Causalidad

Tercera persona

—¿Qué ocurre chicos?  –los chicos observaban atentos, frente al cristal de la pequeña ventana que tenía la puerta. Mark intentaba ver algo pero los demás se lo impedían.

— ¡Cállate Mark! –todos pusieron un dedo en su boca volteando hacia Mark. Todos menos Gun— Nos van a escuchar y van a corrernos por tú culpa.

— ¿Pero qué tanto están mirando?

— Ven Chicuelo –Gun lo jalo y lo puso en frente de todos— Éste chico es la novedad.

— ¿Por qué?

— Por su manera de hablar. Dicen que es súper dulce, el chico perfecto para uno de los personajes principales de la serie.

— ¿En serio? No me parece tan guapo...

— Para ti, nadie es más guapo que tú.

— ¡Cierto! Incluso tú eres más guapo que él –Gun bajo la mirada cuando Mark dijo aquello.

—A mí tampoco me parece guapo y mucho menos lindo –él más bajo de todos protesto.

— ¿Plan lo conoces?  

— Es el mejor amigo de Mean.

— ¡Jooo! Eso quiere decir que esa lindura, es tu rival dulcesito –Earth llegó quitando a todos, observando al mencionado, llevándose con él a Plan bajo su brazo.

— Yo no tengo más rival que yo mismo cielo, sólo no me agrada... –esté se soltó de su agarre moviendo los hombros de un lado a otro.

— Aquí y en China, a eso, se le llama celos.

— Title tú y tus conjeturas.., ¡Apestan!

— Sabes que tengo razón.

— ¡Olvídalo! Ése Suppapong no me llega ni a los talones...

— ¿Ya te diste cuenta que mide más que tú? – todos voltiaron a verlo señalando su altura.

— ¡Idiotas! No me refiero a eso...

— ¡Ahhh! – exclamaron todos excepto Mark quién no dejaba de observar al chico que tenía atento a todos sus amigos. No podía dar crédito a lo que acababa de escuchar.

— ¿Cómo dices qué se llamas?

— Eh... –Plan no le da importancia y solo balbucea.

— Plan, contesta. ¿Como se llama?

— ¿Qué pasa Chicuelo? - dijo Gun, él enseguida notó el cambió en su voz

— Saint –Plan le dijo su apodo, omitiendo el nombre que menciono primero.

— ¿Lo que dijiste antes? – el chico cada vez se notaba más desesperado a la espera de la respuesta.

— ¿Por qué quieres saber?

— ¿Dime su maldito nombre completo Plan? –Llego a su límite, tomó a su amigo de la camisa, bajo el asombro de todos, Gun tomo las manos de Mark tratando de calmarlo.

— Tranquilo hermano, su apodo es Saint pero su nombre completo es Suppapong Udomkaewkanjana... –Plan rasco su cabeza sin entender por qué algo como eso, puso a su amigo agresivo.

— ¡Maldición! –Mark soltó a Plan de la camisa, tapó su cara y se dio la vuelta maldiciendo repetidas veces, mientras se alejaba de todos.

— ¿Qué le pasa? ¿A casó lo conoce?, ¡me susto! –todos estaban alterados, no podían creer lo que pasó.

— Disculpa Plan, voy a ver qué le sucede. Y ustedes, dejen de ver al pobre chico, ya se dio cuenta que lo observamos y se está poniendo rojo. – todos ignoraron su comentario y siguieron hablando del chico nuevo, como si nada hubiera pasado.

Gun siguió a Mark, verlo tan alterado le preocupaba. Él mencionado entró en el baño y empezó a mojarse la cara, en ese momento llegó Gun y se recargo en uno de los fregaderos a lado de él.

— ¿Qué tienes Mark, por qué de repente te pusiste mal al escuchar el nombre de ese chico? Tú también lo conoces...

— ¡No! Para mí es un maldito desconocido.

— Entonces, por qué ponerte agresivo al escuchar su nombre, tú nunca actúas de esa forma con nadie...

— Conozco ése nombre, lo tengo grabado en mi cabeza cómo una maldita maldición.

