Alfa Suly

Después de partir el pastel, mi familia contaba historias sobre sus primeros años como cachorros, mi abuelo Leltxu estaba sentado con mi tío Tam y Yuki, creo que el había hecho las paces con ellos.

Mi abuelo me decía que era una niña muy valiente, el se había mudado de nuevo a París, decía que Arabia era lindo pero que un lobo regresa siempre al lugar donde vivió los mejores años de su vida, a lado de su mate.

Cuando Yuki y yo hablamos en secreto, me dice que aunque ama Arabia, su mejor hogar es el mar. Pues ahí vivió con su abuela y fueron los mejores años de su vida.

Ya tenemos un año guardando el secreto y espero que así siga, el dice que Serena lo presiona para que hable con mi padre. Yo le dije a Serena que no quería aún ser un alfa, y tambien no quiero que mi padre aleje a Yuki, ella entendió y sigue guardando el secreto.

Mi hermano Elin y los demás piensan que yo veo a Yuki como mi familia y por eso lo estimo mucho.

Pero es difícil ocultar que el es mi mate, mi lobo siempre quiere estar cerca de el, trato de controlarla. Y es que Yuki me mira diferente, no como mira a Amarís y yo lo miró diferente también.

Mi familia regreso a París, las clases regresaron, Elin tiene miles de drones en el aire, que monitorean los cielos. Ya no se ha escuchado de lobos secuestrados, Elin sigue pensando en su mate, ayer note que bebía la poción para no sentir dolor, creo que el dolor aumenta con el paso de los días.

Siempre a la hora de la salida de la escuela Yuki está parado en la puerta esperándome.

Mi papá le dijo que investigara, ¿quién era el tal blue?, que cuidara de mi.Y para yuki fue un honor, obedecer a mi padre.

Hoy Amaris no fue a la escuela, estaba enferma, Elías ha sido aceptado para ser reclutado en la manada de Serena, así que no vivía más en la mansión.

Sabía que tendría tiempo a solas con Yuki, estoy nerviosa, ya quería salir de la escuela.

Cuando salí, unos chicos se me acercaron y me preguntaban si quería ir a una fiesta.

Yuki se acercó.

- ¡A ver niños, regresen a casa!. Me tomó de la mano y me subió al auto. Yo no dije nada, sabía que odiaba que los chicos de mi edad o más jóvenes que el me hablaran.

- Si tuviera la edad de ellos, podría estudiar contigo, podría llevarte al cine y nadie nos iba a mirar como si yo fuera tu padre, decía triste.

Yo acaricié su barba que ya había crecido.

El detuvo el auto y me miró.

- Te amo Yuki, me encanta que seas tal como eres, a mi también me encantaría que tuvieras mi edad, pero probablemente ya te hubiera dejado de hablar por qué los chicos de mi edad no dicen nada interesante, pero tú tienes tanto que enseñarme y te admiro. No hay nadie tan perfecto para mí, como lo eres tú.

El me abrazo.

- Yo te amo, pero los celos me ponen tan loco.

- Si, a mi también.

- ¿Quieres tener una cita conmigo hoy?

- Si me encantaría.

El encendió el auto y me llevo a un lugar donde vendían pizza y habían juegos para ganar boletos que se podían canjear por regalos.

Comimos pizza juntos, el decia que amaba la pizza.

Después jugamos como locos, cada vez que yo ganaba lo abrazaba, el sonreía al verme feliz.

Después de casi tres horas juntos, solo el y yo, su teléfono comenzó a sonar.

Era Serena toda histérica.

- Tenemos que regresar, dijo Yuki.

- ¿Está enojada por qué estamos solos?

- Si

Cambiamos nuestros boletos, el premio era un chocolate.

Le di la mitad y los dos comimos chocolate de regreso a casa.

Antes de llegar a casa le dije que se detuviera.

El se detuvo

- Es la mejor cita de mi vida, lo mire a los ojos.

- Y la mía, dijo acariciando mi mejilla.

Encendió el auto y cuando bajamos del auto Serena le dio un puñetazo en el rostro.

- Es una niña imbécil, no puedes solo desaparecer así, más con la bruja tras ella.

- Es mía, dijo yuki furioso.

Serena le iba a dar otro golpe y el la detuvo.

- Entiendo que estés enojada, pero no soy un imbecil, ella es lo más importante para mí, no voy a tocarla, hasta que ella sea mayor, solo que no puedes prohibir que quiera hacerla feliz

Yo estaba en shock, no pensé que Serena golpeara a Yuki y que el detuviera la mano de su Alfa.

Serena gruño y el la soltó, se arrodilló ante ella.

- No volverá a pasar.

Serena me miró enojada, espero que hayas disfrutado perderte con tu mate porque tiene prohibido ir por ti a la escuela.

- Si alfa

Yuki subió al auto y se marchó.

Yo entre a la casa junto con Serena.

Entiendo a Serena, ella es la única que sabe de nuestro vinculó, sé que teme que mi padre se enoje con ella por guardar mi secreto.

No debimos escaparnos, porque él tiene trabajo y yo debo estar en casa.

Pero tener mi primera cita con Yuki, fue inolvidable.

En la noche Yuki tomó sus maletas y se marchó.

El me dijo por telepatía que solo quería que Serena estuviera más tranquila, pues ella no quiere que su mate lo mate, por qué el es su beta y su hermano.

Le dije a yuki que estaba bien, que no era justo que Serena cargará con ese peso, pero que no me abandonará.

El dijo que jamás iba a abandonarme, que las noches vendría a cenar con nosotros.

El primer día que salí de la escuela y no lo vi parado en la puerta me sentí triste, me gusta ver como sonreía al verme.

Amarís hablaba demasiado, yo siempre me mantenía sería, no es que no quisiera hablar con nadie, pero aún me mantengo alerta sobre la bruja, cargo siempre con mi daga.

Aún no se hace mi último sueño realidad, de ser atacada por el lobo.