Soy Nikolay Petrovich. De origen ruso, me considero uno de los arquitectos mejor pagados de la ciudad, pues soy exigente y perfeccionista en todo lo que hago referente a mi trabajo.
Y eso se debe ha que tengo al personal con el más alto nivel de estudios y experiencia, para poder trabajar en una de mis empresas.
Pero mi vida dará un giro de la noche a la mañana, dándome cuenta de quienes son en realidad las personas que están a mi lado incluyendo a mí esposa. De quien menos lo esperaba que me diera la espalda cuando más la necesitaba.
Acompañame, en está nueva historia y descubre que pasa en la vida de Nikolay.
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capítulo. 18 Sin discutir órdenes
A Nikolay, le molesto saber que Cecilia no había llegado para recibir a Luisa, después de hablar un poco con Luisa, le ordena que suba a su habitación que de descansar y dormir un poco. . - Pero Luisa comete el error de decir. Pero aún no tengo sueño, ya descanse cuando llegue.
Mis órdenes no se discuten, por hoy romperemos las reglas. Pero mañana debe hacer las cosas como lo marca el contrato. . - Pero en eso suena su móvil, toma la llamada.
Enseguida el ama de llaves se acerca a Luis diciéndole. . Señora Luisa no se sorprenda, el señor Nikolay, ama el orden y le gusta que todo se haga como él dice.
Si entiendo, creo que será mejor que me vaya a mi habitación, así no doy problemas.
Luisa sé retiró a su habitación, mientras que Nikolay, continuaba hablando por teléfono, cuando unos minutos después entro Cecilia casi corriendo a la casa. Nikolay la ve de reojo. . Si no se preocupe mañana estaré ahí sin falta. .Nikolay se gira cortando la llamada telefónica viendo a su esposa, ella sé da cuenta de que Nikolay está algo molesto así que enseguida sé acerca a él abrazándolo. . Hola, mi amor sé me hizo tarde. Llego la incubadora.
Te pedí que estuvieras aquí, para cuando llegará Luisa. Y no lo hiciste. . Cecilia le coquetea a Nikolay diciendo. . Pero mi amor solo fue un momento, para eso está la empleada me, tarde un poco platicando con mi amiga. Que tiene de malo. Sabes amor uno de nuestros amigos que está buscando modelos, me gustaría ser una de sus modelos.
Sabes que no podrás, quedamos en ocultar la maternidad y debes fingir que estás embaraza. Es más he mando a pedir algunas almohadillas para tu vientre, y tendrás, que usar ropa de maternidad.
Pero mi amor.
No te preocupes mi amor, te verás bien. Me hace mucha ilusión verte de ropones de maternidad.
Y creo que ya es tiempo que vayas aprendiendo a preparar papillas para nuestros bebés.
Cecilia podía esperar cualquier cosa que Nikolay le dijera referente al embarazo, lo que no podía soportar que le dijera que tenía que aprender a preparar papillas para los bebés, con eso Nikolay le daba entender que tendría que ocuparse personalmente de los niños, ella le respondió. . Para eso están las empleadas, y las niñeras, ellas sé harán cargo de ellos.
A lo que Nikolay le responde. . ¿No? Cecilia, tú te harás cargo de nuestros hijos. A Cecilia no le queda más que cambiar su actitud, al ver a Nikolay serio y firme él lo que le acababa de decir. . Es una broma mi amor, claro que yo me encargaré del cuidado de nuestros bebés. . Ella lo vuelve abrazar, mientras lo hace comienza a besar a Nikolay en el cuello, eso a él, lo toma por sorpresa. Pues ella nunca a sido así con él.
Siempre ha sido una mujer fría, que a veces lo ha llevado a pensar que ella realmente no lo quiere y está con el, solo por su dinero. Pero ahora lo confunde con su actitud.
El solo de deja llevar por ese momento, y poco después le dice.
Y de favor cariño, no llames a Luisa incubadora, creo que se merece un poco de respeto. Mañana le enseñas toda la casa, has que sé sienta como si estuviera en su propia casa.
Está bien, como tú digas amor. Por lo menos no tengo que lidiar en otras cosas. . Le dice Cecilia a Nikolay, con una sonrisa coqueta.
Al día siguiente, cuando estaba a punto de desayunar Luisa, Cecilia llega al comedor. Mi esposo me dijo que te enseñe toda la casa, no se para que. Pero sígueme. Cecilia fingió no saber el nombre de Luisa. . ¿Cómo dices que te llamas?
Luisa señora.
Ah, sé me había olvidado, vamos no te quedes ahí parada que no tengo todo tu tiempo. . Después le dice Cecilia a la empleada. . Y tú lleva mi café a la sala de estar. . La empleada le responde temblorosa con miedo a que Cecilia la vaya a regañar. . Si señora.
Luisa sigue a Cecilia, mientras esta le va enseñando cada parte de la casa. . Este es el despacho de mi esposo, el cuál no tienes nada a que entrar ahí, al menos que sé te ordené. Y Este es nuestro dormitorio que tampoco tienes nada que venir hacer aquí, no puedes tocar los libros de la biblioteca sin pedirlos, a Nikolay no le gusta que toquen sus cosas sin su permiso.
No se preocupe señora Cecilia. . Le dice Luisa algo apenada ante la actitud de Cecilia, es obvio que no le cae nada bien, piensa que tendrá que mantenerse alejada de ella, si no quiere tener problemas. . Y por último esté es mi vestidor que por ningún motivo debes entrar.
Me quedó claro señor Cecilia.
Cecilia baja las escaleras nuevamente, Luisa va tras ella. . Tu lugar de comer será siempre en la cocina, con los demás empleados, si necesitas algo se lo pides a los empleados. No tienes por qué estarnos molestando con tú quejas.