Te daré un millón de dólares por pasar 30 días con tu mujer- dijo con ese tono altanero que lo caracteriza desde el primer día que lo escuche hablar.
Debes estar loco- contesto mi esposo sin dudar un solo segundo.
Acepto- dije recibiendo las miradas de todos los presentes. Quizás nadie lo entendería pero era la única manera de salvarla y darle todo aquello que luego de la operación necesitaría.
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capitulo 14
Narra Nicolás.
Desperté luego de un sueño mucho más que reparador, todavía tenía su aroma a fresas en mi remera y como un estúpido estaba sonriendo aun acostado en la cama y con un brazo sobre mi rostro.
Hoy las llevaría nuevamente de paseo y a la noche tenía una reunión con un grupo de inversionistas, sería una perfecta ocasión para dejarme ver con ella y siendo sincero ya me la imaginaba en un sensual vestido rojo con la espalda descubierta y unos tacones negros. Menos mal que llevaría varios agentes de seguridad, porque podía sentir que más de uno iba a quedar prendado por su hermosura.
Baje a desayunar y me encontré con la niña hablando con Maria, mi cocinera, si hay algo que tengo que dejar bien en claro, es que me agrada mucho estar cerca de ella. No es como los otros niños, siempre está alegre y es muy servicial a pesar de que paso por mucho a tan poca edad. No sabe diferenciar el bien del mal, a pesar de ser chica se maneja muy bien y tiene una fluidez en su habla que a más de uno lo deja impactado, pero sigue siendo una pequeña que se preocupa mucho por su mamá. Así que en vez de ingresar a la cocina directamente, me quedé como una rata detrás de la puerta escuchando, al parecer ella no había bajado, seguro seguía durmiendo.
Entonces mi mamá empezó a verse más pálida y su pelo perdió el brillo qué tenía, pero todo eso parece que se fue cuando vinimos acá- podía escuchar su conversación perfectamente y esperaría un poco más para comer algo.
Supongo que tuviste mucho miedo, no me imagino como te sentiste al pasar por todo eso- le decía maría mientras batía la mezcla para seguramente unas galletas. Si había algo que ella sabía hacer era consentir a todos los niños, incluso conmigo había sido así. Ella pertenecía a la familia desde muchos años atrás, su hijo falleció antes de cumplir los 15 años cuando quedó atrapado en un tiroteo entre ladrones y policías. Desde ese día se quedó a vivir en la mansión y paso a ser una de las personas más importantes de mi vida, ya que, cubría las ausencias de mis padres cuando salían en viajes de negocios.
Mi mamá siempre estuvo conmigo, y cuando tenía mucho miedo o me dolía ella me abrazaba muy fuerte y no me soltaba. Mamá vivió conmigo en el hospital desde que entré hasta que salí, no me quería dejar ni siquiera cuando tenía que bañarse- abrí los ojos como platos, había leído todo el informe que Guillermo me había conseguido y seguía sorprendiéndome el hecho de que ella no saliera ni a la puerta o a comprar algo cuando estaba en el hospital.
Tu mamá te cuido mucho, pequeña princesita, y sé que te irá muy bien en Estados Unidos. ¿Quieres llamar a tu papá?- pude escuchar un silencio que se me hizo eterno, así que abrí un poco la puerta y pude ver a Maria abrazando fuertemente a la niña -lo lamento por favor no llores niña, dime que es lo que va mal-
Mami se la pasaba cuidándome y por eso papá dejo de querernos y se fue con mi madrina. Escuche que la abuela discutía eso con mi tía y aunque mi tía defendía a mi mamá, mi abuela decía que papi no tenía la culpa de que mamá lo haya descuidado por cuidarme tanto a mí. Al final lastime siempre a mi mami, por eso me porto bien y no le doy problemas, quiero que vuelva a sonreír como antes- Dios esas palabras calaron en lo profundo de mi corazón, cuanto dolor había en esta pequeña y cuanto más guardaba esa mujer.
Mierda estuve tanto tiempo escuchando que no me percate de que ya venía bajando por las escaleras.
Muy buenos días, preciosa- dije en voz muy alta para que en la cocina me escucharan. Sabía que esa niña no quería que la vieran llorar así que iba a ayudarla -necesito que hablemos de una reunión que se llevará a cabo esta noche, ven que quiero que veas lo que usaras-
La tomé de la muñeca y la conduje hasta mi escritorio donde el día anterior había dejado un par de paquetes con ropa para las dos. Ayer cuando paseábamos le iba haciendo señas a Guillermo de que comprara aquellas cosas que podía notar en sus rostros que les gustaban, jamás pidieron nada, pero aun así por alguna razón quería comprarles todo. Nunca había sentido ese impulso de llenar de detalles y regalos a alguien que había conocido.
Pude ver la sorpresa y la duda en sus ojos, volteó a verme y solamente asentí con la cabeza, todo eso era de ellas y si me pedía algo más lo conseguiría, solamente lo haría para curar esos corazones. En el informe hablaba de problemas matrimoniales, pero engañarla con alguien tan cercano en un momento tan duro a cualquiera le daría el coraje de romperle todos los huesos y dejarlo llorando.
Mientras los pensamientos asesinos se hacían presentes, miraba como ella abría cada bolsa y quedaba embobada por los vestidos y las joyas.
No era necesario todo esto, pero muchísimas gracias- me dijo sonriendo y todo aquello que cruzo mi mente se disipó. Esa sonrisa me convencía de que tenía que mantenerla siempre ahí, en sus finos y hermosos labios.
Son mis invitadas, casi secuestradas, merecen esto y mucho más- le dije acercándome para abrazarla. Quería una vez más oler el dulce aroma de su cabello.
La tomé nuevamente por la espalda y sentí como ella se estremecía bajo mi tacto, pero sin alejarse, al contrario, puso sus manos sobre las mías y se apoyó un poco más en mi pecho. La diferencia de altura me jugaba muy a favor, ya que mi cabeza quedaba encima de la de ella y podía aspirar perfectamente ese aroma.
Nos quedamos un rato más así, siendo sinceros no quería tener que soltarla y si pudiera quería tenerla bajo mi cuerpo toda sudada después de una noche completa a mi merced, pero por ahora debía llevarla a desayunar, seguramente Maria me había escuchado y ya estaba calmada la niña.
Feliz navidad 🥰