NovelToon NovelToon
La Cuarentona Divorciada Y El Arrogante CEO

La Cuarentona Divorciada Y El Arrogante CEO

Status: Terminada
Genre:Completas / Matrimonio contratado / Arrogante / Madre soltera / Autosuperación / Divorcio / Amor en la madurez
Popularitas:890.3k
Nilai: 4.8
nombre de autor: Marines bacadare

Alessandra Ferrari, una mujer de 41 años, se casó joven en un matrimonio arreglado con Roberto Fiorucci para salvar su empresa. Aunque lo amaba profundamente, su vida de lujos y eventos sociales se desmorona tras la muerte de sus padres y la absorción de su empresa por Roberto.

En su cumpleaños, descubre la infidelidad de Roberto con una joven de 20 años. Desgarrada, enfrenta el divorcio y queda sin apoyo financiero, con la mansión como único refugio.

Su hija de 16 años se va con su padre, mientras que Alessandra queda con su hijo de 19 y su pequeña de 12. Roberto la deja sin nada y le cierra oportunidades cuando ella se niega a ser su amante.

Rechazada por su círculo social y enfrentando deudas, Alessandra deberá hacer lo que sea para sacar a sus hijos adelante hasta ir a trabajar a un antro de lujo de bailarina donde se cruza con el arrogante CEO jefe de su nuevo empleo, quien la mira tal como es y le ofrece un trato que les conviene a ambos, pero ella se niega a venderse.

NovelToon tiene autorización de Marines bacadare para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Cada quien en su lugar

“Bueno, siéntense todos, me encanta tenerlos aquí, sobre todo a ti, Alessandra; ver a mi nieto feliz de nuevo es algo a lo que ya me había resignado a no ver”. Habla con firmeza y Alessandra asiente.

“Y dime, primo, ¿cómo conociste a tu hermosa prometida?”, dice Guillermo, uno de sus primos, con un deje de ironía en su voz.

“En una cafetería”, dice neutro y el hombre sonríe.

“Qué historia más romántica, pero viniendo de ti…” Alessandra le sonríe y habla.

“Yo estaba buscando empleo y él una asistente, así que nos tropezamos. Vi sus bocetos y le di unas ideas; me enamoré cuando quité mis ojos de los papeles y los posé en los de él”. El hombre, al igual que los demás, queda callado y ella observa a Francesco como si fuese la única persona en ese lugar.

“Vaya, eso sí, es una historia más creíble”, agrega Enzo, otro de los primos de Francesco.

“Y dime, primo, ¿cómo es eso que conseguiste una prometida en el momento en que mi abuela está decidiendo entregar la herencia del abuelo?” El rostro de Francesco se gira hacia su abuela.

“¿De qué habla Enzo, abuela? "Esa herencia no fue donada", pregunta, y la señora Justina sonríe.

“No, hijo, tu abuelo quería a un sucesor, pero debían tener todas las cualidades de un hombre de valor, como lo decía él, y ninguno lo ha obtenido”. Sus nietos hacen un gemido en señal de que se ofendieron.

“No digas eso, abuela, estamos casados, somos buenos padres, esposos y empresarios”, interviene Dominico.

“Para obtener la herencia y lo que conlleva se necesita más que eso y lo saben, es el control de media Italia. Ustedes han tenido fallas y sus parejas no cumplen con lo necesario para suplirme a mí”, habla con carácter, pero calmada la señora Justina.

“Esto es algo injusto de su parte, señora Justina; somos mujeres casi perfectas, estamos hechas a medida para nuestros esposos”, interviene Martina, la esposa de Dominico.

“Ese es el problema”, dice, mirándola fijamente la matriarca Barbieri.

“Y quién sí está a la altura es esta mujer; no la conoces, es una aparecida y es obvio que Francesco le ofreció dinero, ¿no la ves? Tanta perfección es inusual”, esta vez replica la esposa de Enzo.

“Disculpe, señora, pero no me conoce para hablar sobre mí; le pido respeto y Francesco no tiene por qué pagarme, no lo ve más de una; querría tener algo con él”, le responde Alessandra con fiereza pero con educación.

“No les voy a permitir ni un insulto más hacia mi prometida”, habló fuerte Francesco y observó a Alessandra.

“Lo siento, cariño”. Ella le sonríe y le da un beso rápido.

“Descuida”, le sonríe ella, y la abuela Justina solo observa.

