Insaciable

POV Anne

-Le repito oficial, yo estaba con Luciano Rozzi, salimos de la boutique, cerré sin bajar la santa María y le escribí a Carol para que no regresará y se fuese a su casa después de comer-

Estoy sudando frío, mi corazón parece un caballo descontado y mis ojos a duras penas retienen las lágrimas que quieren salir

¿Cómo había pasado todo esto?

Es increíble, cuando por fin todo estaba mejor, tranquilo, la desgracia siempre me alcanza

Ni si quiera puedo sentarme a llorar las pérdidas, ahora también debo pagar por un crimen que no cometí y del que también soy víctima

-Y dígame ¿Qué hacía con el Sr. Rozzi?- El maldito oficial me hablaba con tono déspota, insinuaba una y otra vez que además de ser la responsable, era mentirosa

-¿Qué tiene que ver mi vida personal con todo esto?- Justo en ese momento apareció a mi lado un hombre alto, rubio canoso de unos 50 años aproximadamente

-Creo que aquí acaba el interrogatorio, ya mi cliente le ayudó con todo lo pertinente, si tiene alguna acusación, hagala formalmente y podrá interrogarla conmigo presente. Hasta entonces...- El hombre tendió su tarjeta al oficial y posteriormente me extendió su mano

-Vamos Srta. Gilberti, sígame- Tenía varias preguntas pero viendo la situación, mejor hacerlas luego. Me puse de pie y sin despedirme del maldito oficial caminé detrás del abogado

A las afueras de la comisaría Luciano y Jacson me estaban esperando. Corrí a los brazos de Jacson y este me recibió llenandome de besos en las mejillas

-Amor amor pensé que te iban a dejar detenida con todos esos hombres sudorosos y mal olientes- Jacson lanzaba plumas con solo hablar

La mirada de Luciano se apartó de mí y dió pasos hasta el abogado, ambos hablaban tan bajo que era inaudible

-Estoy bien Jac, tenía mucho miedo- Las lágrimas salían a borbollones, ya no aguantaba más la opresión en mi pecho

-Shhh tranquila amor-

Tenía suerte, siempre he tenido la suerte de poder contar con Jacson, estaría perdida sin él, es más que mi mejor amigo, mi hermano y única familia viva

Luciano carraspeó -¿Por qué no vamos al apartamento para que te duches y cambies?.. El funeral de Caroline se llevará a cabo en la tarde- Extendió su mano hacia mi antebrazo, la suave sensación de su tacto me recorrió, me miró con esos ojos grandes y azules como el océano profundo, parecía no sé, gentil

Asentí, me solté de los brazos de Jacson y caminamos hacia el auto. El abogado se despidió de Luciano y tendió su mano a nosotros. Un agradable señor

-¿Quieres que pasemos por algo de comer?- preguntó Luciano

Negué con la cabeza. No me apetece probar bocado

-Ella no come cuándo está ansiosa... Anne creo que deberíamos de llamar a Charles- El tono de voz de Jacson emitía preocupación pura

No es para menos, sé que siempre ha tenido que lidiar con mi depresión mayor. He intentado tantas veces salir y superarla, fallando para hundirme más. Me ha encontrado tantas veces como un alma en pena, puedo sentir su tristeza al verme

Gire hacia el asiento de atrás, llevé mi índice a mis labios haciéndole seña de que guardara silencio y asentí. No me sentía cómoda hablando de mi depresión con otros, no quería darle detalles a Luciano

Sin embargo éste no pasó desapercibido el comentario

-¿Quién es Charles?- El tono de voz suave ahora era duro con un poco de molestia

-Es... Hmm... Un viejo amigo de la familia- Habló Jacson rápidamente -Quiere a An como a su hija-

Luciano no preguntó más y yo resoplé aliviada.

-Gracias por traernos- Mi corazón se agitaba de solo ver su sonrisa

-No ha sido nada... Por favor avísame al estar lista, te llevaré al funeral-

Negué de nuevo

-No me digas que no... Pudiste haber sido tu Anne... Esto hay que investigarlo a fondo, no quiero dejarte sola, yo...- Silenció sus palabras, su rostro era sombrío

-Tu... ¿Qué?-

-Nada, solo no quiero dejarte sola. Permíteme llevarte por favor- Me miraba con ojos de súplica

-Vale... Te avisaré-

Nos despedimos con un corto beso en los labios y me adentre al edificio con Jacson

En el apartamento me lance al sofá

-No puedo creer todo lo que ha pasado, me duele la muerte de Caroline, me hace sentir culpable...-

Fue claramente mi culpa, aunque no inicie el incendio la dejé sola, debí insistir en la llamada y no resolver todo rápido por pensar en tener sexo con Luciano, siempre la cago en todo.

Abracé mis rodillas y me quedé un rato en el sofá

-Bebe esto- Jacson me tendió una taza de té de manzanilla y dos píldoras para el dolor de cabeza

-Gracias- Me acomodé en el sofá y lo tomé

-Anne no quiero verte destruida de nuevo por algo que no tienes culpa... Mañana iremos con Charles, ya hablé con él-

Suspiré

-Esta bien, lo que tú digas... No quiero ir al funeral, no sé cómo podré ver a los padres de Carol-

-Viendolos, tu no hiciste nada malo-

Bebí un sorbo de té y trague las pastillas, me quedé no sé cuánto tiempo viendo la pared blanca de la esquina. ¿Por qué siempre estaba en medio de un agujero negro?