La Sombra Del Mal

...Narra Cecilia...

Cuando tu vida corre peligro, te conviertes en una versión distinta a la que eras. Comienzas a ver la vida distinta, eres capaz de todo por sobrevivir.

Matar es la única opción que te queda. No te debe temblar la mano para poder eliminar a quien te quiere matar a ti.

Dejas a un lado tu dignidad y regalas tu cuerpo por un poco de comida y agua. Matas sin sentir remordimiento, convirtiéndote en un ser sin sentimientos y emociones.

Poco a poco el miedo que congelaba cada parte de tu cuerpo, comienza a desaparecer. Ya no sientes nada, te conviertes en un monstruo capaz de todo.

Es un sentimiento que no se pude describir con palabras. Solamente, quien pasa por el infierno puede sentirlo.

Tu mirada ya no es la misma. Te ves al espejo y no logras reconocerte. Ni por fuera ni por dentro, eres un cuerpo con vida luchando por no ser asesinada

Con pasos cortos entre al Motel donde pensábamos quedarnos por esta noche. Ya no soporto el dolor de pies, me duelen demasiado, es una verdadera tortura.

Detrás de un viejo mostrador de madera, se encuentra un hombre de mediana edad. Trae una gorra azul marino y gafas transparentes.

Está delgado, tiene bigote y barba desordenada, el olor a tabaco está por todos los rincones del pasillo.

A su lado derecho, tenía un cenicero de cristal, en la cual tenía más de 50 colillas de cigarro.

A primer vista se ve que es un Motel de muy mala muerte. Al llegar al mostrador coloque mis manos encima del viejo mostrador.

Una sonrisa coqueta entre mis labios; y dije.

______ Necesito una habitación.

Con una cara de poco amigos se me quedó mirando.

_____ ¿Por cuántas noches?

_____ Solo una. ____ Respondí sin borrar la sonrisa de mis labios.

Se da la vuelta y toma una de las llaves. En ese momento entró Lilit y se esconde en las escaleras.

_______ Son 350 dólares. _____ Me dice.

_______ ¿Es un hotel de 5 estelas o qué? ______ Respondí por impulso.

_______ Tomala o vete... ____ Me dice con mucha seriedad.

Saque la cartera poniendo el dinero sobre la mesa. Furiosa me dirigí a las escaleras. Al final de las escaleras veo a Lilit.

_____ Me cobro 350 Dólares por una noche. Es una cantidad absurda.

Lilit me ordena quedarme callada, haciendo una señal con su dedo. Me toma de la mano y me lleva a la puerta de la habitación donde nos vamos a quedar.

Abre la puerta con la llave, entramos y ella cierra por dentro.

_____ Trae algo con que detener la puerta.

Obedezco y llevó un palo que encontré junto a la ventana. Ella lo coloca en la puerta, evitando que se abra por fuera.

______ Tenemos poco tiempo iré a bañar.

Son las únicas palabras que dice, luego se mete al asqueroso baño. A decir verdad la habitación era un asco.

El olor a podrido y a cosas viejas estaba por cada rincón. No sé quien pueda pagar tanto dinero por quedarse una sola noche aquí.

Me dejé caer sobre el sofá cerca de la ventana. Observo hacia afuera. El Motel era de tres pisos. Nosotros nos encontrábamos en el primer piso.

Si habríamos la ventana dábamos a la calle. Eso era lo bueno de este cuarto. Pasó el tiempo y Lilit terminó de bañarse. Una toalla sucia cubría su cuerpo.

______ Cecilia, ayúdame a buscar unas prendas abandonadas. Me imagino que debe haber algo por ahí.

Me levanté del sofá y fui a buscar a los cajones de los muebles. Todos estaban vacíos, buscamos hasta debajo de la cama y no había nada con que Lilit se pudiera vestir.

_____ Si aquí no hay nada, tal vez haya en otro cuarto.

_____ Olvidate de eso, no nos volveremos a poner en riesgo solo por una ropa. ____ Me dice molesta Lilit.

______ No te vas a quedar desnuda todo el tiempo y tampoco vas a usar la misma ropa llena de sangre.

______ Iré a buscar ropa a otra habitación, en una debe haber algo con que te puedas cambiar. _____ Insistí, y luego de pensarlo, Lilit cede a que vaya.

Nunca había intentado abrir la puerta con pedazo de alambre que le quitamos al colchón viejo.

Cuando estaba por darme por vencida, la puerta abre. Enseguida, entré encendiendo la luz.

El cuarto era mil veces mejor que el que nos dieron. ¡Ese hijo de puta me cobró de más por un cuarto tan horrible!

Salí del cuarto dejando la puerta abierta. Fui por Lilit y nos mudamos a la mejor habitación. Ahí encontramos ropa de hombre que fue abandonada.

Era bastante vieja, pero estaba en buenas condiciones. Lilit se cambió de ropa y pudimos descansar un rato.

Eran cerca de la una de la madrugada cuando escuchamos ruidos afuera en el pasillo.

_____ Estoy seguro de que es ella.

Lilit y yo nos acercamos a la puerta, colocando el oído junto a ella para escuchar todo lo que decían.

______ Estoy seguro... Quiero el dinero que me prometieron.

______ Si es ella, te daremos todo el dinero, pero si no, serás hombre muerto.

Lilit y yo intercambiamos miradas, en silencio nos alejamos de la puerta y fuimos a la ventana. Al igual que la otra habitación, esta daba a la calle.

Solo con gestos, Lilit y yo nos comunicamos. En total silencio abrimos la ventana y logramos salir de ahí.

No íbamos muy lejos cuando se escuchó un disparo. Seguimos caminando, sintiendo nuestros corazones latir violentamente.

Logramos escapar, Lilit arrojó el arma de alto calibre a un contenedor de basura. Era arriesgado que lo llevemos a todos lados, ahora solo nos queda defendernos con el arma corta.

Al amanecer y sin dormir casi nada. Lilit y yo llegamos a la vieja mansión, donde nuestro infierno comenzó.

Nos estuvimos recargando nuestros pesados cuerpos sobre el tronco del árbol... Los malditos recuerdos de lo que vivimos se apoderan de nuestras mentes.

Lilit y yo nos tomamos de las manos. Solamente, somos ella y yo contra el mundo.

______ ¡1... 2... 3... ! ____ Lilit contó hasta 3 y nos pusimos de pie, arrancamos los listones amarillos y caminamos de nuevo al infierno.