El Amor Alocado del Jefe del Pueblo

"¡Mas Abi, espera!" Runi detuvo el brazo de Abi que estaba a punto de bajar del coche.

"¿Qué pasa, dek?" Preguntó Abi que renunció a abrir la puerta de su coche.

"¿Esta empresa es tuya, Mas?" Preguntó Runi.

"¿Cómo te explico, dek? En realidad, el fundador de esta empresa soy yo, Danu y otro amigo mío, Iqbal. Aquí, mi puesto es el de Presidente, Danu es el Vicepresidente e Iqbal el Director. Danu e Iqbal son los que más la gestionan porque son los que se quedan aquí. Durante estos dos años, yo solo he supervisado desde el pueblo, aunque de vez en cuando sigo yendo a la ciudad para reunirme con clientes importantes. Pero, solo he aparecido unas pocas veces en esta empresa. Porque después de mudarnos a este edificio, mi padre me pidió que volviera al pueblo." Explicó Abi.

"¿Hablas en serio, Mas? ¡Esta es una de las mayores empresas de TI!" Runi parecía muy sorprendida.

"¿Acaso tengo cara de estafador, dek?" Preguntó Abi mientras tomaba el rostro de Runi en sus manos. Mientras que Runi solo podía sonreír con picardía.

"Vale, vamos a entrar. Tengo una reunión del consejo de administración en breve." Dijo Abi.

"Eh, Mas. ¡Aún no he terminado!" Dijo Runi.

"¿Qué más, mi amor?" Preguntó Abi.

"Es que ayer mamá finalmente me dijo con quién quiere que me case." Dijo Runi.

"Hm, ¿y?" Preguntó Abi.

"Es que, trabaja en esta empresa, Mas." Continuó Runi.

"Jajaja...." Abi se echó a reír al escuchar la historia de Runi.

"¿Por qué te ríes, Mas?" Preguntó Runi extrañada.

"Bueno, al menos sé que mi rival es mi empleado. No se atreverá a arrebatarle la futura esposa al Presidente, ¡si aún quiere vivir!" Dijo Abi con una sonrisa engreída.

"Iih, Mas da miedo cuando está así." Dijo Runi.

"Mas, ¿tan tierno, dulce y lindo soy que dices que doy miedo, dek?" Bromeó Abi.

"¡Oh Dios mío, qué narcisista es mi futuro esposo!" dijo Runi riendo.

"Vamos, bajemos, dek. Danu e Iqbal ya están llamando sin parar." dijo Abi mientras mostraba su teléfono.

"Sí, sí, Mas." Respondió Runi.

Luego salió después de que Abi le abriera la puerta. Algo sencillo, pero que él nunca olvidaba cuando viajaba con Runi en coche. No olvidó mantener la mano en la puerta del coche para que Runi no se golpeara la cabeza.

"Con razón me pidieron que me arreglara, resulta que me iban a traer aquí. Lo pregunté y me dijeron que ya lo sabría." Refunfuñó Runi.

"Ampun dremimile to, sayangku. (Ya terminaste de refunfuñar, cariño.)" Dijo Abi mientras apretaba la mano de Runi. De vez en cuando frotaba el dorso de la mano de Runi con el pulgar.

Todos los empleados miraron hacia Abi que caminaba de la mano de Runi. No todos sabían quién era Abi, solo los empleados antiguos sabían que ese hombre alto, corpulento y guapo era su Presidente.

"Buenos días, señor Presidente. ¿Cómo está? Hace mucho que no se le ve." Saludó uno de los empleados veteranos.

"Buenos días. Alhamdulillah, bien. ¿Sigues a gusto aquí, Mas?" Respondió Abi amablemente, bromeando un poco.

"Por supuesto, señor. Tengo la suerte de trabajar en una empresa que es generosa con sus empleados." Respondió el hombre.

"Alhamdulillah. En ese caso, voy a subir, Mas. Danu e Iqbal ya me están esperando." Se despidió Abi.

"Bien, señor Presidente." Respondió el hombre mientras se inclinaba respetuosamente.

Después de escuchar a su empleado veterano saludar y charlar un poco, los demás empleados se turnaron para saludar a Abi y Runi.

Abi era conocido por ser muy amable y no dudar en mezclarse con sus empleados. Por lo tanto, los empleados veteranos no dudaban en pedirle que charlara un rato después de saludar.

Además, durante estos dos años, Abi casi no se había dejado ver visitando la empresa. Haciendo que los empleados veteranos echaran de menos su amabilidad.

