Después de mi repentina muerte despierto en un carruaje en movimiento, con un pequeño frasco en mis manos y amargo sabor en mi boca
Lo que pensé que era un sueño resultó ser mi nueva realidad. Había reencarnado en el cuerpo de Ysara de Drakmor princesa de un reino caído, un cruel y despiadado emperador en cuanto vio la belleza de la princesa busco los medios para hacerla su esposa. Pero está se rehusaba a estar con él, ya que en su corazón existía alguien
El cruel emperador se apoderó de las tierras y de esa forma también de Ysara volviendo la su esposa aun en contra de lo que ella queria, pero yo sé cómo termina todo esto si sigo el camino que tomo Ysara así que dejaré que todo fluya y aceptaré a este hermoso hombre
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Capitulo 18: Arrepentido
Ya habían pasado dos días Desde que Lysander apareció en la tienda y ahora me sigue como un perro desolado
Ysara: ¿Puedes dejar de seguirme?
Lysander: No lo haré hasta que me escuchar y perdones — Dice tomando mi mano — Ysara me equivoqué y admito mi error, por favor perdóname y vuelve conmigo. Hazlo por nuestro bebé
Ysara: ¿Y que te hace pensar que el niño es tuyo? - Veo como tiembla un poco y se arrodilla y abraza de la cintura, yo volteo la mirada a un lado porque verlo así hace que mi corazón quiera ceder
Lysander: Ysara no trates de alejarme, se que el bebé es mío y reconozco lo equivocado que estaba — Yo trato de hacer que se levanté, pero el estaba sujeto fuertemente a mi cintura y sin intenciones de levantarse
Ysara: Ya basta, levántate. Eres el emperador no debes actuar de esa manera
Lysander: Y tu eres mi emperatriz, así que puedo hacerlo. Eres la única mujer que puede tenerme a sus pies — Todos en la tienda nos estaban mirando haciendo que me sintiera súper incomoda por la situación, yo tomo su mano y hago que se levante
Ysara: Ya basta, vete yo no pienso volver con alguien que no confío en mi y que no dejo que yo explicará la situación. ¿Acaso sabes lo dolida que estaba en ese momento? ¿O como me sentía? llevábamos meses juntos y tú me echaste solo por unas cuantas palabras de alguien que apareció de la nada — Yo veo al capitán el cual miraba la situación desde lejos - Es mejor que te lleves a tu emperador de mi presencia — Lysander al escuchar eso toma mi mano rápidamente
Lysander: Ysara, no deseo volver sin ti. Por favor acepta mi disculpa y vuelve conmigo — Yo solo lo ignoro y regreso dentro para ir a mi oficina
Ysara: Maldición este hombre hace que se me ponga los pelos de punta — Digo avergonzada sentandome en mi silla
Lucia: ¿Otra vez ha venido a verte? — Yo asiento — Señora él se ve que está arrepentido de verdad ¿En serio no lo perdonará? — Yo miro por la ventana y veo como el capitán Santos se lleva a Lysander
Ysara: Lo haré solo lo dejaré sufrir un día más — Lucia ríe y me coloca los papeles sobre la mesa
Lucia: Bueno si es así, no olvide llenar estos documentos antes de que se vaya — yo asiento y lleno todos los documentos. Al caer la noche estaba afuera esperando por David, él siempre me iba a buscar y me acompañaba de regreso hasta la casa, pero hoy se ha tardado bastante — ¿Desea que yo la acompañe? — La veo y niego
Ysara: Ve a casa yo iré sola. además no está lejos — Ella duda, pero a la final accede y se va. Yo regreso a la tienda y toma una pequeña daga y esconde entre mi ropa, ya que está situación me parece extraña
En cuanto doblo la esquina veo como un hombre tiene sujeto a David contra el suelo, ellos al verme me sonrien
— su majestad es un gusto que se reuna con nosotros — Yo los veo sería y veo como David niega con la cabeza indicando que me vaya — Me imagino que desea salvar a su amigo si es así espero que coopere con nosotros
Ysara: Lysander este tipo de maniobra solo hará que me moleste contigo — Digo fuertemente esperando que con eso salga de donde sea que se está escondiendo — Lysander deja este puto juego ahora y suelta a mi amigo
—¿Su majestad? ¿A quien llama tan desesperada? — Este hombre se acerca y me toma del cabello haciendo que me arrodille bruscamente, es allí cuando me doy cuenta de algo, es imposible que trabaje para Lysander, ya que él no dejaría que me lastimaran — No se preocupe la trataremos bien y su majestad nos dará una recompensa por eso. Tomen a esta mujer y vámonos — Yo Aprieto los puños en cuanto me levantan y saco la daga que tenía escondida acabando con uno de ellos
— Mierda — dice el otro hombre que me sujetaba — Líder — Este voltea y mira al hombre tirado en el piso sin vida y luego a mí
— ¿Estás loca mujer? ¿Acaso que deseas que mate a tu amante? — Dice poniendo una espada en el cuello de David
David: Emperatriz huya no se preocupe por mí — Dice el chico mientras la espada se apoya más en su cuello
Ysara: Ya basta. Ustedes están locos, mi embarazo es de Alto riesgo si mi bebé muerte ustedes y sus familias tendrán la peor de las muertes
— Nuestro trato es limpio y seguro, solo te llevaremos a las fueras del imperio, allí está la persona que pagará una gran suma por usted — Yo le sonrió de lado
Ysara: En verdad piensan que pueden poner un pies fuera del imperio conmigo a su lado y con un poco detrás de ustedes — Este voltea pensando que Lysander estaba atrás de él y yo aprovecho esa distracción para lavarme mi daga haciendo que está se clavara en su hombro, la espada cayó y yo corrí ayudar a David — ¿Estás bien?
David: Ysara vete no necesitas ayudarme yo estaré bien — Yo niego mientras descaro las cuerdas, ese hombre se acercó por detrás y me propinó una fuerte bofetada —YSARA — grita preocupado yo veo mal al tipo ese y paso mi lengua por mi labio roto
Ysara: Están tan muertos — él me sujeta del cabello para que lo mire a los ojos
— ¿Y quién nos matará? Tu?
Lysander: Yo — Dice para pasar su espada por el cuello del hombre en cuanto el cuerpo cae este se acerca corriendo a mi y me toma en brazos
Ysara: Eres un idiota ¿Por qué tardaste tanto? — El acomoda mi cabello
Lysander: Lo lamento mucho — Yo me recuesto de su pecho, ya que estaba viendo estrellitas y todo me daba vueltas
Ysara: Encárgate de David y de que esas personas se arrepientan — Él asiente y eso fue lo último que recuerdo antes de caer desmayada en sus brazos
