En Busca De La Felicidad

Marcus se reúne con el jefe de la aldea para hacerle saber sobre lo que encontraron en el bosque, emitiendo ciertas partes para evitar el temor desenfrenado de las personas. Los soldados permanecerían hospedados en la casa que les habían proporcionado al llegar y harían guardias durante el día y durante la noche para estar atentos a los posibles ataques.

_Agradezco mucho por toda su ayuda príncipe heredero.

_Es nuestro deber mantener seguros a nuestra gente. Si llegasen a necesitar de ayuda o provisiones comuníquese directamente con el general a cargo, él nos hará llegar el pedido inmediatamente y veremos qué podemos hacer al respecto.

Todos agradecen y hacen una reverencia ante los príncipes. Amalia ya estaba esperando a que su hermano termine su plática para poder marcharse, ella nunca ha sido una mujer que guste de recibir tanta atención por parte de las personas, ella prefiere la acción y dejar que su hermano se encargue de la parte de interacción.

Marcus se despide y sube sobre Lort y salen volando del lugar, de esa manera llegarían rápidamente hasta la capital de Anjar. Habían tardado más un día en dejar todo en orden en el pueblo, por lo cual ir volando fue la única opción de llegar a tiempo para la fiesta de la princesa.

_¿Quién crees que pueda ser el enmascarado que nos atacó en el bosque?

Marcus observa a su hermana y está parece perdida en sus pensamientos.

_Amalia.

Ella lo fulmina con la mirada y Marcus siente un escalofrío cuando ella voltea para observarlo.

_Disculpa, ¿Qué decías?

_¿Tienes alguna idea de quien puede ser el enmascarado?. Has estado muy pensativa desde aquel día, eso no es propio de ti.

_Estuve analizando los movimientos y ataques que realizaba, por su manera de moverse, sus poderes y energía que emitía no es de Luner o otro imperio cercano.

_¿Cómo puedes estar tan segura de eso?

_He luchado con varios hombres y mujeres de los imperios vecinos y algunos de otros continentes, ninguno presenta las características que ese hombre tenía. Estoy segura de que viene de un lugar que aún no conozco y tengo que averiguar de dónde viene. El poder que emitió antes de desaparecer no es normal.

Marcus observa a su hermana y nota que no está con ganas de entablar una conversación, la conoce y sabe que cuando encuentra a personas logran llamar su atención no descansa hasta descifrar completamente su método de pelea, magia, lugar de nacimiento y manera de derrotar. Por algo es la más tenaz de todas y la única que fue capaz de heredar el poder y talento de Esmeralda y Alexander. Marcus tenía algunos poderes, pero no sé comparaban con las habilidades de Amalia.

Antes del anochecer ambos llegar al palacio de Anjar, el emperador los recibe contentos, en especial al ver que Amalia también había acudido.

_Buenas noches majestad. Es un honor ser recibidos personalmente por el emperador de Anjar.

_Cuanta modestia príncipe Marcus, debo decir que no esperaba la presencia de la hermosa princesa.

_Mi hermano me comentó que su hija realizaría su fiesta de cumpleaños, no pude evitar venir hasta aquí para darle mis felicitaciones y un obsequio especial.

_Estoy seguro de que estará encantada de recibirlos, por favor pasen. La princesa Nala estará feliz al tenerlos presentes en su fiesta.

El emperador pide a una doncella para que guíe a los invitados de honor hasta el área de invitados y esté al pendiente de todo lo que llegasen a necesitar.

Amalia y Marcus realizan una reverencia ante el emperador y siguen a la doncella, al llegar al área de invitados está señala una habitación, Amalia abre la puerta y se despide de su hermano. Marcus sigue a la doncella hasta su habitación, al llegar nota que la joven no para de mirarlo directamente a los ojos.

_Esta es su habitación príncipe.

_Muchas gracias.

Marcus abre la puerta de la habitación y antes de entrar la doncella lo sujeta levemente por la manga de su camisa.

_Si gusta comer alguna cosa solo llámeme, estaré por aquí cerca. Además, si gusta de compañía también puede llamarme que acudiré hasta su habitación.

Marcus no era un tonto, sabía perfectamente a que se refería la joven doncella. Por más que la encuentre linda no está con ánimos para dejarse llevar por la lujuria.

_Con gusto aceptaré..._Al escuchar esas palabras las joven se sonroja y levanta la mirada hasta los ojos de Marcus_ aceptaré una cena bien grande, no he tenido tiempo de comer en todo el día y me vendría bien algo para comer. Con respecto al segundo ofrecimiento tendré que negarme y darle un consejo, no se rebaje al punto de ofrecer su cuerpo a un hombre solo porque esté posee un status alto. Ninguno que acepté dicho ofrecimiento la verá como algo más que un pasatiempo, no soy un hombre que se fije en la condición financiera o social de las mujeres y las respeto por igual. Es por eso que me atrevo a decirle que no debería hacer tal cosa solo porque el hombre le resulte apuesto o crea que la hará subir de nivel.

La doncella estaba roja de la vergüenza, no esperaba que el príncipe le diera tal sermón, varios otros nobles hubieran aceptado sin pensarlo dos veces.

_Agradezco sus palabras joven príncipe. La cena estará lista dentro de una hora.

Realiza una reverencia y se retira del lugar casi corriendo. No muy lejos de ahí una joven había logrado escuchar y presenciar todo lo ocurrido entre el príncipe y la doncella.

_Esto si que es interesante.

La joven se retira del lugar sin hacer ruido, no quiere que el príncipe note su presencia.

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Una hora después Marcus estaba en el balcón de la habitación observando las estrellas, Luner es un imperio en donde la luminosidad no permite observar tal belleza de manera seguida, por la cual está disfrutando del momento silencioso y apreciando el paisaje.

Escucha como golpean a su puerta acabando con aquel momento de paz, se dirige hasta la puerta y al abrirla encuentra a una hermosa doncella, está hace una reverencia ante el príncipe.

_Como usted lo había pedido alteza, le traje la cena. La doncella que estaba atendiéndolo tuvo un inconveniente y se vio forzada a retirarse antes.

_Entiendo.

Marcus había quedado fascinado con la belleza de la joven, tenía una piel blanca, cintura definida, sen*os grandes y unos ojos diferentes. Nunca había visto a una mujer hermosa como aquella que tenía enfrente. Había perdido toda la compostura ante ella y por la sonrisa que tiene en el rostro ella ha notado que tiene cierto efecto sobre él. Está pasa a la habitación moviéndose provocativamente hasta llegar a la mesa, deja la bandeja con la comida de Marcus y vuelve a la puerta, antes de salir está se inclina en una reverencia dejando ver parte de su busto.