Narra la historia de Victoria, una joven de 23 años que es forzada a contraer matrimonio por interés.
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Captiulo 17
Narra Victoria
Días después
Hoy se cumplen dos meses de mi boda con Emir y no puedo creer como ha pasado el tiempo.
Las cosas entre nosotros han seguido iguales, durante estos días yo lo estuve evitando, no quiero hablar con él, luego de enterarme de que Berna es su amante, me resulta repugnante tenerlo cerca.
Él tampoco intenta acercarse a mí, por lo que estuvimos alejados. Se la pasa todo el día en el trabajo, solo viene a casa por las noches. Mi compañía son Emré y Deníz, hemos salido a a tomar café los 3 juntos, hemos ido al cine y también de compras. Los he estado observando y creo que entre ellos dos ha surgido una chispa de pasión.
- Ay ya Victoria detente - una agitada Deniz me toma del brazo y me detengo. Últimamente se nos ha dado por salir a trotar a un parque que está a una cuadra de casa.
- Oh vamos Deníz, es la última vuelta y terminamos - digo animándola
- Ya en serio, no puedo mas - dice entre jadeos mientras apoya sus manos en sus rodillas.
- Te recuerdo que tú insististe en venir - río
- Te odio - dice mirándome cansada
Ambas soltamos una carcajada y entonces tomamos el camino a casa.
El sol comienza a caer y la noche se asoma, llegamos a casa y ambas nos tiramos en los cómodos sillones de la sala.
- Mañana es el cumpleaños de Emir - dice Deníz
- Sí ya me lo dijiste ayer - digo volteando los ojos.
- Bueno, solo quería recordártelo. ¿Qué le vas a regalar ? - pregunta con una sonrisa pícara.
- Nada, que se lo regale Berna - digo seria.
- Ay Victoria por favor! No puedes ocultar tus celos- Deníz suelta una carcajada burlona. Yo golpeo su pierna y ambas reímos.
- ¿Cuántos años me dijiste cumplirá? - trato de averiguar.
- No te lo he dicho, pero cumple 29 - dice sonriendo.
- Oh - digo observando el piso.
- Mañana habrá una fiesta, espero que esta vez sí decidas acompañarlo - dice poniéndose de pie para luego subir las escaleras.
Quedo allí tirada en el sofá por unos minutos. Luego oí que se abrió la puerta de la entrada principal de la casa.
- Buenas noches - Saluda Emir. Luce realmente cansado. Sus mirada parece perdida, su camisa tiene los últimos botones desprendidos que deja ver parte de su pecho y un dije que cuelga de su cuello.
- Buenas noches - respondo antes de subir las escaleras para ir a mi habitación.
Entro al cuarto de baño y tomo una ducha de 15 minutos. Decido usar un traje chandal color gris y dejo que mi cabello se seque al natural.
Iba a meterme a la cama cuando Deníz entra a mi cuarto.
- Hoy noche de películas, que ni se te ocurra dormirte temprano - dice sentándose en la cama
- Es en serio Deníz? Estoy muy cansada - digo bostezando.
- Oh vamos! Es para levantarle los ánimos a Emir, creo que ha tenido un mal día y no quiero que esté solo - dice en voz baja.
- Está bien, vamos - le digo tomando una manta color verde de mi cama.
Cuando estamos bajando las escaleras, en la sala tendido en uno de los sillones puedo ver a Emir, viste una playera blanca unos joggings negros. Su cabello esta despeinado y mojado. Vaya que luce atractivo.
Deniz me indica que me siente junto a Emir y ella se sienta del otro lado, dejándolo en medio de las dos.
Mientras vemos la película recostados en sillón, Emir sostiene un bowl con palomitas con sus manos; sobre su estómago.
Distraída observando la gran pantalla del TV plasma, estiro mi mano para tomar mas palomitas y Emir hace lo mismo justo en el mismo instante.
Nuestras manos se rozan sobre el bowl y mi piel se estremece, mi corazón comienza a latir fuertemente. Emir guía su mirada hacia mis ojos con los labios entreabiertos. Puedo observar con la tenue luz que brinda el TV, que sus negros ojos brillan mas de lo normal. Emir toma suavemente mi mano y una corriente eléctrica corre por todo mi cuerpo. Él gira completamente su rostro hacia mí y se inclina aproximándose lentamente a mi rostro, nuestros labios se encuentran a una distancia de aproximadamente a 10 centímetros, puedo sentir su respirar sobre mis labios. Inmóvil miro su boca y luego levanto la vista hacia sus ojos, puedo ver el deseo en sus ojos. Va a besarme, él va a besarme.
Aclaro mi garganta y regreso mi mirada hacia el TV, por el rabillo del ojo puedo ver como Emir se acomoda nuevamente en su lugar. Observo a Deníz y ya está dormida. Al final de la película despierta.
- Aaumm - Deníz se estira como un felino con pereza.
- Ya terminó? no sé en que momento me quedé dormida - agrega bostezando mientras cubre su gran bostezo con su mano derecha.
- Bueno. Lo he disfrutado mucho pero ya me dio sueño. Buenas noches- digo y envuelta en una verde manda subo las escaleras, me meto a la cama y caigo en un profundo sueño.
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Despierto en medio de la noche con una sensación extraña en todo mi cuerpo; deseo.
Miro el reloj en la mesita de noche junto a mi cama y marca 3:45 de la madrugada.
Un fuerte y tonificado brazo se posa sobre mi cintura. Me giro y me encuentro a un adormilado y despeinado Emir que descansa en boxers a mi lado.
- Oh nena, despertaste - dice con una voz ronca mientras entrelaza suavemente sus piernas con las mías.
- Que pasó? - pregunto confundida.
- Todavía nada, pero si quieres que pase algo solo debes pedirlo amor - se acerca y besa mis labios, dudo unos segundos luego correspondo a su beso moviendo mis labios al compás de los suyos. Emir se lanza sobre mí presionando su rostro contra el mío, puedo sentir su lengua buscando la mía; cuando ambas logran encontrarse Emir suelta un suave gemido.
Con un brusco movimiento toma mis caderas con sus grandes y fuertes manos, y me coloca a horcajadas sobre su pelvis. Suelto un pequeño gemido al sentir su miembro viril duro como una piedra a través de sus boxers y mis bragas. Me lanzo sobre su rostro devorando sus suaves labios en un apasionado beso, y con ambas manos tiro suavemente de sus cabellos, Emir gruñe en respuesta y con ambas manos levanta mi camisón de seda posando sus manos sobre mis glúteos, ahora solo cubiertos por mis pantaletas de encaje negro. Presiona mi trasero hacia él acercando aún mas mi parte íntima con la suya, yo dejo salir un gemido involuntario.
- Sabes que deseas esto tanto como yo - Emir susurra besando mi cuello haciendo que mi piel se erice.
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Despierto y de un sobresalto rápidamente me siento en la cama con la respiración agitada. Con mi mano derecha tomo mi frente y puedo notar que estoy bañada en transpiración ¿Qué acaba de ocurrir? En mis sueños estuve a punto de entregarme a Emir, y lo mas extraño es que mi cuerpo ahora mismo lo desea, puedo sentir que mi ropa interior está húmeda; resultado de aquel sueño erótico con mi esposo.
Agito mi cabeza rápidamente de un lado a otro para quitar todos los pensamientos que pasan por mi mente y me levanto a tomar una ducha de agua fría.
Al salir miro la hora y noto que en pocos minutos ya saldrá el sol, así que decido esperar despierta recostada en la cama.