— ¿Por qué?

— ¡Es él! Regreso del pasado para torturarme, ésto es una locura ¿por qué aquí? De todos los lugares, tubo que ser en mi espacio, dónde me sentía seguro...

— No te entiendo Mark, explícame.

— No hay nada que explicar, haré de cuenta que nunca lo ví, que no existe. Tana no tiene por qué enterarse...

— ¡A ver Mark! Creó entender que Saint es él desconocido del cuál Tana sigue enamorado, ¿cierto?

Por eso mismo tú te acabas de desquiciar...

— ¡Él mismo!

— Y piensas quedarte callado y no decirle a tu mejor amigo, lo qué tanto desea, vas a ser tan cruel, por tus estúpidos celos.

— Yo no estoy celoso.

— Se hombre y admítelo – Gun lo retaba con la mirada.

— No entiendes, déjame solo por favor... –estaba por irse, Gun se daba cuenta que no iba a conseguir nada presionando. Dos palabras bastaron para que él otro lo pensara mejor.

— Está bien –a pesar de decirle que se fuera lo detuvo.

— Discúlpame Gun, me altere de más. No sé cómo explicar los sentimientos que me invaden en este momento...

— Te entiendo.

— ¡No! No me entiendes, tú das por hecho que estoy celoso y no es eso.

— Si tú lo dices...

— No sólo lo digo, es la verdad. No te imaginas cuánto Tana a sufrido por ese hombre, un hombre que ni siquiera conoce.

— Por lo que me has contado, no está sufriendo, está luchando por encontrarlo...

— Se por donde vas con eso, yo no quiero ser quién lo lleve a él.

— Es tu amigo.

— Por eso mismo lo hago, no quiero que sufra...

— Aunque tú no le digas nada, él seguirá esforzándose por encontrarlo y tú no podrás evitarlo.

— ¡Lo sé! Es un maldito terco, qué no comprende que no tiene sentido todo su esfuerzo.

— Para el amor ningún esfuerzo es inútil y sin sentido, es más, algunos nos convertimos en simples instrumentos. – esa indirecta no le pasó desapercibida a Mark.

— Gun, por favor.

— Si, yo mismo, de sobra sé, que no me quieres como algo más, pero sigo a tu lado y lo seguiré estando aunque solo puedas darme pocos momentos. Con ellos soy feliz.

— ¡No es lo mismo! – Mark frotaba su nunca todo se le estaba acumulando y no encontraba salida.

— Claro que si, es amor, sólo cambia las circunstancias no el significado.

— Gun necesito tu apoyo, no tus reclamos, de verdad no entiendes como estoy ahora. No sé... ¿Qué debo hacer?

— Está bien. Déjame decirte algo más como amigos que somos...

Puedes quedarte callado y no decirle nada a Tana, recuerda qué tú y yo ya estamos dentro de está serie, sí Tana llega a ver la serie de su mejor amigo y ve al chico que con tanto esfuerzo pretende conocer. ¿Que reacción crees que tenga hacia ti?

— ¡Me va a odiar!

— Antes también te dijo que te odiaba y te perdonó...

— Ahora es diferente, si yo bloqueo una oportunidad cómo está, jamás me lo perdonaría... –Gun puso su mano en su hombro y le dijo antes dirigirse a la salida.

— Ahí tienes tú respuesta –antes de que Gun saliera por completo, la voz de Mark lo detuvo.

— ¿Nos vamos juntos cuando terminemos aquí? –Gun tardo en contestar pero al final dijo.

— No, me voy antes, te espero en mi casa cómo siempre.

— ¡Gun! –éste dio la vuelta para ver a su amado.

— Gracias. –sin decir nada termino por salir.

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«Mark»

Gun acaba de hacerme ver que mi hermano puede odiarme de verdad, aún y con eso de por medio, no quiero.

