El poderoso y despiadado CEO Daemon Rivadeneira, obligado por su familia, lanza un concurso para encontrar una esposa.
Muchas jóvenes de todo el país se suman a esta competencia. Quién ganará el corazón de nuestro despiadado CEO?
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Capitulo 20
Nicole llegó a su habitación, su corazón seguía corriendo y dando tumbos como si estuviera en una carrera. Respiró hondo y se tiró a la cama.
Se tapó con la almohada en la cabeza. Quería gritar. Era su primer beso real y había sido robado como si nada por Daemon. Lo peor es que para él no había sido nada especial, ni romántico. Nada de lo que ella había imaginado que sería.
Obviamente todas las veces que fantaseó con su primer beso había sido con Pablo. Aunque Nicole no podía negar que este beso que le dió Daemon superaba con mucho las espectativas que tenía para un primer beso. Sus besos eran como fuegos artificiales. Lo único malo, es que eran besos actuados, sin amor.
Decidió ya no darle más vueltas al asunto. Debía ubicarse, ella necesitaba el dinero, él necesita una salida al matrimonio. Viéndolo fríamente, es como si Daemon fuera su jefe. Así no había necesidad de mezclar sentimientos.
Nicole se relajó y después pudo conciliar el sueño.
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Ya habían pasado varios días. Nicole no podía confrontar a Daemon, cada vez que lo veía por la casa a lo lejos ella daba media vuelta y lo evitaba.
Esa mañana, Nicole bajó a desayunar como de costumbre. Pero se encontró con que nadie podía pasar al comedor.
La sala estaba llena de jóvenes hambrientas y malhumoradas. Les indicaron que el desayuno se serviría a las 9. Todas estaban esperando a que diera la hora indicada.
Finalmente las puertas del comedor se abrieron, cuando las chicas entraron se llevaron la sorpresa de que Daemon estaba adentro, esperando para desayunar con todas ellas.
- Buenos días hermosas damas. Por favor tomen asiento. - dijo Daemon de forma comedida.
Las mujeres se peleaban por los lugares más próximos a Daemon. Nicole por su parte trató de sentarse lo más lejos de él y la acompañaba su amiga Rocío.
El desayuno comenzó y todas comían muy animadas. Como siempre el chef se había lucido con la comida.
Nicole intentaba no voltear a verlo, para que él no le hablara. Pero no era necesario, Daemon estaba muy distraído charlando con todas las mujeres a su alrededor. Naomi limpió el rostro de Daemon con una servilleta, como marcando territorio con las demás.
Ese pequeño gesto molestó mucho a Nicole. Quién tuvo que recordarse que Daemon era sólo su jefe y que no había sentimientos involucrados.
Todos terminaron de desayunar, después del desayuno. Daemon hizo un anuncio.
- El día de hoy vamos a hacer una convivencia. He convencido a la gente de producción que está semana no haya competencia por la inmunudad.
Las mujeres se quedaron viendo unas a otras asustadas. No habría inmunidad esa semana?.
- Sé lo que están pensando, la respuesta a lo que se preguntan es que en esta ocasión la inmunidad será rifada. Esta vez será por suerte quien la obtenga. - dijo Daemon.
Las chicas estaban contentas, tenían mejor oportunidad para obtener la inmunidad que competir con alguien como Naomi.
- Ahora vayan por favor por su ropa de playa. Todos vamos a dar una vuelta en el yate. Las veremos en 20 minutos en el muelle. - dijo Daemon y las mujeres, incluyendo a Nicole salieron a sus habitaciones a cambiarse de ropa.
Cuando entró a su habitación, Nicole encontró en su cama un hermoso vestido blanco de tela fina, con traje de baño para salir en el yate, unos lentes de sol y un sombrero para taparse el sol.
Después alguien salió de su baño.
- Ah ya regresaste. Vine a dejarte algo de ropa para tu salida. - dijo Paula.
- De verdad que te luciste Paula. Está increíble el vestido. Cómo supiste? - preguntó Nicole.
- Soy muy amiga de alguien que se entera de todo acerca de el concurso y me llama cuando hay algo importante. Además esa persona al igual que yo, queremos que tú ganes. - dijo Paula.
- Muchas gracias, no sé si tengo muchas posibilidades de ganar. Pero agradezco su apoyo. - confesó Nicole.
- Vamos apúrate ya debes estar lista. - dijo Paula.
Nicole fue a cambiarse con un traje de baño blanco al igual que el hermoso vestido cuya tela se veía vaporosa.
Se puso el sombrero y los lentes y se puso un poco de protector labial color cereza. Ya estaba lista para salir en el yate. Cuando bajó, se fijó que muchas de las mujeres iban vestidas muy provocativas. Con pequeños shorts y un bikini.
Pero la que realmente resaltaba con elegancia era Nicole. Incluso Naomi se veía más ordinaria con el atuendo que llevaba. Todas habían apostado por verse provocativas y Nicole al estar un poco más tapada resaltaba de todas las demás. Eso era un punto para Nicole y agradeció tener a Paula como asistente.
Varias mujeres empezaron a ver con envidia a Nicole y al outfit perfecto que traía para la ocasión. Pero ya no había tiempo de volver a sus habitaciones a cambiarse.
Todas fueron llevadas al muelle. Nicole conocía muy bien aquel camino, pero algunas de las mujeres no conocían esa parte de la mansión.
Cuando Daemon vio a Nicole, se veía complacido por su apariencia. Incluso hizo un "Wow". Nicole al verlo se sonrojó.
- Debes estar muy feliz con tu atuendo. Lástima que la verdadera elegancia no solo está en la ropa. - dijo Naomi crítica.
- Y tú debes estar decepcionada con el tuyo, para la próxima intenta ser más elegante y bájale a lo sensual, pues por desgracia, ya caiste en lo vulgar. - contestó Nicole, no iba a dejarse de Naomi.
Nicole se alejó lo más posible de Naomi, que estaba roja de furia y buscó a su amiga Rocío.
- Me encanta tu atuendo Nicole. Ese vestido es precioso y el sombrero le da un toque muy elegante. No sé en qué pensaba mi asistente cuando me puso este mini vestido. - dijo Rocío.
- Tu vestido también es hermoso, es verde, como tus ojos y se ve que es muy fresco. - dijo sinceramente Nicole.
- Si, pero tendré que buscarme una sombra, o me quemaré pronto. - dijo Rocío.
Las mujeres empezaron a subir a yate una a una, ayudadas por Daemon. Cuando le tocó subir a Nicole, éste le apretó la mano y le dijo:
- Necesitamos hablar, ha habido cambios importantes en nuestra negociación. Esta noche como siempre.
Nicole no quería estar a solas con él, pero un trato es un trato, así que asintió con la cabeza.