estoy volando", pensó.
Miro a todos lados sin entender que pasaba.
"Debo estar soñando", se dijo volviendo a cerrar los ojos.
Al despertar se encontró entre unas sabanas cubierta.
-Despertaste. Le dijo Edan al ver que abrió los ojos.
-Tuve un sueño extraño... Cómo si volará. Le murmura Fay.
-Si... Qué raro... Llamaré a mi padre. Le dice Edan incorporándose de donde estaba sentado.
-Papá... Ya despertó. Le avisa Edan suspirando pesado.
-No le dijiste lo que viste de ella. Le consulta.
-No... No sé lo dije. Le responde Edan.
-Asi que ella irradia calor al punto de quemar. Reflexiona el señor Dragan.
-No quise decir nada... Debido a... Por todo lo que pasó. Le dice Edan.
-Bien... Pero igual debe saber. Le dice el señor Dragan.
Se dirigieron a verla.
-¿Cómo logramos librarnos de ellos? Le pregunta Fay ni bien ve a Edan ingresar.
-Tú te desvaneciste porque te dolía la cabeza... Y el vehículo de adelante perdió dirección haciendo que los demás también salgan de la carretera y ahí aproveche a salir contigo, mientras esos tipos estaban afectados por el incidente. Le comenta Edan.
-Fuiste muy valiente... Gracias. Le dice Fay.
El padre de Edan le miró de soslayo suspirando por lo que relató.
"Si y se ve que fallo algo en ellos que se incendiaron", pensó de manera irónica el señor Dragan.
-Fay... ¿Recuerdas lo sucedido?. Le pregunta el señor Dragan a Fay.
-Mi padre. Dice ella alterada.
-No te preocupes... Le avisamos que estás con nosotros. Le dice Edan para que se tranquilice.
-Fayna... Mírame... Se que todo debe ser muy traumático... Pero debes saber... Qué cuando te defendíste de Luisa... Le quemaste las muñecas. Le informa el señor Dragan al ver que ella estaba alterada. -¿Sabías que podías hacer eso?. Le consulta.
-¡¿QUÉ?!... NO... ¿LA QUEME?. Le pregunta incrédula.
-Si... Cuando te defendíste... Al sujetarla de las muñecas. Le dice el señor Dragan.
-No lo puedo creer... La verdad... Cuando mi temperatura se elevaba más... Mi padre me inyectaba para que se me pase ... Nunca me pasó eso... Debe ser porque no consumí nada de los medicamentos... Debido a lo que pasó ... Y no me inyectaron nada. Comenta angustiada Fay sollozando al respecto.
-No te pongas así. Dice con pena Edan sujetándola la mano.
-Eso quiere decir... Qué me van a querer enviar lejos... Me verán como una amenaza... Van a querer encerrarme... Ya antes le habían dicho a mi padre ... Y él jamás accedió asegurando que se podía curar mi padecimiento... Ya no quiero volver a esas continúas pruebas. Exhala angustiada.
-No se lo diremos a nadie... Eso quedará entre nosotros... No creemos que seas una amenaza ... Solo te defendiste. Le dice Edan.
-De seguro ella hablara. Dice Fay preocupada, al referirse a su madrastra.
-Nadie le tomara en cuenta... Debido a que colaboro para tu secuestro. Le comenta el señor Dragan.
-Soy un fenómeno... Jamás nadie va a querer estar conmigo... Ser mi amigo. Lloraba Fay angustiada.
-Fay... No eres un fenómeno... No dejes que te caractericen de ese modo... Eres única. La consuela Edan.
En ese momento el celular de ella suena y ve que es una llamada de su padre.
📱Hola pa. Responde con la voz ahogada.
📱Mi niña... Qué bueno que estás bien... No te preocupes ... Enseguida voy a buscarte... Estaremos en la base... Ya esta todo arreglado. Le avisa su padre.
📱Me tendrás aislada de nuevo. Le consulta Fay.
📱No... No estarás aislada... El doctor tiene una nueva medicina que te sanará... Serás una persona normal. Le dice su padre.
📱Ya no quiero más medicinas nuevas... Me afectan... La última me dejó en cama. Le comenta Fay.
📱Te prometo que será la última. Escucho que dijo su padre.
Fay sin responderle corta la llamada incorporándose y sale de la habitación.
-Fay espera. Le grita Edan.
-Ve con ella. Le indica su padre.
-Ya decidí... Me iré... Ya no seguiré aquí donde solo sea sometida a pruebas que me descomponen y estoy mal por días. Le dice a Edan que la sigue.
-Sabes que esos hombres te quieren capturar... No debes andar sola. Le dice Edan.
-He leído de un lugar... Será inhóspito... Pero eso no me afecta... Aprenderé a sobrevivir. Le dice Fay.
-No sabes lo que dices. Le dice Edan.
-Tú no me entiendes... No pasas por lo que estoy pasando. Le responde Fay.
