UN ANGEL VUELTO DIABLA

NARRADOR:Abi llama a su padre le pregunta donde está, él le dice que en la mansión responde perfecto voy para allá, corta la llamada, en la mansión se escuchan gritos y llanto, Santiago baja a ver qué sucede ve a su hija con el labio roto sangra, se acerca alarmado a su hija estás bien, quien se atrevió hacerte esto

PAULINA:quien más tu maldita bastarda, pero esto no lo puedes permitir me entiendes

ZARETH: esa maldita asesina mira como me dejo, yo no le hice nada mamá es un animal

SANTIAGO:ya hija la abrazo hablaré con ella, tranquila esto no volverá a suceder

PAULINA: eso espero controla a ese demonio o no respondo

ABIGAÍL: no responde de que Paulina, yo no le tengo miedo ni a usted ni a nadie, si tengo que morir lo haré eso sería un descansó a toda esta porquería, pero mientras que este viva me defenderé de ustedes y de quien sea, incluso de ti Santiago Altamirano, lo miro ya veo que le creíste a la arpía le grito

SANTIAGO: baja la voz Abigaíl le grito, yo no le he dado la razón a nadie entendido vamos al despacho, suelto a Zareth empiezo a caminar ella me sigue, entramos siéntate te escucho

ABIGAÍL: está bien no debí gritar es tu casa, pero tú tampoco me vuelvas a alzar la voz, solo te conozco hace un par de años no eres nadie en mi vida, (siento un dolor en el pecho al decir esas palabras, que me está pasando no puedo ser débil)

SANTIAGO: es bueno saberlo hija, pero sabes yo si te amo, pero no importa habla

ABIGAÍL: solo te vengo a decir controla a tus arpías, si se vuelven a meter conmigo haré más que partirle el labio me entiende, no me importa que eso me lleve a ser tu enemiga, pues son tu familia

SANTIAGO: de que hablas, hay algo que no sé, tú también eres mi familia, explícate

ABIGAÍL: tu mujer me mando a investigar no sé con qué intención, tu hija hoy me abofeteo en la vida he recibido muchos golpes como para dejar que ellas quieran venir a maltratarme, estaba en la constructora de tu yerno porque quieren que sea la portavoz de un proyecto, estábamos en su oficina, me cayó algo en el ojo él se acercó a ayudarme (mentira), la desquiciada entro en ese momento me gritó diabla, asesina, z****, pensó que estaba pasando algo con Sebastián, me abofeteo, por eso la golpe ,pero tampoco soy un ángel, luego de darle una lección, acepte firmar el contrato con ellos, e incluso me despedí con un apasionado beso que le di a él para darle una lección a ella, tú sabes que yo no tengo corazón, no sé amar, ese hombre no me interesa, pero tampoco me voy a dejar humillar por nadie, eso era todo me retiro

SANTIAGO: me acerco a mi hija la abrazo hay tanto odio en ella, jamás la había abrazado, te amo Abigaíl, perdón por no protegerte, por dejar que te convirtieras en esta diabla, no te preocupes hablaré con ella

ABIGAÍL:(siento que mi corazón late muy fuerte, ese te amo está revolviendo algo en mí, tengo que arreglar lo que dije antes, maldición siento esa necesidad) me separo de él, sabes que soy leal a quien lo es conmigo, jamás quisieras llegar a tener que hacernos daño, eres mi padre te debo la vida, y tú no tienes la culpa de lo que he pasado, me voy adiós salgo aquí definitivamente no me gusta lo que estoy sintiendo, no me puedo permitir ser débil ni con mi padre

SANTIAGO: llamo a mi mujer e hija, entran empiezo a hablar quiero que les quede claro, Abigaíl es mi hija la amo igual que a Zareth, espero que sea la última vez que se meten con ella, que no me enteren de que la han vuelto a mandar a investigar, no lo voy a permitir ahora que ya saben quien es no quiero enfrentamientos, porque si llegase a pasar con

mucho dolor no voy a intervenir , hay una diferencia entre ustedes ,ella piensa que la muerte es un descansó , aunque me duela decirlo es un angel vuelto diabla ,no se tentara el corazon ante nadie ,no las quiero ver destruirse

NARRADOR: Paulina y Zareth formaron un berrinche, reclamaron, pero no les quedo de otra que aceptar lo que santiago decía, saliendo del despacho Paulina se acercó a su hija, tranquila mi vida juro que la desapareceré, y tú no le vas a dar el gusto de dejar a Sebastián, así que te reconcilias con él