Deseo Prohibido

Me puse un lindo vestido blanco con puntos negros, pinte mis labios ahora de rosa, le dije a mis padres que iba salir al cine con mis amigas, no le dije que saldría con Lucas por qué no me iban a dejar.

Bajé del auto, Lucas se miraba guapo con su camisa azul cielo que resaltaba sus hermosos ojos negros.

- Te ves hermosa, me abrazo y nos dimos un beso rápido. 

El compro las entradas, me compro unos dulces, la verdad es que no puedo comer palomitas porque me provocan vómito, ¿por qué?, no tengo idea pero es algo que aún estudian mis padres. 

Nos sentamos justo cuando apagaron las luces, el me tomo de la mano. 

A la mitad de la película se acercó a mi oído 

- ¿Te gusta la película?. 

- Si, dije sonriendo 

- ¿Puedo besarte?, dijo cerca de mi oído. 

Me acerque a sus labios y nos besamos, el beso fue bueno, pero sin magia. 

Salimos del cine, el me tomaba de la mano, lo miraba pero no era el. 

Al llegar a casa mi familia estaba reunida, mi papá gano un premio en una investigación que realizó a sus pacientes, creo que era algo sobre un mejor tratamiento en pacientes con cáncer. Mi mamá le organizo una cena sorpresa.

- Hola familia, salude a mis abuelos de un beso en la mejilla y a mi tía. 

- Te ves muy linda, decía mi tía. 

- Gracias. 

Ramón me abrazo

- Ya me contó el tonto de Tom que tienes novio, recuerda que te dije que quería conocerlo, me decía mientras caminamos a la cocina. 

- Si, primero deja que cumpla con el al menos una semana. 

- Muy bien. 

- Voy a quitarme los zapatos, le dije liberandome de los brazos de mi primo.

Necesitaba mis hermosas pantuflas de unicornio y quería quitarme el vestido.

Cuando entré a mi habitación el estaba sentado en la cama mirando la televisión. 

- ¿Que haces aquí?, dije molesta. 

- Antes podía entrar aquí sin que la señorita se molestará. 

Lo ignore y me quite los zapatos, camine del otro lado de la habitación para buscar mis pantunflas. 

El me abrazo por atrás. 

- ¡Escúchame bien!, no podías conseguirte otro novio, ¡por qué el idiota de Lucas!. 

- A mí me gusta, lo empuje. ¡Y tú que!, con tu pinche novia que se vacia encima la botella de perfume. 

- ¿Estás celosa?. 

- ¡Pudrete Tom!. 

Camine hacia la puerta no pensaba seguir ahí con el, al abrir la puerta de mi habitación el la cerró con su mano. Me gire al mirarlo, ambos estábamos enojados. 

- ¿Lo amas? 

- ¡No, ya estás contentó!. 

- ¡Quiero que lo dejes!!. 

- No, lo necesito idiota, necesito sacarte de mi mente, necesito olvidar lo que hicimos en la estúpida fiesta y en tu habitación, no voy a dejarlo. 

El comenzó a reír. 

- Suerte con eso primita, dijo mientras salía de mi habitación. 

Yo comencé a llorar, lo odio, pensaba mientras limpiaba mis lágrimas y salí con una sonrisa falsa. 

Mi madre nos dio un poco de vino para brindar por el triunfo de mi padre, la cena estuvo perfecta, el estaba como si nada hubiera pasado, sonreía y decía sus chistes tontos, que me encantaban, siempre reía hasta morir, pero ahora solo saboreaba el pastel de chocolate que mamá me había servido. No decia nada. 

- ¿Que tal la película?, pregunto la abuela, tocando mi espalda. 

- Bien abuela. 

- ¿Qué pasa hermosa?, tu siempre estás sonriente y ahora te ves triste. 

- Estoy bien abuela, sonreí. 

Carajo necesito salir de aquí, pensaba. 

- Bueno los dejo familia tengo que estudiar, felicidades papi, le di un beso en la mejilla, me subí a mi habitación. 

Me quite el vestido, entre a la ducha y coloque mi pijama, cuando me acosté en mi cama, mi almohada tenía su perfume el muy cabron se acostó en mi cama y dejo su hermoso aroma, pensé mientras lo inhale con fuerza. 

Te odio, dije con lágrimas en los ojos. 

Cuando alcé el edredón para tapar mi cuerpo, había una hoja de papel, era un dibujo, una rosa, con una nota.

Quisiera darte miles de rosas, quisiera tocarte sin temor a pecar, quisiera gritar que estamos juntos, quisiera caminar de tu mano por el colegio como lo haces con el, quisiera besarte en público, quisiera olvidarte pero no puedo, perdoname por amarte. 

Lágrimas caían sobre el papel, te amo Tom, dije mientras me aferraba a la almohada. 

Ayudame Dios, perdoname por desearlo, susurre.

Toda la noche me quedé mirando su nota, se que esto no me va ayudar en mi relación con Lucas, tal vez es mejor olvidar esto. 

Tome la nota, la rompí, después me arrepentí y guarde cada pedazo en mi cajón, entré mis libros favoritos. 

En la mañana coloque un poco de maquillaje para tapar mis ojeras y mis ojos hinchados. 

Bajé a desayunar, mis padres me miraron asombrados. 

- Ahora te maquillas, pero decías que lo ibas a hacer cuando tuvieras 15, decía mi padre.

- Bueno faltan un año y meses para que los cumpla, aparte es algo ligero, ¿se nota mucho?.

- No, decía mamá dándome un abrazo. Te ves más hermosa. 

- Gracias mami. 

- Oye ya se que estás saliendo con alguien me dijo Ramón, quiero saber todo, decía mi padre serio.

- Ese chismoso. 

- Ya es tarde, vete, decía mamá empujandome. 

Al subirme al auto Ramón me miró asombrado. 

- Ese tipo te está cambiando, mírate, ahora ya te pintas los ojos. 

- Chismoso, le dije sonriendo. 

La verdad me sentía de mejor humor, porqué aunque es difícil olvidarlo, se que me ama como yo lo amo.  Que ambos queremos olvidarnos saliendo con otros, pero eso jamás podrá ser. 

Al entrar al colegio, Lucas me esperaba en la entrada.

- Hermosa, me besó.

- Hola Luc, le dije sonriendo. 

Tom paso a nuestro lado y lo empujó. 

Yo me quedé asombrada. 

- ¡Hola primito!!, le gritó Lucas. 

Tom regresó enojado y lo empujó. 

- ¡Mira idiota tu y yo jamás seremos familia que te quede bien claro!, le dijo empujando su cuerpo hacia la pared. 

- ¡Basta no lo toques!!, le grite. 

El me miró enojado y lo soltó. 

- ¿Qué le pasa a tu primo?, está loco, creo que te cela demasiado. 

- Es que mis papás le dicen que me cuíde, dije nerviosa.

Abrace a Lucas para que no sospeche de nada. 

El me besó de nuevo

- Estoy bien amor, vamos a clase.