La noche del cumpleaños número quince de Pearly Hazel Willfred se convirtió en una noche imposible de olvidar. Otra joven apareció de repente, asegurando ser la hija biológica de la familia Willfred.
Pearl regresó con su familia verdadera… pero pronto volvió a huir. Fue entonces cuando se reencontró con el chico al que siempre había seguido en la escuela.
Alexander Marshall se convirtió en su salvador, sin que Pearl supiera que también era el líder de una banda de motociclistas. Con la ayuda de Alex, Pearl volvió a estudiar… sin imaginar quién era en realidad ese misterioso joven.
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Capítulo 22
Al día siguiente en la escuela, Pearl estaba en el aula leyendo un libro cuando de repente recibió una cubetada de agua. Después, se escucharon risas que resonaron y llenaron el aula.
"Una hija adoptiva como tú merece ser derribada, no levantada. Te ves mejor así. Seguro que no te bañaste esta mañana, ¿verdad? ¡No puedes pagar el agua!"
Pearl apretó los puños. Intentó contener su ira y su frustración. Respiró hondo e intentó calmarse.
"¿Ya terminaste? ¿Ya terminaste de mojarme? Si crees que no puedo pagarlo, a partir de mañana iré a tu casa a bañarme. Puedes pagar el agua solo para mi baño, ¿verdad? Además, ¿no es que tus padres me quieren allí? Puedo recuperarlos fácilmente", dijo Pearl con calma.
Ahora era el turno de Merva de apretar los puños, "Es imposible que te atrevas a venir. No eres de la familia Willfred, ¡maldita sea!"
Pearl cerró los ojos y respiró hondo. Luego miró a Merva con una sonrisa.
"¿Maldita sea? No eres tú la que ha sido cuidada por ella durante quince años, así que debe estar en tu sangre. Mira tu comportamiento ahora mismo, un reflejo de tu corazón sucio".
"¡¡Maldita seas!! ¿Cómo te atreves a decir eso?"
"Que sepas que nunca te he tenido miedo. Más bien, estoy segura de que tú me tienes miedo. Tienes miedo de mi existencia, que te amenaza en todo momento", dijo Pearl con una mirada penetrante.
Pearl no quería tener miedo de nada más. Tenía que ser fuerte e independiente. No podía seguir dependiendo de Alex, aunque él siempre le dijera que lo contactara si pasaba algo.
Con la ropa mojada, Pearl finalmente decidió volver a casa. Sin embargo, eso no significaba que hubiera perdido. Simplemente no quería enfermarse y no poder ir a la escuela y concentrarse en sus estudios.
Merva llegó a casa sintiéndose molesta. Sentía que había fracasado en avergonzar a Pearl, e incluso ahora ella misma se sentía amenazada.
Los murmullos que al principio hablaban de Pearl, ahora parecían volverse contra ella, especialmente en la parte en que había vivido con una mujer callejera durante quince años.
"¡¡Arghhhh!!" gritó Merva molesta.
La puerta del dormitorio, que no estaba bien cerrada, hizo que Mamá Lady escuchara los gritos de Merva y finalmente se acercara.
"Cariño, ¿qué pasa? ¿Qué ha pasado, por qué gritas tan fuerte?" preguntó Mamá Lady.
Merva, al ver la presencia de Mamá Lady, abrazó inmediatamente a la mujer.
"Mamá... Me está haciendo daño", dijo Merva.
"¿Te está haciendo daño? ¿Quién se atreve a hacerte daño? Dímelo rápido a Mamá y Mamá se las arreglará con él", dijo Mamá Lady.
Merva vio la preocupación en el rostro de Mamá Lady y se alegró por ello. Planeaba aprovechar el cariño de Mamá Lady y su estatus como hija biológica de la familia Willfred para vengarse de Pearl.
"¡¡Mamá!!" Merva volvió a abrazar a Mamá Lady, esta vez con sollozos.
Por supuesto, eso hizo que Mamá Lady tuviera aún más curiosidad por saber quién había hecho daño a Merva. Acarició el pelo de Merva para tranquilizarla.
