La Niñera De Niños Del Ceo

La noche fue larga y el domingo aún más largo, salimos al parque, al centro comercial, disfrutamos mucho del día, Alisson me hizo comprar un vestido plateado de lentejuelas un poco corto que, quieras o no, resaltó mis escasas curvas. Tiene un escote profundo en el pecho y llega hasta la mitad del muslo, me pareció un poco exagerado, pero Alisson dijo que si no iba dejaría que el perro escapista de la vecina durmiera en mi cama y lo peor es que el perro orina mientras duerme, rápidamente accedí a su petición.

Alisson: Si te mueves, voy a hacer borrones y te quedarás con la cara toda manchada porque no lo voy a arreglar - mi amiga se queja después de que me muevo una vez más mientras ella me delineaba los ojos, normalmente me hago un delineado básico, pero ella hace un delineado que parece cosa de artista.

Yo: Está bien, no me voy a mover, pero es que cuando tú me dices que no me mueva, ahí es cuando dan ganas de moverse - digo ya molesta, en realidad no quería ir.

Alisson: Solo no te muevas, Júlia, no es difícil, y no vengas con esa mirada de que me vas a decir que no quieres ir, porque te voy a azotar el trasero - ella dice poniendo fin a la conversación y yo me encogí de hombros sabiendo que no vale la pena discutir.

Ya completamente lista, me miro en el espejo y me siento hermosa, ella hizo un maquillaje básico con delineador negro con purpurina, un look espectacular en los labios, un labial rojo mate que realza aún más mis labios gruesos.

Alisson: Estás simplemente preciosa, no, no simplemente, maravillosamente hermosa - ella dice y sonríe satisfecha - Ahora voy a ponerme mi ropa.

Yo: El pedazo de tela que insistes en llamar ropa - le digo, ella revuelve los ojos, cojo mi celular para tomar una foto frente al espejo y por primera vez tengo ganas de publicar en Instagram una foto que no sea solo de mi rostro, me pongo los zapatos de tacón alto de tiras que usaré, tomo una foto en el espejo mirando el celular, no pienso en tomar otra y publico la única foto que tomé antes de que me arrepienta, en la leyenda solo pongo un emoji de zorro, no sé por qué, no soy creativa para crear frases y poner en leyendas.

Miro el celular y ya son casi las diez de la noche, no sé en qué estaba pensando al aceptar esto, como sé que la única persona que dará me gusta será mi amiga y en este momento ella está arreglándose, bloqueo la pantalla del celular y voy a la sala a esperar a Alisson.

Cuando llego a la sala, mi celular comienza a vibrar en mis manos, encuentro extraño una llamada a esta hora y cuando veo, es mi jefe, ¿habrá pasado algo con los niños? Me preocupo, especialmente porque ya hablé con ellos después de la cena.

Yo: Hola, ¿pasó algo? - pregunto preocupada y la cara de sorpresa de mi jefe me preocupa aún más - Habla, Lincoln, estoy empezando a preocuparme.

Lincoln: D-disculpa, ¿puedo saber adónde vas? - él pregunta y no tiene la sonrisa que indica que está bromeando, lo miro sin saber qué responder - María Júlia?

Yo: Voy a salir con Alisson - digo extrañada por la pregunta - ¿Por qué?

Lincoln: ¿A una fiesta? Porque ya pasó la hora de la cena - él no responde lo que pregunté, en cambio, pregunta otra cosa - ¿Ya viste la hora? ¿Estás usando la ropa que publicaste?

Él pregunta una cosa tras otra y mira mi ropa y sonríe incrédulo y muy enojado, ¿mi jefe está celoso?

Lincoln: ¿Viste la longitud de esa ropa, María Júlia? - él pregunta, abro los ojos como platos y me enojo.

Yo: ¿Te estás escuchando, Lincoln? No puedo creer esto, era lo único que faltaba, si tuviera unas tijeras ahora mismo cortaría otros cuatro centímetros - digo roja de ira - ¿quién te crees para querer decidir cómo debo vestirme o no?

