Luna De Sangre

El sol ascendía lentamente sobre el Claro del Lobo, dispersando las sombras de la noche y pintando el cielo con tonos dorados y rosados. Lyra, de pie en lo alto de una colina, observaba con nostalgia el paisaje que había sido testigo de su amor y su lucha.

Desde la batalla contra los Hijos del Crepúsculo, el valle había cambiado. Los campos verdes y los bosques oscuros mostraban señales de la reciente confrontación, pero también de la vida que continuaba con determinación.

—Kael —llamó Lyra con suavidad, girándose hacia donde su compañero se le acercaba con paso firme.

—Lyra —respondió Kael, su voz tranquila pero cargada de la misma determinación que había visto en ella durante tantos desafíos—. ¿Cómo amaneces hoy?

Lyra contempló un momento antes de responder, sus ojos verdes fijos en el horizonte.

—Con esperanza, Kael. Esperanza de que nuestros clanes puedan recuperarse y avanzar hacia un futuro mejor.

Kael asintió, colocando una mano reconfortante sobre el hombro de Lyra.

—Lo lograremos, juntos. Nuestra alianza es nuestra mayor fortaleza.

Juntos, observaron cómo el campamento Luminara cobraba vida con la energía renovada del nuevo día. Guerreros reparaban las estructuras dañadas, aldeanos trabajaban en los campos y los más jóvenes jugaban con una mezcla de alegría y respeto por la reciente tragedia.

En el campamento Luminara:

Faelan y Evelyn coordinaban los esfuerzos de reconstrucción con una eficiencia marcada por el cansancio y la determinación. La batalla contra los Hijos del Crepúsculo había dejado cicatrices visibles e invisibles en todos ellos, pero también había fortalecido su determinación de mantener la paz a cualquier costo.

—Nuestro clan ha demostrado una fuerza y unidad increíbles —comentó Faelan, dirigiéndose a Lyra y Kael cuando se les unieron—. Ahora es el momento de sanar y fortalecernos aún más.

Evelyn asintió, ocupándose de los heridos y asegurándose de que cada miembro del clan recibiera el apoyo necesario.

—Preparad las reservas y mantened la vigilancia. No podemos permitir que los Hijos del Crepúsculo nos tomen por sorpresa nuevamente —instó Evelyn, su mirada seria y determinada.

En el campamento Sombraluna:

Thane y Kael se reunieron para discutir los planes para el día. La reconstrucción estaba en pleno apogeo, con los guerreros y aldeanos trabajando juntos para restaurar lo que la guerra había tomado.

—Los informes de patrullas indican que las fronteras están seguras por ahora, pero debemos mantenernos vigilantes —dijo Thane, su voz resonando con autoridad pero también con optimismo.

Kael asintió, admirando la resiliencia de su líder.

—Estoy de acuerdo, Thane. No podemos permitirnos bajar la guardia. Seraphina y los Hijos del Crepúsculo podrían regresar en cualquier momento.

En el corazón del Claro del Lobo:

Lyra y Kael se encontraron una vez más, esta vez bajo la sombra protectora de un roble centenario que había visto generaciones de paz y conflictos.

—El camino hacia la paz será largo y lleno de desafíos, pero estamos juntos en esto, Lyra —dijo Kael, su voz llena de determinación.

Lyra asintió, tomando la mano de Kael con cariño.

—Juntos somos invencibles, Kael. Nada ni nadie podrá destruir lo que hemos construido.

                                                                             FIN......

"¡Hola! Un gusto, soy la autora de 'Luna de Sangre'. Espero que hayan disfrutado de mi novela y quiero contarles que habrá una segunda temporada. Me gustaría pedirles su ayuda para saber cómo les gustaría que continúe la historia."