El Juego Del Destino

El volteo y me vio a los ojos, sentó un escalofrío recorrer mi cuerpo y el miedo me invadió, se puso de pie e intento acercarse, pero yo retrocedí y él entendió que tenía miedo y se detuvo...

Patricio: oye, por favor escucha sé que nuestro matrimonio no empezó de la mejor forma, pero ahí algo en lo que no puedes dudar y es que te amo

Elena: Cuando alguien ama no lástima, tú me lastimaste y mucho y ni siquiera te importo... no dejó que terminara de hablar

Patricio: no es porque no me importara, es porque no sabía que pasaba por tu cabeza, perdóname por favor y empecemos de nuevo por favor...

Mire su cara suplicante y de arrepentimiento, se que van a decir que soy una tonta y lo se, pero en ese momento estaba aún enamorada, me había casado "con el amor de mi vida" tal vez yo había exagerado un poco y el tampoco sabía como reaccionar ante "la vida de casados"

Lo vi acercarse un poco más y lo dejé, llego a mi despacio e intento abrazarme, pero espero a que yo autorizara el abrazo, asentí y me abrazo, pero yo no sentí lo mismo, solo muchas ganas de llorar, me sentía frágil y recibí el abrazo que necesitaba en ese momento pero de la misma persona que me había hecho daño

Él hablo, me prometió cambiar, reparar el daño que me hizo y ser paciente, yo le dije que estaba bien, que también trabajaría en soltar lo que había pasado y olvidar, esa noche yo decidí irme a la habitación en la que dormida, él estaba tomado y seguía desconfiando de que se volviera a olvidar de sus palabras y me lastimara, así que mejor dormí sola, estaba tan extraña, tenía muchos sentimientos encontrados, que ni yo misma sabia como manejar, algo dentro de mí estaba roto y tenía que repararlo, a la mañana siguiente me desperté la verdad un poco más animosa, me duche y baje a desayunar no tenía mucha hambre, pero baje no sé porque, en el comedor ya estaba él, esperándome, era algo superextraño para mí, pero me senté al lado de él y desayune un poco solamente, seguía sin poder comer bien, me dio un beso en la frente y se fue a la escuela donde él da clases, yo subí a mi habitación, tenía ya 1 semana sin saber de mi amiga, así que subí a la habitación a buscar mi teléfono en las cosas mías, pero no lo encontré ¿qué extraño? No estaba, tal vez estaba en alguna maleta o bolsa, aún no desempacábamos, pedí ayuda a una de las chicas y nos pusimos a acomodar toda la ropa en la habitación principal, sentía un poco de ánimos de volver a empezar, ese día Patricio llegó temprano, no como las otras noches, paso la tarde preparando las clases del día siguiente y yo solo lo observe, cenamos juntos y él me pidió dormir con él, acepte algo dudosa y nerviosa, subimos a la habitación, nos cepillamos los dientes y nos fuimos a la cama, nos dijimos buenas noches y apagamos las lámparas, pasaron unos minutos y el encendido la lámpara del lado de él yo me hice la dormida, tenía los ojos entre cerrados para que él no notará que lo alcanzaba a ver, me vio y se quiso acercar a mí, se pegó en mí y quiso besarme, pero yo sentí algo que no puedo explicar y no pude corresponder, me hice la que tenía mucho sueño y a el pareció que le agrado que lo rechazara, o no sé tal vez si iba a ser paciente y seguía amándome que no le importo eso, apago la luz nuevamente y se volvió a recostar, yo no supe ni a qué hora me quedé dormida, al día siguiente me desperté tarde que ya no alcance a verlo antes de que se fuera a su trabajo, pidió que me llevaran el desayuno a la cama, me sentí consentida, pero algo seguía dentro de mi que aún no aceptaba todo ese "cambio"

Después de desayunar me metí a bañar, que tonta, olvidé preguntar por mi teléfono, baje de la habitación y al fin salí de esa casa, ya estaba pálida, salí al jardín y me senté en una mesa con una sombrilla, una muchacha me llevó jugo de naranja y pase un rato en el jardín leyendo un libro, después entre a la casa y me puse a ver la TV, no tenía mucho que hacer, pedí que prepararan la comida y volví a sentarme en eso entró Patricio a toda prisa, fue directamente a mí, tenía unos papeles en la mano e iba apurado

Patricio: Elena, mi amor, necesito que firmes esta hoja

Elena: claro, déjame leerlo

Patricio: no hay tiempo mi amor

Elena: pero ¿qué es?

Patricio: es un contrato para un viaje que reserve a la playa por nuestra luna de miel, pero por la tarde lo lees a detalle, ahorita tengo que regresar rápido para que alcancen a reservar, no me pueden esperar mucho por la fecha, está muy solicitada

Elena sintió una emoción muy grande, al fin iba a conocer la playa

Elena: está bien

Elena tomó la pluma y sin pensarlo mucho firmo emocionada

Patricio tomó los papeles y salió de prisa, Elena se quedó emocionada, tal vez ese viaje los volvería a unir como antes, nuevamente tubo que comer solsola, ya quetricio tardo mucho, incluso ni a cenar volvió, tal vez estaba preparando todo y ella trató de estar más relajada, se fue a dormir a la habitación, como a las 3 de la mañana llegó, traía aliento a alcohol, pero parecía no estar muy borracho, así que no lo molesto y se quedó dormida nuevamente, era más la emoción por el viaje que tenía y ella no pensaba arruinarlo, a la mañana siguiente se despertó temprano y se duchó, no hizo ruido y decidió prepara ella misma el desayuno, quería poner en práctica todo lo que aprendió como chef y consentir a su esposo, bajo y preparo un rico y nutritivo desayuno, estaba por subir a despertarlo y llevarle el desayuno cuando lo vio bajar

Elena: justo iba a llevarte el desayuno

Patricio la vio y contestó muy serio

Patricio: no es necesario, aquí puedo desayunar, rápido porque tengo que irme

Elena: claro

Tomó los platos y los puso en la mesa mientras le dijo...

Elena: oye, pero no me has dicho cuando viajaremos para prepararme (en eso el probo el plato de comida y lo escupió)

Patricio: ¿qué es esta basura?

Elena no podía creer lo que escuchaba, estaba rico, ella lo había probado antes de servir lo peor de todo fue lo siguiente

Patricio se puso de pie con una cara de molestia, tomó el plato y lo tiro al pisó, la salsa salpicó a Catalina desde la ropa hasta la mejilla, se fue muy molesto y cerró la puerta de un golpe...