Lincoln: No te atreverías tanto, enana de Blancanieves - él dice rojo de ira, ¿a qué me llamó? - Me preocupo por ti, María Júlia, salir por la noche con esa ropa, hay muchos hombres sin escrúpulos por ahí.

Yo: ¿Qué mierda me has llamado, enviado de Lucifer? Que el SEÑOR sepa que no voy sola, así que no hay peligro.

Lincoln - ¿Qué mierda estás diciendo, Maria Júlia? - preguntó casi gritando- ¿Con quién vas a salir? Espero que sea tu amiga o no sé qué hacer.

Júlia - No sabes porque no puedes y no tienes que hacer nada, la vida es mía, estoy soltera, libre y desocupada, hay una canción brasileña que dice así, voy a la osadía, voy a la juerga, hoy quiero emborracharme - Iba a seguir, pero él me interrumpe y la canción ni siquiera es así.

Lincoln - Cállate la p0rr4 de la boca Maria Júlia, ven aquí a casa - Dice rojo de rabia y solo ahora me doy cuenta de que estamos peleando por nada, porque no tenemos nada el uno con el otro.

Júlia - No te preocupes Lincoln, sí voy - Hablo haciendo que él suspire aliviado, sonrío como la mujer del Joker - Mañana a trabajar.

Lincoln - NO TE A... - Cierro la llamada sonriendo y luego siento mi rostro sonrojado, Lincoln está celoso de mí, pero ahora que se joda, menos mal que llamó para discutir así me siento más motivada para ir.

Alisson - Iba a preguntar con quién estabas teniendo esa conversación animada, pero por tu cara sonrojada solo puede haber sido una persona - Dice sacándome de mis pensamientos y mi celular empieza a vibrar en mis manos - ¿Es él verdad?

Júlia - Sí - Suspiro al decirlo.

Alisson - Él te quiere, ¿crees que este sea el momento adecuado para sentarse y hablar? - Pregunta. Quería decir que sí, pero no creo que sea así, además, ¿quién me garantiza que él no correrá hacia Soraya de nuevo?

Júlia - No, Alisson, vamos de una vez antes de que me arrepienta - Digo tragando las ganas de contestar la llamada de Lincoln, pero no soy así, pongo el celular en silencio y respiro hondo dejándolo en la mesita, no me dejaré llevar como la primera vez que acepté sus besos.

Ya en el club, como no bebo alcohol, nos conformamos con las bebidas sin alcohol pero no nos divertimos menos por eso.

Júlia -

Siento tu respiración en mi cuello, pero no hay esa diferencia de altura que me hace parecer una zorrita al lado de un león, inclino la cabeza hacia un lado y Dean toma mi boca de asalto, le beso de vuelta y no tiene el mismo sabor a menta que siento en Lincoln, su agarre y su beso no me hacen sentir la pulsación en el centro de mis piernas que siento solo al sentir la respiración de Lincoln.

Me alejo un poco solo para girar y mirarlo a los ojos, él parece determinado en olvidar a alguien, lo peor es que yo también, así que él me besa de nuevo y vuelvo a corresponder, esta vez intensifico más, para no pensar tanto en Lincoln, pero no hay manera.

Alisson - Vamos a casa que la noche promete, chicos - dice y me separo de mi compañero, pero él continúa con la mano en mi cintura y me guía hacia fuera de la discoteca.

Dean no es feo, al contrario, es guapo, sus ojos de un castaño oscuro intenso, sus cejas gruesas lo hacen aún más guapo, pero cerca de Lincoln parece un niño, maldición, no debería estar comparando.

En el coche, como él no ha bebido nada, él conduce y entabla conversación conmigo, él es genial para hablar, tiene un buen rollo, dice que fue a visitar a su madre antes de empezar a trabajar en una gran empresa, se graduó en ingeniería informática.

Apenas llegamos al apartamento, Alisson y Thomas se van a la habitación, Dean y yo nos sentamos en el sofá, él decide intentarlo una vez más y me besa, yo correspondí pero no puedo sentir exactamente nada, él pone una mano en mi muslo expuesto y no parece querer ir más allá, así que decido hacerlo por los dos y me alejo.

