Cansado de que sus padres le preguntaran “¿Cuándo te vas a casar?”, Joe Erlangga decidió tomar la iniciativa y proponerle matrimonio a una chica que siempre ha sido herida por su novio.
Tissa Andriana, una hermosa joven que ya tenía pareja, se vio obligada a aceptar la propuesta de Joe, poniendo fin a cinco años de relación con un novio que nunca le dio certezas y que la lastimaba acercándose a otras mujeres.
—"¿Es este un matrimonio por contrato?" preguntó Tissa.
—"¡No! No hay matrimonio por contrato entre nosotros. Quiero casarme solo una vez en la vida, y esa persona eres tú." respondió Joe.
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Capítulo 18
La fiesta se celebró en un lujoso hotel de cinco estrellas en la ciudad. Elfan y Cecil salieron del coche. Ambos intercambiaron sonrisas tomados de la mano con afecto, como si fueran los dueños del mundo.
"Wow... El evento es muy lujoso y festivo... No puedo esperar a entrar...", Cecilia miró con admiración el lugar que había sido transformado. Era tan lujoso y hermoso a la vista...
"Es la primera vez que asisto a un evento como este...", dijo Elfan. Se podría decir que estaba un poco anticuado.
Por lo general, Surya y Cecil siempre asistían a eventos como este. En cuanto a Cecil, siempre había sido reacia a salir, especialmente a eventos como este.
La empresa dirigida por Surya aún no podía ser tan grande como otras empresas, porque la empresa acababa de ser construida por el hijo de Manisa.
Antes de que pudiera hacer algo, el hombre había fallecido. Fue reemplazado por Surya, que en realidad era perezoso. Surya hizo todo eso por orden de Manisa, donde se le exigía ser inteligente.
No fue fácil para Surya dirigir la empresa, aunque había existido durante veinte años. La empresa casi se declaró en quiebra y se recuperó con el esfuerzo de Surya solo. ¿Quién querría ayudar?
Y como dijo Tissa antes, la empresa se ha mantenido firme durante los últimos diez años. Pero aún no puede competir con las grandes empresas.
"¿Tu papá no vino?", Cecilia se quedó en silencio por un momento. Miró a Elfan con una dulce sonrisa.
"No lo sé... No había nadie en casa antes y pensé que papá ya estaba aquí...", respondió Cecil. En realidad, también estaba sorprendida. Tenía la sensación de que no había nadie en casa antes. Pensó que sus padres se habían ido y estaban aquí primero. Pero parece que aún no han llegado, ¿a dónde fueron?, pensó.
"Está bien, tal vez tus padres todavía están en camino. Es mejor que entremos primero...", Cecilia asintió. Los dos humanos diferentes entregaron una invitación como prueba de que realmente estaban invitados a este evento.
"¿Esta es la invitación?"
"Bien, lo aceptaré primero..." El hombre que fue asignado al frente para recibir a los invitados tomó las invitaciones de Elfan y Cecil para revisarlas. Hasta que entró y se detuvo un lujoso coche tipo Lamborgini.
Elfan y Cecil se miraron. ¿De quién es este invitado? ¿Por qué usa un coche tan lujoso? No es comparable al coche que usó Elfan antes.
"Por favor, señorita..." El chofer abrió la puerta a alguien dentro del coche.
"Gracias...
Unos tacones altos negros brillantes comenzaron a verse. Elfan y Cecil, que todavía estaban allí, sintieron curiosidad por el invitado que llegó en el coche lujoso.
Una hermosa mujer bajó. Todos los invitados que acababan de llegar se sorprendieron como si estuvieran cautivados por la hermosa mujer vestida con un vestido negro azabache. Su cuerpo era sexy como el de una modelo, su sonrisa era dulce, su apariencia era realmente muy agradable a la vista.
¡Deg!
Elfan y Cecil se congelaron. La mujer que subió al lujoso coche era Tissa. Sus pasos eran tan elegantes mientras caminaba por cada piso.
"Tissa... Es muy hermosa...
Al principio, Tissa también se sorprendió al ver a Elfan allí. Un segundo después, Tissa se expresó con calma. Pasó junto a las dos personas como si no fueran visibles.
"Buenas noches...", saludó Tissa al hombre con un traje pulcro que estaba recibiendo a los invitados.
"Buenas noches, señorita..."
"Tengo la sensación de que este evento solo se organiza para los empleados de la empresa. No para una empleada de una boutique como tú..." Tissa se giró. Sonrió a Cecil, que estaba de pie abrazando afectuosamente el brazo de Elfan. La expresión de Cecil era tan desdeñosa...
"Cecil tiene razón, ¿por qué viniste a este lugar?", preguntó Elfan. "Lo sé, seguramente quieres seguirme, ¿verdad?", continuó Elfan con confianza. A Tissa no le importó, volvió a mirar al anfitrión del evento.
"¿Puedo ver su invitación, señorita?", pidió el hombre.
