Adrian es un joven que sufre de acoso escolar, cansado del maltrato y desprecio de sus compañeros por casualidad encuentra un brujo que le hace un hechizo a sus gafas haciendo que todo aquel que lo vea a los ojos con las gafas puestas se enamore perdidamente de él, un día se topa con el matón de la escuela y él se confiesa ante el pero, ¿será por el hechizo de las gafas o algo más?
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18
Le pregunto una vez más,
—¿me amas?—pregunto con los ojos cerrados,
—si, realmente te amo—respondió él,
eras las palabras que tanto anhelo escuchar,
—¿de verdad?—volvió a preguntar incrédula,
—sí, realmente te amo—insistió el y la abrazo y beso,
—¡no puedo creerlo!—ella grita de felicidad, —¿entonces estamos saliendo?—pregunto magnolia,
—sí, eres mi hermosa novia—respondió él,
Entonces se tomaron de las manos y pasearon por todos lados juntos y todos los vieron,
Magnolia sentía que estaba viviendo un sueño, todas querían ser ella en ese momento y ella se sentía muy orgullosa hasta que los amigos de él lo interceptan,
—¿acaso te golpeaste la cabeza?—le dijo uno de sus amigos,
—¿que haces con esa cosa tan fea de la mano?—pregunto él amigo,
—oye no digas así de mi novia, yo sé que es fea y pobre que aún así la amo—dijo él en broma,
Magnolia se sintió mal porque todos los amigos de él comenzaron a reírse de ella incluyendo a su ahora novio, magnolia salió corriendo y fue a refugiarse al baño,
Mientras magnolia llora mirándose al espejo él entra al baño,
—no puedes entrar al baño de mujeres—le dijo ella,
—¡eres mi novia!—él la sujeta del cabello con fuerza, —no puedes irte sin mi permiso,
—me estás lastimado—ella intenta irse pero él no la suelta, —¡déjame ir!,
—creó que tendré que educarte—él la golpea en el rostro,
Ella queda en shock, nunca imagino que esto podría terminar así, la imagen que tenía de él se desmoronó, él nunca había sido malo con alguna chica antes, siempre fue arrogante y creído, pero nunca un maltratador, en ese entonces la realidad la golpeó en el rostro y dolía más que el golpe que le dio en la cara,
—¿cómo puedes hacerme esto?—dijo entre lágrimas magnolia,
—porque eres mi novia y te amo, tengo que educarte para que sepas comportarte—respondió él, le da un beso y la lleva de la mano,
—¡tienes la cara roja!—dijo la amiga, se acerca a magnolia,
—mi novia está bien, apártate—él la empuja,
—¿que demonios te sucede?—dijo enojada,
—esta bien no te preocupes, estoy bien hablamos luego—dijo magnolia asustada de qué su novio lastime a su amiga,
—te dije que era mala idea magnolia—dijo su amiga triste,
Ella volvió a clases e intento fingir que nada había pasado hasta que terminaron las clases,
—¿a dónde vas magnolia?—le dijo él,
—voy a casa—respondió ella,
—tienes que ir a cocinarme a mi casa,¿eres mi novia verdad?—le pregunto él,
—pero tendré problemas en mí casa—insistio magnolia,
—ahora que eres mí novia, soy tú prioridad—la sujeta fuerte del brazo,
—vamos camina no me hagas enojar de nuevo o voy a tener que darte otro golpe—la empuja y ella comienza a caminar,
Ella aprieta fuerte las gafas de Adrián, sintiendo una gran decepción y tristeza, el amor nos vuelve ilusos totalmente incrédulos, pero de no ser así no sería amor, el amor es querer con el alma y carece totalmente de sentido cuando amas sin medidas es porque realmente amas, no existe amor a medias ni poco amor, cuando amas simplemente no puedes irte ni aunque tu mente te lo suplique, pero realmente eso es el amor, cuando amas y no sabes bien por qué e incluso cuando la persona ni siquiera te da razones, magnolia pensó; de quererte a medias sería más fácil, de no haberme enamorado de la imagen que yo misma cree de ti me iría sin culpa, pero ese anheló de amor fue más fuerte, no estoy decepcionada de ti lo estoy de mí porque en el fondo sabía que no eras bueno y te cree en mi mente, me negué a aceptar la realidad y perdí, me perdí y no sé cómo encontrarme, estoy presa de la ambición.
AHORA EN LA ACTUALIDAD
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Adrián estaba abrazo con zero, ambos disfrutando el uno del otro en silencio y con los ojos cerrados, Adrián no aguanta y necesita ver el rostro de zero y cuando abre un poco los ojos lo ve sonriendo, esto hace que el corazón de Adrián latiera muy fuerte,
—¿qué sucede?—pregunto zero cuando abrió los ojos y lo vio mirándolo con una expresión de ternura,
—eres realmente encantador—dijo zero extiende su mano y acaricia su mejilla con suavidad,
—tu mano es áspera—dijo Adrián,
—es porque entreno demasiado—respondió zero,
—¿me dirás por qué estás tan lastimado?—pregunto Adrián,
—no es necesario que sepas, no quiero involucrarte en esto—zero se levanta y se dirige al baño,
—pero dijiste que me dirías—dijo Adrián,
Zero se detiene por un leve momento, pero se arrepiente y se mete al baño, al salir de la ducha Adrián ya estaba dormido en la cama, entonces zero se pone hablar por teléfono y nunca imagino que Adrián estaba escuchando,
— ahora no puedo trabajar en este estado además estoy cuidando de alguien—le dijo zero al matón,
—¿sabes lo peligro que es eso zero?—respondió el matón,
—si lo sé, sé que por su seguridad tengo que alejarme solo quiero disfrutar más de él, aún no estoy listo para dejarlo ir—dijo con su voz entre cortada,
En ese momento Adrián quería saltar sobre él y abrazarlo, quería pedirle que nunca lo abandone, pero el miedo se apoderó de él, sentía que si lo confrontaba en ese preciso momento, quizás se alejaría de él entonces fingió dormir por temor, zero luego se acostó a su lado y lo abrazo,
—cariño despierta—zero le llevo el desayuno a la cama,
—buenos días—él lo besa en la mejilla,
—¿te sientes bien?—él pone su mano en la frente de Adrián,
—no es nada, solo me da fiebre cuando estoy estresado—respondió Adrián,
Aunque zero sabía que no solo era eso lo que le preocupaba decidió no presionarlo para que le diga,
—voy a buscar algo para la fiebre ya vuelvo—el se fue,