Por Mis Malditos Tacones

...NARRADORA...

El abogado llevó a Belén junto a Molly a su casa. Él estaba casado y su señora era una mujer muy amable que las recibió como si fueran familia.

-Belen es un placer conocerte niña, lamento profundamente la muerte de Marta, mí más sincero pésame. Nosotros sabemos que la cuidaste muy bien y lo feliz que la hiciste junto a la niña sus últimos meses de vida- la abrazó con cariño y Belén comenzó a llorar, la mujer parecía sincera y cariñosa

-La extraño tanto, me siento culpable de que haya enfermado aunque el doctor dijo que era normal a esa edad- lloró con pesar

-De ninguna manera, tu no tienes culpa de nada. Marta era muy mayor y los años no vienen solos, ¿Sabes? Todos vamos para el mismo camino y ella tuvo una buena vida aunque con hijos malagradecidos- Secó las lágrimas de la angustiada joven y volvió a abrazarla

-Belen ven por aquí así te muestro la habitación que ocuparás con Molly- el abogado la guió y ella dejó algunas prendas de ropa sobre la cómoda, no quería guardarla porque no merecía la pena, tendría que irse en breve dónde no sabía

-¿Tiene el periódico?- se atrevió a preguntarle

-Lo siento, lo he dejado en mi trabajo, después de la lectura del testamento iremos a comprar uno- era una completa mentira pero Belén se lo creyó por completo

Belén comió con el matrimonio y luego se retiró a descansar. La señora Dalia, mujer del abogado se ofreció a cuidar a Molly para que pudiera descansar. Sus hijos ya eran mayores pero aún no les daban nietos y esa niña era preciosa.

(.....)

Al día siguiente el abogado llevó a Belén quien sostenía a Molly en sus brazos a la lectura del testamento.

La señora Marta no tenía muchos bienes pero sus hijos querían lo que fuera que pudiera darles dinero pese a que tenían sus propios y buenos ingresos. Siempre querían más, la ambición estaba reinando en sus vidas por completo.

-¿Que hace ella aquí?- el mayor de los hijos miró despectivamente a Belén

-Si la señorita está aquí es porque su difunta madre así lo decidió, ¿Tiene alguna otra duda o podemos proceder a la lectura?- miró el reloj- Aún me queda tiempo libre, por si necesitan interrumpir- los hijos lo miraron con bronca

-Proceda abogado- pidió el menor mirando mal a su hermano para que no molestara

La lectura del testamento comenzó con el nombre de la señora así como su apellido, que estaba en sus facultades mentales y varios preliminares más que a sus hijos no les importaba. Ellos solo querían saber que le tocaba a cada uno.

-A mi querida Belén le dejo mi tocador así como todo lo que se encuentra dentro y encima de él. Las cajas musicales son mi obsequio para Molly. Mi querido abogado te entregará un sobre.

-A mis hijos les dejo mi casa junto a lo que dentro de ella se encuentra a excepción del tocador, hagan lo que crean conveniente con ella y si quieren venderla recuerden que está hipotecada. Los quiero porque sean como sean son mis hijos y si esa casa se las dejo es porque fue su padre junto a mí quien la construyó.

A los hijos poco le importó el tono en que su madre les escribió aquello, con decepción, con enojo y desilusión. Que la casa estuviera hipotecada les molestó porque la propiedad perdía su valor de ese modo.

(.......)

Cuando la lectura finalizó el abogado se dirigió a casa de la señora Marta y entró para sacar con ayuda de un hombre de confianza el tocador. Cuando lo retiraron le dió las llaves a los nuevos propietarios y se fue con Belén quien cargaba a Molly profundamente dormida.

En casa del abogado dejaron el tocador y Belén se dispuso a leer la carta. En el sobre encontró una llave y eso fue extraño.

Belén: Tu compañía en mis momentos finales me trajo gran felicidad, hiciste a esta pobre vieja muy feliz. Eres una muy linda persona que ha atravesado por muchos inconvenientes y deseo de todo corazón que puedas ser feliz junto a Molly.

La llave que ves aquí en éste sobre es de una pequeña propiedad que adquirí hace tiempo de la cual mis hijos no saben nada porque los conozco bien, seguro están buscando de dónde obtener dinero.

En el tocador encontrarás un poco de dinero y algunas pocas joyas que puedes vender en caso de que lo necesites.

Te quiero mucho a ti y a Molly. Gracias por hacerme tan feliz.

Comenzó a llorar al saber que la señora le dejó algo y que no está sin un techo con su pequeña.

-Belen se que tienes muchas dudas ahora y eso te aclararé ahora mismo- el abogado se sentó frente a ella mientras su mujer sostenía a Molly

-Yo no sabía de ninguna propiedad- comentó ella desconcertada

-La casa que Marta dejó a sus hijos fue un bien matrimonial pero la que te dejó a ti es pequeña pero fue adquirida después del fallecimiento de su esposo. Sus hijos no sabían de su existencia pero está en una ciudad cercana- Belén lo miró aún más confundida

-¿Tengo que viajar entonces con Molly?- se preocupó

-Nosotros te llevaremos así te llevas el tocador- la miró con dulzura la señora

-De verdad se los agradezco de todo corazón- se dirigió a los dos

(......)

Después de desayunar todos partieron a donde sería el nuevo hogar de Belén y Molly. Ahora debía aprender a manejarse en otra ciudad y volver a empezar, al menos no se había quedado desamparada junto a su hija.