Vampiro, Tú Eres Mi Destino.

Me encontraba en mi habitación tomando el té, recordé entonces la cara de confusión del Rey en nuestra cena de anoche, baje la taza y la puse en la mesa.

"Realmente no creo en el amor, como futura Reina y ama de casa, me esforzaré para cumplir mis responsabilidades, así que nunca me ha importado quien sea mi pareja, pero... Sinceramente no pensé que él pensara igual que yo" -pensé-

Oigo tocar la puerta de la habitación.

Damar: Adelante.

Se trataba de August, que tras hacer una leve reverencia dijo.

August: Señorita Damar ¿Ha descansado bien?

Damar: Si, gracias.

August: Por hoy, no tiene ningún plan en especial, entonces ¿Qué le parece recorrer el castillo? Todo esta preparado con mucho cuidado para usted.

Sonreí, me parecía una gran idea, así iba conociendo el entorno donde me encontraba. Primero fuimos a la biblioteca, habían más libros de los que pude haber visto en toda mi vida, luego fuimos al jardín, para que negarlo, la belleza de este me cautivo, luego recorrimos todos los pasillos, se detenía una que otra vez, hablándome sobre la historia de las estatuas y retratos, la mayoría ya los había visto, entonces alguien llamo a August y este, disculpándose se retiro, diciendo que volvería enseguida, camine un poco más por el pasillo, entonces algo llamo mi atención.

Era un hermoso retrato, se podía apreciar una hermosa pareja junto a un niño que evidentemente no era Axel

Dimitri: ¿Te gusta?

Mire a Dimitri, quien había aparecido a mi lado sin hacer el más mínimo ruido al acercarse.

Damar: Si ¿Quiénes son?

Dimitri: Son los difuntos padres de Axel, el Rey Roger y la Reina Esmeralda y ese niño que esta a su lado soy yo... Axel no había nacido aún, la Reina estaba embarazada de él.

Damar: Entiendo, según tengo entendido, el Rey Roger aparte de cumplir con sus deberes como Rey, también protegía a la Santa Cecilia ¿me equivoco?

Dimitri: Es cierto, el Rey Roger, mi tío, era considerado el Rey más fuerte de todos los tiempos, nadie sabe aún como murió con exactitud, su cuerpo fue hallado sin vida en su recamara, solo se sabe, que la Reina fue asesinada con la espada Blade.

Vi como él cambiaba la expresión de su cara, paso de tristeza a rabia, luego como recordando que estaba a mi lado, me miro y sonrió.

Dimitri: Debo irme, hablamos luego, pequeña cuñada.

Damar: Hasta luego.

Luego de eso, lo vi recitar un conjuro en voz baja y desaparecer ante mis ojos. Volví a posar mis ojos en el retrato de los difuntos Reyes, había visto una imagen de ambos, pero se veía borrosa, aquí podía apreciarlos mejor. La Reina Esmeralda, era una Vampiro pura sangre, el Rey había sido un Brujo, el más poderoso de todos los tiempos.

Para preservar la paz, el legitimo heredero al trono, debía casarse con alguien que no fuera de su especie, sin embargo, ellos dos habían pasado su infancia juntos, él era su mejor amigo, tan grande fue su amor, que terminaron casados, pero su felicidad no duro mucho.

August se acerco y sin dejarle hablar le dije.

Damar: Tengo otro lugar al que quiero ir.

*En el pueblo del Reino del norte*

August: Señorita Damar, espere por favor. Esto es demasiado peligroso, la paz interior es muy buena, pero a los alrededores..

Damar: No te preocupes, yo te protegeré.

August: Eso no es lo que quiero decir...