Hoy es sábado, las audiciones terminan hasta el Viernes, sí le digo a Tana que participe en la serie, el dirá que no, nunca le ha gustado actuar, siempre que lo hizo fue por su madre. Cambiará de parecer cuando le  comenté que él escuálido estará en esa serie, no dudará en participar, tampoco es un hecho que valla a quedar en ningún papel, con ello, ya no será mi culpa sí no lo conoce. En todo caso si lo logra, podría tratarlo, tal vez con eso pueda ver qué lo que siente es una ilusión y cambie de opinión sobre la universidad, entonces yo... Podría estar más tranquilo por él.

El que Gun siga creyendo que tengo sentimientos por Tana me molesta pues en cierta forma tiene razón, lo ame desde que era un niño, eso no se olvida de la noche a la mañana, que sí soy sincero, ya no son con la misma fuerza que antes y eso hace que vuelva a pensar en Gun. No quiero lastimarlo, ni qué se sienta usado como él me insinuó, son muchas cosas que estoy sintiendo por él y no voy hacerme el tonto diciendo que sólo es amistad entre los dos, por qué no es verdad, tenemos algo más grande.

Antes de ver a ése escuálido estaba decidido a demostrarle a Gun que lo nuestro va en serio, al descubrir a ese extraño regresar del pasado a mi mundo perfecto, hizo mi sangre hervir, no era justo que el destino jugará conmigo, poniendo a prueba todos mis sentimientos del pasado y los que estoy descubriendo en esté momento.

Mañana vería a Tana, subió de promedio y como lo prometió me invitó a comer para celebrar su logró, yo jamás lo dude, todo lo que se propone siempre lo logra, su perseverancia le impide ser de otra manera. Voy a contarle, no mañana, mañana es nuestro día y no pienso arruinarlo hablando sobre aquél escuálido sin chiste.

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Estaba frente al edificio de Gun pensando que sería mejor irme, él dijo que me esperaría como siempre, no quiero que se moleste más conmigo, si me voy y lo dejo esperando. Todo es mi culpa y voy a decirle que... ¿Qué rayos voy a decirle?

Yo mismo no sé lo que me pasa y menos cómo me siento por dentro.

Lo único seguro para mí es que no quiero perderlo, se ha convertido en alguien importante en mi vida, es él refugio que siempre busque, la calidez que adoro, la ternura que hace que mi corazón palpite y el calor que me hace sentir en casa cuando estoy en sus brazos.

[Soy la única que se acaba de dar cuenta, que Mark, está enamorado hasta la médula y lo sigue negando.  ¡Hombres necios!🤭🤷🤦]

Me decidí a subir, que sería lo peor que podría decirme, qué me valla, sí lo hace, me voy, le daría tiempo para que se calmará.

Saliendo del elevador, su puerta quedaba exactamente enfrente de este a unos veinte pasos, al llegar a su puerta escuché el leve sonido de su música, le encantaba escuchar canciones viejas de los 80, eran tolerables, incluso algunas me gustaban y compartimos el gusto por la guitarra y el teclado, con el único que compartía todo eso siempre fue Tana pues aprendimos juntos. Disfrutar y hablar de las mismas cosas con Gun me hacía sentir muy bien a su lado.

Toque varias veces a su puerta, no obtuve respuesta, será que no me escucha o tal vez sigue tan molesto que me está ignorando.

Pues no me voy a mover de aquí, hasta que no me diga en mi cara, que quiere que me esfume.

— Gun abre de una vez, no voy a moverme de aquí hasta que respondas y sí es preciso tiro la puerta, pero vas a darme la cara... –[grité]

— Y la puerta que culpa tiene  –la voz tras de mí hizo que cesará mis golpes, me di la vuelta para verlo, está con los brazos cruzados, de uno brazo colgaba una bolsa con bebidas y en su boca una paleta, “se veía tan coqueto” y yo aquí suponiendo, sí pudiera existir un círculo negro que me transportará a otro lugar y evitar su mirada, no dudaría en utilizarlo, ya que no es posible, debo decir algo...

— ¿Dónde estabas?  –debí pedir disculpas, culpó a mi mente por no esta reaccionando cómo debe últimamente.

Mueve las bebidas como respuesta.

— ¡Auu! Cómo siempre me dejas la puerta abierta... Supuse...

