Imperio Marino Y Conti

Arlette- que dijiste

Rafael- que no soy tu padre contenta

Arlette- es mentira, mi madre te era fiel, mi madre

Rafael- tu madre me puso los cuernos por tener una aventura, quedo embarazada y dijo que era mío, para que no la eche a la calle con todo y barriga, cuando naciste eras mi vida entera, una niña lo que tanto quería, a medida que crecías te daba todo y amaba verte jugar y sonreír, pero todo cambió cuando cumpliste los 18 años, me llegó un anónimo con fotos de hacía 18 años donde tu madre me había sido infiel, y una nota diciendo que yo no era tu padre, como crees que me sentí Arlette, como crees que sentí al darme cuenta de que por 18 años críe y mantuve a la hija de alguien más, que la niña que era todo para mí, ni siquiera era mía.

Arlette- al menos estás seguro de esto que me dices, ya lo comprobaste

Rafael sacó de la caja fuerte una prueba de ADN entre Arlette y él, donde decía que no eran padre e hija, Arlette no lo podía creer, como que Rafael no era su padre, entonces de quien era hija, ni siquiera su madre estaba para ella poder pedirle una explicación.

Arlette- por eso la mataste

Rafael- amaba a tu madre más que nada en esta vida, ella, tus hermanos y tú eran mi vida entera y con esta noticia la vida me estaba quitando todo, enfurecí, pero me tranquilice no podría hacer algo en la casa, así que invite a salir a tu madre y la lleve a nuestra casa de la montaña, a la que íbamos de vacaciones

Arlette- que le hiciste Rafael, que le hiciste a mi madre

Rafael- quería la verdad, ella ya me había mentido por 18 años, yo quería la verdad, le mostré la prueba y ella se sorprendió y trato de excusarse diciendo que ella había pensado por el tiempo de embarazo que era mi hijo y no de su amante, confirmando así que si me había sido infiel, perdí la cordura y empecé a golpearla mientras la gritaba de que era una zorra, una puta barata que no valía nada, que ni siquiera merecía vivir, la ate a la cama y la viole sin piedad, me suplicaba que la dejara, pero no le escuchaba mi enojo y rabia eran más fuertes, después de violarla la solté, no le haría más daño, solo le pedí que dijera la verdad a los 3, y me dijo que no, que tú tenías mi apellido y eras igual a mí, como si de verdad fueras mi hija, lo que me hizo enojar y a golpes le quise sacar el nombre de su amante, y me dijo que había sido una aventura de una noche de tragos y de enojo conmigo y que jamás sabría quien era tu padre verdadero y que ella no les diría la verdad, fue entonces que mi paciencia se acabó y sin pensar saque el arma y le metí el tiro entre los ojos.

Arlette- porque le hiciste daño si la amabas

Rafael- para que veas lo que él enojó y la ira pueden hacer, perdí la cabeza y cuando reaccione tu madre ya estaba muerta, decidí con mis hombres mentir de una emboscada y que pues ella sufrió e hice que mis hombres me golpearon un poco, para ser más creíble todo.

Arlette- mis hermanos y yo jamás te creímos, mi abuelo tampoco

Rafael- NO ERA TU ABUELO, aunque él supo toda la verdad de que no eras mi hija y de igual forma te metió en su testamento y te dejo lo que me correspondía a mí, por eso mi enojo y bronca.

Arlette- Me quisiste tanto y solo por saber que no soy tu hija, me mandaste pegar y violar, porque

Rafael- Porque mi padre quería dejarte lo que al final te dejo, le quería demostrar que no estabas hecha para esto, así no te dejaba nada a ti y me lo dejaba a mí o a mis hijos que si llevan mi sangre, pero te recuperaste, aprendiste y más te metiste en esto a tal punto de ser la mejor, y por eso mi padre no dudo en dejarte la mafia, le dejo algo para una bastarda.

Arlette- no me digas así

Rafael- es verdad, eres y siempre serás una bastarda