Quiero El Divorcio

Dahlia se incomodó por todas las miradas que recibía en la mansión y se puso nerviosa, aunque intento disimularlo, Max lo había notado.

Por lo que él habló con una persona mayor, un hombre canoso, algo regordete y con una mirada amable.

Max: señor Andrés, reúna a todas las personas de la mansión

- De inmediato señor.

Max: ¿todo bien Dahlia?

Dahlia: si claro… por supuesto…

Max: necesitamos que esto se sienta real, por algunas semanas, para que tu padre deje de buscarte y para que no crean otras cosas…

Dahlia: bien…

Max la tomó de la mano y Dahlia se sintió extrañamente más tranquila.

Max: aunque sea por unos días tienes que hacer valer el papel de duquesa…

Dahlia: jajaja no creo…

Max: bueno, por este mes eres la duquesa Wilson

Cuando todo el personal se reunió, Max hablo fuerte, seguro y confiado…

Max: ¡quiero que todos sepan, que hoy recibimos en la mansión a la duquesa Dahlia Wilson, mi esposa!

[wow este hombre cuando quiere puede ser intimidante]

De inmediato varios susurros y comentarios, se esparcieron para sorpresa de Dahlia todos eran positivos.

- La duquesa es muy hermosa

- es muy joven

- me alegro por el señor

Max continúo hablando y extendió su mano para que Dahlia se acercará a él.

Max: el mismo respeto que me tienen a mi, deben profesarlo a la duquesa Wilson, ¿alguna duda?

- no señor – respondieron al unísono y finalmente Dahlia botó el aire que no sabía que estaba conteniendo.

Max: señor Andrés muéstrele a Dahlia la habitación, pídale a la modista, al zapatero y a don Mateo que vengan mañana mismo.

- si señor.

Dahlia (susurro): tengo hambre

Max: ¿quieres cenar en la habitación o en los comedores?

Dahlia: en la habitación

Max: bien… voy a la base, cualquier cosa que necesites se la pides al mayordomo.

Dahlia: esta bien… gracias…

Max la miró un momento más, y luego salió en su caballo rumbo a la base militar.

El mayordomo le mostro a Dahlia la habitación, un espacio amplio, lujoso y elegante…

Dahlia: muchas gracias.

- buenas noches duquesa.

Esa noche, después de una abundante cena, Dahlia durmió profundamente. A la mañana siguiente, le llevaron el desayuno temprano.

- Duquesa, en una hora viene la modista y el zapatero y una hora después tiene una reunión con don Mateo.

Dahlia: ¿Quién es don Mateo?

- es el señor que administra las finanzas en el ducado.

Dahlia: entiendo…

[me imagino que será para ver algo de los bienes… no quiero nada de Max, pero lo más probable que, mirando su mansión debe tener mucho dinero, seguramente busca proteger su patrimonio]

La atención con la modista y el zapatero fueron muy entretenidas para Dahlia, converso con ellos, compro algunas cosas, ciertamente, no le gustaban los lujos excesivos, pero la frase “el duque pago por adelanto” y elegir cosas en un delicado catalogo había ayudado a que la primera experiencia como duquesa Wilson resultase bastante agradable.

Después de comer unos deliciosos bocadillos, Dahlia tuvo una reunión con el señor a cargo de las finanzas…

Dahlia: …entonces… ¿esta seguro de todo esto?

- por supuesto duquesa

Dahlia: ¿o sea Max lo sabe?

- asi es, todo esta autorizado por él…

Dahlia: ¿y que se hace con ese “fondo para la duquesa”?

- Generalmente, lo usan para obras de caridad… en la frontera siempre las cosas son difíciles… sobre todo para niños huérfanos o ancianos…

Dahlia: es cierto… los internados son costosos…

- Aquí no hay internados, ni nada parecido…

Dahlia: ¿de verdad?

- Si bien, después de que la reina Freya asumiera en el cargo, muchas cosas mejoraron, para las personas mas desamparadas… pero estas tierras, cuando el duque Wilson llegó, estaban prácticamente en la ruina… por lo que priorizo el trabajo y la comida…

Dahlia: entiendo… entonces… ¿yo podría hacer un internado?

- por supuesto, si quiere puedo contratar a algunas personas para que preparen algunos documentos y propuestas.

Dahlia: bueno lo intentaré… muchas gracias.

Después de un almuerzo en el jardín, Dahlia recibió al mago.

Mago: ¿Cómo esta duquesa?

Dahlia: aun no me acostumbro a todo esto

Mago: aun es pronto…

Dahlia: viene a enseñarme magia.

Mago: asi es… muéstreme que sabe

Dahlia: no mucho, miré, puedo hacer aparecer algunas hojas y las plantas se sacan minutos después.

Mago: mmmm entonces el problema no es de habilidad, sino de fuerza…

Dahlia: ¿Cómo? ¿tengo que hacer ejercicios?

Mago: asi es… no solo debe fortalecer su maná, sino también su cuerpo…

Dahlia: entiendo…

Mago: lo primero que tiene que hacer es visualizar lo que quiere crear, imaginar que con su luz lo hace crecer…

Esa tarde, Dahlia entreno su magia y termino agotada… por lo que se durmió temprano…

Los dos días siguientes continuaron de igual manera, con reuniones sobre el posible internado y en la tarde entrenando su magia… lo que la tenía agotada… no supo nada de Max, hasta la tercera noche en la mansión…

Max: ¿Qué haces en mi habitación?

Dahlia: ¿Qué?

Max: ¿Por qué estas aquí?

Dahlia (bostezando): desde que llegue que duermo aquí, ahora déjame, tengo sueño estoy muy cansada…

Max: ¿Qué?

Dahlia: tienes decenas de habitaciones en la mansión, usa otra si te molesta compartir la cama conmigo, me da lo mismo… yo no me voy a levantar.

Max: ¿Por qué?

Dahlia: ya duérmete, tengo sueño…

Max iba a seguir hablando, pero Dahlia se durmió profundamente.

[no pensé que después de tantos días sin verme reaccionaria asi]

Max estuvo ensimismado en sus pensamientos hasta altas horas de la madrugada…

[dice que se quiere divorciar, pero esta haciendo el trabajo de duquesa… sabe que no podemos tener contacto físico, pero me espera en mi cama]