NovelToon NovelToon
El Regalo Más Grande

El Regalo Más Grande

Status: En proceso
Genre:Yaoi / Hombre lobo / Omegaverse / ABO / Malentendidos
Popularitas:3.6k
Nilai: 5
nombre de autor: D J Becker

Zach y Dylan llevan una relación bonita y perfecta. En años de Relación, nunca se les ha visto discutiendo y mucho menos separados.


Pero cuando Zach queda embarazado, muchas cosas comienzan a pasar y cambiar todo.



El amor que se tienen, podrá ser fuerte, tanto que lograrán superar todos los obstáculos que la vida les tiene preparados.

NovelToon tiene autorización de D J Becker para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

20

[Zach] 

Cuando salí de casa no tenía la más remota idea de dónde dirigirme. Estaba demasiado molesto como para detenerme a pensar, sólo deseaba salir de ese lugar cuanto antes, lejos de Dylan. Tomé el primer elevador que abrió sus puertas, sabía que era cuestión de tiempo para que el imbécil de mi novio fuera tras de mí, debía darme prisa. Mientras bajaba recordé la cita que tenía con Kai para esa tarde, supuse que llegar un poco antes de lo acordado no iba molestarle. Justo cuando estaba por salir del edificio sentí vibrar el celular en mi bolsillo, no planeaba responder, en su lugar desvié la llamada y apagué el artefacto para guardarlo de nuevo. 

Miré ambos lados de la calle tomando el primer taxi que se cruzó en mi camino, subí e indiqué la dirección al chófer. Al doblar calle pude respirar de nuevo, mi escape fue exitoso. Transcurridos un par de minutos en silencio mirando por la ventana sentí los estragos del enorme disgusto que pasé, el dolor de cabeza había vuelto, esta vez de una forma más intensa. Por otro lado un molesto dolor se instaló en la parte baja de mis caderas y vientre, supuse entonces que se debía por correr estando embarazado, lo hice al bajar del elevador. Pésima elección. 

El conductor no tardó ni quince minutos en llegar a nuestro destino, apenas tuve tiempo de calmarme. Pagué la tarifa correspondiente y bajé, sintiendo la fría brisa matutina golpear mis cálidas mejillas. Faltaba poco para las once de la mañana, así que Kai debía estar en casa cuidando de su bebé. Pensé en llamarlo, no obstante lo reconsideré y opté por sorprenderlo. Caminé a paso lento hasta su privada, mirando la fachadas de las casas vecinas, anhelando un sitio así para mi bebé: un inmueble espacioso, con jardín y terraza. La tristeza me invadió al recordar las palabras de Dylan esa mañana, no sólo pospondríamos la boda, también la mudanza. Suspiré, no iba perdonarle que rompiera mis ilusiones de esa manera tan cruel. 

Pronto el número 97 apareció ante mi vista indicando que había llegado a mi destino, toqué el timbre y esperé paciente a que alguien me recibiera. Tardó un poco, sin embargo tras un poco de bullicio Kai finalmente abrió la puerta, llevaba a su pequeño bebé en brazos dándole su biberón; sonreí enternecido, la imagen de mi amigo alimentando a su niño era algo digno de ver. 

—  ¿Zach? — murmuró desconcertado—  ¿Qué haces aquí? Pensé verte hasta un poco más tarde. 

—  Sorpresa — traté de sonreír. Aventuré mi mano a la mejilla del bebé, acariciando con delicadeza mientras éste seguía bebiendo con energía su fórmula. 

—  Oh cielos, pasa — abrió aún más la puerta—  Está helado aquí fuera. 

—  Gracias — murmuré—  Siento llegar de este modo, sin avisar. 

—  Es tu casa Zach — aseguró conduciéndome por el pasillo—  Puedes venir cuando gustes. 

—  ¿Y Kris? — cuestioné al llegar a su sala. 

—  Trabajando, hace escasos minutos que se fue. 

—  Ya veo... 

—  ¿Zach, estás bien? — me miró preocupado. 

—  ¿Eh? 

—  Estás pálido, desde que llegaste no has dejado de tocarte el vientre & pareces sofocado. 

—  Un poco, supongo... — sonreí, o al menos lo intenté. 

—  ¿Qué pasó? 

Mi pecho se encogió de forma dolorosa y mis ojos empezaron a humedecerse sin poder evitarlo. Traté disimular pero ya era tarde, mis emociones habían ganado. 

—  Oh, Zach—Zach... — Kai se acercó preocupado hasta mí sitio con la intención de abrazarme pero su bebé le dificultaba la acción. 

—  E—está bien, pronto se me pasará — mentí. 

—  Claro que no pasará — gruñó—  No estás así por nada y quiero saber lo que ocurre ¿Dy te hizo algo? — no respondí—  ¡Argh! Estúpido gigante ¿Qué te hizo? 

Negué con la cabeza. 

—  Oh dios, espera... — reacomodó al bebé en sus brazos de tal forma que su mano derecha quedara libre, su criatura tenía suficiente edad para aferrarse al biberón con sus diminutas y regordeta manitas. 

—  No es nada — insistí—  Termina de alimentar al niño. 

—  SeoHan pronto se dormirá — aseguró—  Sólo toma su biberón y vuelve a dormir, así que habla.

