Anya siempre había llevado una vida tranquila hasta que conoció a Alicia, la nueva estudiante del instituto de la manada. Lo que comenzó como una bienvenida amigable pronto se convirtió en un infierno cuando Alicia, con su talento para la manipulación, consiguió volver a todos los amigos de Anya en su contra. Incluso los atractivos trillizos Ethan, Damien y Gael caen en las mentiras de Alicia y se burlan de Anya públicamente. Después de un ataque verbal por parte de un grupo de chicas influenciadas por los rumores, Anya decide contarles a sus padres lo que está pasando y se muda con su tía en otra ciudad.
En su nuevo hogar, Anya conoce a Emma y Max, sus primeros amigos verdaderos en mucho tiempo, quienes la ayudan a recuperar su confianza. Dos años después, se ve obligada a regresar a su antigua ciudad y descubre que está destinada a estar con los trillizos por un vínculo de la luna en la comunidad de licántropos. A pesar del destino dictado, Anya todavía siente dolor y traición.
NovelToon tiene autorización de Victoriaਏਓ⁹⁷ para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo III (Maratón 1/3)
¿Pruebas? ¿De qué pruebas habla? Eso es imposible.
- ¿Sabes qué es lo más gracioso, Anya? — se acercó, tenía una mirada llena fría, indiferente — Tus supuestos sentimientos por mí. Como si alguna vez hubiera considerado estar contigo. Eres una tonta. Es decir, solo mírate, las ballenas del océano me parecen más esbeltas que tú — risas y burlas se escucharon tras su comentario.
Damien solo desvió la mirada, mientras Gael continuaba las burlas. Luego voltee a ver a Alicia y ella igualmente reía, pero más discretamente.
- Ya vámonos, esta perdedora no merece más nuestro tiempo — dijo Damien, fue el primero en irse, seguido por sus hermanos y por supuesto, Alicia quien iba agarrada del brazo de Ethan.
Antes de irse ella volteó por última vez, solo para verme con una sonrisa, como si hubiera ganado, bueno, de hecho, sí lo hizo.
Cuando estaba por levantarme, las mismas chicas me volvieron a arrojar al suelo.
- ¿A dónde crees que vas?
- Aun no hemos ajustado cuentas contigo, sabemos lo que dijiste, maldita habladora.
Ni siguiera me dieron la oportunidad de defenderme, las mismas dos chicas de antes me sujetaron de cada brazo mientras la otra me golpeaba en el abdomen. Antes de irse, claro que me amenazaron con no decir nada, después de todo, absolutamente nadie me creería, pues "yo misma me encargué de arruinar mi reputación con mis mentiras".
Aún recuerdo cómo me levanté apenas para regresar a casa antes de que anocheciera, el dolor que sentía al día siguiente por los golpes y la indiferencia de todos en el colegio, era la peor de las situaciones que nunca me había planteado vivir.
Así continuó el acoso con insultos, empujones, a veces me golpeaban en el patio trasero solo porque sí, me excluían de las actividades grupales en clase, comencé a comer sola porque ahora mis amigos me evitaban así que también dejé de ir a la cafetería y simplemente iba a la biblioteca para esconderme de todos, Alicia ahora se sentaba en la mesa de los trillizos y sus amigos, todos parecían seguir con sus vidas, mientras que yo me hundía en la mía.
Pov. Narrador:
Una semana antes de "La noche de iniciación":
Anya se dirige a la cafetería del instituto. No ha comido allí en semanas, prefiriendo evitar las miradas y susurros. Pero hoy, decidió que ya había soportado suficiente y quería recuperar una parte de su antigua vida.
Entra y se dirige a la fila para comprar su almuerzo. Siente los ojos de los demás sobre ella, pero intenta ignorarlos. Toma su bandeja y se dirige a una mesa vacía.
Alicia, quien se encontraba observando desde otra mesa con sus amigos, incluyendo a Ethan y sus hermanos, la veía con una sonrisa maliciosa
- Miren quién decidió unirse a nosotros hoy. Creo que es hora de darle una bienvenida especial.
- No hagas nada estúpido, Alicia. — la veía con una expresión seria, pero ella lo ignoró.
