Melodía De Amor

 Bryan se acercó a Julieta le agarró la cara y la besó apasionado, las amigas rieron feliz, al soltarse la agarró por la mano y la sacó del lugar, ella sorprendida le decía mientras era llevada por él

-Qué pasó? Para donde me llevas?

- quiero mostrarte un sitio especial para mí- los dos jóvenes salieron ante la vista del portero quien sonrió moviendo su cabeza.

Después de un corto viaje en autobús, se encontraban caminando una subida, era una urbanización de gente acomodada, luego, agarraron por un caminito forrado de la vegetación, Julieta después de unos minutos de caminata le preguntó

-Será que me puedes decir para donde vamos?

-el soltó su risa, luego respondió

- tranquila, no te voy a secuestrar, mi mamá trabaja en una de esas casas, desde niño me traía con ella, y yo descubrí este lugar- caminaron por un poco más salieron de ese caminito y por fin ella se vio frente al paisaje más hermoso y extenso de la ciudad, desde ahí se podía ver toda la ciudad, era un lugar solitario y apartado del mundo, Bryan le colocó un pequeño pañuelo que llevaba con el y la ayudó a sentarse, ella estaba hipnotizada ante tanta belleza, ambos sentados sobre la grama mirando hacia la ciudad, Bryan le acomodó el cabello que se movía con la brisa jugueteando

- que te parece mi lugar secreto? ¡Nadie conoce esto, solo yo! - Julieta contestó, mientras mantenía la vista al frente

- como estás seguro? alguien igual que tú lo debe conocer- Bryan se levantó y de entre los matorrales sacó una cajita de madera, y se la mostró

- todo lo que está aquí son mis recuerdos de niño, es mi mayor tesoro, descubrí esto a los siete años, en un descuido de mamá salí de la mansión donde trabaja y caminé por largo rato hasta encontrar este refugio, desde entonces me escapaba para acá solo, cada vez que quería esconderme del mundo, me venía y pasaba tiempo aquí, aún lo hago, cuando discuto con mi abuela o mis tíos, cuando me sucede algo, incluso cuando quiero componer una canción este es mi sitio secreto- la abrazó llevándola hacia él y continuo hablando

- que te parece?- Julieta respondió sin emoción

- quien sabe a cuántas chicas has traído para acá!- Bryan soltó la risa y la besó, tratando de hacerla reír, ante la cara molesta de ella le respondió

- mi amor! No soy como crees, eres la primera persona que traigo para acá! - ella continuó seria y le preguntó?

- que me hace diferente a las demás?- él la volvió a besar y le respondió

- tu me haces sentir diferente, es algo que no te puedo explicar, desde hace mucho te veía con tus amigas en el liceo y me gustaste, pero no me atrevía a preguntarle a alguien por ti o acercarme a ti, luego me hice amigo de Viviana, pero tampoco me atrevía a decirle nada, es que te veía tan seria tan diferente y pensé que no te fijarias en mi, hasta ese día que nos tropezamos, te sentí tan cerca y eso me dio valor para acercarme a ti- Julieta le preguntó

- te has enamorado antes?

-si! Te contaré algo que tampoco he contado a más nadie, hace cuatro años cuando yo tenía quince años, conocí a una muchacha, ella era mayor que yo, tenía como veinte años, esa mujer me tenía loco, hacía lo que fuera por ella, pero yo notaba algo extraño en ella, era muy popular en el barrio y siempre estaba en la esquina hablando con alguien, yo le formaba esos problemas celoso y cuando me terminaba yo insistía, un día me encuentro a unos amigos abajo en el cerro, antes de subir para donde mi abuela, estos tipos me dicen que la vieron con un tipo, yo llegué a dónde mi abuela, agarré un cuchillo y me fui a dónde más o menos me habían dicho que ella se la pasaba, era más arriba de dónde mi abuela, al final del cerro, una casita de tablas y muy precaria, entré sin ser escuchado, la puerta estaba abierta, cuando entré en medio de la oscuridad encima de la cama, un tipo muerto, por lo que logré a ver desde la puerta, que tenía un orificio en la frente, estaba tan pálido, que juro nunca había visto a alguien de ese color, como pude corrí y me tropecé con una lata de Zing y se cayó el cuchillo, estaba tan nervioso que no me importó, recuerdo que corrí cerro abajo y me vine para acá, llegué a la casa ya muy tarde, pensando que la policía me estaría buscando, pero todo estaba normal

- esa mujer,qué explicación te dió? Quien era ese hombre? Estaba muerto? Que más pasó?

- ella nunca más apareció, de el hombre tampoco supe nada, me imagino estaba muerto, y en el barrio nunca se escuchó nada, al principio sufrí mucho, estaba enamorado de esa loca, pero ya se me fue pasando, eso sí, juré no enamorarme mas!- Julieta se cruzó de brazos y le dijo molesta

- entonces... Yo que soy?- él comenzó a besarla mientras le decía

- eres mi amor, mi vida, mi oxígeno- la comenzó recostar en la hierba fresca, besándola apasionadamente, dejando que su lengua pasara por cada rincón de la boca de ella, quien se dejaba llevar sin saber que hacer, mientras el comenzaba a apoderarse de cada espacio de su cuerpo virginal, besándole el cuello, poco a poco llegó a sus pechos, besando sus pezones, esto la hizo reaccionar nerviosa de inmediato, apartándose de el

- no! Por favor! No estoy lista para eso!- él la miró agitado, tratando de controlarse, se levantó acomodandole la blusa y el cabello lleno de hojas secas, la vio que tenía la mirada en el piso apenada y le dijo

- te amo! Esto es serio! Voy a respetar hasta el día que estés segura, pero por favor mi amor no me falles nunca! - Julieta se levantó recogiendo sus cosas y le dijo tímida

- es hora de irnos- el caminó junto a ella de regreso a casa.