No lo hice, en su lugar permanecí callado, observando atento como el pequeñito entre nosotros terminaba con su biberón. El pequeño SeoHan era igual de hermoso que sus padres, tenía esas largas y frondosas pestañas idénticas a Kai, sus rasgos eran finos como los de Kris. Sentí más nostalgia de la que debería, pero no pude evitarlo; mis ojos empezaron a escocer. 

—  Zach, solo habla — urgió mi amigo—  Estás asustándome. 

—  Ya no me voy a casar con Dylan. 

—  ¿Qué? — jadeó sorprendido. 

—  Que no habrá boda — respondí con tristeza, buscando el cálido consuelo que desde un principio anhelé. Hundí mi rostro en el pecho de Kai, siendo cuidadoso para no aplastar a su bebé, sólo así me permití llorar, liberar toda esa decepción y frustración que traía encima y que me negué a mostrar frente a Dylan. 

Le conté todo, hasta el más diminuto detalle. 

—  ¿No crees que estás malintérpretando? — respondió Kai tras oír paciente mi problemática, su bebé ahora durmiendo pacíficamente en sus brazos—  Dylan sólo habló de 'posponer' la boda, nunca empleó el término 'cancelar' 

—  Me tachó de negligente — me defendí—  Dijo que si no soy capaz de cuidarme estando embarazado, tampoco lo sería para críar a mi bebé. Se atrevió a chantajearme ¿Crees que voy a perdonarle? 

—  OK — suspiró poniéndose de pie —  En primer lugar, entiéndelo: está preocupado, no sabe qué hacer para persuadirte, así que en su desespero eligió esta forma — colocó al bebé en su carreola arropándolo cuidadosamente. 

—  No pienso perdonarlo. 

—  Zach — me miró —  Por lo que me cuentas y viéndote entiendo la preocupación de Dylan. 

—  ¿Qué quieres decir? 

—  No estás bien, basta verte para deducirlo. Perdón pero no creo que el dolor de cabeza recurrente sea un buen síntoma, es más, hasta ahora sigues tocándote el vientre ¿Sientes molestia? 

—  Un poco — admití—  Corrí un tramo al salir de casa. 

—  A eso se le llama negligencia, Zach. En tu estado correr es malo, al igual que comer o dormir. 

—  ¿Estás de mi lado o en mi contra? 

—  Un poco de ambos. 

Bufé. 

—  Mira — continuó—  Estás dolido, enojado, lo entiendo pero en estos casos lo mejor es actuar con la cabeza fría. Apuesto que Dylan también va reconsiderar sus palabras, de una u otra forma va darse cuenta de lo erróneas que fueron. 

—  Es un imbécil — farfullé. 

—  Pero es el imbécil que amas y al cuál vas a darle un hijo. 

No respondí, era totalmente incapaz de refutar sus palabras. Simple y sencillamente porque encerraban la verdad absoluta de mi vida: amaba a Dylan, no importaba si se comportaba como idiota o era un cabeza hueca; mis sentimientos por él jamás cambiarían. En especial ahora que esperábamos un bebé. 

—  Por ahora, tranquilízate — palmeó mi hombro—  Medita muy bien lo que vas hacer y decir a Dylan cuando llegues a casa. Toma en cuenta aquello que es más importante para tí, incluye claro tu salud. De igual manera recuerda: no puedes comerte el mundo de un sólo bocado, jerarquiza tus prioridades. 

—  Entonces...¿Realmente he de tomar la baja médica? 

—  Cada organismo es distinto, Zach. Hay quienes llevan una vida normal aún estando embarazado, en mi caso llegué a sentirme mal pero no tanto. Si crees aguantar el ritmo de una tesis, organización de una boda y encima la crianza de un recién nacido: sigue tu convicción. Pero si no, haz caso a Dylan; casense, busquen una hermosa casa, disfruten de este embarazo y tengan a su bebé. Ya el tiempo dirá después. Ya sabes lo que dicen : el orden de los factores no altera el producto, es decir, se casen antes o después su amor seguirá siendo el mismo. 

1
Solange Schiro
se repitieron los capitulos?
Inés Gómez
debería ir al médico
Inés Gómez
que lindo amigo apesar de estar el pasando por un momento difícil en su matrimonio se da el tiempo de aconsejar bien y apoyar a su amigo que amigo parecer está siendo un poco inconsciente
Inés Gómez
Excelente
Inés Gómez
Bueno
Margarita 12345 Gongora
/Angry//Angry/yo pensé x un momento, q fueran 3bbbs
Dorito
Fue mi error en los números. Como llevo dos historias a la vez me confundi en los números ni cuenta me di. Ya se arreglarán. 🙂🙂🙂🤗
Kitty
Esto ya no lo habíamos leído?
Elii
Que emoción 🥹 quiero que cada pareja sea feliz y resuelvan sus problemas 🫶🏻
Muchas gracias autor@, tu historia está genial 🫂
Dorito: Muchas gracias por leer. Espero que sigas disfrutando lo que se viene ❤❤
total 1 replies
Kitty
No puedo entender como esta increíble historia no tiene tanto seguidores. Me encanta su historia autor@💗
Dorito: Muchas gracias por tu apoyo. Todo a su tiempo ❤❤❤
total 1 replies
Neira Ramirez
Excelente
Neira Ramirez
Normal
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play