“Digamos que no le pagó, pero, abuela, esta mujer es la indicada para tu puesto; sí, es toda una dama en cuanto a modales y educación, pero…” Dice Guillermo con una sonrisa enorme en su rostro; ya iban por la mitad de la cena, aunque por la discusión estaba pausada.

La madre de Francesco quiso intervenir, pero los ojos de su suegra la hicieron quedarse quieta.

“¿Pero? ¿Cuál es tú, pero, Guillermo?”, pregunta Justina y él sonríe.

“Tu sucesora será alguien como ella; ¿sabías que es divorciada, tiene tres hijos y trabajó de bailarina en un club de caballeros?”. El silencio arropa la sala; el único sonriente es Guillermo y sus dos primos, aunque lo hacen con disimulo; los demás solo observan mientras Justina Barbieri se mantiene serena.

¿Una bailarina? ¿Es en serio, hermano? ¿Dejarás que tu hijo se case con una...? Comienza Ernesto, padre de Guillermo, pero es interrumpido por Francesco, quien golpea la mesa.

“Mucho cuidado con lo que sale de tu boca o me olvido de que eres mi tío”, habla fúrico Francesco y Alessandra le toma la mano para que se calme.

“No hay necesidad de que te alteres, cariño”, le sonríe y fija su mirada en el que la acusa.

“Sí, señor Guillermo, soy madre soltera de tres hijos, porque el día de mi cumpleaños encontré a mi exesposo, al cual le entregué 21 años de casados, con una jovencita en su oficina teniendo sexo, así que me pidió el divorcio y me dejó en la calle sin pasarle dinero a mis hijos porque me negué a ser su amante”, habló firme.

“También es cierto que trabajé de bailarina y no me da vergüenza; me cerraron las puertas de cualquier trabajo para que me viese obligada a estar con él y preferí mi orgullo y trabajar de bailarina, óigase bien”, dijo con voz severa, pero calmada.

“Porque yo bailé en ese lugar durante quince días, soy administradora y publicista, soy traductora también y nací en cuna de oro; jamás trabajé y no me importó por sacar a mis hijos adelante y lo volvería a hacer. Dejé de trabajar cuando conseguí empleo en la empresa de Francesco”.

“Una persona no es más o menos por el trabajo que hace, señor Guillermo, pero ahora que lo dice lo recuerdo: usted iba cada noche a verme y creo que fueron tres las veces que lo rechacé porque yo solo bailaba”. La cara de la esposa de Guillermo era de sorpresa; Alessandra giró la cara hacia la señora Justina y habló.

“Lamento haber dañado su cena, señora Justina, y si es un pecado haber bailado para sacar a mis hijos adelante y también ser madre soltera. Creo que este lugar no es para mí, con permiso y que tenga una buena noche”. Se levanta y Francesco lo hace con ella.

“Ambos se sientan ahora”. La voz severa de Justina Barbieri retumba en el lugar.

Francesco observa a Alessandra y la ayuda a sentarse.

"Todos me van a escuchar", dijo poniéndose de pie una mujer mayor, pero con porte y carácter.

“Alessandra, te pido disculpas en nombre de mi familia; yo contestaré cada pregunta que se hizo”, dice sonriendo.

“¿Francesco le pagó a Alessandra?”, preguntó al aire y prosiguió.

“A menos que hayan hecho un excelente curso de actuación para fingir esas miradas que se dan ambos a cada momento, no, su relación es real”. La sonrisa de las esposas de esos hombres se borró, aunque la de la esposa de Guillermo hace un rato era una mueca de rabia.

"Sobre si es madre soltera y fue bailarina, ya lo respondió ella y, por último, observó a su nieto Guillermo".

“¿Preguntaste si Alessandra está a la altura de tomar mi puesto como cabeza Barbieri?”, lo observó fijamente.

“Bueno, aun siendo profesional y una mujer de sociedad, se bajó de su pedestal y sacó a sus hijos adelante e hizo algo más que criticar y gastar dinero”. Dio una respiración profunda.

“Aparte, te enfrentó y se defendió con la verdad y con respeto y compostura; tú no la habías visto antes, Guillermo, así que no la investigaste”, dijo Justina.