Julia - Basta, no va a funcionar - digo y empiezo a quitarme las sandalias para tener algo que hacer con las manos.

Dean - Gracias a Dios - dice suspirando, lo miro y me mira preocupado por haberlo ofendido, pero solo río - Perdón.

Julia - No te preocupes, simplemente no pudimos contener la risa, yo también estaba a punto de soltarla - digo haciéndole reír conmigo - Y entonces, ¿tienes a alguien en tus pensamientos?

Pregunto mientras me siento cómodamente después de poner una manta en mis piernas, la manta estaba en el sofá desde que veía la televisión y estaba bastante frío por la mañana.

Dean - Lamentablemente sí, ella dijo que con mi nuevo trabajo tendríamos menos tiempo para nosotros, así que decidió terminar, solo por eso, supongo que no me amaba como yo la amo.

Julia - Si fueras millonario, diría que no necesitarías trabajar para tener tiempo para ella - digo haciendo que él ría pero esté de acuerdo - Perdón por decirlo, pero ella está siendo infantil, dijiste en el coche que conseguiste el trabajo de tus sueños, donde ninguna otra empresa pagará tanto como esta. Ella quiere que renuncies a algo que siempre has querido y que puede proporcionar una vida cómoda para ustedes solo porque está de rabieta.

Dean - Lo sé, por eso, por mucho que la ame, no di marcha atrás, antes de partir fui a verla - dice riendo y negándolo al mismo tiempo - ella dijo que solo volvería cuando dejara el trabajo, así que me fui de allí.

Julia - Lo siento mucho, Dean.

Dean - Y tú, ¿estás pensando en alguien? - ¿lo estoy? Mi celular en la mesita de café con la pantalla hacia abajo en el mismo lugar donde lo dejé me dice que sí lo estoy.

Julia - ¿Podemos hablar de eso otro día? Buenas noches, el sofá es genial - digo y sonríe al ver que estoy evitando el tema, le muestro dónde está el baño y le reitero que se sienta cómodo, cojo mi celular y voy a mi habitación, solo allí tengo el coraje de ver qué me espera. Hay diez llamadas de Lincoln y diez mensajes de él, uno que acaba de enviar.

📥 Contesta

📥 María Júlia

📥 No estoy bromeando

📥 por favor

📥 vamos a hablar

📥 buenas noches, espero que te diviertas

📥 Maldición, Júlia, ¿dónde estás?

📥 no voy a poder dormir

📥 Espero que no te acuestes con nadie y te arrepientas como yo me arrepentí cuando estuve con Soraya, creía que era lo mejor para nosotros, Júlia, ¿y tú, cuál va a ser tu excusa?

Este deseo que estamos sintiendo el uno por el otro no es pasajero, cuando beses otra boca te vas a acordar de la mía, vas a sentir que su cuerpo no encaja tan bien como el tuyo en el mío, somos inevitables María Julia.

Confieso que mi corazón se detuvo por un momento, tragué saliva y me gustó saber que él me desea tanto como yo lo deseo a él, pero ¿será que funcionaremos? Y si no lo hacemos, ¿sabremos separar lo profesional de lo personal?

Como sé que no podré dormir pensando en Lincoln, decido no dejarlo dormir tampoco así que le envío un mensaje.

Disculpa, ignoré todo lo que dijiste, estaba ocupada, muy ocupada, apenas me detuve para tomar agua.

Sonrío antes de enviar el mensaje, sé que no debería, pero no me importa, no tarda ni un minuto en llegar su respuesta.

MARÍA JULIA

Hasta puedo visualizar el rostro enrojecido de ira de mi jefe, puedo verlo apartando las sábanas hacia un lado y empezando a caminar de un lado a otro y luego me va a llamar, sonrío cuando la llamada silenciosa aparece en la pantalla, rechazo la llamada y apago el celular.

La noche va a ser larga, y espero decidirme, pensar con claridad sobre qué hacer a partir de ahora.