"Cálmate, luego dile a Mamá quién te está haciendo daño. Mamá se vengará de todo y se asegurará de que no se atreva a volver a hacerlo a la hija de Mamá", dijo Mamá Lady.
"Pearl... Me está haciendo daño, Mamá. Dice que no merezco estar en la familia Willfred y que me lo quitará".
"Sí, Mamá, me está haciendo daño. ¿De verdad que no lo merezco?" preguntó Merva con una mirada triste que, por supuesto, era fingida.
"Eres la hija biológica de Papá y Mamá, por supuesto que mereces estar aquí".
"También dijo que durante estos quince años he vivido con una mujer callejera. Seguro que mi carácter será el mismo", Merva aumentó aún más el volumen de sus lágrimas, "¿Soy así, Mamá? ¿Seré como una mujer callejera?"
Las palabras de Merva, por supuesto, hicieron que el corazón de Mamá Lady doliera. Fue su error cuando Merva fue cambiada, pero no era apropiado que Pearl le dijera eso a su hija biológica.
"Cálmate, cariño. Mamá se asegurará de que sepa que eres la favorita de Papá y Mamá. Eres la hija biológica de Mamá".
Detrás del abrazo de Mamá Lady, Merva sonrió. Estaba muy segura de que Mamá Lady haría que Pearl no pudiera moverse.
Al día siguiente, Mamá Lady estaba lista. Hoy iba a ir con Merva a la escuela. No aceptaba lo que le había pasado a Merva.
"¿Vas a salir, cariño?" preguntó Papá Willfred.
"Hmm... Acompañaré a Merva a la escuela llevándola. Quiero pasar más tiempo con ella", respondió Mamá Lady.
Papá Willfred sonrió, "Está bien, ten cuidado, cariño. Te amo".
Mamá Lady no quería que Papá Willfred supiera lo que había pasado. Su marido quería mucho a Pearl, como ella. Sin embargo, tampoco aceptaría que Pearl hiriera a Merva de esa manera. No era un dolor físico, sino psicológico.
El coche se dirigió a la escuela. Merva estaba muy contenta de estar acompañada por Mamá Lady. Incluso estaba impaciente por ver el enfrentamiento entre Mamá Lady y Pearl.
"Ve a clase primero, cariño. Mamá hablará primero con el director", dijo Mamá Lady.
"Vale, Mamá. Te amo", con entusiasmo, Merva corrió hacia el aula. Para Merva, Pearl no tenía ningún poder ni fuerza en la escuela, a diferencia de ella. Papá Willfred y Mamá Lady eran empresarios influyentes, seguro que la escuela ayudaría a Mamá Lady.
Después de que Mamá Lady se separó de Merva, continuó su camino hacia la oficina del director. No aceptaba que Merva recibiera un acoso tan doloroso.
Sin embargo, a pocos pasos de distancia, vio la figura de Pearl. Sinceramente, echaba mucho de menos a su hija adoptiva. En cualquier caso, los recuerdos con Pearl desde que era pequeña estaban grabados en su memoria.
"¡Pearl!" llamó Mamá Lady en un tono ligeramente alto.
Pearl, que sintió que la llamaban, se giró. Vio la presencia de Mamá Lady que estaba de pie no lejos de su posición.
"Ah, señora Willfred, ¿hay algo en lo que pueda ayudar?" preguntó Pearl.
"Estás lastimando a Merva, Pearl. Desde que te fuiste, tus palabras se han vuelto más agudas. Mamá y Papá, así como Brian, nunca te enseñaron nada malo. ¿Por qué eres así ahora?" preguntó Mamá Lady.
"¿Así? No entiendo. Nunca he buscado problemas con Merva, pero al contrario, ella es la que me busca problemas primero", dijo Pearl.
"Es imposible que Merva te lastime. No le enseñé a buscar problemas. Incluso volvió a casa llorando. ¡Te has vuelto mala, Pearl!"
Pearl suspiró y miró a Mamá Lady, "¡Sí, soy mala! Soy mala".
Plakkk
"¡No eres mi hija!"