"Pero vine sin invitación..."
"Ppprrrrtt... Jajaja... ¿No tienes invitación pero vienes a este evento? Estás soñando o alucinando, Tissa..." Cecil se echó a reír, seguida también por la risa de Elfan. El hombre también dijo...
"Jajaja... Tissa... Tissa... Es mejor que te vayas de aquí ahora... Este es un lugar...
"Puede que no tenga una invitación, pero tengo esta tarjeta..." Tissa interrumpió las palabras de Cecil y Elfan con una tarjeta en su mano. La tarjeta acababa de ser sacada del caro bolso que llevaba Tissa.
"¿Solo una tarjeta? Jaja... Tissa... Tissa... Este evento es para empresarios ricos. Por ejemplo, como Cecil, que en realidad es hija de un empresario. Y el requisito para entrar es dar una invitación... No una tarjeta..." Elfan volvió a burlarse de Tissa mientras se reía como si fuera muy divertido.
"¿Ya terminaste de hablar?", la risa de Elfan se detuvo de inmediato. Tissa miró al hombre con una mirada plana y fría...
"Si no sabes nada, es mejor que te calles..." Tissa se llevó el dedo índice a los labios. "Además, todavía tengo vergüenza... No soy un jailangkung que viene sin ser invitado..." Tissa levantó una comisura de sus labios, su mano levantó la tarjeta que aún tenía en la mano.
"Como dije antes... No tengo una invitación para entrar a esta fiesta, pero tengo esta tarjeta..." El hombre que tenía la tarea de recibir a los invitados recibió la tarjeta de Tissa.
"Señorita, ¿usted?", el hombre parecía nervioso e incómodo hasta que...
"Por favor, entre, señorita, y esta es su tarjeta..." Tissa volvió a recibir la tarjeta, cuando estaba a punto de entrar...
"¡Señorita, espere!"
"¿Sí?"
"Una vez dentro, vuelva a mostrar esa tarjeta... Allí tiene un asiento especial..."
"Está bien, gracias..."
"De nada, señorita..."
Tissa sonrió burlonamente a Elfan y Cecil y luego entró sin más.
"¿Eh? ¿Cómo pudo entrar así? No debería entrar sin una invitación, ¿verdad?", protestó Cecil al hombre. La mujer pateó sus pies con mucha molestia.
"Así es, ella no es una invitada, pero ¿por qué...?
"La señorita tenía una tarjeta premium que no cualquiera tiene... Ella es una invitada VIP, lo que significa que es una invitada importante...", explicó el hombre.
"¿Cómo es posible? Ella no trabaja en ninguna empresa..." Cecil aún no podía aceptarlo.
"Podría ser que la señorita sea la mujer especial de alguien..." Cecil parecía cada vez más molesta, su pecho ardía al ver que Tissa siempre estaba un paso por delante de ella.
...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...
Dentro de la fiesta, Tissa miró a su alrededor. Estaba sola en este momento porque Joe dijo que todavía tenía asuntos que atender. Incluso su chofer lo dijo, mientras que Joe aún no pudo ser contactado.
"¿Podría ser que me engañaron? Considerando que él aún no ha venido aquí, ¿verdad?", Tissa comenzó a pensar cosas extrañas. Joe no estaba a la vista, lo que hizo que Tissa claramente se sintiera extraña aquí. Tissa no conocía a estas personas...
Pero el vestido y la tarjeta, así como el buen servicio para ella, demostraron claramente que Joe llegaría pronto.
"Es una pena, llegar con lujo a este evento pero estar solo..." Tissa giró los ojos con pereza. Respiró hondo, estas dos personas siempre la molestaban.
Tissa, que no quería preocuparse, quería irse de inmediato, pero...
"Lo sé, seguramente viniste aquí porque querías conocerme, ¿verdad? Nuestra relación ha durado más de cinco años, es imposible que puedas superarlo..."
"En lugar de hablar mucho, es mejor que pienses en la deuda de tu madre conmigo. O puedes pedirle dinero a esta mujer para pagar todo. Ella es la hija de un empresario, esa cantidad de dinero no es nada, ¿verdad?", Tissa cruzó los brazos sobre el pecho. Quería ver cuál sería la reacción de Elfan cuando le cobraran su deuda.
Elfan comenzó a avergonzarse, quería responder a las palabras de Tissa, pero de repente hubo un anuncio de que el evento estaba a punto de comenzar.
"Cariño, mira, el evento está a punto de comenzar..." Elfan desvió su atención abrazando afectuosamente a Cecil para invitarla a irse.
"Señorita, su asiento está en el frente..." Una mujer con un vestido lujoso invitó a Tissa a sentarse en el asiento especial que había sido provisto junto a otros empresarios exitosos.
En cuanto a Cecil y Elfan, solo se sentaron en asientos regulares en la parte de atrás. Cecil se estaba calentando aún más...
"¡Maldita sea! ¿Por qué siempre pierdo contra ella...
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Continuará