“Vi tu cara de sorpresa cuando la viste, te sorprendió que era la misma mujer a la que tanto pediste y se negó. Preguntaste por ella y por eso sabes que es divorciada y con hijos”, siguió dejando a su nieto temblando”

“Tienes esposa y fuiste a pagar los servicios de otra mujer, la cual te pateó y por eso quieres enlodarla; yo creo que ya sabes la respuesta, pero igual la daré”, dijo y esta vez observó a todos.

“Alessandra Ferrari tiene el carácter, la clase, la nobleza y el temple que se necesita para tomar mi puesto, así que bienvenida a la familia”, dijo sonriéndole a Alessandra y Francesco sonrió.

“Ahora sí, como ya la cena terminó, pasemos a la sala para tomar un café y discutir el día de su boda”, dijo, y los padres de Francesco sonrieron hacia su hijo y nuera.

“Disculpe, señora Justina, pero a Francesco le trae un jugo de zanahoria, apio y espinaca; por favor, no puede tomar café”, dice y Francesco la observa.

“Cariño, ¿vas a cuestionar a Justina Barbieri?”, le pregunta con sorna levantando una ceja.

“Por tu salud, sí, no tomarás café”, dijo y le dio un pequeño beso en los labios del cual él se aprovechó y la besó más intensamente.

“Me agrada, tu prometida”, dijo Justina.

"Yo la adoro", dijo la madre de Francesco y algunas primas de Francesco que estaban calladas en toda la cena sonrieron de acuerdo.

Francesco se le acerca y le susurra al oído.

“Al parecer tambien domas a ogras" ella sonrió y lo besó.

1
Rosalicia Vela cachón
Excelente
Mirian Lopez Torres
Malo
Mirian Lopez Torres
Muy malo
Claudia Ixmatlahua
Excelente
Elizabeth Delvicier
los 2 padres sin culpable x no poner límites en el comportamiento de roberta a los hijos se los ama pero se les pone limite y roberto es un imbecil q no supo valorar su familia
Elizabeth Delvicier
no creo q este enamorado es una niña casi le triplica la edad
Rosalicia Vela cachón
señor fiorucci es su ex . su jefe es Barbieri
Maribel Monter Hernandez
Bueno
Mayka Puche Velasquez
Excelente
Amelia Mirta Fernández
Que duro el camino que tiene que caminar, que atroces marcas va a llevar consigo en toda su vida. El padre , yo creo que va a ir preso porque la va a matar a la prostituta con que se casó. ...y le hizo eso a su hija.
Amelia Mirta Fernández
Tanta soberbia que tenía, aún así, nadie merece lo que ha pasado por una loca basura que se acosto con el padre, tanto odio a su madre y hermanos, iban a volverse en su contra. A eso se le llama KARMA. . Pero hay que salvarla, siempre hay una luz de esperanza.
Yessy Almazán
me enamore de Francesco!! el si es un hombre no como el otro parásito 😍😍😍😍😘
Amelia Mirta Fernández
que tristeza tan grande que su propio padre la hay entregado así. Ojalá no tome una decisión equivocada y se deje ayudar. Para ella va a ser un calvario, con los conocidos, con sus hermanos.. el inútil del padre se merece un balazo entre los ojos o que sea castrado y encerrado x HDP
Gleni Santos
puyalo pantera
Amelia Mirta Fernández
Por favor, se me ha puesto la piel de faisán, crespita estoy.. Que mujer maldita, como le va a hacer algo así a una chica, por más odio que tenga. La entrego a unos trata de personas.
Gleni Santos
Su santísimo ese hombre de ése tamaño debe de tener tremendo calembo 🍆😥
Amelia Mirta Fernández
GRACIAS MARINES
ESTUVO SENSACIONAL ESTE CAPITULO. QUIERO MAS , ME ENCANTA COMO RELATAS CADA PORCION DE AMOR.
WOWWWW\ QUIEN PUDIERA VOLVER EL TIEMPO ATRAS Y BUSCAR UN NENITO COMO ÉSE..😂😂😂😂😂😂😂 EN MI JUVENTUD, ERAN VOMUNACHOS NOMAS 😂😂😂😂😂😂😂😂😂❤️❤️❤️❤️❤️.
Carmen Hernandez
es Roberta ay Dios
Gloria Torrealba
jajajaja se las desquitó pero por 1000
Amelia Mirta Fernández
Como dije ántes, em.pezaron las inquietudes. BUENISIMO SE ENCONTRO CON LA HORMA DE SU ZAPATO. 😂😂😂😂😂😂
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play