- Claro, claro. Solo quiero hablar con ella. — le dio una sonrisa falsa.
Alicia se levanta y se dirige hacia Anya, quien está sentada sola, comenzando a comer su almuerzo.
Pov. Anya:
- Hola, Anya. No te había visto por aquí últimamente. ¿Puedo sentarme? — se acercó con una sonrisa y voz amigable.
¿Qué rayos? Como sea, si la rechazo seré mal vista, es mejor evitar más problemas.
- Eh, claro, puedes sentarte si quieres.
Al principio no es más que una conversación trivial, podría decir que incluso aburrida, pues mis respuestas no eran más que afirmaciones, negaciones y respuestas cortas, realmente quería que se fuera y no me metiera en más líos, pero, parece que eso fue demasiado pedir para lo que se aproximó.
- Sabes, Anya, realmente me duele que sigas hablando mal de todos nosotros. No entiendo por qué eres tan cruel. — soltó de la completa nada y en voz alta para ser escuchada por todos.
- ¿De qué estás hablando? — estaba confundida — No he dicho nada sobre nadie. — comencé a sentirme nerviosa, asustada por la reacción de los demás.
- ¿Cómo puedes mentir así? ¡Todos sabemos lo que has estado diciendo! Solo quería ser tu amiga, pero parece que eso no es posible. — tenía una expresión triste.
Ella en serio es muy buena actriz, no entiendo por qué está haciendo esto.
- ¡Eso no es verdad! Tú eres la que ha estado mintiendo sobre mí.
Ella, en un movimiento dramático, tira su bandeja de comida al suelo y se "tropieza", cayendo y haciendo que todos en la cafetería volteen a mirar.
MALDITA SEA, ¿QUÉ HACE?
- ¡Ay, Anya! ¿Por qué hiciste eso? — comenzó a llorar y a quejarse del supuesto dolor.
Pude escuchar el fuerte sonido de una silla siendo movida, era Ethan quien se levantó y llegó rápidamente hasta nosotras con una cara de pocos amigos.
- ¿Qué demonios está pasando aquí? — se escuchaba muy molesto.
- No sé, ella de pronto fingió caer y... — traté de explicar, pero él me ignoró, solo para ayudarla a levantarse.
- ¿Estás bien? — se veía muy preocupado, algo que nunca sería dirigido para mí.
- Creo que me torcí el tobillo... Todo por culpa de ella. — dijo en medio de sollozos.
- ¿Qué tipo de persona eres, Anya? Primero los rumores y ahora esto. Eres patética. — me veía con desprecio, ese era el único sentimiento que, al parecer, podía despertar en él, asco, odio, desprecio...
- ¡No es cierto! ¡No hice nada! — fue mi último intento por defenderme mientras lágrimas se acumulaban, amenazando con descender sin permiso frente a todos.
- Todos aquí han visto lo que eres realmente. — dio un paso al frente mientras aumentaba el tono de su voz para ser escuchado por todos — Una persona falsa, cruel y ahora violenta. ¿Te crees mejor que los demás? ¿O es que necesitas hacerte notar porque tu físico no te ayuda?
Y eso fue el detonante para que mis lágrimas corrieran sin permiso por mis mejillas.
Yo nunca había tenido problemas con mi físico, es cierto que no soy tan delgada como Alicia, pero tampoco soy gorda, simplemente me mantengo en la talla media, lo único "gordo" que podía considerar en mi cuerpo eran mis muslos, ya que sí, son anchos, pero ¿Tan grande me veo realmente?
Tras ese comentario, la cafetería quedó en completo silencio. Todos observan la escena con una mezcla de sorpresa y morbo.
- Para, por favor ya detente — supliqué.
- No. Ya hemos tenido suficiente de tus engaños. Es mejor que te vayas antes de que las cosas se pongan peores para ti.
Con mi dignidad por el piso, decidí tomar mi bandeja con manos temblorosas y las lágrimas fluyendo libremente por mi rostro.
Me siento tan humillada y destrozada. La cafetería seguía en silencio mientras caminaba hacia la salida, sentía la mirada de todos clavadas en mi espalda.
.......
.......
.......
.......
.......
^^^Continuará...^^^