— ¿Qué estaba molestó? o ¿que no te quería ver? – Me quito de la puerta empujando con sus caderas mi costado, con la paleta todavía en la boca, abrió y entró primero dejándome a fuera. No sabía si entrar o irme de una vez.

— ¡¡Entra Chicuelo!! – [grito]

¡No está enojado! Pensé, suspiré y volví a sonreír.

Me encantaba su piso, siempre está bien ordenado y muy acogedor. Me sentía tan a gusto que a veces no quería irme.

Mi madre había empezado a preguntar por qué llegaba tan tarde del trabajo, al principio le decía que era trabajo, con forme se repetía las veces tuve que decirle que pasaba a casa de un amigo que está ayudándome mucho, ella al principio pensó que se trataba de Tana, hasta que le dije que era alguien más. Me pidió que lo llevará a la casa para conocerlo, no creó qué por el momento sea apropiado invitarlo.

— ¿Tienes hambre Chicuelo?

— No, no... –cuando Gun se acercó a mí, mi estómago gruñó traicionando mis palabras.

— Pues aún que no tengas hambre, come conmigo, compré de más y no me gusta tirar la comida.

— Bueno si insistes... – ¡moría de hambre! Con ver mi cara podía notarlo. Gun sonrió sin decir más.

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«Gun»

Tremendo descarado que es éste niño, a leguas se nota como quiere devorar lo que ve y todavía ni siquiera le he servido.

Cuando lo vi frente a mí puerta, casi queriendo tirarla a golpes, eso me emocionó, él es alguien tan temperamental, cuando siente algo no sabe cómo expresarlo y eso lo vuelve agresivo, para los demás puede parecer arrogante o prepotente, a mi me gusta.

En realidad es un hombre muy apasionado en toda la extensión de la palabra, es alguien que protege tanto a los que él quiere que a veces eso llega a lastimarlo. Pero tiende a ocultar lo que siente muy seguido, por ello soy paciente, yo sé que no soy un juego para él, que él de verdad siente algo más fuerte por mi y entiendo que este preocupado por su amigo aunque eso no me limita a mí, a sentirme celoso del cariño y la protección que siente por aquel niño.

— Pues insisto –está salivando y todavía trata de hacerse él indiferente, ¡tontito!

¿Qué es? –no dejaba de observar mientras destapada los recipientes.

— Tu favorito...

— ¿Pad Thai? – esa sonrisa es responsable de mi estado emocional.

— ¿Con gambas? –mordió su labio sin apartar la mirada de la comida

— ¡Por supuesto!

— Uiiii..., Si, si, si... –cuando tiene esa expresión me enloquece, ése es él Mark que robó mi corazón, desde que lo conocí, bueno si soy sincero me asustaba en un principio, fue mi primera impresión, con el tiempo lo comencé a tratar, llegué a tenerle respeto y admiración pues actuaba tan profesional y rayaba en lo perfeccionista, siempre desesperaba a los demás, en mi caso, sabía que sólo quería que todos diéramos lo mejor, yo trataba de calmar a los demás a su favor. Mark no es de los que se disculpa si habla fuerte o si crítica tú trabajo y eso hace que lo tomen de ególatra, lo que ellos no saben es que él puede ver el potencial en las personas, sí exige más de las persona, es por qué sabe que pueden con ello.

— ¡A comer entonces! - le sonreí, sabía que terminaríamos hablando del mismo tema que nos tenía en esté estado de alerta. No quería ser yo él que hablará primero.

Comencé a limpiar la mesa como siempre, le dije que fuera a la sala pero insistió en ayudarme, lavó los trastes que ocupamos mientras yo los secaba en silencio, lo conozco también que puedo asegurar que está buscando la forma de sacar el tema.

— Gun... Yo... –por alguna razón no quería que dijera nada.

— No quiero tus disculpas ni tus escusas, si ya tomaste tu decisión lo entiendo. No estoy de acuerdo en tú forma de pensar, sin embargo, te apoyaré en la decisión que tomes.

— ¿Cómo sabes lo que voy a decirte?

