La Simple Omega Rechazada.

Ha pasado una semana desde la reunión, Mario ha estado viniendo a diario y yo salgo con él al cine, la luna me dijo que estaba bien salir y distraerme, estábamos en el cine disfrutando cuando mi teléfono sonó, era un mensaje de Alekséi quien le había dado mi número de teléfono, fruncí el ceño y guarde el celular al terminar la película regresamos a casa, Mario me abrazó y me susurro al oído que todo estaría bien y que pronto ya no sufriría más el abrazo fue interrumpido por la voz de Ale quien dijo muy déspota.

Alekséi: Hola Mario, espero no me la hayas cansado mucho, pues, ella es mi joya y a eso va en estos momentos.

Mario apretó sus puños y sus ojos se volvieron negros como la noche sabía que era Canon su lobo, él me quería mucho también. Puse mi mano en su pecho y lo detuve.

Gema: Está bien Mario es mi obligación, nos vemos pronto si cuídate.

Mario: Tú también hazlo muñeca.

Mario dio la vuelta y se marchó Alekséi alzó su voz y tomándome del brazo me dijo.

Alekséi: Que no sabes que no puedes andar de zorra, en este momento, los amigos de Ale salieron y empezaron a decirme cosas, como; luna defectuosa, eres una zorra, ya Ale me dio permiso de follarte cuando quiera, Loba defectuosa hazme un oral y otras cosas más no conteste, aunque en mi mente había una carnicería, pero suspiré y le pregunté a Ale.

Gema: Para qué me llamó Alfa Petrov.

Alekséi: Para que hagas lo que sabes hacer, camina.

Me tomó del brazo y me hizo caminar delante de él, entonces cuando iba a entrar a su habitación me detuvo y dijo.

Alekséi: Qué crees que haces, ni loco entras a mi habitación, a esa solo es digna de entrar mi luna y futura esposa Brittany.

Sus palabras eran peor que dagas en mi corazón, me guio a mi habitación y me ordenó que me bañara, salí solo con la toalla para buscar ropa y ponérmela, él estaba en la cama sentado al verme, me dijo que no buscara nada y me quitó la toalla, mi cara era muy roja estaba muy ruborizada, me observo durante varios minutos y me acostó en mi cama.

Besó, mi cuello y luego mis pechos, con ellos jugaba los chupaba, yo solo me imaginaba que él me amaba y me deseaba como yo a él.

Besó todo mi cuerpo y puso su lengua traviesa en mi zona, sentí una sensación maravillosa nunca antes vivida, sonidos extraños salieron de mi boca, luego sentí una sensación a un mejor e inexplicable, él sonrió y subió para estar encima de mí, frente a frente y me dijo con residuos de un líquido por sus labios.

Alekséi: Dime si tus otros amantes te han hecho vibrar de esta manera.

No dije nada, solo me quedé en silencio, él empezó a besar mis labios, ni eso sabes hacer, volvió a preguntar y de nuevo me besó, está vez le seguí un poco mejor el paso.

Volvió a besar mis senos, me sentía muy bien, esto me encantaba, volvió a besarme, vi sus ojos y eran color miel con destellos dorados, estaban ambos presentes, abrió mis piernas e intento introducirse, pero abrió los ojos porque no pudo a la primera, luego lo volvió a intentar y tampoco pudo.

Alekséi: Gema, no has estado con nadie, por qué no me lo dijiste.

No respondí, solo me quedé en silencio, él me volvió a besar, poco a poco fue entrando en mí sin dejar de besarme gemí fuerte cuando entro y tape mi boca.

Alekséi: Shh tranquila, ya pasará sí.

Siguió moviéndose y tuve que volver a tapar mi boca con mi mano, él me dijo que no lo hiciera, que quería escucharme y así siguió moviéndose hasta que sentí algo caliente dentro de mí.

Enseguida hice para levantarme, no sé adónde iba a ir, solo quería salir de allí y Ale me tomo por el brazo y me acostó junto a él, yo no hablaba, no decía nada, no pronunciaba palabra alguna.

Alekséi: ¿A dónde vas? Quédate acostada.

NOS quedamos en silencio y tocaron la puerta, luego las voces de sus amigos resonaron.

X: Por lo visto estuvo bien.

Y: Ya sal y ven a contarnos.

L: Déjala salir, mira que en tres semanas si podrá ser mía esa zorra.

Alekséi se levantó enredado en las sábanas y se escuchó un golpe fuerte, luego silencio, minutos después entró de nuevo y me abrazó. Yo siempre me iba los sábados por la tarde noche al bosque y regresaba el domingo en la tarde para limpiar mi casa, cuando se hizo la hora quise levantarme a bañarme y a alistarme para irme a casa, entonces me caí él rápidamente me levanto.

Alekséi: Por qué te levantas.

Gema: Solo quería bañarme para irme a mi casa, hoy es sábado señor Petrov.

Alekséi: No volverás a esa casa sola y menos a dormir, tampoco me digas, señor Petrov.

Gema: Disculpe mi Alfa.

Alekséi: Gema, acabamos de hacer el amor, dime Alekséi.

No dije nada, solo me volví a acostar y me quedé profundamente dormida.