Mi Vida Después De Tí

Cole siguió manejando en silencio, mientras se daba golpes mentales, del por qué no revisó el maldito trato y peor aún porque Dimitri no le dijo, ahora tendría que someterse a las reglas de Abbie, otra cosa que tampoco pudo controlar… se preguntaba cómo haría ahora, esta mujer era más complicada de lo que él pensó, pero le daría un escarmiento por querer controlar la situación…. 

-Una farmacia, espera aquí enseguida vuelvo - le dijo a la chica mientras se encaminaba a darle una pequeña sorpresa-. 

Abbie se quedó pensando una farmacia se sentía mal…. pensaste que sería fácil tratar conmigo ahora verás. 

A los minutos Cole regresó, le dio una botella de agua y una bolsa de papel le dijo que lo abriera, al hacerlo Abbie sintió ganas enormes de golpearlo hasta cansarse. 

-Y esto qué significa, que crees que haces- que crees que está haciendo, además no puedo volvé a tomar otra-. 

-¿Qué? ahora no sabes leer, son una caja de  anticonceptivos y otra de condones, tomate la pastilla ya, para eso traje el agua -le dijo con una mueca de satisfacción en su cara- que pensabas,  esperaba aguantar hasta regresar a la ciudad para tener sexo pero viendo que me lo prohíbes, pues lo haremos hoy no me voy aguantar. 

Abbie se le quedó mirando y solo suspiró, volteo la cara y miró afuera del auto, insultandose mentalmente, quien la mandó abrir su gran bocota….

 -Que vas a pedir - le consultó él-Quieres comida típica o algo rápido. 

-Lo que pidas está bien…. Ella se sentía nerviosa y molesta, como él se atrevía a hacerle eso y ahora qué haría al llegar a casa, hasta pensó encerrarse en otro cuarto quien sabe que tantas cosas quiera hacerle él.. 

-Abbie que tienes, además no te tomaste  la pastilla - tonta estás asustada, solo me burló de ti, no te obligaría a eso, pero merece un escarmiento, por no decirme- comprare  hamburguesas y comemos en el mirador, espera aquí. 

Minutos después estaban sentados en el mirador disfrutando la vista Abbie no se había atrevido a comer, entre más rápido terminara, más rápido volverían a casa. 

Cole ya se estaba desesperando, tenían casi 15 minutos sentados allí y ella no había probado bocado, seguía con esa cara de susto. 

-Abigail por Dios come, hasta cuando vas a esta así, ya quita esa cara de espanto, tan repulsivo te parezco para tener intimidad. 

-Claro que no, es que ya te dije mis motivos, no me siento segura. 

-Y yo te dije que eso no fue tu culpa, y ya cambia la cara, solo estaba bromeando contigo. No te obligaría a hacerlo, no soy tan despreciable,  por favor come todavía debemos comprar algunas cosas. 

Abbie empezó a comer en silencio, y Cole no dejaba de ver la increíble vista que tenían, pero Abbie se sintió fatal, tal vez lo había hecho sentir mal, para ella él no era despreciable se sentía atraída por él, y si deseaba estar íntimamente con él, solo estaba nerviosa, debía aclarar la situación no quería que él se quedara con eso. 

Terminó de comer y fue a un baño que estaba en el mirador, se aseo un poco, y salió decidía hablar con Cole debía aclarar las cosas, no quería ocasionar malos entendidos desde ya, tenían mucho tiempo todavía que compartir y era mejor hacerlo de la mejor manera. 

-Cole disculpa si te hice sentir mal con mi actitud, no es nada de lo que piensas, solo estoy nerviosa y un poco asustada. 

-Esta bien Abbie como dije solo bromeaba, no obligaría a nadie a eso, que te quede muy claro. 

-No me tome las pastillas, porque me causarás repulsión, es que no puedo hacerlo… 

-No tienes que explicar nada, te dije que solo bromeaba, ya pasó así que olvídalo, si ya estás lista sigamos, todavía tenemos que ir a comprar víveres. 

-Necesito aclararlo, no quiero que desde ya empezamos con malos entendidos, podrías dejar que termine de explicarme - Cole solo asintió - no me tome las pastillas porque en la mañana Gabriela llevó una caja y me hizo tomar una, no puedo volver a tomar otra. 

-Gabriela te dio anticonceptivas, y tú te la tomaste, quiere decir que esperas que eso pase.

-No empieces a burlarte, ella dijo que debía venir preparada, que cualquier cosa podía pasar y yo pues no puede negarme, ella tenía razón, las cosas se están volviendo algo raras y yo no sé……. 

Cole calló sus explicaciones con un beso, que se fue tornando algo desesperado, en el fondo él quería que estar con ella, y quería que tomará las pastillas, pero luego de ver su reacción y su rechazo a tomarlas dedujo que ella no le interesaba estar con él de esa forma, ya había decidió no volver a tocar ese tema con ella y escuchar que ella ya se había preparado para eso fue un gran alivio y no pudo evitar tomarla entre sus brazos y besarla. 

-Tonta, porque no puedes simplemente decir las cosas sin darle tantas vueltas, deja de tener pena conmigo, ahora somos tú y yo, tienes que decirme las cosas. 

-Esta bien - le respondió después de recuperar el aliento. 

Estuvieron dando vueltas por el pueblo, luego pasaron al pequeño supermercado compraron cosas que le harían falta, y emprendieron su viaje de regreso a casa. 

La vista era mucho más increíble de noche, la luna se reflejaba en la playa, Cole observaba como Abbie iba perdida en la vista que reflejaba la ventana del auto. 

-Nunca viste la playa de noche - le preguntó, mientras posaba su mano en su muslo. 

-A decir verdad, nunca había venido a la playa, de noche y mucho menos de día. 

-Es enserio, debiste decirme, bueno ya que estamos aquí te gustaría nadar.

Abbie, agacho la cabeza con algo de pena, ella no sabía nadar, no quería decirle, lo más seguro es que se burle. 

-¿Qué sucede? - Le preguntó mientras estacionaba el auto, a un lado de la playa- Dime que pasa. 

-No sé nadar, nunca me llevaron a estos sitios. 

-Estás bromeando verdad, que vida fue la que llevaste Abbie, tengo tantas cosas que enseñarte, cuando este año terminé, ni tu misma vas a reconocerte. 

-Una difícil, limitada de muchas cosas… pero ahora no quiero hablar de eso. 

-Bien entonces no lo hablemos, mejor vamos a nadar - le dijo saliendo del auto. 

-Pero como, no tenemos ropa extra. 

-Ya verás - le dijo mientras la ayudaba a salir del auto. 

Cole empezó a quitarse los zapatos, desabrochó su pantalón, quedando solo en ropa interior. 

Se acercó a ella, le quitó el abrigo, bajó sus manos a mitad de sus piernas tomando entre ellas la basta del vestido, lo subió lentamente hasta la altura de los senos.. 

-Vamos Abbie solo déjate llevar