-Aunque no lo creas... Te entiendo ... Se exactamente lo que sientes... Crees que es una maldición... Te preguntas ¿por qué te pasa a ti? ...¿ Por qué no puedes ser normal?... Pero lo normal es aburrido... Algo que alguien te impuso creer que es normal... Tal vez tu particularidad sea normal en algún universo ... Tan solo que no estás en tu hogar ... Pero estar donde todos son lo mismo puede resultar aburrido... Tal vez sea mas genial ser diferente. Le dice Edan.
-¿Qué me quieres decir?. Le pregunta desconcertada.
Él suspira hondo, le toma la mano llevándola con él.
-Subete. Le indica su espalda.
-Para que quieres que suba. Le pregunta.
-Solo hazlo. Le indica, ella suspiro y se le trepó en la espalda.
-No te sueltes. Le indico serio.
Edan inhaló y exhaló ante la sorpresa de Fay se elevó transformándose en un dragón que se puso invisible elevándose hacia lo alto, ella se prendió asustada cerrando los ojos.
-Abre los ojos. Le indica Edan.
-Esto no es real. Le dice Fay.
-Ahora entiendes... Lo tuyo no se compara a lo que soy. Le dice Edan.
Desciende volviendo a ser humano, Fay le entrega la mochila dándose la vuelta para que se cambié.
-Debes tener presupuesto en vestimenta. Le comento Fay.
-Te mostré lo que era y solo piensas en eso. Le dice Edan con una mueca.
- Una cosa por años me estuvo martirizando... Y solo opté por negarlo. Comenta Fay.
-¿Qué?. Le pregunta Edan.
-Si fui la que provocó el incendio donde mi madre salió afectada y produjo su deceso. Le comenta con la voz ahogada.
-Tu no lo hiciste... Fueron esos hombres que te quisieron llevar... Escuché cuando hablaban. Le dice Edan.
-En serio?... O solo lo dices para consolarme. Le consulta Fay.
-Para qué te mentiría. Le responde.
-¿Por qué me revelaste lo que eres?. Le pregunto Fay.
-Tu me ayudaste... Estuviste cuando te necesite a pesar de haber sido pesado contigo. Le comenta Edan.
-No lo recuerdo tan así... Al contrario... Fuiste amable. Le comenta Fay.
-Bueno... Y para que aprecies lo que eres. Le dice Edan.
-Eso si tiene más sentido. Le dice Fay.
-Debes saber controlar tu temperatura... He notado que cuando estás así tranquila... La mantienes. Le dice Edan.
-Porque hace frío aquí. Le responde Fay.
-Se que donde estaba tu padre estaba fresco... Para que puedas estar con él... Y cuando te defendíste de Luisa... Se produjo el aumento de temperatura en tus manos... Qué le dejaron marcadas las muñecas ... Cómo si le cayera agua hervida. Le dice Edan.
-No me había percatado de eso ... Estaba muy enojada ... Qué no preste atención a ello. Reflexiona Fay.
-Piensalo... Y no está de más... Decirte que lo mío no debes revelarlo. Le dice Edan.
-Pierde cuidado... Nunca lo haré... Se lo que se siente que te dejen de lado o te persigan, por lo que uno es sin haberlo pedido. Le responde Fay.
Llegaron a la casa de él y ve que su padre la está esperando junto a otros uniformados.
-Hija . La saluda el señor Aragón abrazándola.
-No quiero someterme a ningún tratamiento. Le dice Fay.
-Esta bien ... Si es lo que quieres... Pero debemos vivir en la base para tu seguridad... Hasta que atrapen a los que te quieren capturar. Le dice su padre.
-Podre seguir yendo a clases. Le pregunta Fay.
-Si ... Por supuesto. Le responde su padre.
-Gracias por su hospitalidad. Le dice Fay.
-Fue un placer. Le responde el señor Dragan.
-Nos vemos en clase. Le dice Edan.
-Nos vemos. Se despide Fay.
-Debo ir a buscar a Francis. Le avisa su padre a Edan.
-Bueno... Yo me quedo. Le avisa dirigiéndose al interior de la casa.
Edan estando en su cuarto escucha que llaman a la puerta y se dirige a atender encontrándose con el señor Aragón.
-¿Se olvidó algo Fay?. Le pregunto Edan.
-¿Qué?... Venía por ella. Le dice.
-Pero si hace diez minutos vino junto a unos oficiales. Le dice Edan
-Eso es imposible ... Mira este es mi identificación ... Tarde porque esperaba que me coloquen una inyección... Cómo tengo adolorido el hombro. Le muestra su brazo bajo el saco atajado por una banda elástica.
En eso a Edan se le vino la imagen del que creyó era el padre de Fay, no traía el brazo así, no lo movía pero no tenía la banda.
-Señor ... Venga... Le muestro el video de seguridad. Le dice Edan nervioso al recordar las camaras de seguridad de su casa que tenían en la sala y en el exterior.
-Ve ahí. Le señala en el monitor.
-No lo puedo creer... Se me parece ... Y están uniformados como si fueran nosotros. Observa nervioso.
Por lo que toma su celular a llamar a su base.
