El Amor Duele

y así fue, Ana solo había salido a comprar unas cosas personales para el viaje..

cuando entro a su departamento, pudo ver a su jefe de piernas cruzadas en el sofá.

Que haces aquí? quien te dejo entrar?..

La puerta no tenía seguro así que pase, te estoy esperando.

Dime qué necesitas? estoy ocupada y voy de salida.

Dime por qué renunciaste?. tienes un contrato con la empresa..

Ana se había sentido tan feliz al verlo ahí, el estaba ahí por ella. pero al escucharlo nombrar el contrato de la empresa.. solo se encogió de hombros y sintió un fuerte dolor en el corazón..

Un dolor de decepción...

Estás en todo tu derecho en demandarme si así lo deseas, te pagaré lo que un juez dictamine por incumplir el contrato.. solo te digo que no pienso regresar..

Manuel se levanto del sofá a grandes zancadas, recortando rápidamente la distancia que los separaba..

No quiero que te vayas.. quédate conmigo.

Ya le dije que no pienso regresar al puesto de trabajo. Puedo recomendarle una persona tan eficaz como yo.

Nadie podrá reemplazarte, puedes entenderlo?.

Se que nadie sera igual que yo, ni podrá igualarme, pero le aseguro que tendrá a alguien con un buen rendimiento acto para su empresa.

Conejita por favor, entiéndelo, te quiero a ti, en mi vida como mujer...

Señor Roig ya le e dicho que no somos compatibles..

Manuel la agarro de los hombros, ya no sabía que hacer con **esa mujer tan testaruda..

Deja de mentir, me gustas y se que te gusto.. por favor aceptalo.

Suéltame y sal de mi hogar..

Ana estoy enamorado de ti, te Amo.. me gustas eres perfecta..

A mí no me gustas, por favor basta..

No, de aquí no saldré hasta que me des una buena explicación.. dime por qué eres así?..

Ana le dió la espalda, miro hacia el gran balcón que le brindaba de una vista hermosa.. respiro profundamente para luego voltearse y contestarle..

Tu no me gustas..

El sintió una fuerte punzada en su pecho... pero recordó el informe que ya había leído..

Conejita, mírame ven, siéntate aquí conmigo.. por qué te niegas el amar.. por qué huyes de la felicidad..

Ella se acercó y se sentó junto a el.. lo miro a los ojos y soltó sus palabras con un tono de voz muy claro..

Manuel, no quiero amar, el amor duele, así como vivo es mejor..

una lágrima rodó por su mejilla..

el la abrazo, metió su rostro en su clavícula y inhaló su rico aroma a vainilla..

Luego la miro a los ojos.

Conejita, la soledad no es buena.. que te han hecho para que pienses de esa manera?.

Se que es malo estar sola, pero sabes algo? la soledad no lastimas..

No quiero que te vayas, pero tampoco puedo obligarte.. solo dame una oportunidad para demostrarte lo bonito de ser amado..

Y si no funciona??. me dolerá y no quiero sufrir..

El ya había hablado mucho, tratando de convencerla, pero si sus palabra no eran suficientes, su actos si lo serían.

Se acercó a ella y la besó, fue un beso suave y tierno, un beso lleno de amor, en donde el le demostraba todo lo que sentía por ella..

Ana se derritió por su contacto, abrió sus labios y se dejó consumir, su aliento caliente le penetraba cada hueso de su cuerpo, el poso su gran mano en su espalda baja y la acarició lentamente mientras la besaba, sus lenguas se entrelazaban..

Ana solto un gemido seguido de jadeos, su cuerpo se estremecía por el rico tacto.. tenía tanto tiempo sin chocar sus labios,.. aunque ella se besaba apasionadamente con Andrés, nunca había sentido placer...

Su cuerpo estaba temblando con sus suaves caricias, la magia estaba creciendo en esa diminuta sala.. ella le rodeó el cuello, para luego posicionar sus manos en el cabello, lo masajeaba suavemente..

Manuel sabía que era el momento para demostrarle todo lo que tenía guardado por esa bella mujer..

El la subió ahorcadas a sus piernas de frente, donde empezó a desprender las prendas que la acompañaban, besaba sus suaves labios hasta llegar a sus pechos, donde los acaricio circularmente y pasaba su lengua sobre ellos.

ella ya no podía negarse a lo que estaba sintiendo.. se dejo llevar por el placer.. estaba temblando y quería más.

Esos suaves gemidos que salían de sus jugosos labios, hacian crecer la ombria del CEO.. quien la agarró por la cintura y empezó a estrujarla sobre sus erección..

La cargo hasta llevarla a su habitación, la despojo de sus prendas inferiores que eran las que le quedaban...

El zorro viejo, empezó a jugar con su cuerpo.. haciéndola temblar y jadear..

introdujo su dedo para sentir lo apretada que estaba.. debía de tener mucho tiempo sin relaciones pensó el.. siguió su suave ritmo, hasta que la sintió temblar por el orgasmo que le producía...

Volvió a subir para besarla intensamente, ella necesitaba más de el.. lo deseaba.. y aunque no fue capaz de pedírselo por orgullo, el ya tenía el terreno ganado..

Siguió encendido esa llamas que la estaba volviendo loca, se despojo de la ropa, y subió sobre ella, fue entrado de a poco, pero no podía entrar, aunque ella estaba muy lubricada sentía que tenía una pared que lo atajaba..

La miró y vio sus ojos cerrados y fuertemente presionados.. no era tonto, sabía lo que pasaba..

Conejita, quieres que siga..

Ana lo miro a los ojos y asintió.. su carácter no la deja hablar..

El siguio siendo suave con ella, hasta que entró por completo, la besó por una largo rato hasta que la sintió relajarse.. quería tratarla con mucho amor, pero era tanto su deseo, que parecía una gran vestía Déborandola..

Pasaron todo el día amándose.. ella no pronunciaba palabra alguna, solo con una mira le pedía más y más**.