Victoria Casani es una chica de 24 años con poca vida social, su día a día se basa en ir a la universidad y forjar su carrera a base de esfuerzo y dedicación, ella sueña con ser arquitecta, ella vive con sus padres Carmen que es de Asendencia Mexicana y Lorenzo que es Italiano, también con su hermano mayor Gabriele, viven en la hermosa ciudad de Florencia- Italia.
Leonard Loannou tiene 38 años, es un excelente decano de diseño arquitectónico y hace poco se unió a (Università degli Studi di Firenze, UNIFI) en Florencia, el es de origen Griego, pero decidió mudarse a este nuevo país, ya que le llegó una excelente oferta de esta universidad, a la que por mucho tiempo estuvo aplicando, pero hasta hace unas semanas se le dió la oportunidad gracias a su excelente perfil profesional.
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CAPITULO 22
Al llegar, pagué y entré con urgencia a casa, mi mamá estaba sirviendo el almuerzo.
- Hija, llegaste justo a tiempo, ve y te lavas las manos y vienes-- dijo y yo asentí.
- si... mamá, quizás hoy lleguen las fotos-- mi padre alcanzó a escuchar y caminó rápido hacia mi.
- ¿te encontraste a ese cretino?-- solo pude mirarlo a los ojos, el vio mi expresión y no necesitó que le diera una respuesta que ya era obvia -- ¿te hizo algo?--
-No, no tuvo tiempo, en ese momento pasó un taxi y sin dudarlo lo detuve y me vine en él a casa-- mi padre relajó sus hombros.
- Que bueno hija, pues esperemos que si cumpla, mi padre ya tiene listos los abogados para este proceso... Además -- miró a mi madre y luego a mi-- este fin de semana iremos a visitar a tu abuelo, el quiere hablar con nosotros -- estaba muy nervioso al decir esas palabras, y yo realmente estaba confundida.
- Está bien, por mi hija iré-- mi madre comentó.
- Lo siento amor, te prometí que nunca más tendrías que relacionarte con mi padre...-- mi mamá lo interrumpió.
- Toda madre hace lo que sea por sus hijos, y en estos momentos es un mal necesario y desde que yo no siga siendo el tema de conversación preferido de tu padre, todo va a estar bien -- resaltó.
- Lo sé, lo entiendo, y no dejaré que te sientas incómoda -- le aseguro mi papá, yo solo me quedé en silencio escuchando las palabras que iban y venían.
- No estoy entendiendo nada, pero comprendo, entonces el fin de semana iremos con el abuelo, ok, eso me quedo claro, voy a lavarme las manos y vengo a almorzar -- dije huyendo de la tensión que se había formado.
Al volver ya todo estaba normal, mi madre estaba sentada al lado de mi papá, me estaban esperando para almorzar, me senté y comenzamos a comer.
Al terminar, recogí los platos y los llevé a la cocina, los lavé y subí a mi habitación, debía estudiar para la entrega del proyecto, debía hacer una excelente exposición, pusimos mucho empeño en realizar un buen trabajo, no quiero defraudarlos.
Estuve hasta las 11 de la noche repasando y practicando lo que debía decir, cuando el cansancio me golpeó fui a tomarme una ducha y luego me tumbé en mi cama, quedé profundamente dormida.
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Me levanté muy temprano, la ansiedad no me permitió dormir más de la cuenta, me duche y busqué algo acordé que ponerme para este día, no podía ir vestida de cualquier manera, debía representar mi profesión, no era necesario un traje totalmente elegante, podía hacer uso de estampados con figuras.
Opte por un pantalón holgado bota ancha, acompañado de una blusa de tirantes con estampado, y unas sandalias de plataforma plateada, todo lo que usé salió del closet de mi mamá, todas mis prendas son un poco sosas y simples, hoy decidí no usar mis gafas y dejar mi cabello en ondas.
hace mucho no utilizaba mi portafolio, pero por la vestimenta que estoy usando, hoy debo hacerlo, allí guardé los documentos y algunos apuntes que hice, lo agarré y bajé a la sala.
- Hija, te ves hermosa, esa ropa te queda mejor que a mi-- mi madre dió una vuelta alrededor apreciando cómo estaba vestida.
- Gracias mamá, pero a ti también te queda hermoso -- y no es mentira, mi mamá tiene una silueta muy linda.
- Hace mucho no me la pongo, quizás ya he subido algunas tallas-- comentó y luego me miró a los ojos-- de verdad hija, te ves muy linda, ahora ve a desayunar, antes de que se te haga tarde -- dejé el portafolio sobre el sofá y fui al comedor.
Desayuné lo más rápido que pude, al terminar fui a lavarme los dientes, mi mamá me pasó el portafolio y yo salí de casa, saqué mi auto del garaje y me puse en marcha, mientras avanzaba ví a Leonard subiéndose a su auto.
Prácticamente el venía atrás de mi, custodiando mi camino, pero en uno de los semáforos le tomé ventaja y llegué primero a la universidad, después de parquear el auto fui al coliseo, allí será el evento, mis compañeros me vieron llegar y se sorprendieron.
- Wow Victoria, hace mucho no te veíamos así, te ves muy bien -- comentó Cassidy, una de mis compañeras.
- Muchas gracias, voy a dejar mi portafolio acá y voy a ir por la laptop que dejé en la parte de los lockers-- ellos asintieron y yo me fuí.
el pasillo para llegar allá era estrecho, además que habían puesto algunas cosas que hacían difícil el acceso, pero logré llegar, busqué las llaves del locker y abrí la puerta, de allí saqué mi portátil, ya estaba cerrado cuando sentí las manos de alguien en mi cintura, yo giré con rapidez.
- Me asustaste -- dije en un susurro en cuanto ví a Leonard.
- Te ves preciosa -- dijo y yo sonreí.
- Tu también, te ves muy guapo, pero... ¿porque estás aquí? sería muy sospechoso que nos vean en el mismo lugar sin ninguna razón -- comenté.
- claro que hay una razón, dejé mis memorias y mi equipo aquí en los lockers-- elevó sus hombros mientras hablaba.
Vi como estiró su mano y apagó el interruptor dejando el lugar totalmente oscuro, no veía nada, pero luego pude sentir sus labios sobre los míos, yo solo me dejé llevar, en mi mente no había nada ocupando mis pensamientos, solo disfruté de sus labios sobre los míos.
- ¿Decano? ¡Decano!-- era la voz de uno de mis compañeros, yo lo empujé por el pecho y nos apartamos.
El, rápidamente encendió el interruptor, acomodó su traje y tomó sus cosas del locker y se fué, antes de perderse por completo de mi vista, giró y me guiñó un ojo, hizo que mi cara se calentara.
Usé mi mano como abanico para dispersar el color que se había concentrado en mi rostro, terminé de cerrar el Locker y salí a reunirme con los demás.
Hablamos un poco de como nos íbamos a distribuir en la exposición, todo estaba más que listo para ser presentado, la maqueta quedó tal cual la diseñamos, hicieron un excelente trabajo con las terminaciones.
El director dió inicio a las exposiciones, todos fuimos a los diferentes estand, vimos cada una de las muestras y proyectos que cada facultad preparó, todas estaban realmente interesantes, muy pocas no fueron de mi agrado, ya que era más de lo mismo.
Ya faltaba un estand para que fuese nuestro turno, así que corrimos a nuestros lugares, organizamos todo y nos preparamos para la muestra.