"¡Bienvenido, nuestro Big Boss!" Saludó Iqbal que se abalanzó directamente a abrazar a Abi.

"¡Woyy! ¿El modo teletubbies por qué no me invitan?" Soltó Danu al ver a sus dos amigos abrazándose para liberar el anhelo.

Danu también se unió al abrazo de Abi e Iqbal. Se notaba el anhelo entre ellos, incluso Runi que era nueva, podía sentir el anhelo y la cercanía de los tres.

"Casi se olvidan de saludar a la señora jefa." Bromeó Iqbal.

"Bienvenida a la empresa de mi futuro marido, doctora. Me presento, soy Iqbal, fuera soy amigo de Abi, en la empresa, soy subordinado del señor Jefe." Explicó Iqbal.

"Encantada de conocerte, kak Iqbal. Soy Arunika." Respondió Runi.

"Conmigo, seguro que ya me conoces. Así que no hace falta presentarse." Dijo Danu.

"Sí, me acuerdo, kak Danu." Respondió Runi.

"¿A qué hora empezamos?" preguntó Abi.

"Todavía quedan treinta minutos." Respondió Danu. Luego le entregó un ipad a Abi que contenía el material que se iba a tratar.

"Dek, ¿quieres beber o comer algo? Voy a ignorarte un rato." Dijo Abi.

"Lo que sea, Mas. Sí, no pasa nada, Mas, concéntrate en tu trabajo." Respondió Runi.

Abi llamó a uno de sus empleados para que le trajera bebidas y comida para Runi.

Abi parecía estar leyendo seriamente el borrador que le había dado Danu. Los tres estaban discutiendo muy seriamente. Runi observaba el rostro serio de Abi que irradiaba un aura especial. Realmente se veía muy genial a los ojos de Runi.

Poco después, la comida y la bebida que Abi había pedido llegaron, junto con Danu e Iqbal que se despidieron de la habitación de Abi.

"Mas, ¡el pudín de seda está delicioso! Pruébalo aaaa" Ofreció Runi.

Abi abrió la boca cuando Runi le metió el pudín en la boca.

"Otra vez, dek." Pidió Abi de nuevo a Runi.

Runi volvió a darle de comer a Abi que seguía concentrado con el ipad en la mano. Siguió observando el hermoso rostro de Abi de lado.

"Dek, ¿por qué me estás mirando así desde hace rato?" Preguntó Abi sin apartar la mirada.

"Estoy fascinada con mi futuro esposo." Respondió Runi que hizo sonreír a Abi.

"Aquí tienes Mas, aaaa otra vez." Dijo Runi mientras volvía a meter el pudín en la boca de Abi. Runi alimentó a Abi hasta que el pudín se acabó.

"¿No has desayunado hoy, Mas?" Preguntó Runi.

"No tuve tiempo, dek. Pero esto ya es como desayunar." Respondió Abi.

"¡Qué costumbre, Mas! ¿No te acuerdas que ayer te dolió el estómago?" Regañó Runi.

"¿Qué puedo hacer, dek?"

"¿Qué qué, qué? ¡Solo Mas que no se preocupa por sí mismo!" Runi continuó su regaño mientras le daba de comer a Abi macarrones schotel.

"Casémonos mañana, dek. Es agradable que alguien te dé de comer mientras trabajas." Se rió Abi.

"No digas tonterías, Mas. ¿Por qué no ayer junto con bang Bayu?" Respondió Runi que hizo reír a Abi.

"¿Papá ya nos dio su bendición?" Preguntó Runi.

"Iba a decírselo a papá y mamá esta noche." Respondió Abi.

"¿Qué vas a decir, Mas?" Preguntó Runi.

"¡Ah, qué curiosa! Escúchalo tú misma esta noche." Respondió Abi que a propósito hizo que Runi sintiera curiosidad.

"¡Ah! Mas Abi. ¿Y si muero de curiosidad?" Se molestó Runi.

"Ten paciencia, dek. Solo son unas horas, ¿no puedes esperar?" Bromeó Abi

"Hhuuuhhhhh, Mas Abi, ¡te juro que eres muy molesto!" Runi estaba cada vez más irritada. Luego se terminó los macarrones schotel que le había dado de comer a Abi.

"Eh, ¿por qué te lo terminaste, dek? Todavía quería." Protestó Abi.

"¡Ya sé! Estoy molesta contigo. Ya estoy curiosa y aún así no quieres decírmelo." Respondió Runi que hizo reír a Abi.

"¡Ay, qué linda! Lo escucharás tú misma, considéralo una sorpresa." Dijo Abi mientras jugaba con la mejilla de Runi.