– He vivido tantas vidas que me resultan absurdas las personas que matan por poder y avaricia, o aquellas que quieren ser jóvenes eternamente. De nada sirve vivir sin un propósito o amor verdadero.
— Soy Gustavo Chevalier, el emperador del vasto imperio Terra Nova, pero durante muchos años fui el paladin de mi hermano. Fui testigo de cómo amó a su ahora esposa con todo el corazón en sus diferentes facetas.
— Han pasado siglos, pero yo sigo añorando su olor, su dulzura, su reconfortante presencia y su preciosa sonrisa, que iluminaba mis días.
NovelToon tiene autorización de huracán para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
¿Piensas casarte de nuevo?
A diferencia del ducado, en el palacio todo estaba en calma. El emperador estaba compartiendo un entrenamiento con su hijo cuando surgió una conversación un tanto inesperada.
—¿Piensas casarte de nuevo? La corte está presionando mucho para que lo hagas. Además, yo no quiero ser emperador —preguntó el príncipe, tratando de mantener el ritmo de su padre.
—Sí, lo haré, pero no porque la corte esté presionando o porque tú quieras un hermano que cubra tus responsabilidades. Me gusta alguien. ¿Te molesta que quiera volver a casarme? —A pesar de que su hijo se muestra muy maduro, para el emperador seguía siendo su pequeño.
— Oh, no pensé que te fueras a enamorar de alguien. Y, respondiendo a tu pregunta, en comparación con otros emperadores, demoraste mucho en querer tomar otra esposa. Otro rey o emperador, estando en tu situación, habría matado a su esposa o la habría encarcelado para librarse del yugo. Durante muchos años, estuviste atado a una mujer que no amabas. No me molesta que quieras rehacer tu vida. ¿Cuándo será la ejecución de la emperatriz? —preguntó el príncipe, tratando de derribar a su padre, pero le era imposible.
— No la ejecutaré —respondió el emperador, volviendo a atacar, aprovechando que el príncipe dejó un punto de su defensa al descubierto, logrando derribarlo.
— Tienes que hacerlo; ella cometió traición —respondió el príncipe, levantándose con agilidad.
— Es tu madre —dijo el emperador, volviendo a atacar.
— Pero le falló al imperio —respondió el príncipe, defendiéndose del ataque, el tenía un sentido de serle fiel a las leyes, muy fuerte.
— La encerraré en un monasterio de por vida. Ella me dio algo realmente importante —dijo el emperador, desarmando a su hijo, y ambos quedaron en completo silencio.
— ¿Qué opina de Lady Mónica Mesellanas, la joven que acompañó a la duquesa y archiduquesa en el palacio? —preguntó el emperador, entregándole su espada a un caballero.
— Es linda, pero muy inocente; ve la bondad en donde no la hay. Su amabilidad podría traerle problemas. ¿Es ella con quien te quieres casar?
— Sí, ella aún no lo sabe. Quiero cortejarla antes de anunciar el matrimonio —dijo el emperador con firmeza.
— Tienes que cuidarte de los nobles. Ellos ya estarán formando alianzas para ver quién sería mas beneficioso para que ocupar el puesto de la emperatriz, aunque su estatus es sólido y cuenta con buenos soportes entre las damas —dijo el príncipe pensativo.
— Ellos no sabrán nada hasta que se celebre la boda.
— Padre —el príncipe hizo silencio por un momento; estaba realmente nervioso.
— Sí, puedes decirme lo que sea —dijo el emperador mientras caminaban hacia el palacio principal.
— Padre, quiero su aprobación para casarme. — El emperador casi se ahoga con su propia salida, así que se detuvo en seco, tosiendo lo más fuerte posible para calmarse.
— ¿Con quién te quieres casar? —preguntó el emperador, tratando de mantener la calma.
— Con Lady Cloy —dijo el príncipe sonrojado.
— ¿Lady Cloy? —preguntó el emperador intrigado; no sabía quién era la joven, aunque el nombre le parecía conocido.
— Es una doncella de la archiduquesa; es hija de un barón. Sé que su estatus no es el mejor, pero en realidad me gusta y quiero casarme con ella. — El emperador rebuscó en su memoria hasta que dio con la joven; entendió por qué su hijo estaba deslumbrado: su apariencia pelirroja era bastante inusual en el imperio.
Tengo entendido que esa señorita es un año mayor que tú. ¿Estás bien con eso? —Cuando la emperatriz trató de concertar un matrimonio entre Lady Margaret Vitaly de quince años y su pequeño hijo, mandó al príncipe de diez años fuera del alcance de la emperatriz.
—Sí, ella es solo un año mayor; no es mucha la diferencia —dijo el príncipe, avergonzado.
—Ella corresponde a tus sentimientos —preguntó el emperador, intrigado. La mayoría de las señoritas preferían caballeros mayores que ellas, no menores, así que temía que su hijo fuera despreciado cruelmente. Las señoritas solían ser más hirientes que el filo de una espada.
—No lo sé, aún no le he declarado mis intenciones. —Sin duda alguna, padre e hijo eran realmente parecidos en sus formas de actuar.
—Te acompañaré al archiducado para que hables con la joven, pero con una condición —dijo el emperador, continuando su camino.
—¿Cuál? —preguntó el príncipe emocionado.
—¿Estás dispuesto a cumplir mi condición? —preguntó el emperador para saber hasta dónde llegaría su hijo.
—Sí —respondió el príncipe apresuradamente, sin titubear.
—Solo te casarás cuando cumplas los dieciocho años.
—Padre, para eso faltan tres años —se quejó el joven príncipe, el en unos meses cumpliría sus quince años, la edad mínima para casarse.
—A los quince o dieciséis eres muy joven para entender muchas cosas. El matrimonio es para toda la vida; si no tienes la intención o no te ves con esa persona hasta el final de tus días, no te cases. Tu tío y yo no tuvimos elección cuando tuvimos que casarnos, pero tú sí la tienes. Esos tres años te ayudarán a conocerla bien y sabrás si la amas lo suficiente para querer casarte con ella —dijo el emperador de forma comprensiva; su hijo aún era muy inocente.
—Entiendo —dijo el príncipe, derrotado.
—Anda a alistarte, le daremos una visita a tu tío en el archiducado.
😅😅😅
Cambio de nombres: Margaret en lugar de Mónica
1- tendrá el testimonio en tiempo real de las víctimas del depravado conde.
2- despertará a la realidad de todo lo que el Emperador ha hecho por su pueblo, en especial las mujeres.
3- tendrá la posibilidad de ayudar a esas chicas con sus habilidades de sanadora.
Tal vez así entienda que el amor que el Emperador siente por ella es real, puro y sincero; desde siempre y para siempre.