— Lo percibí por tu expresión, además no es normal que te quedes callado por tanto tiempo, eso también me hace pensar que estás buscando las palabras correctas para no lastimarme, de antemano te digo que no te odió. Desde el principio dejaste claro que no sientes lo mismo que yo... –Mark no me miraba, podía notar  que estaba poniéndome atención, dejo de lavar y secó sus manos.

— Vamos a la sala Gun –tomo mi mano y pretendió llevarme con él, lo detuve.

— No tienes que ponerte serio conmigo, de verdad entiendo...

— Quieres cállate de una vez... ¡Haz lo que te digo! - jamás me había hablado de esa forma y menos tan serio. Le hice caso y me senté lo más alejado que pude de él.

— Gun no exageres, siéntate aquí conmigo... ¡Por favor! –esos cambios en su voz me estaban confundiendo, ahora era todo dulce y atento.

Me acerque sin mirarlo.

— Voy a contarle a Tana sobre el escuálido -me dejo sin palabras, yo aquí pensando que hablaría sobre nosotros y él preocupado por su amigo, me rindo.

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«Mark»

Noté la decepción en su mirada, Gun esperaba que hablará sobre nosotros, si lo hago, no voy a soportar las ganas de besarlo.

— Y no me digas “te lo dije”.

Es mi hermano y me preocupo por él, entiendo que debe decidir su propio camino, cómo yo elegí él mío...

— ¿A qué te refieres? –no dejaba de mirarme en la espera de mi respuesta.

— ¡Gun te quiero!,

En ningún momento he tenido la intención de jugar contigo, reconozco que mi orgullo me supera y no quiere aceptar que Tana nunca me verá con otros ojos, sé que soy el peor de las personas por decirte todo ésto... –tomé su cara con mi mano acariciando su mejilla— Eres alguien que ha logrado despertado nuevos sentimientos en mí y no quiero perderte por mi indecisión, esto es más fuerte que yo, es egoísta pedirte que me entiendas y me esperes...

— ¡Lo haré! –él no dudó. [me quieres tanto para arriesgar a tu propio corazón por mí] no salía de mi asombro— Mark no me importa lo que pase más adelante, sí en este momento me dices que me quieres, aún que sea un poquito, yo puedo esperar el tiempo que quieras, el que pueda tenerte a mi lado me basta.

— ¡Amare!  –Gun me miro pasmado, es la primera vez que lo llamó de esa manera... Sé lo que significa, a sí me siento cada vez que lo veo.

— ¿Conoces su significado?

— No, pero suena bien y me gustó usarlo en ti.. ¿Puedo?  –soy una persona difícil de entender, yo quiero decirle que si lo sé, otra parte de mi prefiere ignorarlo y ver lo encantador que se nota confundido.

— ¡Eres malo caro!

— ¿Eso quiere decir qué no te gustó?  –pretendo molestarme, él enseguida toma mis manos.

— Si te gusta, úsalo en mí... ¡Me encanta! –sonrió para él y sin aviso me besa.

— ¿Gun? Espera.... Todavía.... No terminó... De contarte.... Todo... –hacia pausas apartando sus labios.

— No me interesa, te necesito... –con esas poderosas palabras, me gano por completo.

Esos besos suyos estan convirtiéndose en mi postre favorito y quería mucho más... Por alguna razón, Gun no quería que pasáramos de segunda base, eso me frustra un poco, entiendo que puede ser doloroso, no soy tonto, he leído mucho sobre el tema, he buscado maneras y formas de satisfacerlo sin lastimarlo mucho. Lo comentamos en un par de ocasiones,   él siempre cambiaba la conversación. Tal vez todavía no me necesita tanto como dice y eso me hace pensar de más.

— Amare... No crees que podríamos intentarlo.... –seguía torturando mis labios con sus besos, podía sentir a su amigo apuntando en mi dirección y él ignoraba mis palabras...— ¡Gun! Detente. –mi cambio de voz, logró que se detuviera.

— ¿Qué pasó?

— ¿De verdad preguntas eso?

¿No estás mirando como me tienes y pretendes seguir besándome?

— Yo puedo ayudarte a liberar... –estaba por tocar a mi amigo, enseguida detuve su mano.

