Mi Adorado Tormento

Dos años después

Dos largos años, donde Leticia ya había regresado a su país, había creado su propia agencia de modelos, donde también era diseñadora de ropa de todo tipo, la chica había firmado un contrato de tres años con una revista que en un tiempo era muy famosa, pero había decaído, gracias a ella y sus diseños, se convirtió en la número uno, del país, al ser tan joven, era toda una modelo famosa no solo en su país, también una empresaria, segura e imponente.

Su relación con Francisco se convirtió solo en una, de buenos amigos, aunque al principio tenían encuentros, ella decidió no darle más largas y así evitar darle falsas esperanzas, ya era más de un año que no tenía relaciones amorosas, no lo veía como una prioridad en su vida, debía estar concentrada en otras cosas y ese tipo de cosas, la llevaría a muchos chismes, era una figura pública.

_Zuria, sabes que eres mi amiga, mi mejor amiga, pero no te daré prioridades, deberás competir con las chicas para modelar mi creación principal de la colección de verano._

_Sí, lo sé._

Zuria sonrió y la abrazo.

_¿Seguirás siendo la modelo principal del abuelo.?_

_Solo por este año, ya me quiero retirar de las pantallas, quiero dedicarme a mis diseños y mi empresa por completo._

_¿Qué? Estás super joven._

_Pero me gusta más, ser quien las entrene y verlas usar mis diseños._

Zuria se rindio, solo siguieron hablando de una y otra cosa, hasta que llegó el momento de cada uno ir a casa, pero Lety fue a visitar al abuelo, quien siempre tenía cosas lindas que decirle.

Al verla, se emocionó mucho, abrazándola con mucha alegría, aprovecho para decirle que ya quería retirarse.

_Yo respeto tu decisión, abuelo, daremos por terminado el contrato._

_No, mi niña, quiero que te quedes y me ayudes a que mi nieto se dé cuenta de que sus amigos y esa novia, no le convienen._

Lety levantó una ceja.

_¿Acaso es un niño, No pensarás que me quedé a cuidar de él, es mayor que yo, debería ser un hombre maduro.?_

_Ja, ja,ja, no es tan maduro como tú, mi niña, solo quiero que lo ayudes un poco, hazlo por mí._

Lety caminaba de un lado a otro.

_No seas manipulador, viejo, solo no me pidas ser buena con él o ellos, por qué no lo haré para nada._

El abuelo asintió con una sonrisa y la abrazo.

Brasil

_¿Qué carajos vas a hacer allá?_

Grito su padre molesto.

_Mi abuelo ya no puede más y yo soy su heredero, así que iré a trabajar en lo mío, no quiero defraudar a mi abuelo._

El chico bajaba sus maletas.

_No puedo creer que dejes a tu familia, por eso, el padre de Lise quiere hablar sobre la boda._

_Qué boda, mamá, Lise sabe bien que no estoy para eso._

Su tono era sarcástico.

_No puedes decir eso, tenemos negocios juntos, por ese trato._

_Un trato que hicieron ustedes, como siempre, yo no prometí casarme y no lo haré._

Greyson tomo sus maletas y se subió a la camioneta donde el chófer lo llevaría al aeropuerto, en su mente ya tenía todo lo que quería hacer, su abuelo le había contado de la modelo que estaba, quien firmó un contrato para que la revista publicará en primera plana, todos sus eventos, sin mencionar su nombre, él no tenía mucho interés en ella, pensado en que sería la típica chica caprichosa, que por tener un buen cuerpo, se creía la más bonita y especial, ya pensaba en que podría tener problemas con ella, llegó a su destino y se dio cuenta de que, su amigo y novia lo esperaban con maletas, frunció el ceño por pensar que eran sus padres los que le pidieron a la chica seguirlo.

_¿¡Sorpresaaa!?_ 

_¿Qué haces aquí, lise?_ 

Greyson sintió fastidio al verla.

_No dejaré que mi novio viaje solo y yo seré la nueva modelo de tu empresa cariño._

Hablo segura.

_Yo no dejaré solo a mi amigo y podría encontrar a una chica allá._

Grey se sintió fastidiado, pero no menciono que la aún modelo, tenía un contrato firmado por tres años y aún quedaba uno, así que era imposible que ella tomara ese puesto.

Mientras unos viajaban en un avión, donde uno más que otros, pensaba en todo lo que podía pasar en su vida en ese nuevo lugar, no deja a de pensar en lo bien que hablaba su abuelo de esa modelo, mientras que otra estaba sentada en su puesto favorito, donde diseñaba su nueva obra, una sexi lencería, pero le faltaba algo y en ese momento no podía pensar, se levantó del lugar y con una copa de vino en su mano, veía la gran ciudad por medio del ventanal, pensaba que sería de su vida si su padre no hubiese muerto, si ese anciano no la hubiese ayudado y algo resentida, pensaba en su madre, aunque no supo más de ella y tampoco quiso investigar.

En otro lugar

_Deberías de buscar a tu hija, nos puede ayudar._

La mujer se levantó de la cama.

_¿Crees que me recibirá con los brazos abiertos? La dejé con su padre._

El hombre se le acercó y la abrazo por detrás.

_Estoy seguro de que te extraña y si te ve, se va a emocionar._

_Lo pensaré._

La mujer salió de la habitación, se sirvió una copa de vino y pensaba en que si su hija tenía su mismo carácter, no la perdonará así de fácil, tal vez nunca lo haga, su destino estaba en fracasar siempre, dando a entender que todo lo fácil se iba de sus manos, ya que nada era logrado por ella misma.