— Esta vez no quiero eso. No aguanto más, quiero estar dentro de ti...

Me estoy volviendo loco, imaginando  como sería escucharte decir mi nombre cuando entre en ti... –Gun se puso completamente rojo y se abrazó a sí mismo— ¿No quieres hacerlo conmigo nunca? –se levantó del mueble dándome la espalda, creó que la respuesta es obvia.

— ¡Tengo miedo!... –lo que dijo me sorprendió, pensándolo mejor es algo muy normal si es... ¿En serio es su primera vez?

— Nunca antes he estado con alguien... Pero no sólo es eso... –yo seré el primero, esto hace que mis ganas aumenten.

— Sé que la primera vez puede ser doloroso amare, tendré cuidado y seré delicado contigo, lo prometo.

— Mark no se trata de eso...

— ¿Entonces? –por qué no va al grano.

— ¡Mark! En serio, a veces puedes ser un completo idiota.

Yo también te necesito en todos los sentidos, muero cada noche que te vas de mi casa, la de veces que he querido cerrar mi puerta y no dejarte ir, pero no puedo. Si yo cruzó esa línea contigo, no habrá vuelta atrás, ya te amo demasiado. Al hacerme tuyo por completo, mi corazón sufrirá el doble.  –lo miré sin dar crédito a lo que escuchaba, él acaba de decir...— ¡Te amo! No lo puedo ocultar más, aún que tú no sientas lo mismo, no me importa, quiero estar contigo de esta forma por lo menos... –¿Qué puedo contestar?, me levanté para ir juntó a él.

— ¿Gun por qué no lo mencionaste antes?...

— ¡No Mark! No digas nada, no deseó que ésto te haga tener lástima ni remordimientos. Lo dije para que entiendas por qué no quiero hacerlo, no por qué no lo deseé...

— Los sentimientos que mencionaste nunca pasaron por mi cabeza Gun, en todo caso estoy sorprendido y emocionado muy probablemente... Nada de lo que mencionaste está en mi, en este momento. Dame tiempo, yo quiero corresponder a tus sentimientos de la misma forma, ¿podrías esperar?... ¿Por favor? –lo lleve al mueble conmigo y lo abracé.

— Mm.., caro –sentir su cabeza en mi hombro es una experiencia indescriptible, mi corazón se siente completó, ¿será que lo amo también?

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[Días después]

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— ¡Tana vamos!

— ¿Estás seguro de esto Maki? –sabía que buscaba mi opinión antes de que llegáramos con mi agente y con su madre, Tana estaba más nervioso de lo normal.

— No me salgas con qué ya no quieres...

— No es eso, estoy nervioso... ¿sí no me reconoce?

— Eso es seguro Peke, ya pasaron años, además, tú corte deja mucho que desear... – tocaba su cabeza haciendo muecas, hasta en los peores momento me burló de él. Es imposible no hacerlo.

— ¡Te Burlas! Andá te doy permiso.

— Tana no lo vas a ver hoy, primero tienes que hacer la audición. Tienes media hora antes de que la hagas, ¿estudiaste lo que te mandé?

— No me siento muy seguro, no sería mejor que sólo lo vea de lejos o cuando venga cuándo tú grabas y de esa forma acercarme a él en vez de hacer esto...

— Tana ya lo hablamos, persona que no sea del set no es admitida y por muy amigo que seas mío, no te dejarán estar cerca de los demás actores. Escúchame, tú hazlo. Te he visto actuar antes y tienes el potencial, sí realmente deseas conocerlo arriesgarte, además yo no hice nada para que tú entraras, tú imagen gustó a los de la producción, ve esto cómo un punto ganado.

— Lo intentaré... ¡Gracias amigo!

— Idiota deja de decir eso, ve a lavarte la cara para despejarte, te espero aquí. -lo vi correr con una sonrisa, es la primera vez que lo veo tan nervioso.

Después de nuestro encuentro en el café, no pensé que arreglaría las cosas tan rápido para presentarse a la audición. Al día siguiente de vernos, él ya había hablado con su mamá, logrando su permiso y también el permiso escolar.

Por mi parte hablé con mi agente para ayudarlo a que le permitieran la audición, me dijo que no sería nada fácil pues había muchos y al director no le gustaba los chicos recomendados, sólo hizo falta mandar su foto y dos días después le hablaron directamente a su mamá, le pidieron que se presentará, eso ni yo me lo esperaba.

Es el último día para las audiciones, sinó logra quedar, no habrá más oportunidades para él. No entiendo este destino loco, sí Tana logra quedar en algún papel, juro que dejaré de ser tan incrédulo en lo qué al destino se refiere.

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«Tana»

Nunca antes había estado tan nervioso, incluso cuando tuve al superior frente a mí, los nervios estaban, en esté caso, se están apoderando de mí, mojaba mi cara tantas veces esperando algún cambio, nada. Me miré al espejo...

“Tano vas a poder con ésto, ya has actuado antes, no es para tanto”

Maki dijo que no vería al superior hasta que pasará la audición, si es que lo lograba...

— Tana sal de una vez –por qué Maki tiene que ser tan impaciente, no puede ver como estoy.

— ¡Voy!  –[grité]  Respiré profundamente y salí.

— ¡Sígueme! –me miraba serio, tenía que admitir, cuando de trabajo se trata Maki era todo un profesional. 

Llegamos a una oficina dónde estaba el agente de Maki y mi madre.

— ¿Dónde estabas Tana? Ya están aquí por ti, ve con ellos... –mi hermosa madre, estaba tan nerviosa cómo yo y eso que no me vería en la audición pues era a puerta cerrada.

Seguí a las personas, estás me llevaron frente a tres personas que se encontraban sentadas en una mesa rectangular, en el fondo varias cámaras grabando a todos al rededor, ya había pasado antes por esto, en esté caso todo estaba en juego para mí y no quería fallar...

— Hijo antes de empezar con la audición, nos gustaría que nos hables un poco de ti, ¿qué haces en este momento?, tus gustos, ¿que actividades extraescolares realizas? Sólo habla un poco de ti... Por favor.

Difícil mi caso, ya con eso me sentía perdido. De que podía hablar, soy un anti-social con tendencia a enojarme con facilidad, no soy tan bueno en la escuela a menos que tenga una gran motivación como ahora... Ahh y si eso no es suficiente, hay un chico que me gusta, eso ayudaría ya que es una serie BL. ¡No! Eso no me ayudaría, al contrario. Sólo dije cosas superficiales, ellos hacían tantas preguntas en cada oración, que al final terminaron por sacar más de mí, de lo que deseaba contar.

— Bueno ahora queremos verte actuar en solitario... –¡momento!

¿En solitario?,  eso quiere decir que habrá otra audición con alguien más, nadie me dijo nada, quería protestar. Ya era demasiado tarde.

Terminando de interpretar el papel que me pidieron y que antes había estudiado, pues Maki me había mandado montones de libretos que debía estudiar, amanecí repasando cada uno de ellos y de todos los que estudié, me pidieron hacer el que más me gustó, tiene un poco de mí, no por completo pero en algunas cosas me identifico.

Parece que les gustó, pues empezaron hablar entre ellos y no vi malas caras ni nada, puede ser engañoso sus expresiones, entonces no debo tomarlo como cierta mi afirmación.

— Perth puedes ir a comer, regresa a las 6 de la tarde, por favor. Tú última audición será juntó a otro actor, queremos ver su interacción.

— Está última audición nos dirá si podríamos considerarte, yo estoy muy confiado que sí, me gustas, Saint y tú harán buen equipo... –cuanto el director dijo su nombre, sólo asenté con la cabeza y salí.

Mi madre estaba diciéndome algo que yo no entendía, Maki y su agente también y yo no podía entenderle a nadie. En mi cabeza me repetía una y otra vez... “el superior y yo juntos”

A las 6 de la tarde, lo volvería a tener frente a mí y está vez, no por unos minutos, sí yo me quedaba con el papel, sería mí pareja en una serie...

Esto es un sueño o de verdad el destino me está ayudando.

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